Mi novia me engaño con mi amigo
Esta es una historia 99% real que me sucedió hace algunos años..
Nosotros éramos un grupo de amigos/as que íbamos religiosamente a bailar todos los sábados. El grupo estaba formado por: Carla (mi novia de ese entonces, teníamos 3 años saliendo), tenía en esa época 24 años. Ella era muy bonita de cara (se parecía bastante a la actriz Cody Lane), ojos marrones grandes, pelo lacio negro, medía 1.65 mts de altura, no tenía mucho de adelante, no era un tabla, pero tampoco tenía como para andar orgulloso diciendo que tenía una novia pechugona, delgada, boca carnosa y con un culo perfecto (era mi orgullo). Las veces que nos fuimos de vacaciones a Mar del Plata notaba como los pibes le clavaban los ojos en el orto, mitad por la curva perfecta que dibujaban esos glúteos y mitad porque Carla sabía que ese era su punto fuerte y le sacaba provecho poniéndose bikinis un tanto chicas.
A mí no me molestaba que la miraran, ya que ellos solo podían observarla y clavarse alguna paja por la noche pensando en ella y yo en esa misma noche podría cogérmela tranquilamente por todos ellos. El tema es que nunca me la pude culear bien porque argumentaba el típico «miedo a que me duela»… lo habíamos intentado en un par de ocasiones, pero por ansiedad no lubricaba bien su agujero o apurado trataba de meterla de una provocándole un dolor suficiente como para que no me dejara intentarlo en el futuro, aún así me conformaba con esas excelentes mamadas que me hacía, aunque tampoco le gustaba tragarse la leche, aún así, teníamos buen sexo.
En el grupo también estaban Emilio y Florencia, ellos eran pareja desde hace 2 años, Emilio era mi mejor amigo y Florencia íntima amiga de Carla (se conocían desde el jardín de infantes), el resto del grupo estaba formado por Patricio, Julián y Verónica. Todos los varones del grupo teníamos 25 años e hicimos todo el secundario, juntos.
Patricio, mi amigo y también mejor amigo de Emilio era grandote, medía casi 1.90, hacía artes marciales, iba seguido al gimnasio, no era un fisicoculturista, pero tenía los músculos marcados, él era de tez blanca, cabello negro muy corto, y generalmente usaba barba de 1 semana, ese aspecto de «chico malo», atraía a las mujeres. La principal virtud que Patricio tenía (además del físico) era que era muy entrador con las chicas, tenía buena charla para levantar…igual, mucho no le hacía falta, era carita y con eso era suficiente como para levantarse casi una mujer por sábado y llevársela a su casa, era el picaflor del grupo y las chicas lo sabían porque casi siempre se iba antes del boliche bien acompañado. Vivía solo desde hace un año y pico.
Era buen pibe en lo social, pero en la intimidad era de lo más pervertido y degenerado, muchas veces nos reuníamos los varones en su casa y nos mostraba los accesorios que usaba con las chicas que se levantaba y terminaban en la cama con él…esposas, cremas lubricantes, consoladores de varios tamaños, antifaces, etc… pero nosotros no íbamos a ver esas chucherías que él tenía, nosotros íbamos porque el degenerado este, filmaba sus relaciones sexuales con una cámara oculta que tenía en su habitación. Ahí podíamos ver en la televisión lo perverso que era, como así también veíamos las humillaciones a las que eran sometidas las chicas que se acostaban con él y curiosamente la mayoría de estas aceptaban entregadísimas (debe ser difícil hacerse la santurrona si te están dando matraca con una pija de casi 21 cm como decía portar el mismo Patricio).
Recuerdo uno de los videos que me dio «gracia». Patricio había conocido en el gimnasio a una mina que había empezado a ir hacia un par de semanas… media entrada en kilos, 19 años, rubia con rulos, de nariz respingada, buenas tetas. En el video se ve como él está destrozando analmente a la gordita que estaba en 4 patas, mientras esta pegaba alaridos de dolor, pero a su vez gritaba con voz disfónica casi en forma de súplica que le siguiera descosiendo el culo mientras su par de tetas se bamboleaban al compas de la culeada que este le propinaba. Juro que cuando vi el video pensé que a la pobre piba la tendría que llevar de urgencia al hospital a coserle el culo porque pocas veces vi como una mina es sometida tan salvajemente por detrás.
