En el bosque
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Esta historia que les contaré, me sucedió con un amigo al que casualmente conocí, gracias al trabajo en Inicial, pues resulta que David, trabajaba en la subdelegación de Tlalpan y yo tuve que recurrir a sus oficinas en busca de apoyo, para el programa donde trabajaba
Al inicio yo note que se fijaba mucho en mi, sin embargo no hice caso, pero resulta que en una ocasión me dieron un aventón hasta el centro de Tlalpan, y como veníamos en una camioneta sólo cabían tres personas sentadas y éramos 5 por lo que me toco sentarme en las piernas de David, yo sentí algo muy raro pues al roce su verga se estaba poniendo dura sin embargo no hice ningún comentario ya que en el fondo lo estaba disfrutando, al llegar a destino, él me dijo que si le esperaba que no se tardaba, yo le dije que sí y efectivamente no tardo, cuando llego nos encontramos con un beso muy contenido pero muy rico, él me dijo que camináramos y nos metimos en una cerrada y allí cachondeamos de lo lindo, como traía falda no le costo trabajo encontrar mi panocha que ya estaba toda empapada y por ese día sólo logro meter sus dedos 2 en mi vagina, chupar por un rato mis senos, ese día quedamos de vernos al siguiente puesto que yo tenía que ir a trabajar y con seguridad lo vería.
Como les había comentado lo fui a visitar a su oficina, le pedí que cerrara la puerta con seguro, una vez que lo hizo me abrazo por detrás, como llevaba un vestido largo sólo necesito subirlo y sacarlo para que yo quedara casi desnuda
Sin dudarlo me acarició los senos y me los mamo por un rato, después me acarició la panocha y la recorrió con los dedos, él se agacho y me comenzó a besar las nalgas y metió su lengua en mi raja, lo que hizo me pusiera bien caliente, me subí al escritorio y de frente le pedí que me la metiera, hasta ese momento yo no había visto su verga, cuando la saco me saboree el caramelo que me iba a comer ya a punto de ensartarme sonó el teléfono, lo que nos desconcentro por completo, él sé parar rápido y subió sus pantalones y yo sin dudarlo me puse el vestido y todo quedo como si nada, al salir de la oficina me dijo que mañana me invitaba a conocer el albergue que esta en el ajusco, yo le dije que cómo a qué horas el me dijo que al mediodía y así fue yo estaba ansiosa por salir del grupo que tenía, cuando se termino la hora salí corriendo y llegue pero rápido a su oficina y salimos de allí y nos fuimos en su camioneta, ya en el camino me comento que estaba loco de deseo y que no se iba a quedar como ayer, me beso y me tocó los senos, como llevaba pantalón no le fue fácil tocar nada más, llegamos al albergue y así como llegamos salimos pues había mucha gente cosa que él no esperaba, en la carretera me pregunto si me gustaría ir a un lugar más tranquilo y le dije que sí, se salió y avanzamos en un camino de terrecería hasta una parte que quedaba completamente incomunicada, yo baje del auto y le pedí me dejara hacer de la chis, él bajó también y me observó como me bajaba la ropa; el pantalón y los calzones, cuando termine de orinar se me acerco por detrás y me abrazó, como no había subido mi ropa
Rápidamente me toco la panocha y me robó el clítoris lo que me calentó, me hundió un dedo primero y luego dos, después me acerco hacia la camioneta y abrió la portezuela me cargo y me sentó, me recostó y me quito primero los zapatos y me saco el pantalón y los calzones, ya desnuda se agacho y comenzó a lamer mis muslos primero y después mi vagina, me hundía la lengua y daba golpes en mi clítoris, yo estaba que me derretía, él se sacó la verga y la puso en la entrada, levantó mis piernas y la comenzó a meter, primero despacio y luego más fuerte, me jalaba de la cintura y yo abrazaba mis piernas a su tronco de tal forma que estaba completamente su verga en mi interior, más de 10 minutos estuvimos así hasta que me pidió que me volteara y me recorriera un poco dentro de la camioneta, ya con el culo así bien parado él se acomodo detrás y me puso su verga en la entrada de la vagina, me agarro de las caderas y me clavó con fuerza el trozo de carne mis jugos hicieron más fácil la entrada, él me empujaba con fuerza y se recargaba totalmente en mi cuerpo, como es más grande que yo me venció y quedo completamente aplastándome pero sin sacar su verga me daba duro, hasta que me canse
El se levantó y se recostó boca arriba, por un rato me dijo que le mamara la verga y que me ensatara, me deje caer completamente y él aprovecho para sacar mis pechos y mamarlos, así estuvimos más de 15 minutos hasta que se vino abundantemente dentro de mi panocha, yo me sentía bastante cansada por lo que permanecí así ensartada hasta que me recupere, él me dijo que jamás había cogido tan rico con nadie, yo sólo le comente que eso era sólo el principio, después me limpie un poco y me vestí, él me bajo hasta unas cuadras cerca de casa y así empezó un tiempo de cogidas con él.
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