Valeria la sobrina de mi esposa
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola chicos, soy José y quiero relatar una aventura peligrosa que me sucede actualmente. Tengo 31, y casado desde hace cinco. Resulta que hace dos años y medio casi, hemos vivido en la casa de la abuela de mi esposa, pues nos decidimos construir nuestra propia casa y la abuela de mi mujer nos dijo que dejaramos de pagar alquiler y que lo invirtiéramos en casa propia, y que nos alojaba en su casa mientras ahorrabamos y construiamos la propia, lo cual nos pareció excelente idea, además ella lo hizo porque vive sola con una nieta de 14 años de nombre Valeria, ella es hija de una hermana de mi esposa, la cual se hizo de un niña siendo adolescente y la abuela la ha criado, ahora ella se ha casado de nuevo y vive con su actual esposo en otra ciudad, la niña quedó a cargo de la abuela. Todo un relajo.
La niña es cabellera castaña clara, de corta estatura, llenita, tez blanca y un hermoso culito respingon, no cabe duda que la chiquilla es linda, pero desconocía que es muy promiscua y cachondita. La casa de la abuela es de tipo antiguo, ambientes grandes, de madera, dos niveles y la casa cruje de lo vieja. La única tv estaba en la habitación de la abuela, asi que la nuestra la pusimos en la sala, y de noche nos reuniamos los tres, mi esposa, Valeria y yo para ver alguna pelicula. Valeria le gustaba quedarse de ultimo viendo tv conmigo, mi esposa era la primera que se iba a dormir, pues ella se levantaba temprano para salir a trabajar, yo salía unas horas más tarde, pues me quedaba más cerca mi lugar de trabajo.
Valeria le gustaba preguntarme sobre chicos, chicas y de sexo, su preguntas eran comprometedoras y eso a mi me calentaba, además durante las peliculas se tiraba al piso alfombrado y facilmente me enseñaba sus braguitas, sus piernas y su trasero paradito. Eso para mi era una delicia, pues la chiquilla estaba en pleno desarrollo, sus tetitas ya resaltaban en sus blusitas. Una noche la peli que veíamos tenia que ver con un romance entre un maestro y una de sus alumnas adolescentes, lapeli tenía escenas fuertes, donde el profesor tenía relaciones sexuales con la jovencita, Valeria estaba inmersa en la pelicula y ponía mucha atención, luego se dirigio a mi.
-José, tu haz hecho eso con alguna chica del colegio?- no lo habia dicho, pero mi trabajo es maestro de escuela.
-No claro que no!- le contesté de inmediato
-Pero, te gustaria hacerlo?- volvió a insistir Valeria.
Me quedé pensando unos segundos, -depende con quien sea?- le contesté. Eso la dejó intranquila. Ella se tiró al piso, se abrió de piernas mientras veía la tv, yo no dejaba de apreciar sus lindas piernas, su culito cubierto solo por su braguita blanca, me estaba poniendo nervioso.
Yo estaba sentado, cuando de pronto Valeria se sube a horcajadas sobre mis piernas, se pone transversal y se queda boca abajo con su traserito sobre mis piernas, tiene la falda subida asi que tengo sus nalguitas a unos centimetros, la chiquilla se queda asi. Yo voy perdiendo la compostura y pongo una mano sobre sus nalguitas, al principio inmovil, pero la lujuria se apodera de mi y comienzo como a acariciar su traserito, ella se queda inmovil sin decir nada, cada vez mis caricias con la mano abarcan más área de sus nalguitas. Mi verga empieza crecer dentro de mis pantalones irremediablemente. Valeria está quieta mientras yo le acaricio sus nalgas. Cada vez mis caricias son más recias, trato de meter mis dedos entre sus gluteos para pasar sobre su rajita cubierta por su braga. La traviesa de Valeria abre sus piernas un poco para facilitarme tocar su rajita, la cual estaba muy calientita.
La sangre ya la tenia en la cabeza, pero una luz en mi cerebro me dictó que parara, sino sería muy tarde asi que me detuve y le dije a Valeria que me iría a dormir, ella se quedó boca abajo en el sofá con cara de angelito. Yo me fui con una tremenda erección en el pantalón, eso fue ese primer momento.
Lo anterior se repitió tres noches después, casi al mismo estilo, mi esposa se fue a dormir y me quedé con Valeria, quien se subió igual y ahora no solo le acaricie sus nalguitas, sino me puse a darle besitos en sus nalgas, poco a poco le fui bajando su braga hasta dejarle al descubierto su lozano culito, el cual primero besé, pero la excitación me hizo morderle suavemente la carne de sus nalguitas. Mis manos acariciaron su rajita a flor de piel, mis dedos se llenaron de sus juguitos vaginales. Valeria dejó escapar varios gemiditos que me indicaron que ella la estaba pasando muy bien. Me atrevi con la lengua pasar por su ojete del culo y luego sobre sus labios vaginales, siempre por entre sus nalguitas, al minuto de eso, la chica dejó escapar un gran chillido, la nenita se estaba corriendo. Luego ella se quitó de entre mis piernas boca abajo y subiéndose su braguita se sentó, alli le dije que ya era hora de dormir.
Los jueguitos con Valeria contiuaron, no era a diario, pero si fácilmente una o dos veces por semana, siempre habian cosas nuevas, en otra ocasión ella se sentó a mi lado y poniendo uno de sus pies en mi boca, yo tomé su piecito y lo chupé todito, dedito por dedito, increiblemente eso me causó una tremenda erección, y Valeria estaba excitada también a través de sus pies. Yo me saqué la verga de mi pantalón la cual como muchas otras veces ya goteaba liquido preseminal, tome sus dos pies y me puse a pajearme con ellos, ante la vista de una sorprendida Valeria.
