♫ COMPARTIR, COMPARTIR CON ALEGRÍA ♫, PORQUE EL MUNDO SE CANSÓ DE COMPARTIR♫… CUARTA PARTE.
El sexo más tremendo y pervertido empieza con nuestras madres, el bribón de mi amigo Jeff se coge a la puta de mi mamá y yo a la suya, y como buenos hijitos que somos les damos verga con todas las ganas del mundo..
ESCRITO POR SIREMIS.
Mientras la señora Stellita y yo nos abrazábamos y nos comíamos a tremendos besotes ahí de pie, mamá se acostó boca arriba sobre la mullida alfombra y descaradamente se abrió de patas poniéndolas hacia arriba. Verla con sus zapatos de tacón alto, sus medias, su liguero y sin su tanga, la hacía ver genial.
Luego, dándose palmaditas en su peluda rajota y abriéndosela con sus dedos, mamá se la ofreció totalmente a su arrecho ahijado, inmediatamente mi pervertido amigo se echó entre ellas, colocando su cabeza frente a esa palpitante vagina y se dedicó a lamerle la concha y a mordisquearle y chuparle el clítoris a mi prostituida madre.
Pasado un rato, Jeff se agarró la verga y se la fue introduciendo en esa experimentada y palpitante vulvota a mi emocionada y entregada mamita.
Mientras yo acostaba sobre el sofá a la señora Stellita y le abría las piernas, Jeff afanadamente le estaba dando verga por la raja a mi rica y gritoncita madrecita.
Yo me entretenía metiéndole los dedos en la panocha a la madre de Jeff y a la vez observaba con ganas lo que ocurría entre ellos. Silbé y aplaudí al ver que mi panita había empezado a follar con terribles fuerzas y con gran agresividad a mi estupenda progenitora mientras le maltrataba las tetas con sus manotas y les propinaba sendos mordiscos a sus gruesos y largos pezones.
JEFF: ¡Aagghh!… ¡Tengo que embarazar a esta perra!… ¡Ooohhh!… ¡No puedo decepcionar!… ¡Aaaahhh!… ¡Tengo que preñar a esta puta!… ¡Oohh!… ¡Tengo que engendrarle un cabroncito!… ¡Oohh!… ¡Aunque si no le hago un varoncito me conformo con hacerle una putita!… ¡Aaaagghhh!… ¡Qué rajota tan deliciosa se manda la puta de mi madrina!… ¡Toma verga, perra!… ¡Toma esto, puta!…
MAMÁ: ¡Aaagghhh!… ¡Eso, ahijado querido! ¡Así, papi!… ¡Muy fuerte!… ¡Dale chimbo a tu madrinita!… ¡Aaaagghh!… ¡Eso!… ¡Dame duro, cretino! ¡Enséñale a esta puta quién es el macho alfa preñador!… ¡Dame duro, mi amor!… ¡Escúpeme y pégame en la cara y en las tetas mientras me revientas la chocha a vergazos, chino hijueputa!…
YO: ¡Eso, mamá! ¡Hablas como la puta vulgar que eres!
MAMÁ: Jejejeje… ¡Tú enfócate en embarazar a la puta de mi comadre, malparido!… ¡Aaaagggghhh!…
YO: Jejejeje…
Mi amigo empezó a escupirle en la cara y en las tetas a mi madre y a abofetearla ahí mismo. La puta gritaba de sumo placer, y, mientras yo ya le estaba dando también fuertes chimbazos por la raja a la vulgar mujerzuela de doña Stella, le dije a mi agresivo y sudado camarada:
YO: ¡Eso, amigo!… Jejeje… ¡Acaba con mamá!… Jejeje… ¡Dale duro! ¡Embaraza a esa ramera! ¡Pégale más duro en esas tetorras y en la cara de zorra mientras le das duros chimbazos por esa puta rajota!… Jejeje… ¡Abofetéala!… ¡Qué suenen esas cachetadas y esos vergazos!… ¡Son música a mis oídos!… Jejejeje… ¡Oohh!…
JEFF: ¡Tú también hazle lo mismo a mamá! ¡Trátala como la puta que es!… ¡Aaaaghh!…
DOÑA STELLA: ¡Si, eso!… ¡Aaahhh!… ¡Hazle caso a mi hijo, mi David!… ¡Oohh!… ¡Qué rico!… ¡Qué sesión de sexo tan exquisita y eso que no teníamos pensado hacer nada de esto hoy!… Jejeje… ¡Pégame y dame mucha verga, cabrón hijueputa!… ¡Aaaaggghhh!…
YO: ¡Toma!… ¡Oohh!… ¡Toma esto grandísima puta del infierno!… ¡Oohh!…
Le propiné muchos más fuertes vergazos por esa raja a doña Stella y al mismo tiempo le di unas buenas bofetadas en la cara y en sus enormes tetotas.
