CUENTO 13 AFTER WORK 1 Andrés
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Nos reimos porque algunas historias son bastante graciosas pero nos sentimos calientes cuando ya con unos tragos en la cabeza contamos cosas íntimas que nadie sabe y son secretos de cada uno.
Yo tengo muchas historias y soy la más popular del grupo.
Estas reuniones que hacemos nos sirven también para conquistar y conocer hombres diferentes que también andan en busca de aventuras de sexo para satisfacer sus deseos lujuriosos de probar algo distinto cada vez.
Demás está decir que andamos siempre excitados, cuando vamos a nuestros encuentros usamos ropa especial para la ocasión, me visto como una puta inocente, sensual y voluptuosa, logrando así un mejor contacto con los hombres que me gustan, los excito con mi cuerpo y mi mirada.
Si hablo de mí, tengo las tetas ricas y me gusta que me las chupen y me las muerdan, siempre que converso, bailo a media luz o coqueteo con los hombres que me gustan y me persiguen a algún lugar más obscuro, me comienzan a tocar y a manosear mis senos hasta que llegan a los pezones, me caliento total, me apretan los pezones y me produce sensaciones fuertes, mientras más me acarician más gusto siento y mi zorra se llena de jugos que me salen y me mojan adentro y afuera de la vagina.
Si les permito que me las mamen de inmediato y me las chupan rico me dan ganas de acabar de inmediato, comienzo a acariciar y sobar con los dedos mi vulva, me masturbo el clítoris, introduzco los dedos y les digo a mis amantes calientes que me chupen las tetas más fuerte.
Cuando me tienen casi acabando les pido que me muerdan los pezones y me hagan doler, que me metan todos los dedos en mi vagina ardiente, que muevan la mano en la zorra entrando y saliendo como culeándome mientras masturbo el clítoris cada vez más rápido hasta que me viene un orgasmo largo, rico, comienzo a pedir que me metan la verga, que quiero todos los miembros, que deseo hombres que la tengan grande, que me obliguen a chuparles , que me la metan hasta la garganta y me den todo el sémen que tienen.
Oh!, qué caliente soy!.
Después puedo seguir bailando y gozando toda la noche y tener más sexo a escondidas hasta que me llevan a un motel o departamento donde doy rienda suelta a mis placeres.
Un jueves me fui a follar con un hombre que me persiguió por mucho tiempo, no me habló si no que solamente me miró con cara de degenerado caliente, nos habíamos visto varias veces en el bar pero eran sólo miradas libidinosas y obscenas que entrego a los hombres cuando ando coqueteando y provocando, parece que él sabía que me gustaba por esa mirada degenerada que me desnudaba totalmente y me hacía sentir sucia obscena, corrupta, viciosa, pervertida, corrompida, toda así de verdad, se le notó mucho que andaba caliente conmigo, me miró el cuerpo, el culo y las tetas que muestro cuando me pongo el vestido abierto adelante con un escote amplio.
Esa noche se acercó a mí cuando fui al bar a buscar unos tragos y me invitó, yo estaba bebiendo con mis amigos y me vuelvo loca cuando bebo, él me dijo que yo era muy bonita, inteligente y que tenía un cuerpo rico para hacerlo gozar, me dijo que quería chuparme la zorra y que yo le chupara la verga, quedé sorprendida por su ofrecimiento, directo, no lo esperaba de un hombre que solamente me miró todo el tiempo sin hablarme.
Como me gustaba y me había hablado directamnte de lo que quería, le pregunté si tenía el miembro grande, me contestó: -Quieres verlo?-, tócalo por encima del pantalón y verás que lo tengo parado solamente conversando contigo-, alargué mi mano y lo toqué, lo sentí duro y grande, le dije: -qué pedazo tienes!, tenemos que ir a un lugar donde lo pueda ver al natural!-, Podemos ir al toilette si quieres- respondió- ahí podrás hacer lo que quieras con él!- Me olvidé de todo, lo seguí hacia el servicio de hombres y entramos a una de las casetas que habían, cerrando la puerta con llave, yo me senté en la taza cerrada y él se sacó el miembro y de verdad que lo tenía grande, se lo agarré y se lo comencé a chupar de inmediato porque me gustó su pedazo, era grande y grueso y me producía cosquillas y gusto en mi zorra, -qué pedazo tienes! amorcito- le dije, de verdad pensé cómo podría metérmelo en la zorra, quería sentirlo adentro, que me lo metiera y lo chupé más fuerte, me saqué las tetas y se las mostré, le gustaron, estábamos muy incómodos pero no importaba, se lo seguí chupándolo, poniéndolo en mis tetas calientes, frotando su cabeza en mis pezones parados por la calentura que sentía, él me puso de pié, tomó las tetas y las chupó soltando los senos, chupó mis pezones parados, me apretó fuerte las tetas y mordió la punta de los pezones, me causó un dolor mezclado con el placer -Más fuerte!- le ordené y empezó a morder mis senos fuerte y con dolor, chupó y me dejó marcas en la piel, estaba desesperado, yo le apreté el miembro y lo masturbé, salía mucha esperma, era mucho lo que salia de su verga, me puse de espaldas a él , me sacó las bragas, subió la falda corta que llevaba y me metió el pedazo entero de una sola vez, casi brutalmente, lo sentí adentro, comenzó a culearme mientras decía: -Puta culeada!, maraca rica!, pervertida rica buena para el miembro, me estás haciendo acabar!-, mientras metía más adentro su verga y me culeaba, le grité: -Sácalo! te lo voy a chupar!, déjame chuparlo y me das tu leche en la boca!, me senté de nuevo y me metí su verga bien adentro de mi boca, se lo mamé fuerte, hasta se lo mordí de puro gusto mientras me lanzaba una cascada de sémen que cayó en mi garganta y me la tragué, lo seguí mamando hasta que me entregó todo, nos arreglamos y yo quedé con mi boca llena de sémen, bien moqueada, pero la zorra me quedó caliente e insatisfecha, quería que me lo siguiera metiendo pero en otra parte donde estuviéramos solos.
