Recordando viejos tiempos
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola a todos, me llamo Verónica, pero todos me dicen Vero, tengo 30 años y vivo en Valencia con mi pareja, con el cual tenemos una hija en común de tres años.
Mi madre tenía un amigo al que visitaba muy seguido que vive en Madrid, el señor es argentino.
Mi madre ya no lo visita más, pero seguimos siendo amigos, seguimos en contacto, pero hace tres años, no lo he vuelto a ver.
Yo estaba embarazada y cuando fui a Madrid, me quedé en su casa unos días y ahí tuvimos relaciones sexuales, debo reconocer que me gustó mucho haber tenido sexo con él.
Le mandé un mensaje diciendo que tenía que ir a Madrid de nuevo y me dijo que no había ningún problema, así que cuando llegué me estaba esperando en la terminal de auto buses.
Nos dimos un abrazo y un beso, "es que no pasan los años para ti", le dije, a modo de saludo, ya que siempre fue un hombre de gimnasio, pero ahora tiene el pelo largo, la barba larga, y en vez de hacerlo mas viejo, lo rejuvenece, "y vos cada día estas mas hermosa", me dijo, cogiendo mi maleta y nos fuimos en su coche a su casa.
Me preguntó como estaba mi madre, mi hija, mi pareja.
Llegamos, me duche y me invitó a salir a cenar fuera de casa.
Llamé a mi madre para avisarle que todo estaba bien y que le diga a mi pareja que mañana lo iba a llamar.
La cena fue todo un lujo, siempre simpático Eduardo, cuando salimos, me cogió de la mano y seguimos caminando así, yo en el fondo de mi ser, sabía que iba a terminar en la cama con él, estaba nerviosa, aunque no quería volver a engañar a mi pareja, este hombre me despertaba mis mas bajos instintos.
En un momento dado de la caminata, me mira y me besa la boca, a lo que yo le respondí el beso, "sabía que esto iba a pasar", le dije después de besarnos, dejando que me abrace, "pero tampoco pusiste mucha resistencia", me dijo, sonriendo y volviendo a besarme y siento como pasa su mano por el culo, "te sigue gustando mi culo", le dije, con una sonrisa en los labios, "me encanta, y ahora cuando estemos en casa, te lo voy a coger como te lo cogí cuando estabas embarazada", me dijo, sin dejar de besarme, "pero con cuidado que el ultimo que lo folló fuiste tú", le dije, ya que a mi pareja el sexo por el culo no le gusta, "tu pareja no te coge por el culo o no se lo das?", me dijo, volviendo a caminar cogidos de la mano, "no, no le gusta, le he dicho varias veces que me folle por el culo, pero no quiere, no le gusta", le dije, abriendo la puerta de su coche y subiendo, "cuantos días te vas a quedar Vero?", me dijo, conduciendo su coche hacia su casa, "tres o cuatro días", le dije, dejando que me acaricie la pierna, "son tres o cuatro días que te voy a coger bien cogido el culo", me dijo riendo y metiendo su mano entre mis piernas.
Yo me reí, abriendo mis piernas y dejando que me acaricie el coño por sobre el pantalón, "huy, no me asustes, que lo tengo cerrado", le dije, quitando su manos de mi coño, y la metí dentro de mi camiseta para que me acaricie las tetas, "te vas a ir con el ojete bien abierto como cuando estuviste la última vez en casa", me dijo, sin dejar de acariciar mi pezón, "si, eso es lo que me asusta, ya que la última vez que estuve contigo, me follaste por el culo, como nunca nadie me lo había follado", le dije, suspirando y los pezones duros, "hay Eduardo, por que a ti no te puedo negar nada?, no sabes lo mojada que estoy", le dije.
Llegamos a su casa, no bien cerró la puerta, me empezó a desnudar, yo encantada de que lo haga, no bien me desnudó, me arrodille frente a él y le saque la polla y se la empecé a chupar, metía mi cabeza entre sus piernas y le lamía sus huevos, me los metía en la boca, me hizo poner de pie y que camine desnuda para él, que no dejaba de mirarme y meterme mano, "que cogida por el ojete te voy a pegar", me dijo, apretando mis nalgas y besando mi boca, metiendo su lengua buscando la mía.
