LA FANTASIA DE MI HERMANO EFREN
No sé si será bueno o malo, tú sabes que los dos estamos casados y con matrimonios vigentes. Si, pero podía haber algo entre los dos si tú lo aceptas, le dijo Efrén..
Cuando estábamos jóvenes, teníamos alrededor de 25 años, mi hermano Efrén se enamoró de Francy, mi cuñada, pero ella recién se había casado con un muchacho unos tres o cuatro años mayor que ella. El siempre que la veía me decía… Uhmmm esa mujer esta como para darle una buena follada, ¿pero cuando será? Habrá que esperar que se aburra del marido, o él de ella. Y como Francy se fue a otra ciudad con su esposo, cada vez que la veía me repetía… Cuando será que hago mía a esa mujer y se frotaba las manos.
Ahora ya pasaron más de diez años y la semana anterior vino Francy con su esposo y se alojó en nuestro departamento, entonces aproveche para avisarle a Efrén la semana anterior que Francy nos iba a visitar y el enseguida dijo… Gracias hermano, tengo que visitarte para ver esa mujer, me imagino debe estar mejor que antes. Y le agregue un condimento… Y te cuento que el esposo va a viajar por asuntos de trabajo, dos días a una ciudad cercana.
Él me respondió… No me digas más, apenas el esposo salga de viaje yo estaré en tu departamento, y así fue que el lunes en la tarde llego Efrén con cualquier disculpa. Al verla se le iluminaron los ojos y no cabía en la ropa de la felicidad. Fuimos al estudio para simular la razón de su visita, pero allí le dije que yo tenía que ir con mi esposa a firmar unos documentos porque estábamos en trámites de vender la vivienda actual y comprar otra mejor. Efrén me dijo… no hay problema, yo acompaño a Francy mientras ustedes regresan.
Yo tenía claro cuáles eran sus intenciones, de manera que para que estuviera tranquilo le dije… Antes de regresar yo te llamo para que estén listos y vayamos a un restaurante. Con esto a él le quedo claro el tiempo de que disponía.
Como yo sentía curiosidad de saber que pasaba entre ellos, active la grabación de dos cámaras de seguridad y luego salimos con mi esposa a nuestra actividad.
Al llegar el final de la tarde, terminados nuestros tramites, llame a Efrén para que se alistaran y avisarles que pasábamos a recogerlos en media hora. Cuando nos encontramos vi en los ojos de Efrén señal de picardía, pero estando allí mi esposa y Francy era imposible que me comentara algo.
Solo cuando nos retirábamos del restaurante que estuvimos un poco separados de las mujeres, con señas le pregunte como le había ido y él levantando el dedo pulgar de la mano derecha me señalo que positivo. ¿Y coronaste? le pregunte y me hizo señas de mas o menos, pero nada más.
En la noche pasamos a dejar a mi hermano a su departamento y nos fuimos al nuestro con mi esposa y Francy. Al llegar ellas se quedaron en la sala conversando, mientras tanto yo me fui al estudio para revisar la grabación. Moria de curiosidad por ver de primera mano lo acontecido y no esperar a que Efrén me contara lo que él quisiera.
La grabación empezó en lo que yo sabía, la despedida de mi esposa y mía cuando salimos del departamento, pero enseguida Efrén y Francy estuvieron sentados hablando banalidades, de pronto ella se levantó del sofá y fue a la ventana, no sé si a mirar cuando nosotros saliéramos en el auto del parqueadero o simplemente a observar el panorama ya que nuestro departamento está en un piso alto y tiene muy buena vista.
Cuando esto sucedió, Efrén se levantó y fue directo a la espalda de Francy, le puso las manos sobre los hombros y comenzó a lanzar su ataque, diciéndole… Cada vez que te veo estas más bonita, ¿qué haces? Ella le respondió… Una buena dieta y un poco de ejercicio. Por eso tu marido debe vivir embelesado contigo. No tanto dijo ella… Cuando pasa el tiempo las cosas se van enfriando y se cae a veces en la rutina. Como Efrén tenía menos años de casado le dijo… Si eso es cierto, cuando uno se casa quiere estar a toda hora con la pareja, pero más adelante se cae en lo que tú dices la rutina.