La perra lo gozaba en gran manera moviéndose muy rico y emitiendo fuertes gritos y palabrotas de placer y cada vez que le escupía o que le pegaba en la cara o en las tetas su sonriente y excitado hijo volteaba a mirar y nos ponía pulgar arriba en señal de total aprobación y gusto.
DOÑA STELLA: ¡Aaaagghhh!… ¡Aaaaggghhh!… ¡Aaaagggghhh!… ¡Gran hijuepuutaaaa!… ¡Qué rico!… ¡Abusador de mierda!… ¡Dame más verga y pégame más! ¡Dame más bofetadas en la cara y en las tetas, puto de mierda!… ¡Que mi hijo observe muy bien cómo te aprovechas de mí y cómo su puta madre goza del abuso!… Jejeje… ¡Golpéame la cara! ¡Sácame sangre, infeliz!
Con mucho gusto y arrechera le seguí dando severas bofetadas a la puta a la vez que le daba dura verga por esa rajota, su hijo miraba con gran arrechera el maltrato hacia su mamá mientras ella apenas gritaba pidiendo más chimbo y cachetadas y se reía como loca.
YO: ¡Mira, Jeff!… ¡Mira como follo, le escupo y le pego a tu madre!…
JEFF: ¡Bien hecho!… ¡Ella se lo merece por puta!… ¡Dale más duro, amigo!… ¡Hazla gritar más!… ¡Reviéntale la jeta!…
YO: ¡¿No vas a venir a defenderla? malparido!
JEFF: ¡Qué va!… ¡A mí me excita ver cómo abusas de esa prostituta!… ¡Oohh!… ¡Esa perra es toda tuya!… ¡Uuff!… ¡Reviéntale la raja y la cara mientras yo hago lo mismo con la puta de tu mamita!… ¡Aaaahhh!… ¡Le estoy dando buena verga por esa tarántula y buenas cachetadas por esa buena jeta de zorra que se manda la desgraciada!… ¡Oohh!… ¡Qué cuca!…
Los berridos de las dos mujeres eran bastante sonoros y agudos, sus palabrotas muy vulgares, solo las putas de la calle las dicen, pero estábamos muy felices todos, las señoras lo estaban gozando, y mucho más Jeff y yo.
JEFF: ¡Mamá ¿Cómo lo estás pasando? so puta!
DOÑA STELLA: ¡Fenomenal, papi!… ¡Oohh!… ¡De lo mejor!… ¡Me encanta en gran manera la vergota de tu amiguis y sus buenos manotazos en mi cara y en mis tetas!… ¡Aaahhh!… ¡¿Y tú? ¿Cómo la estás pasando, amor!
JEFF: ¡Ni se diga, mamá! ¡Le estoy destrozando el coño a punta de verga a la mujerzuela de la madrina!…
Y por su parte, doña Stella seguía aconsejando a su degenerado hijito:
DOÑA STELLA: ¡Acaba con esa prostituta, mi amor!… ¡Oohh!… ¡Dale duro por ese coño y embaraza a la puta!
