Mi vecina mintió
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Esto sucedio este año. Con mi esposa llevamos cuatro años de casados, un niño. Tenemos 27 y 26 respectivamente.
Mi esposa me comentó que teniamos vecina nueva y que iría a saludarla. Luego me dijo que era una señora de unos treinta y tantos años y que era casada, solo que el marido trabajaba afuera de la ciudad. Como entre mis aficiones está la de electricidad, mi esposa me dijo que ella necesitaba alguien que le ayudara con ciertas cosas electricas, asi que con pocas ganas me fui a su casa. Me quedé perplejo de la vecina, de nombre Gloria (ficticio), si tenía treinta y tantos años, pero estaba para levantar un muerto, buenos senos, buenas nalgas y yo le caí muy bien que nos sentamos a platicar. Ella llevaba un vestido, asi que me regalo varias poses estando sentada, para que yo le viera ese par de piernas divinas que tenía. Todo esto me dejó muy excitado ese día.
Al dia siguiente volví a ir a la casa de Gloria, le dije a mi mujer que tardaría un poco esta vez (como si hubiera sabido lo que me esperaba). Gloria tenía puesto un vestido sumamente corto, que nuevamente mostraba su lindo cuerpo. Me puse a platicar con ella y yo le decía que era una mujer muy linda. -Si ya estoy vieja!!- me dijo Gloria, yo le dije -Ojala asi fueran todas las mujeres viejas!-.
Luego me dijo que si quería un whisky, le dije que si, pero si ella me acompañaba, asi se fueron dando las cosas, hasta que ella termino en mis brazos besándonos con intensidad, metí mis manos entre su vestido y pude tocar esos divinos muslos que tiene, luego metí mis manos en su diminuta braga hasta que acaricie su linda raja depilada totalmente. -Vamos a mi recamara!- me dijo toda melosa.
Ya en la habitación le fui entre caricias y besos, quitando su vestido, luego su ropa interior hasta dejarla desnuda, la mujer estaba muy bien cuidada. Le besé todo el cuerpo sin perder un centimetro, hasta chupé sus deliciosos dedos de sus pies, uno por uno, luego me sumergí entre sus piernas y le di la mas juguosa mamada de raja que yo recuerde. Ella se contorsionaba encima de la cama diciendome que le gustaba como me comía su coñito. -Que rico papi, comeme toda!-, -Asi, asi, meteme la lengua en mi rajita-.
Luego fue su turno, me quitó la ropa y se metió entre mis piernas agarrandome con sus labios mi erecta verga. Me chupó rico hasta las bolas.
Gloria quería seguir mamando más rato en lugar de empezar a follar. Asi que la convencií que nos pusieramos en la posición 69, nos mamamos el sexo por quince o veinte minutos, ella me hizo terminar en su boca y yo la hice correrse en mi boca, fue una delicia de sexo oral, se veía que Gloria tenía mucha experiencia. Luego a coger.
Cogimos en cuatro posiciones distintas, yo la hice venirse en tres ocasiones y ella en una más a mi. Tiene un cuerpo espectacular, y sabe coger como las diosas. Lo mejor fueron dos cosas, cuando ella me cabalgó la verga estando encima y cuando la tuve en cuatro al estilo perruno. Su culo es tan perfecto, que tuve que mamarselo un rato antes de cogerla. Terminamos rendidos, fue alli donde me confesó que ella se estaba separando del marido, pero que había tenido pena de decirselo a mi mujer, por temor a que ella pensara mal al igual que los demas vecinos. Para mi fue la gloria con Gloria.
Con la excusa de ayudarla en la instalaciones eléctrica, me cogí también al siguiente día, aún después de esa tremenda cogida que habíamos tenido la primera vez, aún le eché otros dos polvos al día siguiente, ella estaba encantada conmigo.
Luego de eso, nos volvimos amantes, ella quería a alguien que le quitara la calentura y yo esta feliz por eso.
Luego, más tarde le dijo a mi esposa la verdad, a medias, le dijo que empezaba a separarse se su marido. Ahora mi esposa me cuida un poco más cuando voy a la casa de Gloria.
Pero aún nos juntamos en otros lados que es precisamente su casa. Ella como es madura, es muy discreta y no es alocada, solo quiere sexo.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!