Dijo "si" y lo hicimos con una invitada

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por porcasualidad.
Finalmente mi mujer dijo que aceptaba que trajésemos a una chica para hacer un trío, hace tiempo que vengo pidiéndoselo, le ha costado decir que si, y eso que ya lo hicimos con otro tío (léase “desvirgados a la vez” en esta sección), pero bueno nunca es tarde para disfrutar, al igual que la otra vez, contratamos a una profesional, de esa manera evitamos para evitar malos rollo y su experiencia nos podía ayudar a tener una sesión de sexo más satisfactorio.

Cuando llego tomamos algo y charlamos animadamente, al principio de cosas banales pero nuestra invitada comenzó a realizarnos preguntas sobre nuestra vida sexual, como nos gustaba que nos lo hiciesen, que nos gustaba hacer, mientras preguntaba sus manos no estaban quietas, una de ellas cada vez estaba más cerca de mi polla y la otra cerca del coño de mi mujer, aprovechaba que se sentaba en el medio de los dos para poder tenernos al alcance de su mano, yo me estaba poniendo muy cachondo pero aun me puse más cuando poso su mano sobre mi polla, mi mujer miraba, nuestra invitada agarro la mano de mi mujer y tiro de ella, mi mujer se levanto y llevo su mano junto a la de nuestra amiga, ambas estaban masajeando mi polla, a continuación mi mujer se arrodillo delante de mí y abrió mi pantalón, metió la mano y saco mi polla, la agarraron las dos y comenzaron a chupármela, dos bocas que alternativamente se metían la polla en la boca, muy profundamente, era una experiencia me que estaba encantando, después de chupármela un rato, nos desnudamos todos y nos tumbamos en la alfombra, mi mujer se tumbo boca arriba y yo puse mi polla al lado de su boca que se abrió para recibirla, entretanto nuestra invitada le estaba haciendo un cunnilingus que la ponía a mil, no dejaba de moverse, la lengua de la mujer estaba muy bien entrenada y sabia lo que hacía, mi mujer tuvo en ese momento su primer orgasmo, aceleraba la mamada de mi polla, quería comérsela toda, se estaba corriendo con una boca desconocida en su coño y una polla en su boca y le encantaba, la otra chica dejo descansar un rato a mi mujer y me mando que me tumbara, me pregunto “culo o coño”, le dije que prefería culo y se ensarto ella sola en mi polla, entro perfectamente, notaba como me apretaba y como se deslizaba cada centímetro de mi polla dentro de ella, mi mujer ya recuperada, se levanto diciendo “quieres culo, pues me vas a chupar el mío” se sentó encima de mi abriendo sus nalgas y coloco su ano a la altura de mi lengua, se lo chupe, le metí la lengua, juguetee con él y lo prepare para poder fallármelo después, como se retorcía, le encantaba sentir mi lengua jugueteando con su culo, ella misma se metía un dedo por el ano para que pudiese llegar más adentro, de vez en cuando movía la cadera hacia atrás para que mi lengua llegara a su coño, me estaba llenando la boca de sus flujos, me estaba gustando saborearlo, yo con la polla dentro del culo de nuestra invitado y chupando a mi mujer no pude contenerme y me corrí, nuestra invitada lo hizo también, notaba como por mis piernas bajaban su fluidos, tenia espasmos a cada golpe de semen que salía de mi polla, me moría de gusto.

Las dos mujeres me dejaron aparte para que las observara, mi mujer quería otro orgasmo y le pidió a la otra que se la follase con la mano mientras le chupaba, y así lo hizo le fue metiendo dedo a dedo en el coño de mi mujer y le chupaba el clítoris con la lengua, al poco rato le pidió que se pusiese en posición de perrito y desde atrás siguió follándola con la mano mientras con la otra mano le metía dos dedos en el culo, viendo aquello me estaban poniendo otra vez a tono, me acerque a ellas y le pedí a la mujer que me dejara espacio, de un solo golpe metí la polla en el coño de mi mujer, se sorprendió algo, pero empezó a mover las caderas hacia adelante y hacia atrás para sentir toda mi polla en su coño, y sin poder resistirlo más se corrió, notaba como me apretaba la polla mientras se corría, gritaba y yo seguía follándola, la saque y sin pensarlo y con la polla bien tiesa y lubricada se la metí en el ano, dio un respingo, pero se relajo enseguida y me dejo entrar, nada más comenzar a follarme su culo, de nuevo le vino una oleada de placer y me pedía “córrete, córrete en mi culo” y así lo hice, me corrí sin remisión, dando los últimos golpes con mi cadera en sus nalgas, vaciándome por completo dentro de ella. Saque la polla poco a pocoy el semen que quedaba colgando de mi polla se encargo de chuparlo la otra mujer, estábamos todos agotados, relajados y por lo menos yo con ganas de repetirlo otro día. Ya veremos.