cogiendo como poseida

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Esa fue la primera vez que asistí a un festejo sin la compañía de mi esposo e hijo más aun a setenta kilómetros de distancia de la ciudad donde radico.

Ahí conocí a Damián un chico de aproximadamente veintitrés años con quien pase una velada maravillosa tan así que por primera vez en mis cuarenta y ocho años de vida probé el alcohol aceptando tomar en su compañía un par de copas pero el festejo aquel llego a su fin y como de antemano me había ofrecido llevarme de regreso a casa aborde su auto sin ningún tipo de prejuicio donde le comento lo contenta que me encontraba y con deseos de continuar bailando y tal vez tomar un par de copas mas porque la noche aun era joven (una de la madrugada) y yo no sentía ninguna premura por estar en casa pero no corrimos con suerte no encontró el lugar indicado después de recorrer toda la ciudad por lo me pregunta si tendría inconveniente en tomar ese par de copas en la intimidad de la habitación de un hotel para no hacerlo a plena calle y tal vez ahí poder bailar y no sé si fue por el efecto del alcohol o la euforia del momento que acepte y todo inicio muy bien tomando una copa de ron que previamente había adquirido y sintonizo la radio de aquella habitación de motel con música suave, al estar bailando comenzó a pasar su mano por toda mi espalda y me sentí electrizada cuando estuvo a punto de tocar mis nalgas y esa maniobra la repitió tres o cuatro veces y aunque suene extraño anhelaba que lo hiciera pero fue hasta la cuarta melodía que lo hizo cuando yo ya resoplaba por el estado de excitación en que había entrado deseando ser tocada por todos lados

Deslizo su mano por mis nalgas y atrajo mi cuerpo al suyo creo que con la intención de que sintiera la dureza de su verga y aun no logro entender porque al sentirla exclame, mmmm que rico y ahí termino el baile comenzó a besar mis labios eran besos de fuego, pasión y lujuria que me envolvieron en el mismo torbellino correspondiendo de la misma manera entregándome en cuerpo y alma permití que desnudara en su totalidad mi cuerpo que vibraba de deseo sexual con cada una de sus caricias y besos y no soporte por mucho tiempo cuando comenzó a lamer los húmedos labios de mi vulva convulsionando como jamás lo había hecho tuve por primera vez un verdadero orgasmo sin haber sido penetrada aun, cada beso cada caricia y por supuesto sus lamidas eran nuevas para mí ya que jamás había tenido ese trato por parte de mi marido todo fue nuevo para mí y hasta las posturas ya que inicio colocándome empinada y comenzó a hundirme su gruesa tranca mientras me acariciaba las nalgas y no recuero haber participado con mi marido tan activamente como lo hice con Damián cuando ya había introducido casi la mitad comencé a mover las caderas buscando ser yo la que se metiera lo que faltaba de verga y mi activa participación y sintiendo como su enorme y gruesa verga se movía dentro de mi tuvo su recompensa con la llegada de otro gran orgasmo que casi me provoca un desfallecimiento pero el aun no terminaba así que modificando la postura colocándose de pie al lado de la cama comenzó a penetrarme mientras yo permanecía con las piernas ligeramente levantadas y abiertas pero una vez que hubo enterrado la mitad de la verga tomo mis piernas levantándolas por completo y separándolas al máximo de un solo y violento la hundió por completo provocándome dolor al sentir su verga empujando mi útero fue una ensartada muy profunda que provoco dolor morboso ya que a pesar de ello pedía mas y mas verga y fui complacida ya que Damián empujaba con tal fuerza que sentía que hasta sus bolas iban a entrar

La llegada de otro orgasmo me dejo completamente desfallecida con la respiración sumamente agitada y la vista nublada me quede dormida no se por cuánto tiempo pero desperté pidiéndole a Damián mas verga y fui complacida cogimos hasta ya entrada la mañana llegando a casa tan feliz como jamás lo había estado por eso ahora entiendo a todas esas mujeres que buscan al hombre ideal para coger y ser felices yo aunque un poco tarde ya tengo el mío y no siento ningún remordimiento con mi esposo