En medio de la sodomización Patricio le dice a la mina que espere, que ya volvía, al rato aparece otra vez en la habitación con una manzana, este le dice a la gordita que muerda la manzana y la mantenga en su boca, mientras este seguía con su trabajito, la mina puso cara de extrañada, pero aceptó su petición, se introdujo la manzana en la boca y el otro continuó con la descomunal culeada, al cabo de unos pocos minutos acaba dentro de ella (usaba forro) y cuando saca la pija le dice a la rubia: «Ahhh… que placer me da romperle el culo a las chanchas como vos, gorda culo roto».
La rubia se cambió en 2 minutos y se fue dejando una estela de insultos… así era Patricio, una persona común, pero en la intimidad sacaba a relucir a su «Mr. Hyde sexual», le encantaba culearse minas y humillarlas…el disfrutaba de eso. Ese secreto solo lo sabíamos los hombres del grupo, nunca se lo comentamos a las mujeres por miedo a que lo tomen como un enfermo y lo hagan a un lado. Todos nos llevábamos bien con todos y queríamos que la armonía en el grupo se mantenga tal como estaba.
Bueno, una vez presentados los «personajes» prosigo con el relato, llegó el día sábado (22/9). Nos juntamos en un boliche de la zona de Villa Pueyrredon, Capital Federal en el grupo éramos de beber mucho, bailar con nuestras parejas, con las parejas de los otros siempre con respeto y ubicación, divertirnos y seguir tomando. Patricio nos dijo a Emilio y a mí que hacía una semana que no tenía relaciones y que tampoco se había masturbado y que si hoy se cogía una mina iba a recibir un buen chorro de leche. En el transcurso de la noche me empecé a sentir mal, no había comido nada y el alcohol me pegó mucho y pronto, me sentía muy mal así que junté al grupo y les avisé que me iba, Carla insistió en acompañarme a casa, yo le dije que no, que se quedara porque en la semana entre el trabajo y la facultad el único momento de compartir un rato de diversión todos juntos eran los sábados, le dije que se quedara y que alguno después la lleve a su casa, estaban todos pasados de copas, pero el más arruinado era yo…así que me despedí.
El domingo me levanté por la tarde con una resaca que apenas me podía mantener en pie, la llamé a mi novia para ver como le había ido, pero el teléfono sonaba y nadie atendía…la misma suerte corrí cuando la llamé por 2º, 3º y 4º vez…ya entrada la nochecita la logré ubicar en el teléfono, la noté con voz media extraña, distante, cansada y con risa nerviosa… le pregunté que le pasaba y me dijo que no le sucedía nada, no le di mayor importancia… toda esa semana la vi medio perdida, fría… el sábado siguiente fuimos todos a bailar nuevamente y me llamó la atención como Carla y Patricio se hablaban poco y nada… Florencia no le dirigía la palabra a Patricio… pero mucha más bola no le di al asunto y fue un sábado como cualquier otro, pero la misma sensación me agarró los siguientes sábados… incluso a Carla no la ubicaba en la casa en horarios que ella por lo general estaba, solo me decía que ella había salido a hacer «un trabajo para la facultad»… estaba empezando a pensar que Carla me estaba metiendo los cuernos, incluso se lo pregunté en un par de ocasiones, pero ella me lo negaba rotundamente, pero su trato había cambiado conmigo.
Cada día que pasaba me sentía peor anímicamente, necesitaba hablar con alguien así que lo llamé a Emilio porque necesitaba desahogarme con alguien. Cuando le comenté como me sentía, sumado a como me empezaba a tratar Carla y como veía al grupo que ya no era lo mismo desde aquella vez que me fui antes, Emilio se quebró y me contó la verdad que no quise ver, me dijo que Carla se estaba acostando con Patricio, Emilio me comentó además que Patricio le mostró un par de videos de ellos teniendo sexo… ahí nomás el alma se me partió en dos, no me entraba en la cabeza la cantidad de atrocidades a las que había sido sometida Carla… ingenuo de mi parte le pregunté si Patricio (adicto al sexo anal) había hecho algo con la cola de mi novia (a ella no le gustaba por ahí) y el movimiento de su cabeza fue la de un «si» mientras cerraba los ojos. Increpé a Emilio, lo insulté como nunca mientras le preguntaba por qué no me había avisado antes, él sólo atinó a decirme que hace semanas que no encontraba la forma de decírmelo.
