MI JEFA

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por ErickMantle.
Bueno… Voy a seguir contando relatos que me ha sucedido a lo largo de mi vida, tengo que decir que no me considero un hombre apuesto es más me considero feo, pero tengo algo que se llama poder de convencimiento y sobre todo muy buen trato hacia todas las personas, siempre con una sonrisa en mis labios, cuando era muy joven leí en algún libro o párrafo que Benjamín Franklin siempre sonreía porque él se consideraba muy feo y eso me incentivo a siempre sonreír porque yo también me considero que soy feo.
Pero me considero exitoso con las mujeres y he logrado seducir algunas…

Yo considero la vida sexual de nosotros los hombres como una pradera Africana donde todos tienen esa necesidad obligatoria y hay que salir a cazar siendo el porcentaje de éxito menor del 50% para hombres atractivos, 20% para hombres promedio y 1% para nosotros los feos.

Mi relato comienza así:

Como ya dije en mi primer relato (desvirgue a mi prima) soy profesor de matemáticas, en el año 2005 asegure unas horas de mi materia en un liceo en mi ciudad natal Caracas-Venezuela.
La Directora Carolina (mi jefa) de este liceo me recibió muy amablemente y conversamos en un tono muy profesional explicándome ella lo que esperaba que lograra con los alumnos a los cuales le impartiría clase, ella una mujer muy bella, rubia tipo europeo debido a que su padre es español y su madre francesa pero ella es muy criolla de aquí del país, ojos verdes claros con una silueta muy cuidada un busto ni grande ni pequeño una cadera espectacular y un culo muy bien formado.
Comencé a trabajar de inmediato, impartiendo mis clases y tratando de dar lo mejor de mí.

Todos los días cuando yo llegaba a mi trabajo ahí estaba mi jefa dándole la bienvenida a sus alumnos y a sus profesores saludando muy amigablemente e incentivándonos a todos que fuésemos mejores cada día, yo la saludaba en tono muy amable y cordial y nunca note ningún indicio de que ella quería tener algo más que la simple relación de trabajo.
Un día que me quede en mi cubículo después de haber terminado mi jornada ella se acercó y me dijo.
Carolina: Hola profesor, pensé que ya todos los docentes se había ido en su totalidad.
Yo: Me quede y me entretuve revisando algunos exámenes que aplique hoy, pero ya culmine y ya casi me voy.
Carolina: Yo también me ya me voy solo estaba revisando algunas áreas del liceo que quiero mandar a reparar. Si usted quiere me espera que busque mis pertenencias y salimos juntos.
Yo: Ok Profesora no hay problema.

Salimos de mi cubículo caminamos hacia la dirección ella entro a buscar sus cosas y luego salió y nos marchamos, nos despedimos del portero y cuando pensé que íbamos hacia el estacionamiento ella se despidió.
Carolina: Bueno profesor lo veo mañana voy a salir por la otra puerta porque hoy no traje mi carro porque está dañado y va a tardar su reparación.
Yo: Ufffff que lastima Profesora, pero si quiere yo la puedo llevar hasta un sitio más céntrico donde pueda tomar un taxi.
Carolina: Oh bueno por mi estaría muy bien, por aquí pasan pocos taxis y por la hora me temo que tardaran mucho.
Nos fuimos charlamos de algunos asuntos del liceo y la deje en la parada del bus que la llevaría a su casa.

Yo observe sus formas durante el viaje estaba divina que hermosa mujer me dije para mis adentros. Así tuvimos varios días, yo entonces me quedaba a propósito y me ponía a adelantar trabajo. Siempre en la mitad de la jornada le recordaba que yo podía llevarla y ella me daba las gracias con su bella sonrisa.
Durante estos viajes comenzamos a hablar ya de otras cosas que no son de la profesión, descubrí que era casada hacia 7 años tenía dos hijos, su marido era músico y trabajaba hasta muy altas horas de la noche.

Los días viernes en ese Liceo se trabajaba media jornada y ese viernes yo no había desayunado y tenía mucha hambre, cuando íbamos rumbo a la parada donde yo la dejaba dije:
Yo: Hoy tengo mucha hambre esta mañana no tuve tiempo de desayunar, voy a buscar un lugar donde almorzar, le gustaría a acompañarme la invito.
Carolina: Ah muchas gracias profesor, acepto su invitación.
Fuimos a restaurant modesto y ambos ordenamos, comimos y hablamos d muchos temas, pero ya para este tiempo Carolina me atraía mucho y le pregunte.
Yo: Tu esposo debe ser muy celoso contigo…
Carolina: Porque dices eso?