JEFF: ¡Como tú digas, cerdota!… ¡Oohhh!… ¡Cómo me gusta la raja de mi madrina!… ¡Por Dios!…
YO: ¡Y a mí me fascina la de la puta de tu mamá!… ¡Ooohhh!…
Jeff y yo pusimos a nuestras cachondísimas y promiscuas madres en varias posiciones mientras las seguíamos colmando de fuertes chimbazos por sus apetitosas vaginas, las pusimos a cabalgar sobre nosotros, también las pusimos en cuatro, igualmente sentadas sobre nuestros chorizos dándonos la espalda y luego en misionero, en cada una de esas posiciones las inmorales y gritonas señoras tuvieron sus poderosos orgasmos, sus palabras soeces, sus alaridos y la expulsión de sus intensos líquidos vaginales nos comunicaban la ocurrencia de tales puntos máximos de clímax femenino, y aprovechando que esa última posición, la de misionero, la mejor para lograr un embarazo, Jeff y yo no dudamos en lanzar nuestras tremendas lechadas entre esas calentonas y feroces chochotas, chorros y chorros de lefa aseguraron sus tan ansiados embarazos ya que la leche fue tan abundante que sus cucas se rebosaban y se salía gran cantidad de semen por fuera, el cual resbalaba libremente por sus culos y caía sobre los sofás, sin embargo, la mayor parte de ese nutritivo y joven esperma preñador se quedó adentro de las respectivas vulvas, cumpliendo su buena misión de fecundar.
Mamá, Jeff y yo nos sentamos sobre los sofás, doña Stella permaneció acostada. Y mamá, bastante entusiasmada, manifestó lo siguiente:
MAMÁ: ¡Uuff!… ¡Sencillamente es-pec-ta-cu-lar, mis nenes!… Jejejeje… ¡Bien hecho, mi ahijado! ¡Estoy orgullosa de ti! ¡Casi me destruyes la cuca a punta de verga, de lamidas, de chupadas y de dedeadas!… Jejeje… ¡Uuff!… ¡Me encantó, mi rey!… ¡Estuviste como los dioses!…
JEFF: ¡Madrinita!… ¡Su cucaza es la mejor de todas las que he probado! ¡Me dejó la verga seca, pero llena de gozo!… ¡Mis huevas están vacías, pero repletas de placer!… ¡Le enleché totalmente toda la puta raja!… Jajajaja… ¡Qué delicia!…
MAMÁ: ¡Y también estoy muy orgullosa de ti, mi Jeff, mi hijo del alma! ¡Le diste bien duro a la putona de la comadre!… Jejeje… ¡La malparida no hacía sino gritar, gemir y lanzar palabrotas de gusto!… ¡Mira cómo quedó de despernancada la puta!…
En efecto, doña Stella estaba aún abierta de patas y acostadota sobre el sofá, no se movía, mostraba toda su suculenta y enlechada panochota, al parecer disfrutaba de un delicioso shock sexual de gozo, pues sus ojos se veían blanqueados y de su boca abierta salían gruesas babazas.
JEFF: ¡Parece que mataste de gozo a mamá!… Jejeje… ¡La puta ni se mueve!…
MAMÁ: ¡Papi!… ¡Le diste tanto chimbo y tan duro le pegaste que parece que la mataste!… Jejeje…
JEFF: ¡Mataste a mamá a punta de verga y de tortazos! ¡Le sale sangre de la nariz!… Jejejeje…
YO: ¡Qué va! ¡No me asusten!… ¡A esta puta nada la mata!… ¡Miren, ya empezó a reaccionar! ¡Lo que pasa es que dejé a esa hembrota molida de placer!
Doña Stella se empezó a levantar y mientras lo hacía decía:
DOÑA STELLA: ¡¿Eh?!… ¡¿Quién soy yo?! ¡¿Dónde estoy?! ¡¿Con quién amanecí esta vez?! ¡Qué buena rumba y qué buena trabada la de anoche! ¡Creo que estoy totalmente borracha y drogada! ¡Se me borró el cassette! ¡¿Y esta sangre?! ¡¿Quiénes son ustedes?!
Me afané en darle cachetaditas en la cara para que la señora reaccionara y mientras tanto mi mamá se tomaba el trabajito de recordarle las cosas.