En ese momento el morbo se apoderó de mí y le dije que me cuente como fue que sucedió y que había visto en los videos…una vez que me contó como fue que se inició eso (Patricio le contó como fue que llegó a llevársela a la cama) y de que me contara con lujo de detalles lo del 1º video, me fui a la casa de Florencia a que me ratificara o rectificara lo que Emilio me había dicho, yo sabía que Carla le contaba todo a ella ya que eran íntimas amigas, …cuando llegué a la casa de Florencia le dije que ya sabía todo y que me contara todo lo que Carla le había dicho, ella se echó a llorar y me pidió disculpas, me dijo que lo habló 10 veces con Carla para que corte esa relación, pero mi novia no tenía la menor intención de terminarla. El relato de Florencia era prácticamente un calco de lo que me contó y vio Emilio.
Lo que sucedió ese día cuando me fui del boliche fue lo siguiente: El grupo se quedó un largo rato más, siguieron bailando, bebiendo, Patricio aprovechó que mi novia estaba sola y bailaban más apretado que de costumbre, Emilio notó ese detalle y se ponía a bailar con Carla para que no caiga en las garras del pervertido de Patricio que estaba bajo los efectos del alcohol. Cuando salieron, Patricio se adelantó y le dijo a Carla que la alcanzaba a su casa. Emilio se interpuso, le dijo que él y Florencia la iban a llevar, pero Carla lo frenó en seco y le dijo a Emilio: «Che, no seas así, Pato se ofrece cordialmente a llevarme, a parte Uds. son muchos en el auto ya que van todos para el mismo lado, yo me voy con él a parte le queda de paso». Emilio insistió un poco más, pero la suerte ya estaba echada, mi novia se volvía con Patricio. Fueron hasta el auto que estaba a un par de cuadras y se marcharon. A las pocas cuadras Patricio estaciona en una calle oscura argumentando que había tomado mucho y que necesitaba descansar unos minutos para despabilarse.
En ese momento Patricio la mira fijamente a Carla y ella entre risas le pregunta: «¿Qué me miras tanto, Pato?… ¿te gusto?»…y el responde: «Si, Carli, estás bárbara… hoy estás para el crimen»….luego de decir eso, Patricio echó a reír dándole a entender a Carla que lo decía medio en broma… pero medio en serio también. Carla por los efectos del alcohol no pudo mantener su boquita cerrada y apagó el incendio con nafta replicándole: «Bueno, vos estás para matarte también tenés un lindo físico…no te hagas el humilde ahora».
Patricio se dio cuenta enseguida que Carla estaba con la guardia baja gracias a todo lo que había tomado, y le dijo: «Que afortunado tu novio de tenerte, sos tan hermosa… ojalá yo tuviera la suerte que tiene él». Carla se puso seria y le dijo: «¿Pato, me estás tratando de levantar?»…El le contestó: «Decime que no te gusto y no te molesto más». Ella tenía cero inhibiciones así que respondió con un 100% de verdad diciéndole «si, sos hermoso, pero tengo novio». Patricio le retrucó «Bueno, si hiciéramos algo él no tendría por qué enterarse, ¿no?». Carla más seria aún le dice: «Si, pero quedaría en mi conciencia, ¿cómo lo voy a mirar después a él»?
Patricio ni lerdo ni perezoso le retruca: «Carlita, una vez que lo haces, la culpa desaparece… no sabes las ganas que te tengo desde hace tiempo», Carla queda muda y Patricio sigue con su «arte de conquista» diciéndole: «No sabes como me calentás Carla, tenés un lomo impresionante y una boca que en este momento estoy haciendo un esfuerzo sobre humano para no comerla de un beso», Carla solo atina a responderle: «Si, Pato, pero no me parece que sea…» Mi novia no terminó de completar la frase y Patricio le estaba dando el beso más profundo que Carla jamás haya recibido, sus lenguas jugaban… Carla se estaba entregando.
