Soy masajista a domicilio 2

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Por mi profesión, no solo mujeres he cogido, algún que otro padre de familia quedó con la colita bien abierta y llena de leche.

El día martes como habíamos quedado vuelve a venir Ahia, nos saludamos con un beso en la boca y ella sola se fue a mi dormitorio, se desnudó y se tiró a esperarme en la cama, yo me acuesto a su lado, le saco el pañuelo de la cabeza, ya que tiene un pelo largo y hermoso, le digo que me deje verle el ojete como lo tiene, y cuando se lo veo, no se como su marido no se dio cuenta que le habían roto el ojete a su mujer, cuando vino, su ano era bien apretado, uniforme, ahora estaba abierto, como salido para afuera.
Me acuesto boca arriba y dejo que Ahia baje a chuparme la pija.

Que placer sentir la boca y la lengua de esta mujer marroquí en mi pija, como la chupa, como la lame, mientras yo le acariciaba el cuerpo, las tetas que le colgaban, pasaba mi mano por sus nalgas, acariciando su ano mientras ella no dejaba de chupar, "que te gusta mas, chupar la polla o que te follen por el culo?", le dije, buscando de meter mi dedo en su cola, "que gracioso, chupar la polla no duele y follar por el culo sí", me dijo, volviendo a meter mi pija en su boca y siguió chupando, "pero viniste a follar por el culo verdad?", le dije, moviendo mi dedo dentro de su cola, "si, no me voy a desnudar solo para chupar tu polla", me dijo sonriendo, dejando de chupar mi polla y se sube sobre mi, haciendo que mi pija le entre en su concha, "así me gusta estar, con la polla dentro", me dijo, moviendo sus caderas y dejando que yo juegue con sus tetas, "hoy no puedo retrasarme mucho, tengo que hacer las compras", me dijo gimiendo sin dejar de mover su caderas, "bueno, entonces pone tu culo para arriba así te la meto y te follo", le dije, apretando sus tetas.

Ella se acostó sobre mi y me beso la boca, sacando mi pija de su concha y se puso boca arriba de nuevo, levantando sus piernas y acariciando ella misma su concha, yo me pase aceite por mi pija, me acomodé entre sus piernas y se la empecé a meter en la cola, escuchando sus gemidos a medida que mi pija le entraba, "hoy me ha dolido menos que la primera vez", me dijo, sin dejar de acariciar su concha, "es que ahora tenes el ojete roto", le dije, agarrando sus tobillos y sacando y metiendo mi pija de su cola, "es hermoso tu culo, no se como tu marido no te lo folla", le dije sin dejar de mover mi pija dentro de su cola y ella metiendo sus dedos en su concha, "dice que no le gusta, que es un lugar muy sucio para hacerlo", me dijo gimiendo, ya que mis movimientos eran mas rápidos y fuertes y ella no dejaba de acariciar su concha, "Sebastian, me voy a correr, córrete tú también", me dijo, metiendo sus dedos fuertes en su concha y gimiendo tan fuerte que casi sonó a un grito y yo sentí como me empezaba a acabar dentro de la cola de Ahia.

"Discúlpame que no hayamos estado mas rato, es que tengo que hacer las compras y no tengo tiempo", me dijo, mientras se limpiaba la cola y recogía su ropa para vestirse, la semana que viene vamos a estar mas tiempo, me dice, dándome un beso y se fue casi corriendo.
Yo no le di importancia, saqué las sábanas ya que habían quedado sucias de leche y mientras cambiaba la cama, suena mi móvil, atiendo y era un cliente que necesitaba una cesión de masaje, acordamos la hora para la tarde y seguí con lo que estaba haciendo.

A la hora convenida me presenté en la casa de este paciente, acomodo la camilla portátil que llevo siempre y llega él, envuelto en una toalla, se acuesta boca abajo, y empiezo con el masaje, cuando llego a los glúteos me dice que se los masajee bien que los tiene muy contracturádos.