MAMÁ: ¡Eres mi comadrita Stella! ¡Estás en mi casa! ¡No amaneciste, solo acabaste de follar con mi hijo! ¡La pasamos muy rico! ¡Solo nos drogamos un poquito! ¡Somos tus amigos! ¡¿Recuerdas ya? so puta! ¡Quedaste embarazada de mi Davidcito!
Mientras yo reía seguí aprovechándome de doña Stella dándole cachetaditas en la cara y en las tetas.
YO: ¡¿Ya recuerda? puta!… ¡Le di verga hasta por las putas orejas!… Jejejeje…
DOÑA STELLA: ¡Ya!… ¡Ya!… ¡Ya, mi Davidcito!… ¡Ya recuerdo cómo me encendiste a chimbo ventíao! ¡Qué rico!…
JEFF: ¡Vaya, mamá!… ¡Mi amigo te dio verga y cachetadas tan duro que quedaste desmayada!… ¡Hasta te reventó la nariz y un labio!…
DOÑA STELLA: ¡Quedé desmayada del placer tan berraco que este chino hijueputa me dio!… ¡Qué riiiicooooo! ¡Jueputa!… ¡Ha sido la mejor follada que me han dado en años!… ¡Ven para acá, mi David! ¡Ven para acá, mi amor!
Doña Stella bruscamente me agarró y me abrazó, casi me estruja de tremendo abrazo tan fuerte, me hizo sentar sobre ella y masturbándome con su mano la verga, expresó:
DOÑA STELLA: ¡Increíble! ¡Me hiciste el amor como un verdadero machote, mijo!… ¡Te felicito!… ¡Esta vergota es una maravilla!… ¡Es una verdadera fiera!… ¡Es como si tuviera un motor de gran potencia!
YO: ¡Gracias, doña Stella! ¡Usted también estuvo bárbara! ¡Definitivamente usted es la mujer de mis sueños!…
JEFF: ¡Cuádrense ya!… Jejejeje… ¡Tranquilos!… ¡Yo no me opongo a que se hagan novios ustedes dos!…
DOÑA STELLA: ¡Por mi parte añoro que seas mi novio, Davidcito! ¡¿Me aceptarías? amor!
YO: ¡Claro que sí, doña Stella! ¡Severa novia me conseguí!… ¡Una veteranita deliciosa y muy puta! ¡Siempre quise tener de novia a una mujer así, a una puta madurita!
JEFF: ¡Jueputa!… ¡Que vivan los novios!…
MAMÁ: ¡Que vivan!…
JEFF: ¡Pero bésense!… ¡Hagan algo, tortolitos!
Doña Stella y yo nos besamos. Y nos manoseamos. La señora, sobre todo, continuaba bastante ganosa.
MAMÁ: ¡Comadrita, lo más obvio y seguro es que estos machotes nos hayan dejado embarazadas!… ¡Creo que quedamos bien preñaditas! ¡Qué rico!…
DOÑA STELLA: ¡Si! ¡Qué lindo!… ¡A esperar baby!… ¡Y como tu hijo ya me preñó ahora quiero que me meta la verga por el culo! ¡Tal como lo oyeron, por EL PUTO CULO!
MAMÁ: ¡Wow!… ¡Qué rico!… ¡Ay!… Yo también quiero que mi ahijado ahora me dé por el culo!
Mi amigo y yo nos miramos con miradas triunfantes y de asombro.
YO: ¡¿Por el culo?!…
JEFF: ¡Este par de putorras quieren chimbo por el culo!… ¡POR EL CULO!… Jejeje… ¡¿Puedes creerlo?!…
YO: ¡¿Ustedes dos están seguras que quieren que las clavemos por el culo?!
MAMÁ: ¡Obvio, papito!… ¡Si no pues no se los estaríamos proponiendo!
JEFF: ¡Vaya cerdas!… ¡¿No les duele por ahí?!