En un mínimo acto de resistencia Carla aparta a Patricio y le dice: «Patricio, tomamos mucho, vamos a hacer una macana, a parte no quiero que pienses que soy una cualquiera, me comiste la boca y si sigo así vamos a terminar en cualquier cosa». Patricio que ya imaginaba a Carla con una bandera clavada en el culo que diga «regalada» le dice: «Entrégate a tus impulsos, no pienses…solo sentí, no hagas lo que debas hacer…hacé lo que realmente tengas ganas de hacer…y yo se de que tenés ganas, se te nota en esa mirada lujuriosa…a parte vi como me miraste el bulto varias veces…». Acto seguido Patricio la tomó por atrás de los pelos y le volvió a comer la boca, igual que hace un rato, pero con la diferencia que ahora Carla ya no puso resistencia, sino que ella también estaba deseosa de sus besos ya que mi novia también lo agarró de la nuca empujando su cabeza para que su lengua entre más en su boca…
Se besaron apasionadamente durante un par de minutos, mi amigo con su mano izquierda le acariciaba el cuello y lentamente fue bajando la mano hasta su teta derecha, empezó a masajearla con ganas, Carla solo le seguía comiendo la boca a Patricio y comenzaba a suspirar como excitada. Patricio, metió su mano por debajo de la musculosa negra de Carla y comenzó a jugar con su pezón, mi novia se empezaba a pasar de revoluciones. Carla le acariciaba el pecho y seguía comiéndole la boca, ya le había desabrochado casi toda la camisa. Patricio, le cruzó su brazo derecho por detrás de la nuca de Carla y con esa mano siguió jugando con sus tetas mientras que con la mano izquierda le desabrochó el botón del jeans ajustado que tenía, le bajó el cierre y metió su mano dentro de su tanga rosa, palpando la concha húmeda de Carla, incluso metió su dedo lo más que pudo mientras ella acompañaba la escena ahora con gemidos de calentura. Patricio le levantó la musculosa y se hizo un festín con las tetitas de mi novia, las chupó, le pasó la lengua, mordió sus pechos y succionó sus pezones…
Luego de un rato de hacer ese juego previo, Patricio se acomodó en el respaldo de su butaca y lo inclinó para atrás lo más que pudo quedando casi acostado, se desabrochó el pantalón y sacó su flor de verga afuera, Carla abrió los ojos como el «2 de oro», nunca había estado tan cerca de una pija tan grande, solo pudo decir «¡Papi!… ¿toda esa pija es tuya?», Patricio le contestó «…y eso que aún no estoy al palo, vení Carla, compórtate como una buena puta y mámamela ,seguro que con esos labios debes hacer magia» apenas terminó de decir eso, con su mano izquierda tiroó el forro de su pene para atrás para exhibir la cabeza de su pija y con la mano derecha la tomó de los pelos a mi novia y la condujo directamente hacia su verga, Carla le dio un beso en la cabeza, lo miró a Patricio, le sonrió, pero él no le gustaba esperar a la hora de una mamada y le dijo en tono imperativo: «Dale, trola, menos teatro y más verga» y le hundió la pija en la boca de mi novia más de la mitad, ella tuvo una pequeña arcada, pero no atinó a salirse.
Mi novia empezaba a chuparle la pija a mi amigo con ganas, estaba como desaforada, se la chupaba con ganas, se la introducía lo más profundo que podía y se quedaba ahí unos instantes mientras le pasaba la lengua por todo los costados de la verga, la cabeza de mi novia subía y bajaba con velocidad frenética devorándose el orgullo de Patricio, él acompañaba los movimientos con su mano en la nuca de mi novia mientras decía entre gemidos: ¡dale, dale…así…chupa, chupa, chupa…dale! Que boquita de chupa pijas que tenés, yo no me equivoqué, siempre dije que esa boca era de chupa pijas», luego la agarró de los pelos, le dijo a Carla que abra bien grande la boca y Patricio empezó a mover la cadera para adelante y para atrás metiéndole la verga en la boca a ella… si, se la estaba cogiendo por la boca y a ella le encantaba.
Ella hacía chasquidos y se le caía la saliva por la comisura de los labios. Patricio le volvió a hundir la cabeza en su tranca y luego agarró la base de su pija y la empezó a mover de un lado a otro de su boca, con el glande empezó a hacer presión en las mejillas de mi novia desde adentro. Patricio le sacaba la verga de la boca y se la refregó por la cara a mi novia… le pegaba con la verga como si fuera un garrote en las mejillas, la boca, la pera e incluso hacía presión con la cabeza de su verga en uno de los agujeros de la nariz de mi novia mientras decía «Oleme la verga, sentí el olor a macho, trola»…Carla le apartó las manos y ella se apoderó de su verga para seguir mamándosela. Mientras esta se la chupaba, Patricio le decía: «A ver…decí con la pija dentro de la boca, `como me gusta chupar pijas`» y ella repetía «coaaagghhhhmo muuueee guusahhaaggghhta chupaagaga pijaagggagss»
Patricio sintió que ya era suficiente mamada para estar en el auto, y le dijo a mi novia si quería ir para el departamento de él, ella se moría de ganas de ser cogida así que aceptó de inmediato, partieron para allá…en el trayecto de unas 20 cuadras, Carla le siguió chupando la pija mientras Patricio manejaba, sin importar que pasaran por avenidas poco transitadas por la hora que era o que se detuvieran en algún semáforo.
