Mi esposa se dio el gusto
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Cierto día cuando estabamos culeando empecé con la historia de que un tercero se unia a nosotros y ella me siguió la historia. Estaba muy humeda, muy caliente, asi que le pregunté en quien estaba pensando, y primero me dijo que en nadie, pero al final me reconoció que estaba pensando en Alan, que le resultaba atractivo.
Ya empecé a imaginarme a mi mujer culeando con el, y por un lado me entraban celos, pero por otro me excitaba la idea, eran sentimientos encontrados.
En cierta ocasión nos encontramos en un pub, compartimos los 3 la misma mesa y al rato me fuí a la barra a pedir tres copas y observar que hacian desde lejos. La barra estaba a sus espaldas, asi que no me veian. El empezó a hablarle, y con la musica fuerte se tenia que acercar a su oido mucho, y vi como le ponia la mano en el hombro a mi mujer. Despues se la pasó por encima de los hombros agarrandola, y cuando ella le contestaba se apoyaba en su muslo, cerca de su paquete. Ella llevaba una blusa bastante escotada, y yo veia como al inclinarse para hablarle el miraba sus pechos.
Volví a la mesa y seguimos charlando los tres, y yo cogia a mi mujer por la cintura y la acariciaba, pero veia que ella miraba mas a Alan que a mi, y además note que tenia sus pezones duros, no se que es lo que Alan le estaria diciendo, pero la veia inquieta.
Alan se acercó a su oido a decirle algo, apartó suavemente su pelo de la cara, y por detrás de su cabeza, mientras le hablaba me miró, y yo le hice un gesto como de consentimiento, asi que deslizó suavemente su boca hacia alante hasta encontrar la boca de ella y la besó.
Ella en un principio se quedó quieta, no reaccionó. Despues puso su mano sobre el muslo de el y lo apretó y empezó a abrir la boca para besarlo, pero en ese momento dió un salto y se separó de el. Me miró, pero yo rapidamente cambie la mirada, como si no me hubiera dando cuenta de lo que pasaba, pero ella sabia que lo habia visto todo. Se acercó a mi y me dijo no te hagas el tonto, que lo has visto todo, y ademas se te ha puesto la verga dura.
Empecé a besarla y a acariciarle los pechos, hasta que note que Alan tambien estaba metiendo mano, asi que retire mi mano y le deje a el actuar. Empezó a acariciarle los pechos y mi mujer se dejaba. Miró de reojo por que sabia que no era yo, notaba la diferencia, pero se dejaba hacer y disfrutaba del manoseo que le estaba dando su amigo, hasta que paré de besarla y entonces se hizo la sorprendida, pero se veia que no estaba molesta.
Les invité a irnos a casa, asi que nos levantamos y nos fuimos en su auto. Mi mujer iba delante asi que le dije a Alan que lo que mas le ponia era que le pellizcaran los pezones, que eso la volvia loca.
Una vez en casa empezó mi mujer a decir que no, que era una locura, que no estaba bien lo que estabamos haciendo, que en fantasias muy bien, pero que……………. en ese momento Alan se lanzó sobre ella, empezó a besarla metiendole la lengua hasta la campanilla, y le metio la mano por debajo de la blusa, apartando el sostenr, y empezó a pellizcarle los pezones.
Ante esto mi mujer se dejó hacer, le comia la boca con muchas ganas, y arrimó su vagina al muslo de el y empezó a restregarse.
Los dos estabamos con la verga super dura.
Entramos a la pieza, y nada mas entrar mi mujer se quitó toda la ropa, quedandose completamente desnuda, y se lanzó sobre Alan comiendole la boca, mientras este se desnudaba.
Yo me desnudé rapido y me tire en la cama con ellos, pero mi mujer me empujó y me dijo que me apartara, que queria culear solo con Alan.
Me senté en el filo de la cama y vi como mi mujer le comia la pichula, le comia la boca, le comia los huevos, como el le comia los pezones, le comia la vagina y ella se retorcia de placer. Se corrió por lo menos cuatro veces. El se la culeó con todas sus ganas, y cuando se iba a correr sacó su pico y se corrió sobre sus pechos.
Yo me corrí masturbandome mientras veia a mi mujer cachando con otro.
Despues de esto Alan se marchó y nos quedamos dormidos.
Al dia siguiente mi mujer no queria salir de la pieza, le daba vergüenza, pensaba que era una puta. Yo estaba feliz, pero ella parecia triste y disgustada. Llamaron a la puerta y Alan entró en la habitación, se fué hacia mi mujer y se sentó a su lado.
–Cariño, le dijo Alan a mi mujer, has estado tremenda, pocas mujeres he conocido como tu, eres divina. El viernes es feriado, vamonos a mi casa, que esta noche repetimos pero sin alcohol, que rindo mejor.
Ella sonrió me miró, y le sonreí y nos fuimos los tres a su casa.
Durante los tres dias del fin de semana que estuvimos el se la culeó todas las mañanas y las noches, y el ultimo dia se la follo cuatro veces, ella estaba como loca, hasta dentro de su culo acabó. Mi mujer fue poseida por su amigo como y cuando quiso. Fue su mujer y llena de leche la dejó.
No hemos vuelto a saber mas a Alan, pero yo se que cuando culeamos y fantaseamos ella se acuerda de su amigo.
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