DOÑA STELLA: ¡Ay… mi amor!… Jajaja… ¡Ya tenemos una amplia experiencia en sexo anal, mi vida! ¡Nos han metido vergas de todos los calibres y longitudes por el culo! ¡Cipotes diminutos, pequeños, medianos, grandes, muy grandes, de tamaño familiar, mega familiar, monstruosos, mega monstruosos y súper-mega- monstruosos! ¡Y lo que nos dan son ganas de más verga!… Jejeje…
MAMÁ: ¡Que nos enculen los machotes no nos produce dolor sino gran placer, papis! ¡Durante esas culeadas tan ricas esos ojetes nos quedan así de grandotes y aun así no nos duele y antes queremos más verga!…
Mamá unió entre sí las puntas de sus dedos índices y también las puntas de sus dedos pulgares haciendo de esa manera un gran círculo y nos lo mostró a todos en representación de lo abierto que les queda el ano a juntas putas durante esas intensas enculadas.
YO: ¡Qué cerdadas dicen ustedes!… ¡Y nosotros pensando que los marranos éramos nosotros! ¡Pero, en fin, putas marranas tenían que ser!…
DOÑA STELLA: ¡No se preocupen, pueden reventarnos el culo todo lo que quieran, preciosos!
YO: ¡Ah… bueno, mamasota! ¡Si es así pues cuenten con nosotros para encularlas, par de puerconas!
Nuestras madres nos masturbaban con vehemencia, y mi amigo, mirando mi grueso y largo nabo, me preguntó lo siguiente:
JEFF: Jejeje… ¡Yo ya recargué semen! ¡¿Y tú? David ¿Ya recargaste leche en esas huevas?!
YO: ¡Si, pana! ¡Yo no he bajado verga! ¡La arrechera no se me ha disminuido ni un tris! ¡Mis huevas recargan sumamente rápido!
JEFF: ¡Pues entonces ¿qué esperamos?! ¡Enculemos a este par de putas!…
YO: ¡Manos a la obra!… Jejeje…
MAMÁ: ¡Estos si son verdaderos machos!… ¡Eso es diciendo y haciendo!… Jejeje… ¡A ver, mi Jeff, encula ahora a tu madrinita amada!
DOÑA STELLA: ¡Y tú, mi novio hermoso y precioso, dame bien rico y duro por este soberbio y tragón culazo de ramera barata!
Juntas mujerzuelas se pusieron en cuatro sobre los sofás, levantaron sus severos culotes y empezaron a agitarlos provocativa y morbosamente.
Jeff y yo nos situamos frente a esos tentadores culazos, Jeff nalgueó el de mi madre y yo el de la suya. Después las dos señoras, muy colaborativamente, se abrieron las nalgas con sus manos y las mantuvieron así.
Mi amigo y yo nos deleitamos viendo esos exquisitos y palpitantes anos, eran de padre y señor mío, súper-riquísimos.
Nosotros, sin dejar de mirar morbosamente esos tremendos traserotes y anotes, nos echamos babitas en nuestros dedos con el fin de penetrarles esos inmensos culotes con ellos primero.
Escupimos esos incitantes ojetes y decididamente clavamos nuestros dedos en ellos. No nos dio ni pizca de pena ni de remordimiento.
Las putas, teniendo sus ojos cerrados, lanzaron, cada una a su vez, unos deliciosos aullidos de gozo al sentir nuestros abusivos dedotes ingresar en sus excitantes ortos, y con desbordadas ansias empezamos a dedearlos a la vez que las regias y lobas mamás seguían gimiendo.
