Rosy y el amigo de mi hijo
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Como habrán leído muchos de uds.
en mis relatos anteriores , he pasado de ser la mujer más decente del barrio a ser la putona mas buscada y buscona , a la cual, todos los hombres del barrio , o la mayoría de ellos, intentan seducir, me siento tan bien en mi papel de hembra codiciada que no tengo reparos a la hora de vestirme casi como prostituta de lujo y salir por las calles a levantar miradas y halagos, quería ser putona y punto.
Pero puta libre , así que lo primero que hice fue cortar relaciones con mis anteriores amantes (Alejandro, mi primo, los mecánicos, etc), ya que eran muy dominantes y agresivos, ahora la que debía tener el control de todo era yo ! .
Casi se cumplía una semana de ausencia de mi marido en casa, ya era hora de mi próxima aventura: me gusta el juego de provocar y calentar a un hombre hasta el extremo , pero cuando éste avance con intenciones de tener sexo conmigo ponerle freno y luego volver a hacerlo calentar y otra vez el freno.
Así jugaba con los choferes y con los del taller mecánico y con los clientes que acudían a mi negocio , los dejaba con las ganas, pero una vez que conseguía mi propósito de calentarlos , los dejaba y buscaba otro.
– Hace algunas semanas un amigo de mi hija estuvo en casa y lo calenté a más no poder, yo notaba como me miraba siempre la cola y también los pechos.
Lo que me hizo calentar y comenzar mi jueguito de provocación con él fue escuchar que les decía a otros amigos se habían quedado una noche en casa a beber, yo me había retirado un rato antes a mi habitación saludando a todos diciendo que me iba a dormir, que estaba con sueño, mi habitación estaba contigua a la sala , y como después de varias copas las voces de ellos iban en aumento , podía oír su conversación cuando mi hijo no estaba.
-Que lástima que doña Rosy se fue a dormir! me encanta ver esa cola moviéndose de acá para allá por toda la sala!.
– Dijo uno de sus amigos-Shhh…no hables tan fuerte que nos puede oír.
– Otro se sumó a la charla para decir
-Que hermosa cola que tiene esa señora! Yo tengo ganas de cogérmela , me calentaron sus palabras, continué escuchando su charla ,quedando quietita detrás de la puerta…
-Tiene un cola tremendo , pero lo que más me gusta es la cara de putita que tiene, ni hablar de su cola! cuando se pone un short blanco bien apretadito! se le saltan los jamones del cola a la pendeja! cada vez que la veo así se me para la verga!-.
Ya sus palabras me habían puesto loquita , dejé de oír su charla y me acosté a masturbarme…tuve un gran orgasmo pensando en él, especialmente en uno de los amigos de mi hijo…
Varios días después me dijo mi hijo que él vendría, por lo cual decidí que me iba a coger.
Mandé a mi hijo a buscar unas cosas a la casa de su abuela, aprovecharía que tardaría por lo menos una hora en regresar.
Llegó el amigo y le hice pasar.
Ese día me puse el short blanco que tanto enloquecía, sólo que ésta vez me lo calcé más arriba, cosa de mostrar gran parte de los cachetes de mi cola , como el short era lycra me calzaba perfecto , pero para terminar de ponerlo al rojo vivo, arriba sólo me puse una playera también blanca ,bien ajustada al cuerpo y muy escotada que era tan finita que se hacía casi transparente y sin corpiño ! cosa que el noté mis pezones debajo de ella, me miré al espejo y sabiendo lo que estaba por hacer , la calentura me traicionó y mis pezones comenzaron a crecer como nunca antes, tomé coraje y salí hacia la sala, donde él estaba poniendo una pelicola en una DVD …
Sentí que su respiración se agitaba , mi jueguito aumentó el voltaje cuando sola y sin que me lo pida me senté directamente sobre su bulto, en un rápido movimiento me hice para atrás y antes de que el pusiera algún tipo de barrera yo ya estaba sentada sintiendo en mi cola su bulto semi erecto, aún con su pene flácido se sentía que era algo prominente de gran tamaño , mis pechos parecían explotar de calentura , él, ya descarado por demás , me envolvió con sus brazos quedando sus manos muy cerca de mis pechos, digamos que mis pechos descansaban en sus brazos , la erección fue instantánea , sentí la redondez de la cabeza de su miembro en la puerta de mi cola , simulando que nada estaba sucediendo , continúe mirando la peli, mientras , sentía que él, cada tanto pegaba un simulado empujóncito hacia arriba, luego de un ratito para frenarlo un poco me paré y le dije…
-Bruno, pone pausa , ya vuelvo.