Tuve que salir y volver a la mesa de mis colegas y amigos, pero antes decidimos irnos a un motel.
Nos bebimos unos tragos más y salimos despidiéndonos de mis amigos.
No tenía automóvil y llamamos un taxi, yo estaba muy excitada y caliente por todo lo que había acontecido en el bar, me había gozado y utilizado para que le mamara rico su verga, me había poseído con lujuria y desenfreno, acabó llenando mi boca con su esperma , fue una acabada muy abundante, movía el cuerpo con fuerza haciendo que su verga me penetrara profundo cuando me la metía de forma que me hacía sentir un placer exquisito con sus movimientos, me hizo gritar de gusto y su miembro era tan grande que me hacía daño.
En el taxi comenzamos a besarnos y a acariciarnos con las manos, me seguía chupando las tetas y yo suspiraba de gusto, me metió la mano en la zorra y me la sobaba, me metía los dedos, el chofer del taxi estaba vuelto loco y a mi me gustaba que mirara lo que quisiera, lo que estábamos haciendo, me gusta que me vean culear y soy exhibicionista, el chofer del taxi manejaba bien despacio para mirar lo que hacíamos y yo le pregunté si le gustaba mirarnos culear, el dijo que si pero no podía mirar y manejar al mismo tiempo,.
Nos detuvimos en una botillería y compramos dos botellas de whisky para soltarnos un poco más, de verdad que queríamos perder el sentido de lo que hacíamos y crear locuras sexuales, le ofrecimos trago al taxista pero dijo que tenía que ir a dejarnos y que quizás más tarde esa misma noche podría acompañarnos a beber.
Partimos de nuevo y seguimos con nuestras caricias y besos, ya estábamos bien mareados y no nos importaba lo que hacíamos.
Le abrí el pantalón y dejé libre su miembro, me lo metí entero en las boca y comencé a mamarlo, quería gozarlo más, siempre me gusta chupar el pico más que nada y este estaba duro y mojado en la punta, todavía tenía sémen de la chupada anterior que le hice en el restaurante, el chofer dijo que nunca había visto una mujer más puta y buena pa culiar como yo, le grité que parara el taxi en cualquier lugar para que viera mejor la culeada que estábamos gozando, asi lo hizo y yo me senté en el pico del desconocido mientras él miraba hacia atrás y se masturbaba, me fijé que su verga era más o menos grande, se veia dura y parada, rica, le dije que se pusiera frente a mi y me pusiera el pico en la boca para chuparselo: -Dámelo le dije, te voy a comer el pedazo rico que tienes!-, yo estaba sentada con todo el miembro del desconocido llenándome la zorra y lo gozaba moviéndome, le dí unos besos al chofer, le tomé la verga, me la metí en la boca y comencé a chuparlo mientras el sacaba y entraba en mi boca dandome mucho más gusto en la culeada, tenía dos vergas gozando al mismo tiempo.
Es rico andar mareada por el alcohol y no saber lo que hace, no me importaba nada y estaba más caliente que nunca y el miembro del chofer se lo agarré con las manos y lo masturbaba mientras chupaba su cabeza grande, lo hice acabar en pocos minutos, me dió una cascada abundante y me decia: -Oh!, puta, maraca, boca rica para mamar , eres exquisita para chupar, cómete mi pedazo y traga lo que te doy!-, mientras me iba echando los fluídos en mi boca y yo le hacía más fuerte la chupada.
Mi amigo entonces como vió que yo estaba más caliente aún y que el chofer había acabado, le dijo que nos llevara rápido al motel más cercano, que queríamos culear toda la noche, el taxista se arregló y echó a andar de nuevo el auto llevándonos rápidamente, nos dejó en un motel cerca de la carretera y preguntó si podía volver cuando terminara de trabajar porque quería meterme todo su pedazo en la zorra y participar en la follada, le dije que sí porque me dejó exitada con su sémen en mi boca, que viniera y si tenía otro amigo que lo trajera porque yo quería muchos miembros esa noche y me encontraba borracha de modo que podían hacer lo que ellos quisieran conmigo, hablaba cualquier cosa y al final no me arrepentía por nada, a mí me gustaba estar culeando con varios, mientras más hombres , más goce.
(El relato continúa en el CUENTO 13, AFTER WORK 2, Andrés).
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