SE COGIO A MI ESPOSA ME FOLLE A SU NOVIA
La historia comienza porque mi esposa se fue a una ciudad fuera de la capital a visitar a sus padres y normalmente cuando ella viajaba y yo me quedaba en casa, constantemente me llamaba para saber qué hacía y donde estaba, no obstante, hoy en día con los celulares, salvo que se tenga un GPS.
La historia comienza porque mi esposa se fue a una ciudad fuera de la capital a visitar a sus padres y normalmente cuando ella viajaba y yo me quedaba en casa, constantemente me llamaba para saber qué hacía y donde estaba, no obstante, hoy en día con los celulares, salvo que se tenga un GPS se puede saber dónde está la persona. Pero esta vez no recibí llamadas tan frecuentes y precisamente el viernes a eso de las seis de la tarde me sorprendió su llamada, hablamos cinco minutos, le pregunté que iba a hacer y me dijo que iba a estar donde su hermana, pero como yo se lo alborotada que es la hermana, imaginé mil cosas teniendo en cuenta que está separada y no tiene a quien rendirle cuentas.
Nos despedimos, yo le dije que ya estaba próximo a irme a descansar porque había trabajado todo el día, pero no sé porque razón me entro una espinita teniendo en cuenta que ella cuando está de viaje, los viernes o sábados me llama a eso de las nueve o diez de la noche para verificar que yo no esté fuera de casa, por eso me extraño su llamada tan temprano.
Entonces a eso de las diez de la noche se me ocurrió marcarle al celular y active la opción de cámara de video. Posiblemente a esa hora ella ya se había tomado algunas copas y sin mayor precaución contesto y de inmediato me di cuenta que estaba con un hombre semidesnudo y el sitio no era la casa de su hermana, sino lo más parecido era la habitación de un motel. Cuando se puso el celular en el oído no vi más hasta cuando nos despedimos y como yo había iniciado la llamada ella no tuvo la precaución de apagar su celular, entonces al ponerlo boca abajo en una mesa, deje de ver el video, pero si escuche todo lo que pasaba entre ellos esa noche. Mientras colocaba el celular en la mesa quedaron unas imágenes más y ella diciendo… nunca me llama y preciso hoy y a esta hora lo hace.
Después de esto lo primero que dijo Darío fue…mi amor que bueno que hayas aceptado mi invitación, apenas supe a través de tu hermana que venias a la ciudad estuve pendiente que nos pudiéramos hablar. Ella siempre me avisa cuando vienes sola, pero nunca habíamos podido concretar una salida
Si, ella me dijo que había hablado contigo y que te había notado muy interesado que nos viéramos.
Luego dice él… Yo te hice ayer una llamada, pero no nos pudimos comunicar
Si, respondió mi esposa, es que estaba en la casa con mis padres y no podía hablar por eso saqué la excusa que iba a la farmacia y te correspondí la llamada después.
Que bueno, no sabes cuanto te lo agradezco, todos estos años me he arrepentido de haberte dejado ir.
Bueno ya vez de lo que te perdiste.
Si, pero esta noche podemos estar juntos, recordar viejos tiempos y quiero que aprovechemos al límite, ven que quiero besar todo tu cuerpo.
A continuación, hay un espacio de tiempo que no hablan solo ruidos de besos que debían estar compartiendo.
De pronto ella dice… ¡Que locura!, Darío tú me emborrachaste para poderme traer aquí y cogerme como cuando éramos novios ¿verdad?
En principio solo quería verte, porque sé que estás casada y te debes a tu esposo, pero cuando compartimos esas copas y llego el primer beso y las caricias, recordé los viejos tiempos y creí que esta oportunidad no la podíamos desperdiciar.
Luego ella le dice… vamos a la cama que quiero que me cojas como en los viejos tiempos y se escuchan ruidos de besos y de pronto gemidos de ella que simultáneamente le dice… eso, eso, que rico se siente, después de tanto tiempo que ha pasado desde que perdí la virginidad contigo.
Bueno, disfrutemos esta oportunidad, dice él, y ella sigue gimiendo y se escucha un ruido persistente, seguro es de la cama y así en medio de gemidos y murmullos pasan unos cinco minutos hasta que Darío le dice hagámoslo como te gustaba tanto, ponte en cuatro.