– Y me fuí a la heladera a buscar un refresco , cuando regresé , antes de sentarme miré disimuladamente su bulto y ví que tenía el cierre de su bragueta abierto, me senté otra vez bien sobre su bulto, se había puesto un poco blando ,pero enseguida fue retomando su dureza y más , cuando cuando yo me comencé a mover hacia abajo , disimuladamente , eso lo enloqueció y me pidió…
-Señora Rosy, levantase un poquito que me quiero acomodar mejor.
– Así lo hice quedando de espaldas a él , mostrándole toda mi cola bien de cerca , luego él tomando mi cintura con sus manos me dijo…
-Ya está señora se puede sentar.
– y me llevó hacia su bulto, pero esta vez , sentí el contacto piel a piel con su miembro…él degenerado había sacado su pene por la bragueta y me había sentado sobre el, comenzó a moverse perdiendo toda compostura ,ya no disimulaba, sentí que me humedecía mi short con sus líquidos preseminales, advertí por su respiración que estaba por acabar y ese fué el momento justo para huir y dejarlo bien caliente…
me agaché un poco como para darle un beso y de paso dejarlo que mire por mi escote , el entendió y me marché , al llegar a mi habitación , me saqué mi short , pues estaba todo baboseado por su pene , lo acerqué a mi nariz para conocer su olor y al hacerlo me calentó mucho , pasé la puntita de mi lengua para ver que gustito tenía.
me puse una bikini diminuta de color turquesa, era tan pequeña que mi cola estaba toda al aire y ni hablar de la parte de arriba! apenas podía esconder mis pezones, ya que me la había comprado un talle más pequeño y nunca había ido a cambiarla, rápidamente me metí en su cama y me acosté boca abajo, levantando un poquito mi cola.
Le dije que fuera a mi recamara, el corrió
-Bruno…te puede dejar que me toques o que me dés algún besito cariñoso , podemo jugar a ser novios pero nada de hacer el amor! no podemos ! Dije, él sin perder tiempo , me pidió que me acueste boca abajo…
-Doña Rosy quiero verle el cola.
– dijo, y me acosté boca abajo, el me montó por detrás, , sentí como golpeaba sacudiendo su pene duro sobre mis nalgas , luego la colo bien en el centro de mis dos nalgas y las apretó de tal manera que las mismas aprieten su miembro y comenzó a frotarlo de arriba hacia abajo…
-Rosy que cola por favor!!! me voy a masturbar…- dijo y continuó con su movimiento , me sentía muy puta al dejarme hacer eso con mi propio Bruno, pero me gustaba demasiado como para impedirlo , el seguía frotando su pene en mi cola mientras me decía…
-Que hermosa cola doña Rosy…si si ! me encanta tu cola putita !.
– Yo ni hablaba de tanta excitación , sólo me dedicaba a gozar con la situación, luego al notar que el aceleraba sus movimientos ,sabiendo que estaba por acabar le pedí… no me vayas a manchar la bikini!.
–
ahora se movía como queriendo penetrarme el ano, sólo se lo impedía el hilo trasero de mi bikini…un poco por miedo a que eso suceda pero más por lo emputecida que estaba le dije…
-Bruno …querés que cambiemos de posición ?.
–
ponte boca arriba.
– Le hice caso y él rápidamente se subió y puso su pene en el medio de mis pechos y apretándolos contra su verga caliente comenzó a cogerme las tetas , su pene imponente cada vez que subía llegaba hasta mi cara, lo sentí rozar en mis labios, tenía ganas de meterlo en mi boca pero me contuve… me saltó la putona al máximo y tomando su pene con mis manos.
Sabía que no tardaba en llegar mi hijo así que le dije que se marchara, que yo lo buscaba después.
Cómo vivíamos cerca y sabía que sus Brunos no estaban todo el día en casa decidí que sería mejor calentarlo en su casa.
Un día me puse una minifalda blanca elastizada y bien cortita, zapatitos de tacon altos rojos , arriba una blusa también bien pegada al cuerpo de color rosa ,abotonada por delante y sin sostén obvio! Me miré al espejo cuidando hasta el último detalle y salí caminando para la casa de, las barbaridades que me gritaron en la calle al verme vestida así y caminando como puta,fueron interminables, al llegar a su puerta , me desabroché dos botones más de mi escote , mis pechos se liberaron y saltaron casi por completo para afuera, la blusa tan abierta solo escondía mis pezones, luego toqué timbre…
Hola Doña Rosy, y me saludo con un beso y un abrazo, le hice sentir mis pezones sobre su pecho, no tenía nada de panza y sus múscolas.