Entraron y entre besos y manoseos él la llevó para su habitación, Carla no sabía con que clase de persona estaba a punto de ser cogida y menos que menos ella sabía el «secreto» de la cámara oculta… Cuando llegaron a la habitación, Carla le preguntó donde quedaba el baño, Patricio le dijo donde era y aprovechó su ausencia para enfocar y prender la camarita. Patricio se sacó la remera, las zapatillas y las medias, solo tenía puesto el pantalón desabrochado… a los pocos minutos entra Carla con la musculosa negra y la tanga rosa puestas y en la mano tenía el jeans y las sandalias.
Patricio se puso frente a ella, le agarró las cosas que tenía en la mano y las arrojó para un costado, mientras le decía: «Hoy vas a saber lo que es coger en serio, trolita, hoy te parto como un queso, te voy a meter la pija tan adentro que te va a salir por la garganta… hoy te voy a hacer sentir como una puta barata». Yo a Carla jamás le había dicho ningún insulto por miedo a que se lo tomara a mal… lo errado que estaba, ella se dio cuenta ese día que le excitaba que le digan obscenidades, por lo que le contestó: «Dale hijo de puta, partime al medio, cógeme bien cogida, haceme tuya con esa pija que tenés» .
Patricio la tomó nuevamente de los pelos y la hizo arrodillar para quedar con su carita a centímetros de su bragueta, él se bajó los pantalones y la ropa interior, dejando el miembro erecto listo para que le sea propinada otra memorable chupada de pija que mi novia estaba deseosa de hacer, no dejó pasar un segundo más y ya le tenía dentro de la boca, ella lo miraba mientras se la seguía chupando y Patricio estaba con una mano en la cintura y con la otra la agarraba de la cabeza siguiendo los movimientos de la cabeza de Carla. Patricio le dice «Carla con esta mamada que me estás dando, me lubricas tan bien la pija que cuando te la meta en el culo ni va a tener resistencia», Carla dejó de hacer lo que estaba haciendo para decirle «No, Pato, por el culo no… no me gusta».
Patricio le retruca, «Vos quédate tranquila trola, que yo te voy a iniciar en el sexo anal como se debe, vas a ver que te va a terminar gustando y vas a venir a tocarme timbre para que te rompa el culo», Carla le dijo: «Ni lo sueñes, estás en pedo…yo por ahí no lo hago». Patricio le responde: «Vos probá mi servicio completo y después habla… Eso si, deja de hablar como un loro ahora y dedícate a chuparme la pija, vos no servís para hablar, vos servís para chupar pijas…que olor a verga debe tener tu boca, puta». Patricio tenía en una pared un espejo de 2 mts x 2 mts que usaba para verse mientras se cogía a su víctima de turno. Le dijo a Carla que se mirara en el espejo así veía como estaba chupándole la verga.
Así estuvieron un buen rato hasta que Patricio le dijo a mi novia «Puta, rogame para que te pegue una flor de cogida», Carla se sacó la pija de la boca, lo miró y le dijo con tono de nena «Pato, por favor te lo pido, cógeme bien cogida», Patricio la agarró y la empujó boca arriba sobre la cama, le dijo. «Pija querés, pija tenés» y se tiró encima de ella, sin ponerse forro, le corrió la tanga a un costado, se la metió de una en su concha mojada, mi novia pegó un alarido, pero inmediatamente abrazó a Patricio con sus piernas, él empezó con un violento movimiento de caderas metiéndole toda la tranca dentro de su sexo.
Carla gemía como un animal y pegaba gritos, ella tardó solo un par de minutos en tener el primer orgasmo. Patricio no bajó el ritmo y prosiguió en la misma pose a seguir con la cogida que le estaba propinando a la puta de mi novia, un rato después ella vuelve a acabar. Patricio se acostó boca arriba y la puso a Carla arriba de él, Patricio le dijo: «Vení, trola, cabalga esta verga», Carla empezó a saltar con sus manos en los pechos de él, metiéndose toda la pija dentro de ella… pegando un gemido más que notorio llegó a su 3º orgasmo en menos de 15 minutos, Patricio siguió acostado boca arriba, pero le dijo a Carla que se de vuelta dándole la espalda a él, mirando hacia el espejo.