Ok dice ella…Pero primero quiero que disfrutemos sexo oral, hagamos un sesenta y nueve y se comienzan a escuchar los chupones, los gemidos y palabras sueltas de los dos ¿te gusta? Si, hummmm, que rico, sigue, sigue, eso, eso, chúpame duro, que rico, tu boca hace maravillas, sigue, sigue y por los gemidos tan fuertes de mi esposa parece que alcanzo su orgasmo.
Luego un silencio seguro estaban descansando y supongo que beben sus copas porque ella dice… salud y él repite… salud.
Él le dice… Me gusto como mamaste mi verga, estuve a punto de correrme, pero no lo hice porque sé que no te gusta.
Bueno ahora por favor ponte en cuatro.
Hummmm, ¿Darío estas muy deseoso de follarme?
Si, porque esta es una oportunidad única, no se cuándo nos volvamos a dar una escapada como esta, hace tiempo la esperaba.
Y cuando ella se debió poner en cuatro, le dice a Darío… a mi esposo no lo dejo hacer esto, porque me hace recordarte.
¿Verdad? Me alegra saber que aún me recuerdas.
Claro, fuiste el primer hombre que estuvo dentro de mi
Siiii, eran maravillosas esas escapadas a motel porque en tu casa te cuidaban mucho, afortunadamente tus amigas te ayudaban inventando fiestas y reuniones que nunca existieron.
Y comenzaron los gemidos y las respiraciones agitadas,
Y la voz de Darío diciendo… hummmm que rica conchita, se ve que la has cuidado
Si porque mis dos embarazos fueron cesáreas.
Y no tuviste aventuritas cuando trabajabas o ahora que dispones libremente de tu tiempo.
Darío, eso no se pregunta.
Hummmm cuéntame que me excitaría mucho conocer tu intimidad, además nos tenemos mucha confianza.
Bueno si, un par de veces cuando trabajaba, fue al final de dos fiestas en que me había tomado unos coctelitos, y esas dos veces me invito a motel un muchacho más joven que yo muy atractivo además, resulto que follaba delicioso, afortunadamente se fue de la empresa porque o si no, me hubiera terminado encaprichando con él.
¿Y tu esposo nunca se dio cuenta?
Noooo, porque las veces que lo hice él estaba viajando en razón de su trabajo. Pude haberlo hecho más veces, pero supe controlar mis deseos sexuales. Hoy no sé qué me paso contigo, que acepte venir aquí.
Mejor sigue cogiéndome que quiero disfrutar otro orgasmo y que tú te corras dentro de mí, ahora que ya no hay riesgo de embarazo. Al parecer cambiaron de posición y volvió el ruido persistente, seguro de la cama, se intensifico al igual que los gemidos y las respiraciones y pronto mi esposa comenzó a decir…uhmmm me gusta tu verga aún se conserva, que rica esta, déjame subir las piernas para que me penetres más adentro.
Y él le respondió, me he soñado con este momento muchas veces hasta una vez en sueños me corrí, jajajaja. ¿Verdad? Si, y no sé si mi esposa se dio cuenta de mi sueño nunca me dijo nada.
Y continuó el sonido persistente hasta cuando ella dijo…Ya, ya, Darío estoy llegando a mi orgasmo y él le responde espera un minuto… ya me voy a correr y se escucha un aaaaahhhh, que rico por fin pude llenar tu concha con mi semen sin riesgo de embarazo.
Tuve que conectar mi celular para recargar la batería porque se me estaba agotando y minutos después cuando mi esposa dijo… Darío necesito que me lleves a mi casa porque yo dije que iba a donde mi hermana y ya está muy tarde.
Y él le respondió… Claro con mucho gusto lástima que nos tengamos que ir, prométeme que si puedes otra vez me avisas. Luego un silencio, se debían estar vistiendo y él le dice… no olvides tu celular, ella le responde… si ya lo voy a poner en mi cartera antes que se me olvide, porque ahí están todos mis secretos. Jajajajajajaja.
Y pensando que mi esposa tomara su celular y se diera cuenta que había estado prendido todo el tiempo desde que la llame, corte la llamada.
Después revisando la llamada desde el inicio, antes que ella pusiera el celular sobre la mesa y está diciendo… nunca me llama y hoy preciso a esta hora lo hace, pero mientras ella decía esto yo pude confirmar que efectivamente estaba en un motel, gracias al video que alcanzo a quedar en el celular.
