Sexo desenfrendado con la mujer de un primo

Sexo en su casa del pueblo en plena cuarentena.
El siguiente relato ocurrió hace un par de semanas, resulta que con este tema del aislamiento por el covid,  mi primo junto a su familia se fue a vivir a su casa de campo que tienen en un pequeño pueblo a unos kilómetros de la ciudad de Guatemala, esto porque vive menos gente en el pueblo y es menor el riesgo. Resulta que Blanca tiene alrededor de 37 años y yo 28. Ella tiene un buen cuerpo a pesar de la edad y sus 3 hijos, tiene un buen par de nalgas grandes y redonditas que se le antojan a cualquiera y yo no soy la excepción, sus tetas pequeñas pero bonitas, pero lo mejor son sus hermosas piernas bien torneadas y lisas. Yo cuando era más joven siempre tuve la intención de coger con ella, pero no se dio la oportunidad y resulta que hasta ahora se nos dio por llegar a su casa de campo. Pues un día de estos de tanto encierro, decidimos salir para allá para respirar un poco de aire puro, llegamos a su casa y estaba Blanca y su familia excepto mi primo, resulta que anteriormente escuche que ella había tenido una aventura con alguien más y mi primo obviamente tampoco era fiel, entonces pensé que yo podría tener la oportunidad que había deseado desde años. Resulta que ese día todo fue normal, hasta que en un momento sus hijos y mi familia se quedaron del otro lado de la casa y yo cerca de ella y le pregunte por mi primo, a lo que me respondió: trabajando como siempre en el negocio en la ciudad, o así dice el que trabajando. Yo le dije, como que así dice él? Y me reí un poco, a lo que ella me dijo que trabajaba siempre y tal vez ni llegaba al negocio y se iba para otro lado. Al parecer la descuidada más que antes y le dije que debía ser difícil su situación, a lo que ella me respondió que ya nada era como antes, nada de lo que hacemos, si es que hacemos algo. La verdad yo me empecé a excitar y mejor me fui. Ese día nada paso solo quedo todo en pura platica algo personal. Al final le dije que si podamos regresar a visitarla y dijo que si en cualquier ocasión.

A la siguiente semana le escribí por Facebook que, si podríamos llegar entre semana, a lo que ella dijo que estaría en el negocio, que mejor día sábado, la verdad yo ya tenía la intención de ir solo a su casa y ver si cumplía mi fantasía. Le volvía a escribir día viernes y le dije que si podría llegar al siguiente día a lo cual me dijo que estaría bien que podía llevar a mi familia puesto que sus hijos y mi primo estarían en el negocio y que así le haríamos compañía a ella así que acepte, obviamente al día siguiente me fui yo solo para allá, al llegar le marque para que abriera la puerta para entrar mi carro y para su sorpresa solo yo baje del carro. Ella se sorprendió pero desde ese momento sabría lo que iba a pasar, pregunto por mi familia pero les dije que era yo el que quería llegar. Ella tenía puesto unos leggings negros de esos que dejan ver perfectamente sus hermosas piernas y nalgas grandes y exquisitas. Pregunte por su familia y dijo que los sábados llegaban después del medio día, teníamos varias horas disponibles. Entramos a su sala y me ofreció un trago, empezamos con un par de tragos y a platicar, cada vez más y más intenso hasta que las pláticas eras totalmente sexuales, me comentaba que ya prácticamente no tenía relaciones sexuales y que no estaba bien su relación de pareja, a lo que yo le respondí que era un total desperdicio estar con tremenda mujer y no satisfacerla como se merece, a lo que ella solo me sonrió y se tomó un trago completo y dijo que iba al baño. Yo a ese momento ya estaba súper excitado, tenía mis preservativos en la bolsa listos ya solo para ver qué pasaba. Blanca regresó con un short muy pero muy pequeño y una blusa con escote, me quedé sin palabras, tomamos un trago más y finalmente me decidí a besarla lentamente, al principio obviamente nos pareció extraño a ambos, solo