Como me folle a mi exnovia delante de mi mujer y mi amigo

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Nomada_P.
Sucedió hace dos veranos. Nuestro amigo Juanjo nos habia invitado a una fiesta en su chalet, junto con varias parejas mas. Como no me gusta condudir habiendo bebido, quedamos con ellos en que nos quedariamos a dormir en su casa después de la fiesta, a lo que no opusieron ninguna pega. Tienen un chalet grande con habitaciones de sobray además, ese fin de semana no estaban ninguno de sus tres hijos en casa.

La mujer de Juanjo había sido novia mia cuando jóvenes, pero nunca habiamos comentado éste hecho ni con él, ni con mi mujer, Claudia, bastante celosa por otra parte.

El caso es que la noche se desarrolló como suele ser habitual: vino, risas, comida, más vino, más risas, más vino, más comida, mojitos, mojitos, y así hasta que poco a oco nos fuimos quedando los cuatro sólos.

En ese momento, Juanjo, que estaba mucho más bebido que yo, decidió quitarle el bikini a Nuria en la piscina, a lo que ella no puso ninguna resistencia. Yo hice lo mismo con Claudia y me quité el mio.

Las luces de la piscina estaba encendidas, asi que podia ver el coño rasurado de Nuria, swu cuerpo sin marcas de bañador y como Juanjo le metia mano debajo del agua. Sin embargo mi mujer es muy cortada y cuando yo lo intentaba me cerraba las piernas.

– "Déjame" le decía. "Sabes que no me gustan estas cosas" me decía ella. Bueno, me lo decía con esa voz que denota que uno va muy bebido…

Tanto Juanjo como yo nos dedicábamos a jugar con nuestras chicas, pero aprovechávamos cualquier momento para rozarnos los cuatro. Yo sospecho que a él le daba morbo tenernos en la piscina desnudos también, y no dejé de fijarme en que también miraba el peludo coño de Claudia.

Cada vez que Juanjo salía de la piscina (yo no salí ni una vez), Nuria se acercaba a nosotros para rozarse descaradamente….. y yo aprovechaba para ir tocandola por donde podía, o bueno, por donde Claudia me dejaba.

Así le toqué las tetas, le pellizqué un pezón, le pasé la mano por el culo y por un segundo le puse mi mano en el interior del musmo. Yo veía que Nuria iba calentándose por momentos, y con su excitación, mi polla estaba cada vez mas necesitada de ser ordeñada.

Mi mujer, cada vez que nos acercábamos intentaba ponerse por enmedio, pero claro, era imposible porque en el agua manoteábamos y jugábamos a hacer aguadillas sin parar, o Nuria se subia a la colchoneta e intentábamos hundirla. Una de las veces, que me acerqué a Nuria con mi mujer agarrándome por detrás, volvió Nuria la cara y buscó mi boca con descaro. "Eso no" gritó Claudia tirando de mi.

Pero seguimos jugando y chapoteando en la piscina.

Fue pasando el tiempo y calleron varios mojitos mas. Mi mujer, que tiene poco aguante, salio un momento de la piscina y se tumbó en una hamaca para taparse con una toalla: "tengo frío" me dijo, voy a secarme un poco. Yo me tumbé en la colchoneta, con mi polla erguida y me dediqué a saborear una copa mientras Juanjo y Nuria seguían en el agua, aunque poco después se tumbaron en una zona poco profunda y nos pusimos a hablar tranquilamente y a contar chistes guarros.

Al poco yo también me acerqué y me tumbé al otro lado de Nuria. Para entonces mi mujer estaba profundamente dormida en la hamaca y no se enteraba de nada. Nuria se pegó sin cortase un pelo a mi cuerpo, lo que provocó que mi polla todavía creciese más, descansando en su muslo. Ella no hizo ningún amago de quitarla, sino que al contrario, me pasó un pié por encima de mi pierna.

Yo no me atrevia a tocarla porque Juanjo estaba muy cerca, pero miraba hacia arriba y cada vez decía menos cosas… hasta que se oyó un sonoro ronquido que me indicó sin ninguna duda que se había quedado dormido también.

Nuria no esperó más. Giró su cabeza y buscó mi lengua con la suya. Nos besamos como no recuerdo que besara, !habíamos aprendido mucho los dos con el tiempo!. Mis manos se fueron primero a sus tetas, grandes y con esos pezones puntiagudos y duros, ni demasiado grandes, ni demasiado pequeños. Apreté ahora con gusto y vi que ella cerraba los ojos con placer y se mordía los labios aguantando la respiración, esperando que terminase el apretón… que yo prologué hasta que solté uno y bajé mi mano hasta su coño.

Dicen que el cloro reseca los coños…. en el caso de Nuria debía producir tal cantidad de flujo que ni el cloro era capaz de secarlo. Lo encontré lubricado y limpio, listo para ser penetrado por mi mano, que entró poco a poco, dedo a dedo hasta que ella me la agarró y empujó toda para clavársela de forma brutal.

– "Fóllame como sabes". Oir sus palabras me volvió loco. Ya sin cortarme un pelo la llevé a una zona más profunda y la hice sentarse en mi polla, clavándosela hasta el fondo de su vagina. Follar en el agua aligera el peso y la manejaba con facilidad a pesar de ser una pedazo de hembra, alta y bien proporcionada. Ella estaba como loca, saltando y metiendosela sin parar, y sus grititos se oian con toda claridad en el silencio de la noche, pero ya me daba igual que Juanjo o Claudia despertasen.

Cuando se corrió, me comió la boca con fiereza, follándome con su lengua mientras yo seguía acariciandola y apretándole las tetas.

– "¿No te has corrido?" me preguntó. "No, quiero que esta noche duermas con mi sabor en tu boca". "Dámelo, cielo" y me senté en el borde de la piscina, tumbado de espaldas y con los pies en el agua, mientras ella se tragaba mi polla como si fuera un sable. "Tengo que agradecerle a Juanjo algún dia de estos que te haya enseñado tan bien a comerla". "¿Te cuento un secreto?" me dijo ella…"no es él el que me ha enseñado, y es más, a él no se la como" "joder que puta que eres" le dije y ya no pude aguantar más y empecé a soltar leche en su boca como hacía mucho que no eyaulaba.

Ella solícita la recogió toda con sus labios, me la enseño en la boca y me besó largamente para compartir conmigo mi semen. ¡uhmmm que placer!. Después se lo tragó todo, y recogió la gotita que hab´ñia quedado en mi glande.

"Creo que deberíamos acostar a estos dos" me dijo. "Si, ya es tarde"…. la besé largamente y salí de la piscina.

A la mañana siguiente follé con mi mujer como hacía mucho que lo hacía, excitado recordando la noche anterior. y cuando salimos nos encontramos a Juanjo y Nueria ya vestidos y duchados.

"Creo que me dormí" dijo Claudia.

"Creo que nos dormimos todos a la vez" respondió Nuria… "¡no se ni cómo llegué a la cama!" dijo mientras pasaba un brazo por el cuello de Juanjo y le daba un beso en el cuello.