Y a continuación el siguió indagando… Pero estando tan hermosa no te deben faltar pretendientes ¿verdad? Uno que otro, dijo ella riendo y con alguna picardía.
¿Y tú qué tan juiciosa estas? Y con igual picardía respondió algo poco creíble… Muy fiel.
Efrén continuo con sus manos sobre los hombros de Francy, pero luego las fue bajando hasta llegar a su cintura y allí dijo… Mira que cintura más hermosa, parece de reina. ¿Parece? Dijo ella riendo. Y Efrén corrigió… no, no, de reina.
¿Sabías tú que siempre he estado enamorado de ti? No lo sabía, pero lo intuía por tus insistentes miradas.
¿Y qué opinas?
No sé si será bueno o malo, tú sabes que los dos estamos casados y con matrimonios vigentes. Si, pero podía haber algo entre los dos si tú lo aceptas, le dijo Efrén.
¿Como qué? Le respondió Francy. Como aprovechar esta oportunidad en que estamos los dos solos y nadie nos va a interrumpir y simultáneamente la abrazo por la cintura y ella no lo rechazo.
Sabes Efrén, tú nunca me fuiste indiferente, pero siempre pensé que tus miradas eran producto de mi imaginación.
Mi hermano comprendió de inmediato que había oportunidad, y la abrazó más fuerte, y empezó a besarla en el cuello. Y sintiendo la aceptación de Francy sus manos subieron por su torso para posarse en sus senos. Ella hecho la cabeza hacia atrás recostándola sobre el hombro de Efrén. No paso un minuto antes que él la hiciera girar, se retiraron de la ventana e iniciaron un beso prolongado acompañado de caricias, especialmente por parte de Efrén, recorriendo ese cuerpo que tanto había deseado por años.
A continuación, volvieron al sofá y sin parar de besarse, Efrén empezó a acariciarle las piernas subiendo por debajo de la falda, luego cambio y fue a sus senos hasta sacarlos de su encierro y los beso, acaricio y chupo todo lo que quiso.
Volvió a sus piernas y al llegar a su coño lo encontró bastante húmedo, lo sé porque él se lo dijo… Que rica esta tu concha, muy bien lubricada. Y ella le respondió… Es culpa tuya.
Y faltaba lo esperado, admirar ese cuerpazo de mujer y Efrén como si fuera una flor la fue despojando de toda la ropa y al sentarla nuevamente en el sofá, le separó las piernas y le dio una sesión de sexo oral hasta arrancarle un maravilloso orgasmo.
Pero vendría lo más deseado por Efrén, llegar a la coronación. Se acomodo en medio de las piernas de Francy y lentamente la fue penetrando hasta que sus pelvis se estrellaron. Luego el movimiento de las caderas de Efrén hizo lo demás.
Francy gemía con cada estocada que le daba él y así estuvieron durante casi diez minutos sin parar de follar.
Cuando ella disfruto el segundo orgasmo, Efrén bajo el ritmo y pensando en su placer se concentró y pronto estaba explotando dentro de la concha de Francy. Quedaron pegados recuperando energía y volví a escuchar sus palabras. Primero Efrén diciéndole… No te imaginas cuantas veces desee este momento, estar dentro de ti y lograrlo hoy es lo máximo. Espero haya otra oportunidad. Ella le respondió… también deseaba estar con alguien que le pusiera un poco de imaginación y no siempre lo mismo como lo hace mi esposo.
Pero imagino que habrá aparecido otro que te hiciera disfrutar, así como hoy. Y ella respondió… No lo sé, creo que no, y soltó una risotada. Por lo que imagino que, si sucedió, pero no lo iba a divulgar, así son las mujeres, no presumen de eso como los hombres, salvo los caballeros que no tienen memoria.
A continuación, y como tenían tiempo, tomaron una bebida que les había dejado mi esposa y se fueron a la habitación donde se estaba alojando Francy con su esposo. De esto solo pude conocer los sonidos de una segunda follada porque la segunda cámara no estaba direccionada a esa habitación.
Media hora después se vistieron y recompusieron sus figuras para estar listos a la ida al restaurante. Por fin mi hermano pudo cumplir su fantasía de estar con Francy y él espera que sean muchas más veces.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!