Ella siguió en esa pose cabalgando la gruesa verga de Patricio, él la agarraba de la cadera y acompañaba el movimiento, Carla disfrutaba como una verdadera puta en celo y así llegó al 4º orgasmo en menos de media hora (yo no sabía que era multiorgásmica, al menos nunca pude hacerla acabar tantas veces). Carla le pidió un descanso, estaba exhausta y le temblaban las piernas, pero él estaba más que excitado, aún no había acabado y tenía la leche de varios días acumulada aún y lo que menos quería era descansar.
El le ordenó a Carla que se ponga en 4, y comenzó a cogérsela en la pose del perrito, tomándola del pelo comenzó sus embestidas, mi novia empezaba a perder la voz de tanto gritar, ella solo decía: «Cógeme, cógeme, cógeme…así, así, así…si, si, si, si, si, ahhhh, ahhhhh, ahhhhh…aaaaaahhh… sos un dios en la cama hijo de puta, que buena cogida», esa frase elevaba el ego de Patricio y aumentó aún más la violencia con la que se estaba cogiendo a Carla provocándole un nuevo orgasmo, él siguió, se chupó el dedo índice y se lo empezó a introducir en el culo de mi novia mientras se la seguía cogiendo, ella volteó su cabeza y lo miró fijamente, pero no le dijo absolutamente nada, él mientras le metía y le sacaba la pija, hacía lo mismo con el dedo, lo introducía cada vez más adentro, luego de un rato, le introdujo dos dedos.
Carla llegaba a un nuevo orgasmo y así siguieron hasta que le metió 3 dedos, Patricio podía ver por el espejo como en la cara de Carla se mezclaban expresiones de dolor y placer, pero ella en ningún momento le dijo que se detenga… cuando Patricio le dijo: «¿Que pasa puta, no era que no te gustaba que te metan cosas en el culo?», Carla volvió a acabar una vez más, ella cayó desplomada de panza al colchón, estaba bañada en sudor y totalmente satisfecha se le notaba en la sonrisa lujuriosa del rostro, nunca se la habían cogido tanto y tan bien.
Patricio solo tenía entre ceja y ceja romperle el culo a mi novia, así que procede a sacarle la musculosa y la tanga y le dice: «Ahora viene lo bueno, vas a ver que te va a gustar esto…» busca en el cajón de su mesa de luz y saca 3 consoladores, uno pequeño y mediano y otro de mejor porte aunque no tan grande como su verga, unta el consolador pequeño con mucho lubricante y le dice a Carla que se quede en 4 y que levante más la cola, Patricio le pega una buena chupada de orto, le mete la lengua dentro del agujero un tanto dilatado de mi novia y con la otra mano le mete 3 dedos en su argolla, así estuvo un buen rato entre que con la mano pajeaba a mi novia y que se la estaba culeando con la lengua ella volvió a tener otro orgasmo. Carla le dice a Patricio que jamás en su vida había acabado tantas veces.
Patricio toma el pote de lubricante y con sus dedos no escatima en la cantidad que le mete dentro del agujero del orto de mi novia y alrededores, toma en pequeño consolador y le dice: «Relájate, trola que este es el comienzo, hoy de acá salir con el culo bien roto» y comenzó a introducirle el consolador de a poco y muy despacio, ella se queja un poco diciendo: «despacito…así… así… despacito… ayy… siiiii… así». Patricio sacaba y metía el pequeño consolador y cada tanto miraba como se iba dilatando el culo que yo jamás pude tener en 3 años de intentos. Estuvo un buen rato con el primero, y así paso al 2º consolador un poco más grande que el primero, lo untó bien y comenzó a practicarle el mismo trabajito, mi novia mordía y agarraba con sus manos fuertemente las sábanas mientras seguía manteniendo parado el culo que los consoladores se encargaban de dilatar cada vez más.
Cuando Patricio terminó de usar el segundo consolador, le abre las nalgas a mi novia y le dice: «¡Epa!… esto ya está empezando a tomar forma… podría decir que ya tenés el culo abierto, pero falta… ¿cómo te sentís puta?», Carla le responde: «Siento que me arde y lo siento abierto», Patricio le dice con tono seguro «¿Querés que lo dejemos aca?», pero Carla no le dice nada, y como el silencio otorga, el agarró el 3º consolador que tendría unos 15 cm de largo por 3 cm de diámetro y se lo mete también, estuvo un buen rato haciendo lo mismo que con los otros 2, metía, sacaba, metía, sacaba… abría las nalgas y contemplaba como quedaba abierto el orto de mi novia. Patricio le dice a Carla: «espera que ya vengo», al rato vuelve a la pieza con un plumero de mango corto y una escoba de piso.
