Lo hice en un bar swingger

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Con motivo de nuestras calenturas y arrecheras, con mi novia anita cuando estábamos muy excitados nos imaginábamos ir a un club o bar swinger, que solo de pensarlo mi verga se ponía a mil y ella me comentaba que le parecía muy tenaz, pero que lo pensaría.
En nuestra ciudad de clima templado no existe, o por lo menos no conocemos, por lo que pensé cuando viajemos a la capital podríamos ir.
Sin embargo a fin de año planeamos irnos de vacaciones a la costa atlántica y teníamos que quedarnos 2 días en Bogotá; llegamos el jueves en la tarde y nos quedamos en el hotel descansando y en la habitación iniciamos nuestras calenturas, hablando de cachonderías lo que le toqué el tema a anita de estar en un bar de esos y ella se calentaba cuando le decía que rico es mirarte con una verga en tu boca y tu pajeándola hasta que te derramen todo el semen o que te lo metan por tu culo y ella me decía no sigas, no sigas que estoy que reviento, y así seguíamos durante un buen rato.
Nos arreglamos y bajamos a cenar y después fuimos al bar del hotel para tomarnos unos traguitos.
Aproveché para preguntar donde quedaba un bar recomendable swinger lo que me dieron la dirección, y listo para ir el viernes.
En el bar del hotel empezamos a bailar y me calenté acariciándole el culito y cuando nos sentamos le hacía la pajita en su rica y depilada panocha.
Anita es de 35 años de largas piernas un culito bien formado y de tetas pequeñas.
Yo tengo 40 alto y creo que estoy bien.
Seguimos calentándonos y le conté que ya tenía la dirección para ir el viernes y ella me dijo noooo y que debo hacer no sé, yo le dije lo más seguro es que busquemos alguien, o una pareja como nosotros y nos calentaremos, eso la encendió y me dijo si sería algo diferente, mientras hablamos se empezó a pajear y me decía quisiera que me viese alguien para saber que se siente, le dije vaya al baño y mire si al frente el baño de hombres y se pajea.
Ella dijo ya vengo y yo me quedé mas arrecho y con mi verga mojada, pensando que estaría haciendo, se demoró como 20 minutos y se sentó con risa nerviosa y dijo, me atreví y creo que estoy mas puta que nunca y yo solté la risa, cuéntame que pasó.
Cuando me fui al baño entré a orinar y cuando salí al frente entró un joven negro, lo vi y dije me voy a pajear, afortunadamente no entraba nadie, ya que si era así seguramente me iba a sentar, dejé un poco abierta la puerta del frente y me senté en la taza del inodoro, y vi que él salió y me vio de reojo, me toqué la panocha y me estaba excitando, luego me paré y el miraba y se quedó haciéndose que hablaba por celular, yo seguí pajeándome y salí al lavabo y se me acercó y me dijo, que rico que te haces dale sigue, yo estaba roja y se me acercó y me cogió la mano y me la llevó a la verga, estaba grande, le bajé la cremallera y se lo saqué y guauuuu que rica verga se la pajee y al rato me metió los dedos a mi panocha, y me dijo que rica estás, y de veras que estaba muy mojada, me agaché se lo chupé y casi no me entraba en la boca, me incorporé y me lo arrimó por el culo lo que me puse a mil, con la punta de la verga me tocaba mi hoyito, y en algún momento pensé que carajo que me lo meta, pero me controlé y le dije dale venite encima de mi culo, dale, dale, y se empezó a mover lo que no me aguanté y me vine y lo hice venir y me lo derramó encima de mi culo.
Todo esto me contó, ahí me saqué la verga y le dije hacéme venir y me pajeó hasta que me vine.

Al otro día nos acordamos de la noche anterior y nos daba una gran arrechera, lo que le dije anita entonces esta noche si vamos verdad?, y ella dijo vamos pero no te prometo que pasaría ya que me da algo de susto.
Ya entrada la noche cerca de la 11, nos fuimos, ella se puso una falda de color negra alta una blusa clarita sin sostén, calzones blancos sin medias nos tomamos unos dos rones con ginger y listo.
Arrancamos al bar entramos a un salón había bastante luz, nos recibió una señora muy bien vestida, entrada en años y nos preguntó cuál era nuestro deseo, lo que le dije que queríamos experimentar ya que éramos bastante desinhibidos lo que ella dijo bienvenidos sigan y un joven bien vestido delante de nosotros nos dijo sigan siéntense, el lugar era cómodo y un poco tenue de luz lo que pensé que rico, así es mejor para los dos.
Al rato llegó una pareja de más o menos de nuestra edad él era bastante alto y ella era un poco bajita, tenía ella un vestido azul claro y se veía con las piernas blancas y gorditas, ellos se sentaron al frente de nosotros lo que anita me dijo bajito está buena verdad?, yo me sonreí.

