Nuestra primera vez
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Tu realmente te interesas por mi, me esperaste muchos años desde que eramos adolescentes y nos conocimos. Despues un dia ibamos en el auto de tu primo y acaricie tu cabello rizado, me gusto mucho y a ti tambien. La magia se rompio cuando bajamos del auto y llegamos al antro, entonces me puse a bailar y tu, enojado, te quedaste al margen. Te enojaste conmigo, y contigo. Pensaste que yo hacia eso con cualquier chico y le restaste importancia. Depues, tantos años despues y ambos con matrimonios fracasados nos volvimos a encontrar. Coqueteamos como adolescentes, fuimos al cine, caminamos por el parque, me abrazaste de la cintura, bailamos juntos…nos enamoramos de nuevo.
Solo que ahora estabas determinado, no me vas a dejar ir. No te vas a enojar ni vas a perder esto tan maravilloso que hemos recuperado.
En un sitio donde se habla de sexo crudo, tambien cabe el amor. Porque es necesario que alguien lo haga brillar y le de su lugar como el mejor afrodisiaco y la mejor posicion. Amar. Satisfacer al otro, hacerle sentir bien y cuidar su corazon. Por eso comparto mi historia, porque tu me haces brillar desde el interior de una manera fantastica. Ahora no eres mas aquel chico timido, ni yo la muchachita atrabancada y desesperada, tambien puedo esperar contigo.
Pasaron tantos años para nuestra primera vez. Temblabas y tu respiracion era agitada, por un momento pense que te sentias mal, Pero no, era el corazon que te latia fuerte y los nervios de nuestra primera vez. Descubrimos lentamente nuestros cuerpos, me acariciaste y me deje amar, me dijiste que me respetarias si es lo que yo queria. Pero mis ojos te decian lo que queria y sin hacer caso a tus propias palabras me hiciste tuya con suavidad. Nuestros miedos desaparecieron, entonces nacio la ternura, la pasion.
Innumerables horas estuvimos asi, abrazandonos, besandonos como si no hubiera mañana, tocandonos lentamente, despues con frenesi para estar envueltos en un mar de pasion y risas. Ambos empapados, bañados en nuestros fluidos en una fiesta de placer nos probamos, nos saboreamos, nos compenetramos hasta volver a nacer en un grito de extasis.
Te di de beber de mi seno, lo metias todo en tu boca y yo te pedia mas, mas y mas. Espasmos orgasmicos te decian de seguir y tu obedecias, toda nuestra vida anterior no habia sido sino un preludio, una preparacion para ese momento. Agradeci a todas las mujeres que amaste antes, a todos esos años que te habian puesto tan guapo y te hacian ahora irresistible para mi. Porque no miraba tu exterior, sino tu alma. Volvimos a ser adolescentes.
Mi sexo empapado te dejo sin palabras, en un acto automata y de entrega total disfrutaste mi humedad y el fundirte conmigo en uno. Sudabamos mucho y se sentia bien, lamia tu sudor de tu pecho y tu frente, te besaba largamente, nos abrazabamos y casi mecanicamente cambiabamos de posicion, hasta que las habiamos probado todas. Tu sexo y el mio bailaban, gozaban, resbalaban.
No me pediste nada, ni yo a ti. Sin embargo, nos dimos todo.
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