Carla lo mira sorprendida y le dice: «¿Me vas a hacer limpiar?», Patricio le retruca: «¿Alguna vez usaste el plumero?» a lo que mi novia el responde: «No, en casa limpia mi vieja», Patricio le dice: «¿Entonces para que lo traje?, metete el plumero en el orto, pelotuda» y ella estando en 4 se introduce el plumero en el culo, acto seguido le mete la verga parada en la concha y comienza a cogérsela violentamente, ella gritaba y gemía con la pija metida en la concha y el plumero en el culo, Patricio le dice a Carla: «Mírate al espejo, mira como te cojo y mira como tenés el plumero en el culo, pareces un pavo real, yo jamás me cogí un pavo», ella veía en el espejo el reflejo que este le devolvía , una imagen patética, humillante, pero que la llenaba de excitación a pesar de haber acabado tantas veces.
Patricio le dice «Mientras te cojo imítame un pavo real, trola», ella comenzó a hacer sonidos emulando ser un pavo y Patricio mientras la tomaba de las caderas seguía cogiéndosela… luego de un rato le saca la verga y el plumero del culo y va por la escoba y le dice: «Tu novio te dice que sos una bruja cuando se pelean, a ver, bruja, volá con esta escoba», Carla entre risas nerviosas le dice que no puede volar en escoba y Patricio le responde «Bueno, entonces le vamos a buscar una mejor utilidad» y le metió el palo de escoba primero en la concha y luego en el culo. El pervertido de mi amigo le vuelve a decir que mire al espejo para que se vea como se la culeaba hasta una escoba. Luego de dice: «¿Ves?, te culearon mis dedos, 3 consoladores, un plumero y una escoba, pero el pelotudo de tu novio nunca… hacé de cuenta ahora que te la esta metiendo Pinocho, forra»
Se le notaba en el rostro que mi novia estaba disfrutando de una nueva humillación, Patricio le saca la escoba y se pone delante de ella y agarrándose la pija parada se la mete en la boca y le dice: «¿Tenés ganas de que te rompa el culo yo ahora?», ella se saca la pija de la boca y le dice: «si, haceme lo que quieras», él le dice: «bueno, rogame que te rompa el culo entonces», ella le responde: «Rompeme el culo por favor», Patricio le dice: «mmmmm… no se… ¿y si no quiero?» haciéndose el difícil, ella se enoja y le recrimina: «Si no me rompes el culo vos, me voy de acá y me lo hago romper en la calle con el primero que pase», Patricio larga una carcajada y le dice: «Ok, te lo voy a descoser, trola, pero quiero que te mires al espejo y que te veas pidiéndome que te rompa el orto». Carla se mira al espejo, ella nunca hubiera imaginado que pediría una cosa así, pero así fue cuando dijo mirándose al espejo aún en la pose de perrito: «Quiero que me la metas por el culo, culéame bien culeada sin compasión».
Patricio al escuchar esas palabras se lubricó la verga que estaba dura como una piedra, agarró a Carla, le puso una esposa en cada muñeca de la mano y la sujetó contra los barrotes de la cama, se situó detrás de ella, le abrió las nalgas y dijo: «Como voy a disfrutar esta culeada, este culo perfecto es mío y lo voy a usar», agarró su pija con la mano, colocó la cabeza en las puertas del agujero del culo y empezó a introducirle su miembro de a poco, Carla mordía la almohada para no gritar, una vez que le metió la mitad empezó a bombear, agarrándola de las caderas comenzó con un ritmo lento que rápidamente se empezó a hacer más veloz, mi novia estaba siendo sodomizada por mi amigo y ella a pesar del dolor, lo estaba disfrutando, porque paraba aún más su culo para que le sea más cómodo a Patricio para que pueda rompérselo con más facilidad.
