El placer de ser cornudo
Mi novia comenzó a besar el cuello de su amiga mientras ella se retorcía de placer, suplicándole por favor que continúe. Giane desprendió el botón de su short, dejando a la vista de mi novia y la cámara, una tanga blanca de encaje, que transpantaba su pubis perfectamente depilado..
Me llamo Alexander y voy a contarles como descubrí el verdadero placer…
Mi novia tiene 18 años recién cumplidos, mide 1.57m, pesa alrededor de 50 kg, es morocha, de cuerpo atlético, con unas caderas y el culo que hace que cualquiera se de vuelta a verla al pasarle por al lado.
Un día estando en mi departamento me envió un mensaje diciendo que invitaría a Josue y Gianella, una pareja amiga a cenar, le dije que no iba a haber problema y continué con mis cosas; eran las 19 hs Por lo que yo estaba entrando a la universidad ya que tengo el cursado de noche y llegaría cerca de la hora de cenar.
A las 20:30 hs mi novia me envió un mensaje diciendo que Josue había llegado, y que Gianella se iba a demorar porque tenía cosas pendientes que hacer en su casa.
Pasó el tiempo y ella dejó de contestar mis mensajes, lo que se me hizo extraño porque siempre fue muy atenta, así que decidí entrar a la aplicación de mi celular que me dejaba ver en tiempo real lo que veían las cámaras que había instalado en mi departamento.
Hacía un tiempo había decidido comprar dos cámaras para precaución debido a que habían ocurrido varios robos en la zona.
Ví a mi novia sentada en la mesa con Josue y Gianella, al parecer ella acababa de llegar, habían destapado un vino blanco y estaban tomando en una copa cada uno, decidí ponerme uno de mis auriculares para escuchar de que estaban hablando al ver que se reían mucho.
Estaban recordando los juegos que solían jugar de niños, a lo que mi novia agarró una botella que yo había pintado para hacer algunos adornos para la mesa y dice “seguro se acordarán de este”, haciendo referencia al juego de la botella tan conocido.
Giane, con una sonrisa cómplice asiente y rápidamente sacándosela de la mano, apoyándola sobre la mesa la hace girar, para su suerte, la botella al detenerse apuntó directamente a mi novia.
“La botella te señaló a vos” dijo Gianella.
Mi novia que ya se había puesto colorada echó una risa nerviosa, Josue intentó incentivarla y vi como mi novia se sentó en las piernas de Gianella de frente y comenzó a besarla.
Josue y yo no podíamos creer lo que estábamos viendo, debo admitir que eso me excitó un poco, haciendo que mi pene se endurezca en el medio de la clase. Por suerte, al estar sentado al final, nadie se dio cuenta.
Las chicas terminaron el beso y mi novia volvió a su silla, se notaba que ambas lo habían disfrutado, pero ninguna se atrevía a decir nada. El vino se había acabado así que Josue al parecer salió a comprar otra botella. Las chicas quedaron en silencio un tiempo, hasta que Giane confesó que ese beso había esperado por mucho tiempo y quería seguir jugando ahora que su novio se había ido. Abi le dijo que también deseaba hacerlo hace tiempo, Giane no lo dudó y al escuchar esas palabras decidió ser ella quien se suba encima de mi novia esta vez y sellando los labios de ambas en un beso.
Volví a excitarme y no me resistí a apretar mi miembro por encima de mi pantalón en un intento por disminuir ese calor que me invadía.
Giane abierta de piernas, comenzó a balancearse, haciendo que su vagina roce la pierna de mi novia, ella al notar esto, ayudó a ese vaivén tomándola por las nalgas.
Mi novia comenzó a besar el cuello de su amiga mientras ella se retorcía de placer, suplicándole por favor que continúe. Giane desprendió el botón de su short de jean y bajó la cremallera, dejando a la vista de mi novia y la cámara, una tanga blanca de tela de encaje, que bajo los dibujos se transparentaba su pubis perfectamente depilado.