YO: ¡Por las bolas del bíblico Noé! ¡Tremendo culote el que tiene mi novia, es decir, la puta de tu madre, Jeff!… ¡Cómo me gusta!…
JEFF: ¡Uuff!… ¡Dedea bien rico el culote de mamá, viejo David!… ¡Hazme el favor de colmar de placer el ano de la zorra!…
YO: ¡Oohh!… ¡No te preocupes, camarada! ¡Yo le daré una dedeada y una cogidota a tu mami que la puta va quedar sin poderse sentar por días enteros!… Jejejeje… ¡Oohh!…
JEFF: ¡Aahh!… ¡Qué bien, hijueputa!… Jejeje… ¡Revienta analmente a mamá!… ¡Oohh!… ¡Yo también me encarnizaré destruyéndole el culo a la tuya sin clemencia alguna!… ¡Aahh!…
YO: ¡Uuff!… ¡Va pa’ esa, socio!… Jejeje…
MAMÁ: ¡Aaahhh!… ¡Encúlame ya, ahijado!… ¡No hallo el momento de tener tu gruesa y larga poronga dentro de mi hambriento culazo! ¡Quiero que me encules ya!… ¡Penétrame el puto culo!…
JEFF: ¡Uuff!… ¡De una, madrinita culona!… ¡Tenga usted mi verga en su culo, puta de antro!…
Mi amigo Jeff, sin hacerme de rogar más, se agarró su vergota y de una se la fue introduciendo a la puta de mi mamá en su rico y voraz culote, la señora emitió un delicioso y potente gemido.
JEFF: ¡Ooohhh!… ¡Mira, David! ¡Mira cómo enculo a la perra de tu mami!… ¡Oohh!… ¡Madrinita!…
YO: ¡Santas vergas voladoras!… ¡Es algo sublime!… ¡Oohh!… ¡Por fin se cumplió lo que tanto queríamos, encular y tirarnos a las buenotas de nuestras madres!…
Yo también agarré mi larga y gruesa vergota y se la empecé a clavar a la madre de mi amigo por ese tremendo culazo tan tentador.
DOÑA STELLA: ¡Aahh!… ¡Jueputa!… ¡Qué rico!… ¡Siento que algo inmenso me invade todo el hijueputa culo!… ¡Aaaggghhh!… ¡Eso!… ¡Ya lo tengo todo adentro, mi amor!…
JEFF: ¡Oohh!… ¡¿Estás disfrutando? mamá!…
DOÑA STELLA: ¡Aaahhh!… ¡Como nunca antes, amor! ¡¿Y tú?!
JEFF: ¡Uuff!… ¡El culo de mi madrina es una delicia de aquí a las estrellas, mamá! ¡Mira cómo enculo a tu comadre!… ¡Oohh!…
DOÑA STELLA: ¡Wow!… ¡Apenas mi comadrita se estremece todita!… Jejejeje…. ¡Eres una máquina de sexo anal, amor!… ¡Oohhh!… ¡Qué delicia!… ¡Y tu amiguito no se te queda atrás, papito!… ¡Me está reventando el puto culo sin piedad alguna!… ¡Aaaaaggghhh!…
El hijo de doña Stella, enculando a mi mamá mientras permanecía mirando a la suya ser devorada analmente por mi inmenso cipote, le deseo buena enculada a la puta de su propia madre.
JEFF: ¡Disfrútalo, puta!…
Y ella, volteando a mirarlo con ojos y rostro de pura prostituta de calle le agradeció esa vulgar frase con otra grosera palabrota:
DOÑA STELLA: ¡Gracias, cabroncito de mierda!…
Jeff, dirigiéndose a mí, dijo:
JEFF: ¡Oohh!… ¡Muy bien, panita! ¡Sigue destrozándole el culo a mi mamá de esa manera tan bestial!… ¡No le tengas contemplaciones a la perra! ¡Por ser mi madre no le perdones la vida y reviéntale con ganas ese puto culazo a la puta! ¡Quiero verla caminando toda esta semana como un pato!… Jejejeje…
YO: ¡Gracias, amigo!… ¡Uuff!… ¡Estoy disfrutando del culo de tu madre como nunca antes lo hice con puta alguna!… ¡Aaahhh!… ¡Qué rico ano!… Jejeje… ¡Tú también encula a la mía con toda rudeza! ¡No te cohíbas! ¡No me importa que dejes a mamá sin culo esta noche, el todo es que disfrutemos de su violenta enculada!… Jejeje…
MAMÁ: Jajajaja… ¡Malparidos!… Jejeje… ¡Pero tienes razón, hijo! ¡Quiero que tu amigo me encule de una manera bien cerda!… ¡Mas cerda de la que ya está usando!… ¡Aaaahhh!…
YO: Jajajaja… ¡Bueno, mamá!… ¡Oohh!… ¡Ya oíste a mi madre, amigo! ¡Dale una buena y ejemplificante culeada!… ¡Aahh!…
JEFF: ¡De una!… ¡Va pa’ esa, hijueputa!…
YO: ¡Oohh!… ¡Para que veas que mi madre es más puta que la tuya, viejo Jeff!…
JEFF: ¡No! ¡Mi mami es muchísimo más puta que la tuya!… ¡Oohh!… ¡¿Cierto mami que tú eres más puta que la madrinita?!