Así nos fuimos, a los besos, sus manos no dejaban de acariciarme toda.
Me tiré en la cama esperando que Eduardo se termine de desnudar, me puse boca abajo y me abrí las nalgas, "mira como te espero", le dije, moviendo mi culo y dejando que Eduardo me vea el ojete que a él tanto le gusta.
La verdad que estaba caliente, muy cachonda, quería que ese hombre me vuelva a follar, siento que deja caer saliva en mi ano, me hace levantar la cadera, dejando mi cara pegada a las sábanas y noto como acomoda su polla contra mi ano, y gimo al sentir como haciendo fuerza su polla me empezaba a entrar en el culo.
A medida que me iba metiendo la polla, yo solo gemía de placer, notaba como mi ano se iba abriendo, hasta que siento su cuerpo pegado al mío, "me la has metido toda cabrón", le dije, moviendo mi culo para los costados, sentía su polla bien adentro de mi culo.
Me cogió de la cintura y sentía como la hacía salir y la volvía a meter, "pónme boca arriba", le dije entre gemidos de placer, siento como me saca la polla del culo, y me hace dar la vuelta, poniendo mis piernas sobre sus hombros y me la vuelve a meter.
Yo estaba en la gloria follando con el antiguo novio de mi madre, volver a chupar su polla y volver a tenerla dentro del culo, me hacían calentar mucho.
Mientras sacaba y metía su polla en mi culo, bajé mi mano y me empecé a acariciar el coño, sus manos me estrujaban las tetas.
Escucho que suena mi móvil, y lo miro, mientras Eduardo no dejaba de follarme, "es mi pareja, no digas nada", le dije, "hola cariño, como estas, como está la bebé?.
si, yo llegué bien, estaba durmiendo ahora, no te molesta si hablamos mañana?, si cariño, yo también te extraño y te amo", le dije cortando la conversación con mi pareja y seguimos follando con Eduardo.
Eso me había echo poner mas cachonda de lo que estaba, haber hablado con mi pareja, teniendo una polla toda metida en mi culo y mi amante estrujando mis tetas, "pero Vero, vos realmente lo amas a tu pareja?", me dijo, Eduardo, sin dejar de sacar y meter su polla en mi culo, "si, bueno, no se si lo amo, pero si que lo quiero, es muy buena conmigo pero es que él no me folla como tú", le dije, volviendo a meter mis dedos en mi coño y seguimos follando con Eduardo.
Me daba un poco de vergüenza escuchar como a medida que Eduardo me follaba cada vez mas fuerte el culo, se me escapaban pedorretas, pero se notaba que a él no le molestaba, ya que no paraba de seguir follando mi ojete.
Yo estaba tan cachonda, que le grité que me iba a correr, que se corra dentro de mi culo, que ya no daba más, hasta que siento como exploto en un tremendo orgasmo, como hacía años que no tenía, la última vez que me corrí así fue cuando estaba embarazada y estaba follando con él, la polla de Eduardo no paraba de salir y de entrar en mi culo, hasta que siento como me coge fuerte de los tobillos y me mete la polla lo mas adentro que pudo y casi grito cuando siento como su polla empezó a palpitar dentro de mi culo.
Los dos gemíamos como loco, movíamos nuestros cuerpos pero sin sacar la polla de dentro mío.
Nos fuimos quedando tranquilos, sentía como Eduardo me besaba los tobillos, pasaba su mano por la planta de mis pies, "que hermoso culo que tenes Vero", me dijo, sacando lentamente su polla de dentro de mi culo y se quedó viendo como me había dejado el ojete, "sabes que lo vas a poder follar todo el tiempo que me quede en tu casa", le dije, abriendo mis nalgas y dejando que lo vea, "pero también quiero que me folles por el coño, y que me dejes tragar tu leche como me dejabas tragarla cuando estaba embarazada", le dije, abrazando a ese hombre y besando su boca con desesperación.
"Dormimos cariño, que mañana tenemos un día muy ajetreado?", le dije, dándole la espalda y acurrucando mi cuerpo desnudo contra su cuerpo, dejando que me abrace y así nos dormimos.
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