Patricio seguía propinándole una buena culeada y ya estaba metiendo más de las ¾ partes de su pija dentro del culo dilatado de mi novia, ella gemía, se retorcía, apretaba los dientes, pero todos esos síntomas no coincidían con las frases que la puta de Carla le decía: «Rómpeme el culo, dale, dale, así, así, más, más, quiero más, más adentro, por favor… ayyy… ayyy, ¡culéameeee!» Patricio por su cuenta le decía: «¡Toma, toma, toma, puta, puta!, por el culo, mira…mira como te rompo el culo, ¿viste que me ibas a terminar pidiendo por favor que te lo rompa?… ¿te gusta la pija en el culo eh?…quien diría».
Patricio seguía sodomizando a Carla cada vez más violentamente y cada vez más profundo, ella solo atinaba seguir atada y a gemir, gritar e implorar a que se lo rompa aún más… Patricio al cabo de un buen rato, saca su tranca del culo de mi novia y lo abre, el orto de Carla estaba colorado como el de un mandril, muy irritado y por sobre todas las cosas, con una dilatación monstruosa, Patricio comenta: «A esto llamo yo, un culo roto…» El le saca las esposas y le dice que se coloque mirando para donde estaba una biblioteca (ahí escondía la cámara Patricio, él quería enfocar la cara de Carla mientras le seguía desflorando el culo), se coloca detrás de ella en cuclillas y agarrándole del pelo para levantarle la cara se la vuelve a meter hasta el fondo, siguió propinándole una monumental culeada e incluso le dice a Carla: «Puta, hacé de cuenta que estás en una peli porno, hacé de cuenta que nos filman, pone cara de puta satisfecha «, Carla le responde: «Si, da igual, el culo ya ni lo siento…»
Patricio le ordena a mi novia que se vuelva a mirar al espejo para que vea como se la estaba culeando el amigo del novio, ella obedece y se excita con la imagen, Patricio con una mano comienza a masajearle el clítoris provocando un orgasmo al cabo de unos minutos. Las bolas de mi amigo golpeaban en las nalgas perfectas del culo roto de mi novia. Increíblemente la tenía toda adentro. Así estuvieron un rato más hasta que Patricio se acerca a la oreja de mi novia y le anticipa: «En un par de segundos viene la frutilla del postre», apenas termina de decir esa frase y mi novia siente unos chorros intensos y calientes dentro de su culo. Patricio le había descargado una semana de leche en sus intestinos. Mi novia se sentía humillada, cansada, dolorida, pero sobre excitada por los chorros hirvientes de leche de mi amigo.
Patricio se la dejó puesta un poco más ya sin su frenético movimiento de caderas, hasta que la sacó en un estado semi rígido del culo dilatado, junto con su verga cayeron a las sábanas borbotones de leche que venían de adentro del culo de Carla. El degenerado de Patricio le preguntó como sentía el culo y ella le contestó: «lo siento muy abierto, me hierve, lo siento pegoteado y me late»… (por lo que me comentó Emilio que vio el primer video, el resultado de esa empalada fue terrible, le dejó el culo más que abierto).
Patricio le dijo a mi novia que se cambie rápido que estaba cansado, ella caminando con notoria dificultad y las piernas medias abiertas agarró sus cosas y se cambió, fueron hasta la puerta y ella le pregunta: «¿Me llevas hasta mi casa?», Patricio con su diplomacia post-sexo le dijo: «Ni en pedo, volvete por tu cuenta, yo no te traje de prepo acá, vos viniste porque quisiste pija, ahora ándate que estoy cansado», ella ofuscada le dice mientras abría la reja de la calle: «sos un pelotudo, no sos capaz de llevarme, para que mierda habré venido», Patricio le responde, «Chau, pavita real, me encantó culearte , trola, si ves una escoba mándale saludos», mi novia se fue masticando bronca por lo bajo por el trato que había recibido por parte de él, pero parece que tanto no le molestó porque a los 3 días ella lo llamó y le dijo que quería hablar con él, Patricio le dijo que vaya para allá que él la esperaba, en menos de una hora ya le estaba sonando el timbre de la calle y cuando abrió la puerta, estaba mi novia del otro lado y lo primero que le dijo fue: «Mi culo y yo te extrañamos mucho en estos días y queríamos pasar a saludarte».
Así fue la historia, Emilio me dijo que vio 4 ó 5 videos de ella sometiéndose a las cosas más aberrantes que uno pudiera imaginar. Patricio logró en unos días lo que yo no pude en 3 años… le rompió el culo en cuanta ocasión tuvo y también fue el primero en hacerle tragar un buen chorro de leche caliente según se ve en otro video. Sin nombrar otras cosas a las que también fue sometida.
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