DOÑA STELLA: ¡Oohh!… ¡Toda una vida, mi amor!
YO: ¡Aahh!… ¡Mi madre es más puta que usted, doña Stella!…
JEFF: ¡Oohh!… ¡Sigue alucinando, amigo!… ¡Aaahh!… ¡La mía es infinitamente más puta que la tuya! ¡Hasta se prostituye en la cantina que atiende junto a mis hermanitas y a otras niñas que trabajan ahí!… ¡Oohh!…
MAMÁ: ¡Pero yo también me prostituyo! ¡De una manera un tanto diferente, pero lo hago!… ¡Aaagghh!…
YO: ¡Es cierto!… ¡Oohh!… los viejitos con los que se la pasa le dan regalitos por sus favorcitos!
MAMÁ: Jejejeje… ¡Además yo también podría entrar a trabajar en la cantina y puteadero de mi amiga al menos por unos días, pues siempre he querido tener la experiencia de ser puta de antro!… ¡Oohh!… ¡Qué verga!…
DOÑA STELLA: ¡Aahh!… ¡Marcelita, si tú quieres, te puedo contratar en el puteadero que desde hoy voy a montar oficialmente en mi cantina! ¡Serías altamente apetecida por los clientes, comadrita! ¡Con ese culote, esas tetotas y esa cara de prostituta chupa vergas serás la sensación!… ¡Oohh!… ¡Dame más duro, David!…
YO: ¡Ay… si!… ¡Esa es buena idea, mamá!… ¡Oohh!… ¡Siempre he deseado verte bien prostituida!… Jejeje… ¡Acepta la propuesta de la señora Stella, mi nueva novia!… ¡Oohhh!… ¡Toma más duro, puta!… ¡Oohh!…
MAMÁ: ¡Aaahhh!… ¡Claro que sí!… ¡Acepto sin dudarlo, comadrita!… ¡Como ustedes saben mi marido no estará por varios meses, así que puedo putear de lo lindo! ¡Desde esta misma noche quiero empezar a putear en esa cantinita de prostitutas!… ¡Aaahhh!…
DOÑA STELLA: ¡Bien!… ¡Acertada decisión, comadrita!… ¡Aaahhh!… ¡Estoy orgullosa de ti!… ¡Oohh!… ¡Después de culear aquí iremos a culear allá!… Jejeje…
YO: ¡Uuff!… ¡Increíble!… ¡Siempre quise que mamá se dedicara a la prostitución!… ¡Oohh!…
JEFF: ¡Uuff!… ¡Por fin se te hizo el milagrito, amigo!…
YO: ¡Por fin me escuchó el buen Chuchito en mis oraciones!… Jejeje…
MAMÁ: Jejeje… ¡Esas cosas que le pides a Chuchito lindo!… ¡Pero bueno!… ¡Rico!… ¡Me encanta!…
YO: Jajajaja… ¡Y me cumplió el Chuchito lindo y bendito!…
Mi tetona y culona mamá aprovechó que a mi pervertido amigo se le salió su vergota de su culote para incorporarse y decirle:
MAMÁ: ¡Mi Jeff, ahora quiero montarte mientras me lo sigues metiendo por el culo, papi!
JEFF: ¡Como usted desee, madrinita rica!…
DOÑA STELLA: ¡Mi David, amor mío! ¡Yo también quiero montarte para que me chupes las tetas mientras mi culote sigue siendo salvajemente clavado por tu poderosa vergota!