Lo revise varias veces hasta en cámara lenta deteniendo las imágenes confirmando donde y con quien estaba ella. Detallando el video se ve el rostro del hombre semidesnudo que fue el novio que ella tuvo antes de casarnos, y todo quedo confirmado en la grabación cuando ella varias veces le dice Darío y hacen referencias de cuando fueron novios.
Pero para confirmar lo que prácticamente estaba seguro, marque al teléfono de la hermana, ella me contesto, la salude, y le dije… ay que pena creo que me equivoque estaba llamando a tu hermana y ella me respondió… Tu esposa está en la casa de mi mama. Ok, ok, muchas gracias. Esta llamada también quedó grabada.
Con esta información esperé el regreso a casa de mi esposa y en la noche cuando ya estábamos en la cama viendo televisión le dije ¿y como encontraste a tus padres?
Muy bien dijo ella
¿Y a tus amigos?
¿Queee? Porque me haces esa pregunta, dijo ella.
Porque el viernes me dijiste que te ibas a visitar a tu hermana, pero en realidad estabas en un motel con tu exnovio Darío.
Ella se quedó muda.
¡Qué opinas de eso, tú que presumes tanto de tu fidelidad?
Ella nada respondió.
¿De pronto dijo y de donde sacas esas cosas?
Le respondí de mi celular, cuando te llame estaba activada la cámara y de seguro si te habías tomado tus copas no te diste cuenta y pude ver a tu exnovio semidesnudo. Después hable con tu hermana y me confirmo que no habías ido a visitarla. ¡Quieres más explicaciones?
No,
Y entonces se puso melodramática diciendo… nunca te fui infiel pero esta vez Darío se enteró que yo estaba allá, hablamos, me invito a tomar algo, fueron varias copas de vino, que estuvieron acompañadas de recuerdos y caricias y cuando llegó un primer beso, aprovechando la escaza luz del lugar vinieron caricias más intensas en mis senos y mi concha y en ese estado de excitación él me propuso recordar viejos tiempos y no sé qué me paso y acepte ir al motel.
¿Y qué pasó en el motel?
Al bajarnos de su auto y entrar a la habitación nos estuvimos besando y acariciando furiosamente y estábamos en el proceso de desnudarnos cuando entro tu llamada y yo no me di cuenta de la cámara de video activada. Al despedirnos pensé que nada había pasado, reiniciamos lo que estábamos haciendo y vino una noche de sexo como las que habíamos vivido cuando fuimos novios.
Entonces le dije…Pero me deja pensando porque me llamaste tan temprano, si siempre lo haces más tarde, a esa hora ya sabias del encuentro con tu exnovio ¿e imaginabas que podía suceder lo que me acabas de contar?
No, no, la verdad fue mi error haber tomado esas copas de vino, que tú sabes activan mi libido, más los recuerdos del pasado y sucedió lo que te acabo de contar, pero te pido de todo corazón y con mucha sinceridad, perdones mi infidelidad que fue solo física porque jamás te voy a cambiar por nadie. Se, que fue mi error y lo reconozco. Te pido perdón por favor.
Como lo sucedido y narrado por mi esposa me excito, le dije… ya que tú has abierto la puerta quiero que me complazcas con una fantasía que he tenido en los últimos tiempos.
Si, ¿qué fantasía?
Quiero verte follar con otro hombre y que mejor que sea tu exnovio, a ti y a él les encantará.
¿Estas consiente de lo que me dices?
Si, Me estas pidiendo perdón, Este será tu castigo, y que castigo, más bien un premio.
¿Y qué debo hacer?
Invítalo un fin de semana a la capital, él debe tener amigos aquí y solo le costara el tiquete de avión, y por venir a follarse una maravillosa mujer como tú, creo que le resulta muy barato.
No me respondió, pero se debió quedar pensando en el castigo porque a mitad de la semana siguiente me dijo… hable con Darío y él feliz de volver a verme. Le dije que tu ibas a estar en un viaje de trabajo y él de inmediato acepto.
¿Y qué vas a hacer tú en este tiempo?, me pregunto.
No te preocupes prepárate para recibir a tu novio el viernes y el sábado y yo me encargo de lo mío.
Ella no cayó en cuenta que en casa tenemos desde hace dos años tres cámaras de video que están conectadas a mi computador y a mi celular y desde allí veré el espectáculo cuando se realice mi fantasía.