Me dijo que iba de salida que sus papás lo esperaban fuera de casa.
Lástima hoy si me lo iba a coger.
Al día siguiente , salí para su casa vestida como para enloquecerlo de calentura , un short de lycra roja ,bien metido en mi cola , zapatillas deportivas , y arriba sólo una chamarra de algodón también roja, no quería salir a la calle así con mi cola prácticamente casi desnudo, así que me até una chamarra en la cintura, dejándola colgando en la parte trasera ,así me ocultaba la cola…Al llegar a su puerta me saqué la chamarra y golpeé su puerta, el no tardó en abrir , me hizo pasar y sin pensarlo sacó de su pantalón su pene bien erecto, esa imagen me derritió de calentura, -Al fin putita! al fin te voy a clavar! llevo días esperando éste momento! vamos para mi cama que te quiero hacer el amor puta.
Él me llevó hasta su habitación a empujones con su pene golpeando mi cola caminado detrás de mi…al abrir la puerta,me llevó hasta su cama, me paró de frente a él y me ordenó que le chupe la verga…
-Dale putona…chupale la verga
Me metí todo lo que pude su pene en mi boca y traté de chuparselo lo mas puta posible…
-Ay si putita! que bien la chupas!
Su pene golpeaba mi garganta mientras tomaba de mis pelos…
-Bueno , ya basta Rosy…ahora te quiero hacer el amor.
–
Me puse de pie y le dije con el tono de voz de más puta que me salió…
-Bruno…no, no quiero que me hagas el amor…quiero que me violes como los perros violan a las perras!- Sus ojos se iluminaron, y me preguntó…
-Ah si ? así que te gusta que den fuerte como a una maldita perra? no puedo creer que te guste tanto la verga nena!.
ponete en cuatro patas!- me ordenó y sentí como el corría mi body para un costado dejando paso así a su miembro…sin más reparo sentí entrar en mi vagina cada centímetro de la verga, sin miramiento alguno comenzó a sacudir su cuerpo contar mis nalgas de tal forma y con tal violencia que pensé que su cama se desarmaría en cualquier momento ya que estaba toda floja y hacía mucho ruido…
-Tomá ! tomá puta…- Me decía cada vez que me embestía con un vergazo, nunca pensé que la verga de este chico me gustaría tanto! la situación tan prohibida me calentaba cada vez más…
-Más fuerte Bruno…más fuerte!- Le pedí emputecida
-Recién me pedías que te coja fuerte como si fueras una perra y así te voy a coger puta calentona!-
Y de un empujón metió casi todo su pene en mi ano, como la ventana de su habitación daba a la calley por esa calle pasaba mucha gente traté de no gritar, pero su segundo empujón fue tan violento que no aguanté soltar un alarido…
-Ayyyyy Brunoiii!!! ayyyyyy! no seas malo!.
– Le pedí, pero no había marcha atrás, comenzó a destrozarme el cola a pijazos con terribles empujones!!! su pene me quemaba de tanto entrar y salir de mi ano…
-Bruno ayyyy basta ya! no aguanto !.
– le pedí, pero siguió cada vez con más violencia…
-Te voy a pegar tal cogida de orto que no te vas a olvidar más de mi puta de mierda…- Los minutos pasaban y el seguía y seguía partiendo en dos mis nalgas y demoraba en acabar…
-Bruno…te falta mucho? me duele! ya fué suficiente!.
– Lo que vino durante los cinco minutos siguientes me es muy difícil de narrar, la violencia con la cual su cuerpo pegaba contra el mío era terrible, su pene parecía explotar dentro de mí, sentía como su glande se inflaba cada vez más,tiraba con fuerza de mis cabellos haciéndome doler tanto como con su pija como con sus manos, totalmente sometida ,no me quedaba otra que esperar que su semen me inunde de una buena vez para poner fin a tremenda sacudida…
-Ahora vas a ver como te lleno de leche el cola por calienta verga… Dijo y sentí sus espasmos dentro de mi ano, el semen golpeaba dentro de mí a grandes chorros…caí desplomada boca abajo, el cayó sobre mí y dejó su pene dentro de mi cola hasta que comenzó a ponerse menos duro.
Así fue como me conseguí un nuevo amante.
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