Yo: Es que tú eres muy bella, si tú fueses mí esposa yo te celaría…
Carolina: (Risas). Para que tu veas mi esposo tiene tiempo que no me dedica el tiempo que merezco, cuando el regresa del trabajo yo siempre estoy dormida a veces ni cuenta me doy que regreso y cuando yo me voy al trabajo él está dormido y no me gusta molestarlo, últimamente casi no hablamos, los fines de semana es cuando él tiene más trabajo y cuando tenemos días libres se los dedicamos a los niños.
Yo: Es una pena la no coincidencia de sus profesiones.
Carolina: Si es lamentable…
Yo: Te puedo hacer una pregunta?
Carolina: Si por supuesto.
Me fui directo al lio del asunto.

Yo: Con lo que me dijiste quiere decir, que él tiene tiempo sin hacerte el amor.
Carolina: Es obvio. Ya ni recuerdo cuando fue la última vez.
Yo: guaww que pena que le suceda eso a una mujer tan hermosa como tú.
Carolina: Si es lamentable, a veces siento esa gran necesidad y opto por… esto que quede entre tú y yo.
Yo: soy una tumba…
Carolina: En las noches de soledad muchas veces suelo masturbarme, no es igual pero algo es algo. (risas)
Yo: Entiendo no te preocupes.
Carolina: Vamos a pedir la cuenta que tengo que irme.
Pedí la cuenta pague (ella quería colaborar pero dije que no rotundamente).

Llego el lunes un día normal de clases, de trabajo y cuando voy entrando al trabajo ella estaba ahí rozagante, llena de vida, sensual podía sentir sus feromonas brotar de ellas ufffff que delicia.
Carolina: Buenos días Erick como estuvo tu fin de semana?
Yo: Normal no paso nada extraordinario, y usted?
Carolina: Igual la rutina de la casa, también normal, cuando tenga un tiempo pase por mi oficina que tengo que hablar algo con usted.
Yo: Ok no hay problema.
Me dirigí a mi cubículo, pensando que podría ser eso nunca había ocurrido que ella me llamara a su oficina, pasaron por mi mente varias opciones entre en estado de ansiedad.
Como a las 2 horas me presente le dije a la secretaria que la Directora quería hablar conmigo, ella respondió lo está esperando pase. Ella abrió la puerta y le dijo aquí está el profesor Erick.
Carolina: Cierre la puerta y siéntese por favor, no sé por dónde empezar lo que quiero decirle.
Yo: Tan grave es?

Carolina: No lo veo grave, pero si es una decisión muy importante para mí.
Yo imaginaba y la vez no imaginaba ese enigma y comencé a ponerme nervioso (eso lo noto cuando me sudan las manos).
Carolina: Recuerdas la conversación que tuvimos el viernes?, La parte que te dije que quedaba entre tú y yo?
Yo: Si…
Carolina: Estuve pensando todo el fin de semana y decidí tener un desliz.
Yo no podía creer lo que estaba escuchando…
Carolina: Y lo voy a tener contigo.
Apenas pude balbucear:

Yo: A que debo ese honor si se puede saber.
Carolina: Es que siento que me valoras como profesional y como mujer, además que de verdad deseo tener sexo. Tienes alguna objeción?
Ya me había ido acercando a ella, le tome la mano
Yo: Carolina, yo también te deseo mi amor…
Comenzamos a besarnos, era increíble lo que estaba pasando, podía sentir su lengua en mi boca, ansiosa de besos, de lamer otra lengua, estire mis manos para tocar su culo ese culo tan deseado era firme, duro… que maravilla.
En un momento ella se separó y me dijo:
Carolina: Aquí no… vayamos a otro sitio. Entonces llamo a la secretaria.
Carolina: Si la Subdirectora o algún Profesor vienen a buscarme dile que tuve que salir con el profesor Erick a un asunto importante en la oficina de la zona educativa. Vámonos Profesor.
Nos dirigimos a mi carro y arrancamos. Yo no tenía un rumbo, no sabía a donde llevarla (por supuesto iba a ser en un hotel).
Carolina: Donde me vas a llevar?