El viernes en la tarde apenas llegó Darío a la capital la llamo y quedaron que él iba donde sus amigos y en la noche venía a visitarla.
Antes de la hora que él prometió llegar yo me fui, y en mi auto conecté el celular para mantener bien cargada la batería.
Muy en punto de la hora llegó como novio fiel.
Ella lo recibió muy amable, además se había vestido muy sensual para la ocasión como yo le sugerí, una minifalda negra, medias de liguero y blusa semitransparente sin sujetador debajo.
La emoción de verla así, lo dejo sin palabras. Después de un efusivo abrazo le entrego una botella de vino recordándole que era la que disfrutaban cuando fueron novios.
Sin perder tiempo él destapo la botella mientras ella trajo las copas.
No paso más de media hora cuando vino el primer beso, que después fue acompañado de caricias y comenzaron a desnudarse. Como mi esposa se había puesto esa ropa interior tan especial, él se deshizo en halagos al tiempo que la besaba y acariciaba su cuerpo. Minutos después él la estaba despojando de su blusa, apareciendo sus hermosos senos, en los que él se engolosino chupándolos y besándolos.
Pronto su mano busco la concha de mi esposa, lo cual no le costó ningún trabajo teniendo en cuenta la falda tan corta y ella a su vez busco en su bóxer la verga que la llevaría más tarde a un delicio orgasmo.
Los dos estaban muy excitados, y gracias al vino desinhibidos, entonces para disfrutar más cómodos, mi esposa lo invito a la habitación, y aprovechando el buen tamaño de la cama disfrutaron inicialmente un sesenta y nueve. Ella se tragaba la verga de su exnovio, mientras él intentaba penetrar su concha con la lengua y estando super excitados cambiaron de posición, él se subió sobre ella aprovechó la separación de sus piernas y penetró su concha. A continuación, comenzó a mover su cadera logrando que ella gimiera cada vez más fuerte y al alcanzar su orgasmo él no dudo en explotar dentro de su concha.
Consumada la acción se quedaron pegados murmurando palabras que no alcanzaba a percibir, seguro referidas a su pasado.
A media noche Darío dijo… creo que debo marcharme, me da pena llegar tan tarde donde los amigos que me dieron alojamiento, de pronto los despierto. Se despidieron y ella le recordó… te espero mañana. Claro, él respondió, acompañado de un beso en la boca.
Regresé a casa y al entrar le dije a mi esposa… ¿Qué tal? ¡Lo disfrutaste? Y muy lacónica me respondió si, fue bueno volvernos a ver. Muchas gracias
Le dije… tengo una tremenda erección de pensar como tu novio te estuvo follando y ella me respondió… vamos a la cama para que la calmes conmigo.
Nos metimos desnudos a la cama, me subí sobre ella y disfruté una maravillosa corrida, ella estuvo muy tranquila, no tuvo orgasmo porque ya había recibido antes su premio.
El sábado en la noche fue muy similar al día anterior, salvo que decidí cuando los vi en el clímax de su encuentro, entrar a la casa y parado en la puerta de nuestra habitación los observé disfrutar de su momento y cuando ellos notaron mi presencia, en especial Darío, se sorprendió muchísimo y se puso muy nervioso.
Yo lo tranquilice diciendo… No te preocupes Darío yo me he follado durante más de veinte años a tu novia, ahora te puedes follar a mi esposa. Él se tranquilizó, yo me fui a la habitación de huéspedes, pero antes les dije… disfruten, que el escuchar a mi esposa gemir me excita mucho.
Cuando Darío se marchaba, paso a despedirse, entonces le dije… cuando vengas a la capital puedes quedarte aquí y pasar la noche completa con tu novia.
Muchas gracias, hasta pronto dijo él y mi esposa lo acompaño a la salida.
Después cuando nos fuimos a dormir mi esposa me dijo… me dejaste desconcertada con haber aparecido estando aquí Darío.
Le respondí… debemos ser civilizados y compartir sin egoísmo. Ella no dijo nada, yo desnudo me subí sobre ella y la estuve follando a mi gusto hasta cuando explote dentro de su concha, luego nos quedamos dormidos.
Desde ese día Darío nos ha visitado en los últimos cuatro meses, en dos oportunidades y cuando se reúnen en el cuarto de huéspedes con mi esposa a follar, los gemidos de ella me producen una tremenda erección, que más tarde ella misma viene a calmar. Así van las cosas hasta hoy.


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