El padre de mi amiga mi gran amante
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Tengo una amiga que desde pequeñas somos muy unidas yo tengo 18 y ella también. Siempre me iba a dormir a su casa los fin de semana y ella a la mía. Lucia se llama.
Un día con Lucia decidimos ver quien se encamaba con alguien mayor más rápido, accedimos y dormimos. Al otro día fuimos a su casa a comer ya que sus padres estaban ahí fuimos y todo fue normalmente.
Me acuerdo que llevaba puesto una falda de jean corta con un top que dejaba ver mi trabajado abdomen. Luego del almuerzo le ofrecí amablemente a la madre de Lucia a lavar los platos a lo cual ella se negó con una sonrisa hermosa, por dentro agradecí ya que estaba cansada y quería acostarme. En la sobre mesa el padre de Lucia, Sergio, no me sacaba los ojos de encima, yo lo mire y el me guiño el ojo a lo cual agrego "Stefi estas más linda" yo sonreí y sentí dentro mio como el calor se apoderaba de mi clítoris. sabía que había hecho una apuesta con Lucia pero tampoco del extremo de estar con su padre.
Luego de esto la madre de Lucia se fue al centro con su hermana, Lucia se acostó a dormir y yo me fui a bañar. En su casaaaa!!!!!! que caradura soy. Pero luego de lo que paso nunca lo lamentaré.
Cuando salí de la ducha me seque y apenas me puse la tanguita entro Sergio, yo lo primero que hice fue taparme con la toalla el se disculpo y salio rápidamente, en ese momento sentí una excitación terrible. Termine de vestirme y salí del baño, Sergio iba pasando y me pidió nuevamente disculpa a lo cual respondí con un guiño de ojo y seguí camino a la sala.
Allí me senté en el sillón con mi computadora, el llego y se sentó frente a mi, lo miraba entre ojos y observaba que el hacia lo mismo.
Ya mi vagina explotaba, asique hice como si "accidentalmente" se me cayera el celular y me agache mostrando todo mi culito a el.
Cuando me levante el también lo hizo del sillón y me dijo
-Me estas provocando putita
– Sabes que si – le dije agarrando su cinturón y enganchándolo a mis dedos – estoy calentita, lastima que no me puedes ayudar
– Porque lo dices?
– Porque se que no te animas – dije jugando con mis dedos sobre su bulto que quería salir
– No me conoces entonces – respondió con esa erección que me volvía loca
Me saque la remera el sostén y el short que llevaba puesto.
– Demostrame que estoy equivocada – dije
Me agarro de la cintura y apoyo sus labios carnosos en los míos que tiritaban de placer. Cuando me beso de esa manera empece a mojarme, asique baje desabroche su pantalón y deje salir ese tan ansiado trofeo para mi. Lo agarre con mi mano, lo masturbe un poco y lo tire al sillón, ahí empece a chupar ese pene enorme y duro, a lo cual el me agarro del pelo y me ayudaba con los movimientos que realizaba, y sentí ese chorro calentito de semen que corría por mi lengua era tanto que no podía tragarlo todo asique se corría fuera de mi boquita.
El se enderezo y me beso mientras sus deditos jugaban con mi clítoris al cual yo empece a tocar mis pechos el se mojo sus dedos y seguí jugando con mi clítoris
– Sigue así Sergio que me vuelves loca
– Te cogeré todo el día – dijo entre gemidos
Me tumbo en el sillón y empezó a chupar mi vagina, llego mi orgasmo junto de todo mi flujo el cual el lo disfrutaba con un placer que se le notaba en su rostro
– Cógeme por favor Sergio partime en dos – dije entre gemidos
– Sos un putita traviesa – dijo mientras me daba vuelta
Me puso en la posición de perrito y sentí su pene en la puertita de mi vagina, yo ya gemía como puta estaba re caliente , fue metiendola de a poco hasta que un movimiento brusco la metió toda
– Ah ah sigue asi Sergio por favor acaba dentro
Sus golpes eran cada vez más fuertes a los cual los dos tuvimos el orgasmo al mismo tiempo.
– Te voy hacer la colita putita mía – dijo con su respiración acelerada
– Hazlo que quieras, pero hazme gozar – conteste
En la misma posición metió su pene sin cuidado lo cual largue un pequeño grito de dolor pero de placer al mismo tiempo
– Dale Sergio dale no pares
Metía y sacaba con una brutalidad mientas yo mordía la orilla del sillón para no despertar a Lucia, el golpeaba mis nalgas, al mismo tiempo que me tiraba del pelo y eso me volvía loca.
– Voy acabar nena te voy a llenar de lechita puta
– Asi…si…si lléname de leche
Tuve otro orgasmo al mismo tiempo que Sergio. Quedamos inmóviles como por 5 minutos hasta que el saco su pene de mi cola y yo me acomode. Lo bese con mucho cariño, nos cambiamos y justo llego Lucia. Gracias a Dios que no se había enterado.
Desde ese día cada vez que podemos con Sergio nos juntamos para tener sexo ya que el es el único hombre que me deja sastifecha.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!