Ella se había acercado a mí y tocaba mi pierna derecha sobándola, eso me tenía muy excitado y esta full erecto.
Yo: Debemos ir a un hotel para estar más relajados.
Carolina: uhhhh ok vida haz conmigo lo que quieras soy toda tuya…
Llegamos a un motel apartado, pague la habitación y nos dirigimos a la misma, en cuanto entramos nos comenzamos a besar como unos desesperados, la fui llevando a al borde de la cama e hice que cayéramos en la misma, la seguía besando ardientemente y ella respondía como una hembra en celo, comencé a tocar sus senos por encima de la blusa (recuerdo que era color lila), desabotone su jean y trate me meter mi mano por debajo de su bikini pero estaba muy ajustado, ella me lo facilito bajando su jean hasta las rodillas, mire y podía ver el gran bulto de su totona ufffff que rico, me puse de pie y me desnude rápidamente, termine de quitar su jean y tambien retiro su blusa dejando al descubierto sus hermosas tetas sobre las cuales me abalance para chupárselas, ella mientras tanto ya había tomado mi verga dura entre su mano izquierda y la movía hacia arriba y hacia abajo, me tumbe boca arriba y dirigí su cabeza hacia mi verga, al principio la lameteo un poco pero luego la metió en su boca y comenzó a chuparla con ansias muchas ansias tenía mi jefa de chupar mi verga, así estuvo mucho rato chupando mi verga y chupando mis bolas.
Carolina: Te gusta papito?

Yo: Me encanta mi reina, ahora es mi turno.
Fui bajando poco a poco besándola por sus senos, su barriga y llegue hasta su totona, ella aún tenía el bikini puesto lo separe un poco y brotaron sus labios grueso ufffffff que divina esa vista…
Pase mi lengua primero lentamente y luego me concentre en su clítoris… En ese sitio pasaba mi lengua rápidamente ella arqueaba su cuerpo y había momentos que no resistía y trataba de retirar mi cabeza de ahí…

Retire por completo su bikini y pude admirar su desnudez, esta mujer estaba buenísima tenía unas piernas hermosas, me monte sobre ella de tal manera que mi guevo rozara su pierna, la besaba y a la vez pasaba mis dedos por su raja húmeda en ese momento era pura agua su hermosa totona.
Con mi pierna izquierda separe las de ella ahora rozaba mi guevo contra su totona, ella gemía y la vez me miraba fijamente a mis ojos que bellos sus ojos verdes refulgían con su excitación, me puse de rodillas delante de ella, tome mi verga y comencé a rozarla contra su totona tratando de encontrar el hueco mágico que nos llevaría al éxtasis y no dejábamos de mirarnos.
Cuando mi cabeza encontró en hueco la empuje suavemente y luego la empuje toda, pude ver como ella cerraba sus ojos pero inmediatamente los volvió abrir, comencé con el mete saca y ella gemía, de placer.

Carolina: Cógeme Erick yo necesita esto, necesitaba que alguien me cogiera, cógeme papito.
Yo le seguía dando ahora más fuerte porque mi excitación estaba al máximo, ella seguía gimiendo y también decía…
Carolina: Más, más, más… QUIERO MAS! (grito).
Pude sentir como se venía ella en tres oportunidades, 2 veces sentí como apretó mi guevo con los labios de su totona eso fue espectacular. Cuando sentí que ya venía mi leche en camino hice mi pregunta de rigor…
Yo: Donde quieres que te acabe mi reina afuera, adentro o en tu boca?
Carolina: Lléname de ti, échame tu leche dentro de mí, dámela, dámela, dámela…
De inmediato sentí el divino placer de acabar dentro de ella emitiendo un leve quejido…

Me quede paralizado en un momento y vi como ella aún seguía moviendo sus caderas, eso continuo con mi excitación, yo aún estaba erecto y comencé a empujar y sacar de nuevo, ella se dio cuenta que aun tenia potencia para continuar y enlazo sus piernas sobre mi aferrándose fuerte…
Carolina: Dale papito vuélveme a coger necesito que lo vuelvas hacer.

Ella de nuevo gemía y decía cosas incoherentes estaba como poseída por la excitación y la falta de tanto tiempo sin sexo. Esta vez me tarde varios minutos más pero de nuevo pude venirme dentro de ella de nuevo, que divina experiencia me obsequio la providencia, mentalmente daba gracias a eso, saque mi verga de su totona y vi lo rojo que estaba mi cabeza después de este soberano esfuerzo, mire la totona de ella y también estaba un poco roja de tanto empuje, me tire al lado de ella y entonces ella busco mis labios en señal de agradecimiento.
Estuve cogiendo a mi jefa por espacio de año y medio siempre disfrutando nuestros cuerpos sin ningún compromiso, sin ningún reproche, sin ningún problema. Al año y medio pidió traslado para otra ciudad ya que su divorcio era un hecho, luego se volvió a casar y el nuevo marido si la atendía como un marido debe atender a su mujer, como se lo merece.
Hasta aquí mi relato espero les haya sido de su agrado…

Para volver a volver…