En otra ocasión, dejé de pajearme con los pies de Valeria y luego le dije que me lo hiciera con las manos, ella creo que estaba esperando eso, porque sin pensarlo tomó entre sus manos mi verga y la pajeo rico, yo veía que ella se saboreaba viendo mi verga rolliza, dura y suave al mismo tiempo. Le dije -quieres chuparla??- ella se quedó viendome a los ojos, sabía que quería probar, la tome de la cabeza y la dirigí a mi verga y la metió entre sus labios, primero empezó timidamente, pero no se si es instinto o no, pero en pocos minutos me sacaba gemidos de pasión mamando mi gordo miembro. Yo no podía más, la volví a tomar de la cabeza y comencé a eyacular dentro de su boquita, la cantidad de semen fue mucha, ella quiso zafarse de mi verga, pero yo no la dejé, asi que terminó de tragarse toda mi venida. Luego le pregunté si le había gustado y me movió la cabeza positivamente.
Cada semana algo pasaba con Valeria, solo faltaba penetrarla. Y ella fue la ideó eso. Me explico. Cierto día mencionó en la cena que no tendría colegio al dia siguiente. En la mañana del dia siguiente, yo estaba dormido, como dije mi esposa es la primera en salir de casa, cuando sentí que alguien entraba a la habitación y se metió entre las sabanas, yo aun dormitando, de pronto siento como me bajan el pantalón de la pijama y comienzan a chuparme la verga, era Valeria mamando desde temprano. No se si a todos los hombres nos pasa, pero por la mañana la verga se para fácilmente, obtienes una erección y te calientas rápido. Luego de gozar la felación, tomé a Valeria y luego de besarla la fui desnudando, la dejé en cueros entre mis sabanas, luego le chupé sus tetitas, ya las había acariciado, pero nunca las había mamado, la pequeña puso los ojos en blanco y luego me fui moviendo hacia abajo, lamí su vientre y luego le abrí las piernas y comencé a mamarle su rajita, la pequeña gemía como loca, movia su espalda sobre la cama y casi me arranca los cabellos de la cabeza, la hice correrse.
Luego sin pensarlo mucho, llevado por la lujuria y emoción del momento, me subí sobre ella, froté mi verga contra su rajita y la fui penetrando, ella suspiró, luego pujó, mi glande entró gracias a la lubricación que ya tenía, entre saliva y su juguitos vaginales, decidido a cogerla, empujé y mi verga se fue abriendo paso entre sus paredes vaginales, ella me abrazó y metió sus uñitas en mi costado y finalmente se la dejé ir hasta casi la mitad, si era virgen, alli había acabado. Luego me puse pistonearla, entraba y salía de su rajita, trataba de que entrara más de lo que sacaba de su interior. Ya le había metido más de las tres cuartas partes y seguí pistoenando, la besaba y le chupaba las tetitas para quitar la concentración en su rajita. La nenita se corrió como putita cuando yo la ensartaba hasta el fondo.
La cogí en esa única posición esa mañana, fue inicio. Luego de ese día, Valeria quería estar conmigo todo el tiempo y lo que es más, comenzó a tener celos de mi esposa. Cuando yo estaba con mi esposa, ella me llamaba a gritos desde su habitación, mi esposa me decía que atendiera el llamado y solo era para cosas estupidas. Cuando llegaba a la habitación de Valeria, ella se lanzaba contra mi y me trataba de besar con la puerta abierta, aveces yo respondía y otras le decía que era peligroso. Ella cerraba la puerta y me sacaba la verga del pantalón y se ponia a mamarla, en ocasiones me hizo acabar en su boquita. En otra ocasión me dejó tan caliente, que regresé a la habitación con mi esposa y le dije que Valeria quería que le contara un cuento (mentira) y que regresaría en veinte minutos, regresé a la habitación de Valeria, cerré con pasador, y comencé a cogerla, la puse al estilo perruno y la follé como desesperado, ella gemía mucho y tuve que ponerla la mano en la boca mientras terminaba de follarla, fue de locos.
Un día que no estaba mi esposa, no me acuerdo a donde había ido, presté un auto y me llevé a Valeria a un automotel, por fin la tenía toda para mi. Le di una cogida de hora y media, la puse en cuanta posición he practicado sexo con mi esposa. Valeria colaboró y se puso como yo le indicaba, le lamí el culo y le meti un dedo en él. Me corrí unas tres veces y ella lo hizo en al menos cuatro. Fue tan rico y tanto sexo esa tarde que ella ya se sentía mi mujer, pues de regreso me dijo que si ya eramos novios. Yo le expliqué y que se acordará que su tía era mi esposa. En ocasiones me ha dejado papelitos donde dice que me ama, que quiere ser mi esposa y he destruido los papelitos por temor a que los vea su abuela o mi mujer, y le he dicho que deje de hacer eso. La relación tomó tintes peligrosos y Valeria quiere estar conmigo todo el tiempo, ya mi mujer me ha dicho que su sobrina esta loca y que no le haga caso.
Falta poco para que nos pasemos a la casa nueva, porque después de la construcción ha costado llenarla de muebles y accesorios. Pero creo que alli puede estar una solución parcial. Me encanta coger con Valeria, pues no dice no a nada en la cama, es muy caliente la chica. Pero….es que con chicos se acuesta…
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