la mejor despedida
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
La historia que voy a relatar a continuacion sucedio en mi epoca de estudiante, de eso ya hace casi seis años y aun me parece que fue ayer… Por aquel entonces estaba trabajando en una multinacional, bueno mas bien haciendo mis practicas, para conseguir unos puntos extra y subir mi nota.
En nuestro departamento estabamos quince personas, la mayoria de ellos rozando la cincuentena. Los mas jovenes eramos Isaac, Victor y yo, seguramente fue por eso que enseguida conectamos tan bien, siempre los tres juntos a todos lados, a la playa, de compras, al cine…
Isaac era el tipico chico que con una de sus iresistibles sonrisas derritia a cualquier mujer, almenos a las de contabilidad de la empresa… nunca dejaban perder la oportunidad de pasarse por el departamanto de diseño y recrearse la vista. Siempre llevaba su espeso pelo castaño engominado hacia arriba, dejando al descubierto una frente ancha, con unos ojos verdes intensos que iban cambiando de tonalidad segun el dia, y esa boca que volvia loca a la mitad de las mujeras de la empresa, era simplemente…provocativa. Le gustaba vestir bien, a la moda y he de reconocer que cualquier cosa que se pusiera, por muy ortera que me pudiera parecer a mi le quedaba bien. Terminamos apodandole "morritos", apodo que no le sento nada bien, pero que al final tuvo que aceptar.
Victor en cambio era un maniatico de los deportes, practicaba surf, taikuondo, hokey y capoeira. Era bastante alto y musculoso, de piel morena y una larga cabellera negra siempre recogida en una coleta. Siempre enfundado en camisetas estrechas para hacer resaltar su musculatura y pantalones anchos que dejaban a la vista sus calzoncillos, una de sus mayores adicciones, tenia tal coleccion que podia estar un mes sin repetir ninguno de los incontables modelos. El termino con el apodo de "el capo" por su aficion a la capoeira, y a diferencia de Isaac el se lo tomo como todo un honor.
En cambio, los compañeros les llamaban "los perros", porque siempre estaban pendientes de mi, para ayudarme y defenderme, eran mis perros guardianes tanto fuera como dentro del trabajo. Seguramente fue por eso que ese verano apenas me comi un rosco, chico que se me acercaba, chico que era interrogado y evaluado.
Por mi parte era, y soy, una chica de estatura mediana, por entonces llevaba el pelo largo, casi siempre recogido en moños, trenzas o coletas,porque lo tenia rizado y cuando me lo soltaba parecia una leona, de ojos azules y prominente pecho, con el que mas de un amago de infarto he provocado entre mis compañeros de trabajo por culpa de mis escotes. Yo tambien termine con un apodo, el de "muñeca", porque las pocas veces que me habian visto con el pelo suelto, les habia parecido mas una de esas muñecas de porcelana de pelo rizado que una leona.
Como les contaba, estaba de practicas y estas terminaron a finales de agosto, ya que en setiembre reanudaba las clases. Asi que mis compañeros me prepararon una fiesta para la despedida, me hizo muchisima ilusion, la verdad no esperaba nada de eso. Como las oficinas cerraban a las nueve, algunos decidimos irnos a cenar y continuar con la fiesta, terminamos en una de las discotecas de moda y poco a poco se fueron despidiendo los compañeros, hasta quedarnos los tres solos, bailando, bebiendo, riendo, llorando, abrazandonos….
Cuando salimos de la disco ya eran las ocho de la mañana, estaba amaneciendo y nos enfundamos las gafas de sol mientras pediamos un taxi, los tres estabamos demasiado borrachos para conducir. Victor propuso que fueramos al apartamento que sus padres tenian al lado de la playa, estaba cerca de alli y podriamos dormir tranquilamente, asi que para alla nos fuimos. El apartamento estaba en el segundo piso de un bloque de apartamentos a primera linea de playa, estaba muy bien decorado, se notaba que la madre de Victor era interiorista. Nos tiramos en el sofa derrotados despues de una larga noche de fiesta, aun riendonos de todo.
-bueno, ya es hora de dormir la mona, no os parece chicos?- dijo victor- Sandra, si quieres puedes quedarte en mi habitacion, que Isaac y yo ya compartiremos la cama de mis padres.
