LA HICE MI QUERIDA A MI VEECINA
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Ella, se sentó en una de sus sillas, el marido se fue a la orilla con sus hijos a jugar, yo llevaba mas de una hora allí, viendo su exhibición, solo para mi, cada vez que tenía la mínima oportunidad, incluso llegue a pensar que el marido era complice y que se calentaban así, calentandome a mi cada vez que ella podía, pero no, no fue así, allí seguía yo con mi verga a un lado de mi bañador para poder cubrirla, boca abajo, mirandola ahora sentada ella, no lo pensé, cogí un cigarrillo, me levanté fui hacia ella y le pedí fuego ahora era yo mi verga durisima a un lado, tapada pero con mi bañador pequeño apretado, bien visible ella, me lo dió si pero no dejaba de mirar mi rabo, que era lo que yo quería, me tomé el tiempo del mundo, hasta que volví a la toalla, me rei para mis adentros pensando y ahora se lo dice a tu marido cuando venga.
Me fui cachondisimo de la playa, el marido tenía un trabajo que se iba fuera estaba un par de dias volvia estaba un dia y vuelta a empezar, la siguiente noche, él no estaba, "casualmente" ella salió justo cuando yo iba a tirar la basura, sobre las once de la noche una noche de gran calor, bajé ella detrás mia, al menos dos escaleras de distancia, habia bastante gente en la calle, llegué a la parte de los contenedores, esa parte solitaria la veia venir, la esperé tiré la basura ella llegó me saludó, la tiró no podía dejarla marchar de ahí era el unico lugar que podría decirle algo, le dije vaya noche de calor, si me contestó ella, parada como yo no le dije nada mas, le puse la mano en la cadera y muslo, ella lo dijo todo, aqui no, en tu casa cuando se duerman mis hijos nos separamos y se fue delante de mi yo mirando aquel culo que pronto iba a ser mio.
Le dejé la puerta abierta, parecía estar cerrada, ella entró sobre la media noche nerviosa pero pronto yo le iba a quitar esos nervios y ella tambien a mi, que hembra, la llevé al dormitorio ella solo quería follar, me dijo que no habia problemas de embarazo, me dejó desnudo en un instante para chuparmela como una leona estaba loca por coger mi polla, yo mientras la desnudaba como podía la llevé a la cama, nos montamos un 69 hasta corrernos, eso no fue prblema para mi para seguir bien empalmado, ni para ella, me la puse a 4 patas estaba loco por ponerla así, desde que llegué, le dí asi una larga follada, ella loca con mi polla hasta que la hice correrse de nuevo, ella me fue a chuparla la quité, quería que descansara para seguir follandola, apenas a los diez minutos me subio ella encima de ella queria decia sentirme, me la follé asi, para a mitad ella subirse encima mia, como se movia, le cogia sus grandes tetas, ella no dejaba de cabalgar gimiendo, hasta que se corrió pero yo estaba a tope ella se dió cuenta y siguió, hasta que me corrí.
nos duchamos, me dijo para irse pero la retuve, quría echarle un polvo más, pero por su culo, cuando ella me dijo que nunca lo habia hecho por ahí, aún lo quise mas, la magreé sin decirle que le iba a dar por el culo, ella pensaba que yo lo habia olvidado tras decirme que nunca lo habia hecho, yo soy un experto en eso, por eso espero hasta el final cuando ya las ansias de follar no es tan grande y puedes dedicarte tranquilamente, le comí el coño y mis dedos empezaron a jugar con su ano, hasta qe le metí un dedo, ella gemia de gusto, me quité saqué el lubricante ella excitada ya no decía nada segui comiendole el coño cuidandome mucho que no se corriera, trabajando su ano lentamente dilatandolo con mis dedos, hasta que le metí 4 dedos ya, se los metía ya bien dilatada, ella jadeando, me quité me la llevé al borde de la cama me senté la hice sentarse en mi polla por su culo y le fue entrando, ella misma excitadisima se la fue metiendo hasta que se enculó toda le cogí el chocho con mi mano lo acariciaba ella estaba derretida de gusto, hasta que se corrio esta vez fue muy fuerte para ella la corrida, pero yo caliente como un toro la tumbé boca abajo y le segui dando por el culo hasta correrme.
Se fue a casa, desde esa noche, la tenia cada vez que le era posible en mi cama deseando que la follara, con el tiempo uno de nuestros juegos que mas le excitaban era que yo le dijera que su marido era un cornudo y que tenia a una mujer que era mi puta ella se volvia loca cuando le decia ese tipo de cosas follandola, hasta que llegó el punto que al hablar de su marido ella misma me decia el cornudo se ira mañana o el cabron vendra mañana, me contaba como follaba apenas duraba 15 minutos se corria ella hacia como la que se corría y a dormir, no sentia nada cuando le metia su pollita, me decía ella, era una de sus formas de excitarse.
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