Mi suegra me traía de cabeza
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Resulta que por razones de reparacion del techo de la empresa ese día salimos mas temprano por lo que me dirigi a casa de mi suegra. Ella tiene sus 52 años pero esta como una nena, nada que envidiarle a una mas joven que ella.
salude como siempre y note que la doña estaba con una toalla enrollada en su cuerpo pues iba a tomar su acostumbrado baño de las cinco. Le lance un piropo (claro un poco nervioso por cuanto nunca, en los 8 años de matrimonio que tengo con su hija, lo habia hecho) ella me vio un poco seria pero luego se sonrió.
Luego le dije que cuando mi esposa (su hija) tenga su edad me gustaría que tuviera ese cuerpazo que tiene y que se parezca mucho a ella. Se acercó y me dijo: En verdad crees que tengo un buen cuerpo?
Claro que si, le repondí. La tome de la mano y la llevé a su habitación. La recoste en la cama y la besé, al principio quizo rechazarme pero le sujeté ambas manos y le arranque la toalla, comence a besarla y ella me dijo que me bajara o iba a gritar, yo hice oidos sordos.
comencé a besar sus senos y senti como se iban colocando duros y erectos, luego baje una de las manos y comencé a frotar su clítoris que ya estaba humeante, ella jadeaba como su hubiese estado corriendo, saqué mi pene y lo froté suavemente sobre su monticulo y senti como estaba lubricado por sus jugos vaginales y comencé hacer circulos con el alrrededor de su vagina.
Mi suegra me toma del cabello y me ordena METEMELO DE UNA VEZ, así que lo fui metiendo despacito, muy despacito y sentia como al cuerpo de ella se le ponia la piel de gallina. Coloco sus piernas alredeor mio y comenzó a moverse como una maquina de lavar ropa.
Me tiró hacia abajo y se montó sobre mi y comenzó a cabalgarme como una buena amazona mientras una de sus manos acariciaba mis testiculos. Yo le mordía los pezones hasta que no aguanté más y exploté a lo que ella me acompaño con un alarido de placer o satisfacción. Luego se bajo, me tomo el pene y lo llevó a su boca y comenzó a chuparlo, lo introducía tan adentro que sentía como pasaba a través de su garganta hasta que me lo dejo erecto nuevamente, elevó una de sus piernas sobre mi cabeza y me colocó la vagina en ella y comencé a chupárcela.
Como gemia, gruñia, gritaba y me arañaba mientras que mi pene entraba y salía de su boca a un ritmo increible. Se volteó y me dijo que la penetrara por atras (Cosa que a su hija no le gusta), eso me exitó mucho más por que la doña tiene un culazo bien redondito, así que con sus propios jugos moje el pene y se lo meti de un empujón.
Pego un alarido y me acariciaba los testuculos mientras me decía: DAME DURO, DAME MAS DURO, ASI, ASSSI, MAS DURO COÑO, MMMM QUE RICO, HA, HA, HA, oye ese HA me asustó pense que la doña se estaba desmayando y no, no era eso es que estaba acabado. Yo por mi parte segui dándole con furia hasta que exploté regandole leche por ese culo.
Sudados y cansados; me vestí ella tomo su toalla se la enrrolló alrededor de su cuerpo, me dió un gran beso con lengua y todo y me dijo: Papi esto no pasó y se fue para el baño a ducharse.
Cuando salí de la habitación mi esposa estaba llegando, quiero decirles que mi esposa es una mujer adorable pero su mamá está como ella quiere, espero que vuelva a pasar.
A propósito, mi suegra es viuda desde hace 18 años y no se ha casado nunca más, la doña estaba casi original cuando follamos.
Saludos, espero que les halla gustado mi relato. Es real. Ah, y no le comenten a nadie.
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