Yo le masajeaba las nalgas a este hombre de unos cincuenta años y como quien no quiere la cosa, él movía su culo cuando le pasaba mis manos, estaba bien relajado, hasta gemía a medida que le seguía masajeando las nalgas, "que manos tan suaves que tienes", me dijo, moviendo el culo, "así las tengo que tener", le dije, bajando por las piernas, "no, sigue un poco mas en mis nalgas, me gusta como me las estas dejando", me pidió, y yo seguí masajeando su culo, a medida que este hombre gemía, "haz echo que se me ponga dura la polla, a ti no te pasa que se te ponga la polla dura masajeando un culo como el mio", me dijo, dejando que le siga sobando las nalgas, "o te gustan mas los culos de las mujeres?", me dijo, levantando su torso y me quedó mirando mientras yo le apretaba las nalgas, "depende", le dije, siguiendo con mi trabajo, sabiendo por donde venía este tipo, "mira, mi mujer no esta, y te pago el doble si me masajeas el culo por dentro", me dijo, agarrando una de mis manos y haciendo que le acaricie muy suave sus nalgas.

Yo no le dije nada, agarré el pote del aceite y deje caer un poco sobre sus nalgas y le empecé a pasar las manos aceitosas a meterlas dentro de sus nalgas, a buscar su ojete con mi dedo, a pasarlo sobre su ano, lentamente le fui metiendo el dedo, entre gemidos de este hombre, "uffff, que bien que vamos", me dijo, levantando un poco mas su culo y dejando que le mueva el dedo dentro, "que no se vaya a enterar mi mujer, pero no sabes el tiempo que hace que vengo deseando que me follen", me dijo, sin dejar de mover su cola con mi dedo dentro.
Saqué mi dedo de su cola, me pase aceite por mi pija y se la acerqué a la cara y sin decir nada, mi cliente se la metió en la boca, empezando a chuparla, mientras yo seguía acariciando sus nalgas, "como me pongo", me dijo dejando de chupar mi pija.

Lo hice bajar de la camilla, que se ponga atravesado, sacando su cola bien para afuera, "Sebastian, recuerda que eres el primero que me va a follar, métela despacio", me dijo, abriendo sus nalgas y dejando que me acomode detrás de él, y enseguida dio un pequeño grito de dolor cuando le empecé a meter la pija en su cola, "haaaaaa, haaaaaaa", decía a medida que le iba metiendo la pija, "te estoy rompiendo el culo bien despacio para que te duela lo menos posible", le dije, agarrando sus caderas y metiendo bien despacio mi pija en su cola, "si, siento como me entra, que experiencia tienes rompiendo culos", me dijo, dando un fuerte haaaa, cuando le terminé de meter toda la pija en su culo, "ufffff, como siento tu polla bien adentro de mi culo, haaaaa, folla mi culo despacio, deja que disfrute de tu polla, deja que mi ano se abra bien", me decía, a medida que yo movía mi pija dentro de la cola de ese hombre y él dejaba de abrir sus nalgas y se tocaba su polla.

"Uffffff, como la mueves, que bien se siente, me gusta como me estas follando", me decía mi cliente, moviendo su cola bien pegada a mi y no dejaba de acariciar su polla, "pensé que me iba a doler mas que me rompan el culo, pero estoy de maravillas con tu polla bien adentro de mi culo", me decía, "si te viera tu mujer o alguno de tus hijos así como estas ahora", le dije, agarrando sus caderas y moviendo mi cuerpo hacia adelante y hacia atrás, haciendo que mi pija salga y entre de su ojete a medida que sus gemidos de placer se hacían mas fuertes, "no pares, no pares, sigue follando mi culo que me corro, me corro, quiero que te corras dentro de mi culo, llena mi culo de leche", gritó se empezó a acabar sobre el suelo de su casa entre gemidos y gritos de placer y yo seguí con el mete y saca hasta que también, se la metí bien adentro y me empecé a acabar dentro de su cola, nos movíamos los dos en círculos, sintiendo como uno se acababa en el suelo y yo le llenaba la cola de leche a este tipo.

"gracias Sebastian, me gustó mucho como me haz roto el culo, ufffff, me gustó mas de lo que pensaba, podemos repetir?", me dijo, dándome la plata acordada, "siempre que quieras y por este módico precio", le dije, recogiendo mis cosas y me fui a mi casa a ducharme.