-de eso nada!- replico Isaac- yo no pienso acostarme en la misma cama que tu, que eres capaz de meterme mano mientras duermo, cabron!
En ese momento Victor se lanzo sobre Isaac y empezaron a forcejear siguiendo con las bromas, yo no podia parar de reirme y no queiia separarme de mis amigos, asi que les hice una propuesta:
-chicos, es nuestro ultimo dia juntos!, y no quiero separarme de vosotros, anda dejadme dormir con vosotros, me pondre en el medio de la cama y asi Isaac no se tendra que preocupar de que le metas mano, que os parece?
Los dos pararon de jugar, y se quedaron mirandome, pensando en la propuesta que acababa de lanzarles, Victor dudo, no lo encontro muy conveniente, pero al final Isaac le convencio y nos fuimos los tres para la habitacion.
Era espaciosa, con un gran ventanal desde donde veias la playa y una enorme cama de matrimonio ocupaba el centro de la estancia. Nos fuimos desnudando hasta quedarnos simplemente con la ropa interior y nos metimos en la cama, yo en el centro, Victor a mi derecha ye Isaac a la izquierda, y asi dejamos que los vahos del alcohol nos sumieran en un profundo sueño.
No se cuantas horas habia dormido, cuando una sensacion placentera empezo a devolverme al mundo,estaba aun medio dormida cuando note la mano de Isaac recorriendo mi brazo y deslizandose muy suavemente hacia mi estomago, note su pecho pegandose a mi espalda, su respiracion en mi nuca y un duro miembro en mi trasero. Aquello hizo saltar una alarma en mi, Isaac se estaba poniendo caliente a mi costa y con Victor a pocos centimetros! no podia creermelo, estaba paralizada, tanto por el miedo de ser pillados como por el comportamiento de Isaac. Asi que segui haciendome la dormida mientras la mano de Isaac exploraba mi cuerpo, se paseaba por mis muslos, mi estomago y mis tetas, al principio fue suave con ellas, pero a medida que la excitacion subia su presion fue en aumento, me las sobaba y apretaba con ganas, la presion en mi trasero tambien fue en aumento, parecia no importarle que yo me despertara o que fuera Victor el que lo hiciera con el vaiven de la cama. Al cabo de un rato ya no pude aguantar mas, mi respiracion se empezaba a entrecortar, todo mi cuerpo estaba a flor de piel y un pequeño gemido surguio de mi garganta, hasta yo me sorprendi de mi accion, abri los ojos al momento y cual fue mi sorpresa al encontrarme a Victor despierto, con sus ojos negros clavados en mi, sonriendome y al momento dandome un calido beso en la boca.
– buenos dias muñeca- me dijo.
– nuestra muñequita por fin desperto-respondio Isaac.
Gire mi cara hacia el y me respondio igual que Victor, con un beso en la boca. No podia creer lo que estaba sucediendo, pero no tarde mucho en entender. Entonces Victor entro en el juego, deslizo su mano debajo de mis braguitas y empezo a acariciar mi coñito, volvio a besarme, pero esta vez de forma mas intensa, metiendo su lengua en mi boca para saborear la mia. Isaac fue desabrochandome el sujetador hasta liberar mis pechos de su prision, para que Victor pudiera amasarlos, besarlos y chuparlos a su antojo. Mis braguitas tampoco tardaron mucho en desaparecer y notar la verga de Isaac entre mis nalgas, dura e impaciente por poseerme, pase mi mano entre mis piernas en busca de ella. Victor retiro la sabana y dejo su desnudez al descubierto, su gruesa polla estaba tiesa como un asta.
-vamos nuñeca, es toda tuya, juega con ella- dijo Victor.