Nos quedamos algo mudos y el conversaba bajito con ella y nosotros seguimos tomando ron con ginger, al rato nos fuimos a bailar y ellos se quedaron en el sofá regresamos y ellos dijeron brindemos y nosotros dijimos, claro que si, y conversamos un poco de todo, el señor se llamaba Luis Alberto, y ella Mónica, y ya entrado en tragos tanto ellos como nosotros no nos importaba si nos veían le empecé a acariciar la pierna a anita, ella un poco inquieta me quitaba la mano, pero yo con sigilo le decía que rico que nos vean y anita respiraba entrecortada y le metí los dedos por la rajita y decía que estaba mojada, al acariciarla abría las piernas y cerraba los ojos, y yo le decía ellos se están besando y él le acaricia la panocha a mónica y anita abría los ojos lo que en verdad se estaban pajeando.

Tomamos mas trago y ya nos reíamos todos y estábamos bien prendidos como decimos en nuestro país, bueno dijimos vamos a bailar; Luis Alberto dijo venga anita vamos y ella me miró como con pregunta, lo que hice un gesto de dale vaya y solo de pensar me arreché al máximo y también saqué a bailar a mónica estábamos en una pista pequeña prácticamente los cuatro, ya que un poco más allá estaba otra pareja.
Anita con sus giros bailando se le subía la falda y mostraba sus calzones, al rato sonaba música vallenata y anita y luis Alberto muy pegados y miré como le acariciaba el culo de anita lo que me arrechó mucho, igual me arrimé a mónica para que sienta la verga; parecía que se me salía del pantalón y con lo calientes que estábamos los cuatro.

Luis alberto bien arrimado a anita, le besaba la nuca y le dije a mónica venga sentémonos, ellos seguían bailando y al rato ya estaban chupeteándose y lo que me dieron ganas de besar a Mónica, la besé hasta las amígdalas de lo caliente que estaba, y ella me dijo que estaba nerviosa, pero que se sentía muy bueno ya que el esposo estaba alegre y contento y ella también, le metí la mano y le bajé los calzones y sentí su panocha y de veras que estaba mojada, le subí el vestido un poco y le besé las piernas y me dijo antes que vengan métame la lengua por el culito y se la hundí y sentí un aggggg , al momento se acercó anita y Luis alberto y le dije a anita ven bailemos con el fin de que me contara lo que había pasado y me dijo que él la pajeó bailando, me dijo que le metió los dedos por la panocha y que ella estaba tan arrecha que casi se venía, lo que luis alberto le había sugerido que se lo mame, cuando regresaran al sofá, por lo que le dije entonces vaya y mámeselo ella se acercó y como luis estaba con la verga afuera, anita se agachó a mamárselo y mónica se pasó a mi lado lo que se estiró para que la pajeara y claro le empecé a mover los dedos en su panocha y con lo húmeda que estaba y el olor a sexo me excitó todo.

Mónica se puso de lado lo que el culito se le abrió un poco y con el dedo se lo metí suave y me dijo uyyyyy que rico sigue, sigue, métemelo más y luis alberto miró y se puso a mil con anita se le notaba lo arrecho y anita me miró y le puso el culo, para sentir la verga ella sonreía y me miró yo subí los hombros y con lo arrecha que estaba luis alberto se lo metió y anita decía que se venía, que rico, sigue, mételo más y al ver a su esposo mónica estaba a reventar y la subí en mis piernas y me saqué la verga y me la empezó a mover y tal la calentura que le dije a mónica te lo quiero meter por tu panochita y ella me miró con una sonrisa lo que se la metí y ella muy excitada me decía me tienes muy caliente, hacémelo, hacéme venir que quiero sentir el semen caliente por mi vagina, dale, dale, ahhhhhh, que rico, estoy mojada, le agarré el culo y y me las arreglé para meterle un dedo por el culito y fue tal intensidad que me vine en la vagina de mónica lo que ella dijo no aguanto, no aguanto dale, dale que me estoy viniendo ya, ya, me vine, me vine, me vine y yo miraba a anita como se lo estaban haciendo y mi excitación fue tal que seguí otro rato muy excitado, anita empezó a moverse y le decía a luis alberto anda mételo más, que estoy a punto de venirme, hacémelo, dale, me siento como una puta, dale, dalee, dale, que me vengo, siiiiiiii, me vengo muévete más rápido siiiiii me vine, me vine, me vine y se quedó en silencio y claro, luis alberto le metió tremendo chorro de semen en su vagina, al momentico anita llegó a mi lado olía a semen y yo de igual manera todo embadurnado de todo, lo que nos besamos, al rato nos arreglamos cansados pero contentos, ellos muy amables y nos dieron los celulares para encontrarnos en otra ocasión.