Mi novia paró la acción para llevarla a la pieza y acostarse en mi cama.
Cambié la visión a la otra cámara y pude ver como Giane le quitó la remera y empujó a mi novia Abi sobre la cama, acto seguido desprendió el botón de su jean para terminar casi arrancándoselo de su cuerpo, Abi llevaba un conjunto de Calvin Klein color negro que dejaba ver ese cuerpo entallado, un conjunto que yo ya conocía y que poco había prestado atención al poder que ella tenia al usarlo, poder sobre mi y al parecer sobre una mujer también.
Giane terminó por quitarle la tanga a Abi, y se tomó unos segundos para apreciar esa vagina recién afeitada, parecía que ambas se habían alistado para esta situación; no perdió mas tiempo y se zambulló sobre las piernas de mi novia, comenzó a comerle el coño desesperadamente, ese momento que tanto había soñado se hacía realidad.
Abi, sosteniéndola de la nuca, no podía dejar de mirar ese milagro que estaba ocurriendo frente a sus ojos, comencé a escuchar a mi novia soltar pequeños gemidos, con una cierta timidez, sus piernas de vez en cuando sufrían algún que otro espasmo de placer, sus gemidos comenzaron a oírse más fuertes. En ese momento veo la cara de Josue asomándose por la puerta, veo como se movía, parecía que temblaba, creo que comenzó a masturbarse viendo a estas deidades darse placer mutuamente.
Josue se decidió a entrar a la habitación, las jóvenes al escucharlo, se asustaron, pero al ver que se estaba masturbando rápidamente su novia se paró y comenzó a besarlo y con una orden directa exclamó “chupala dale”, Josue se recostó sobre la cama y comenzó a lamer el clítoris de Abigail con mucha violencia, ella también lo tomó de la nuca y comenzó a gemir sin importarle los vecinos, Giane se quitó el short y se sentó encima de la cara de Abigail que sin dudarlo, comenzó a lamer su vulva, ambas jóvenes gemían y temblaban de placer, Josue no se resistió ante semejante espectáculo y con su pene, al parecer de unos 19 o 20 cm por 5 o 6cm de ancho, luego de mojarlo en saliva, comenzó a penetrar la vagina estrecha de mi novia, vagina que había probado un único miembro, el mío.
Josue tomó de la cintura a mi novia y comenzó un vaivén que poco a poco fue aumentando su velocidad, Abi ya no pudo seguir lamiendo la vagina de Gianella debido a los gemidos desaforados que salían de su boca, ese macho la estaba abriendo demasiado, y ella no se resistía, sino que lo disfrutaba a mas o poder; yo sabia que después de eso, esa vagina ya no seria la misma.
Me fui al baño de la universidad a masturbarme y seguir viendo como mi novia era cogida por otras dos personas, estaba siendo cornudo y eso me excitaba tanto, acabé en menos de 5 minutos.
Giane bajo hasta el clítoris de Abi y comenzó a lamerlo al mismo tiempo que Josue lo penetraba como un animal.
Abi comenzó a gritar “AH AH AH SI PAPI, SEGUI, DAME LA LECHE, PEÑAME, PREÑAME”, sus gritos de placer se habrán escuchado en todos los departamentos, al mismo tiempo que empezaron a escucharse los de Josue “AH AH AHÍ VIENE APRETALA PUTITA APRETALA, QUE APRETADA QUE ESTAS” Josue comenzó a gemir mientras se venia dentro de mi novia, al mismo tiempo que ella comenzó a temblar y a orinarse encima, Giane no perdió el tiempo y abrió su boca, tomando todo lo posible de ese néctar que mojó toda su cara y su pecho.
Los 3 terminaron acostados besándose hasta el momento que yo llegué.
En un nuevo relato les contaré como siguió esa noche conmigo incluido.
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