Me incline hacia ella casi ipnotizada, queria tenerla entre mis manos, empece a lamersela lentamente, a besar y pasar mi lengua por su capullo y poco a poco empece a tragarmela, oia su respiracion acelerandose y como se le escapaban pequeños gemidos, aquello le estaba gustando mucho. Isaac, ya no aguantaba mas, coloco mi traseo en pompa quedandome yo a cuatro patas, restrego su capullo en mi vagina y poco a poco me la fue metiendo con suaves movimientos de vaiven, hasta que la tuvo toda dentro, entonces empezo a follarme de verdad. Yo estaba disfrutando como una loca con ellos, con sus pollas. Luego me sente a orcajadas sobre Victor y me clave su verga de una sola vez, aquello hizo que soltaramos un fuerte gemido de puro placer, empece a cabalgar sobre el y a disfrutar de la polla de Isaac en mi boca, era mas larga que la de Victor, habiendo ratos en los que creia que me acabaria por ahogar. Entonces Isaac se retiro y se coloco detras mia.
-Isaac, no lo hagas, por detras no- le solte en cuanto vi sus intenciones e intente safarme de los dos, pero Victor me abrazo con uno de sus brazos atrayendome hacia el, clavandomela bien a dentro y dejando mi trasero al alcance de Isaac. Segui oponiendome, pero Victor no me soltaba y segui rogandole a Isaac que no lo hiciera pero el ya estaba lubricando mi ano con su saliva y masageandolo con sus dedos.
-Vamos muñeca, haznos felices, llevamos mucho tiempo deseando esto- me dijo Victor al oido- relajate, sino te va a doler mas de la cuenta y nosotros lo que queremos es que disfrutes, tanto como nosotros lo hacemos contigo.
Entonces note la polla de Isaac en la entrada de mi ano, la fue introduciendo lentamente hasta tener le punta bien metida.
– Ahora aguanta muñequita, sera solo un momento, luego veras como lo disfrutaras.- dijo Isaac, y en ese mismo instante me embistio, senti como si una corriente electrica recorriera mi espina dorsal y terminara en mi garganta de la que surguio un grito de puro dolor. Se quedaron los dos quietos, dandome tiempo para recuperarme, poco a poco sus caderas empezaron a moverse, sintiendo esos dos penes dentro de mi moviendose, restregandose en las paredes de mis cavidades y esa sensacion volvio a ponerme muy caliente.
-oooooh siiiiii! seguid, seguid…aaah….asi, folladme asi perritos, follad a vuestra muñeca. Isaac no pudo aguantar mucho mas, mis palabras terminaron por ponerle a mil y se corrio dentro de mi culito.
Cayo rendido sobre la cama, a nuestro lado, mirandonos y regalandonos la mejor de sus sonrisar, yo seguia encima de Victor, moviendo la cadera suavemente sintiendo su verga aun dentro mia, tan grande y calida, nosotros aun no habiamos terminado y no hizo falta que Isaac nos dijera nada, sabiamos que lo que queria el ahora era vernos a nosotros dos haciendolo. Me puse a cuatro patas y Victor dirigio su verga a mi coñito, restregandosela por mi coñito, metiendome la punta y sacandola, volviendo a pasarla por todo mi coñito y volviendo a meter solo la punta… creia volverme loca, le pedi que me la metiera, que me la metiera ya y mi deseo fue cumplido, entro toda de una vez, yo ya no podia reprimir mis jemidos y jadeos. Entonces Victor echo todo su peso sobre mi dejandome boca abajo en la cama y todo su cuerpo encima mio, su verga busco mi ano y se fue metiendo en el.
-aaaaaahh, oh muñeca, no voy a ser yo el que desprecie este agujerito…-me decia al oido-no te imaginas cuantas veces he soñado con poseerlo aahh.
-Victor y yo llevamos medio verano deseandote muñequita- me dijo Isaac, mientras Victor seguia follandome-, pero no nos poniamos deacuerdo con cual de los dos iba a tenerte, los dos te deseabamos.
-y hoy, hoy nos has dado la oportunidad perfecta para estar los dos contigo.
Entonces Victor volsio a meterme la verga en el coño, follandome con fuerza, consiguiendo que me corriera, le pedia que no parara, queria que ese orgasmo durara hasta que mi cuerpo desfalleciera y asi fue, se prolongo durante un largo rato hasta que Victor se retiro y se corrio por toda mi espalda.
Nos quedamos el resto de la tarde acurrucados y abrazados unos con otros , halando acariciandonos y besandonos. Esta fue la mejor despedida que e tenido.
Autor: Anonimo
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