fue un pequeño beso y nadie dijo una sola palabra, pero yo ya estaba muy prendido y seguí besándola a lo que ella respondía. Empecé a acariciar sus bellas piernas poco a poco y ella comenzaba a exitarse mas, debimos estar así por unos 10 minutos cuando no resistí mas y comencé a sobarle por debajo de los shorts y ella no dijo una sola palabra. Comencé a besarle el cuello lentamente y a sobarle las pequeñas pero suaves tetas a lo que ella no resistió y empezó a gemir y de inmediato me tomo de la mano y fuimos a la cama. Para ese momento yo ya no pensaba en nada que no fuera satisfacer mis deseos sexuales y los de ella, solo recuerdo haber dicho que nadie debía enterarse de eso a lo que ella acepto encantada. En solo segundos los 2 estábamos completamente desnudos, era increíble cómo se dio, lo primero que hice fue tumbarla para poder saborear toda su mojada vagina, empecé a lamerle el clítoris como loco, ella instantáneamente gimió de placer y me pedía que no parara. Empecé a sobarle las piernas y las tetas, le pase la lengua sobre todo su cuerpo y en esas deliciosas nalgas, me quede casi sin saliva de tanto saborear ese gran trasero, para ese entonces ya no me podía controlar ella agarro mi verga y se la metió a su boca de un solo por completo, yo por supuesto me exite mas que se la saque de la boca e iba a ponerme el preservativo a lo que ella se negó y dijo que quería sentirme piel con piel para que ambos disfrutáramos mas, no me pude negar y de inmediato la puse boca abajo para poder admirar esas grandes nalgas y se la metí poco a poco. Era fantástico, por fin se me hizo mi fantasía de casi 10 años, empecé embistiéndola suavemente y ella gemía de placer pidiéndome más duro, poco a poco se la metí toda y gimió de dolor y placer, estaba tan mojadita que era fácil meterle toda mi verga, luego de unos minutos me inque frente a ella, la coloque boca arriba tome sus piernas con mis manos se las abrí y decidí comerle ese clítoris nuevamente, estábamos demasiado excitados que nos olvidamos que era una relación prohibida. Luego de comérsela se la metí de golpe, ella se retorcía de placer, le mordí sus ricos pezones, lamí sus tetas como loco, luego de unos minutos la puse sobre mí, para ese entonces estábamos muy sudados los dos a pesar de que el lugar es muy frio. Ella comenzó a cabalgar sobre mi verga muy lentamente pero aumentaba el ritmo poco a poco, tenía mucha experiencia en lo que hacía y le dije que mi primo tenía mucha suerte de gozar de este sexo siempre que quisiera a lo que ella me dijo que de ahora en adelante yo también podría disfrutar de ella, me prendí mucho más comencé a apretar sus pequeñas pero deliciosas tetas al igual que sus nalgas, recuerdo que se movía muy intensamente casi al borde del llanto por la excitación y en una de esas se vino, dando grandes gritos de placer y yo súper mojado. Luego de eso la puse sentada encima de mí de frente, nunca nos detuvimos a pesar de su orgasmo, disfrute de allá nuevamente recuerdo que pronto me vendría a lo que la tumbe nuevamente sobre la cama y la comencé a embestir muy duro y rápido, ella pedía más y mas pero finalmente ya no pude y cuando iba a terminar ella me abrazo por la espalda y me dijo que le acabara dentro, que quería sentirme hasta dentro de ella, no pude contenerme y le acabe dentro hasta a última gota, luego le di un beso y los dos exhaustos nos recostamos en la cama sin decir una palabra por unos minutos, hasta que decidí poner mi ropa porque podía llegar su familia en cualquier momento. Ella accedió, le alcance su ropa sin antes darle un buen beso en esas nalgas que por fin había visto desnudas, nos vestimos tome agua y me acompaño a sacar mi carro. Antes de salir me dijo que era la mejor experiencia que había tenido en años y que lo podíamos repetir en adelante siempre que quisiéramos y se pudiera, al día de hoy hemos tenido ya 3 encuentros muy calientes como el primero…