YO: ¡Dale, puta, digo, mi novia hermosa!…
Jeff y yo nos sentamos en el mismo sofá, el cual era bastante amplio para caber juntas parejas. Mi suculenta mamá se sentó sobre mi pajuelo colega dándole la espalda, y empezó a montarlo con muchas fuerzas mientras se clavaba esa dura y excitada vergota por tan ganoso ojete, mi amigo le amasaba las tetas mientras la enculaba, las orejitas de conejo que mamá tenía puestas sobre su cabeza se movían muy excitantemente al ritmo de la salvaje culeada.
Doña Stella, mi nueva novia, se me sentó encima, pero de frente a mí, dándome sus tetas a chupar, y su poderosa cabalgata, metiéndose mi verga por el culo, fue sencillamente fenomenal.
La sala se llenó de los gritos, gemidos y palabrotas que no solo las mujeres lanzaban sino también de los que Jeff y yo emitíamos con potencia.
Yo también observaba las tetas de mamá rebotar cuando mi amigo se las soltaba y las dejaba bambolear libremente, se veían exquisitamente espectaculares.
Las sabrosas hembrotas orgasmearon muchas veces soltando sus impetuosos jugos vaginales y fluidos al aire y sobre nuestros cuerpos. Nosotros también nos vinimos varias veces en esos severos e incansables ojetes y en sus caras y bocas.
Cuando recargábamos leche en nuestros cojones cambiábamos de posición, las penetramos en muchas posturas, las enérgicas mujeronas no parecían cansarse, al contrario, cada vez se notaban más ganosas y dinámicas, al fin y al cabo, eran unas putas ninfómanas.
Volvimos a darles por la raja, alternando cuca y culo, mientras bebíamos trago y fumábamos marihuana y nos vinimos nuevamente en sus cachondas vulvas tratando de asegurar sus embarazos.
Así estuvimos hasta casi el atardecer, hasta que definitivamente las dos putorras nos dejaron completamente secos. Jeff y yo quedamos vueltos mierda, sin semen, agotados, borrachos y drogados, las señoras nos sacaron nuestros últimos chorritos de leche usando sus succionadoras bocas en tremendas mamadas, y dejándonos botados en la sala se fueron muy contentas y risueñas a bañar y a arreglar, ellas estaban sumamente enérgicas, Jeff y yo no nos explicamos de dónde diablos sacaban ellas tanta fuerza y vigor, el licor y las otras sustancias que consumimos parecían no afectarlas negativamente sino muy positivamente, las damas lo que querían era más y más verga, pero nosotros ya no podíamos dar más de nuestros pitos y cojones. Las mujeres decidieron irse a la cantina de doña Stella, se fueron vistiendo como lo que son, auténticas putas, y se fueron con la intención de ponerse a putear.
Efectivamente, después de nueve meses nacieron nuestros hijos producto de esa mítica follada, a fin de cuentas, esa no fue la única culeada que hicimos, vinieron muchas más en el transcurso de ese tiempo.
Nuestros padres se enteraron de todo, pero en verdad no le pusieron mucha atención, lo supieron entender, aceptaron a nuestros hijos como suyos y admitieron el hecho de que nuestras madres fueran reputas, solo nos dijeron que no volviéramos a follar ni a engendrar más hijos. Doña Stella, mamá, Jeff y yo no les hicimos caso en eso de no seguir follando porque de todas formas seguimos culeando como locos.
Es posible que después cuente lo que ocurrió en la cantina de doña Stella y en otros deliciosos momentos anteriores al nacimiento de nuestros bebés, al igual que nuestros respectivos incestos.
FIN DE LA CUARTA PARTE.
¿CONTINUARÁ?… TAL VEZ…
ESCRITO POR SIREMIS.
Hermano, lo felicito, me encantó esta serie ya que mezcla en incesto con el swinging.
Si hace una nueva serie de esta temática de intercambios madres e hijos, saldría bien la premisa de un pueblo donde la tradición que al cumplir la mayoría de edad los muchachos alguna mujer madura del pueblo les desvirgue.