MALTRATADO Y CORNUDO

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Solo me deja salir, con ella, si voy solo al poco me estaba llamando, y el dinero, ella me controla cada, euro, esa es mi vida cotidiana, pero ella lo sabe hacer también que nadie, piensa, e imagina lo calzonazos que soy.

Hace unos 7 u 8 años, su empresa, le regalo, 5 días en un hotel, ahí fue el cambio total, de mi esposa, tuvimos una pequeña discusión en la cena, donde, ella terminó callándose, pero mirándome, de un modo severísimo, cuando llegamos, a la habitación me dio una paliza, sin dejarme marcas en la cara, solo un par de bofetadas, yo no me esperaba aquello termino tirándome de mi pelo, diciendo como grites, cabrón te dare mas y dire después, que me pegabas, mis lagrimas saltaron, termine en el suelo, estaba en slip, me pego en mis nalgas, como a un crio con todas sus fuerzas, te voy a enseñar a contestarme de esa fomar en publico, termine llorando, en el suelo tras la paliza que me dio con sus manos, nunca antes me había hecho aquello, mientras ella se fue a duchar, llore, sin moverme, no sabia que hacer irme, denunciar, quedarme, y seguir callando, ella volvió, sin decir nada, es como si cambiara de personalidad, una vez terminado aquello, yo estaba llorando aun como digo en el suelo, ella se arrodillo, y me dijo, suave sssss no pasa nada, es que me sacas de mis casillas, muchas veces, anda levanta, me levanté me acostó apago la luz, y me acaricio hablándome, termino follandome esa es la palabra, tuve una de las mejores noches de mi vida, en sexo, y mi esposa, también, estuvimos, follando hasta altas horas de la madrugada, y ese fue el preludio de lo que iba a ser mi relación con ella hasta la actualidad.

Desde su embarazo, se acostumbro a que yo hiciera todo, en la casa, apenas a aportado en ese aspecto, por su trabajo en parte, pero, sobretodo por su dominación sobre mi, las palizas se hicieron mas constantes sobretodo antes de practicar sexo, hasta que hace unos tres años, me puso entre la espada y la pared, no quería probar intercambios, sino, palabras de ella que se la jodiera un buen macho, y ella misma se lo busco, si yo no estaba de acuerdo podía marcharme, de casa y pedir el divorcio, acepte finalmente, mi esposa tenia de aquella 37 años, como yo, y había buscado a un chico de 28 que vivía solo, se suponía que era solo para esa noche, y nada mas.

Fuimos a su casa, en un pueblo a 30 kilómetros de nuestra ciudad, de noche, el nos espero, en su coche, a la entrada del pueblo, nos presentamos, y finalmente le seguimos, hasta ella, mi esposa, venia pinchándome desde que salimos ya eran tantas veces que sabia busca una excusa para darme una paliza, hacia, días no me daba ninguna llegamos, a la casa de Chus, un chico atractivo, moreno, fuerte y ancho pero después supe sobretodo por que había elegido a él.

Nada mas entrar en la casa, mi esposa, comenzó a hablarle mal de mi, como si yo no estuviera, yo la conocía bien iba mas que caliente, estaba deseando follar.
Me hizo servir las copas, preparé para los tres, cuando entre en el salón los dos estaban sentados juntos en el sofá charlando, no me agrado desee marcharme de allí, pero aguante, termine sentándome en el otro sofá mas pequeño, el tema era sobre mi, que era esto que era aquello Chus me miraba, con sorna, de pronto mi esposa se levanto, tras dos sorbos, y me dijo esto esta demasiado fuerte, no sabes hacer nada bien, me pego una bofetada, después, otra, tirándome del pelo, comencé a llorar de dolor, mientras decía eso es solo sabes llorar, como una maricona, tiro de mi hasta quitarme del sofá, me desnudo, quedándome en slip, y me dijo coge la copa y prepara una en condiciones.

Lo hice, volví y los dos estaban de pie besándose, yo veía a mi esposa de espaldas, el corto vestido, subido por las manos de Chus, y posadas en sus nalgas, y bragas, de principio no me excito, aquello, solo seguía deseando marcharme mi esposa se separo, y me dijo siéntate ahí, deje la copa en la pequeña mesa y volvi a sentarme en el otro sofá ellos siguieron a lo mismo, pronto mi esposa, quedo en bragas y sujetador, Chus aun conservaba los pantalones pero por poco tiempo, mi esposa se arrodillo le desato, el cinturón después el botón y por ultimo bajo la bragueta, el termino de bajar sus pantalones y apareció aquella enorme verga, mi esposa la atrapo con la boca, y una mano, aun no estaba a tope, pero era magnifica, lo envidie, Chus termino totalmente desnudo, mi esposa de rodillas, mamandosela, cuando, el comenzó a decirle eso es puta, cómela bien, vi como le agarraba de los pelos y la obligaba a mover su cabeza delante y atrás, y me empezó a excitar al ver que mi esposa obedecia, y se dejaba decir todo aquello, le decía zorra perra, te voy a follar, toda la noche te voy a partir ese coño de gusto, y ella lo que hacia era moverse con mas, sumisión.

Aun de rodillas le quito el sujetador, apareció las dos preciosas tetas de mi esposa, y el la levanto empezó a comérselas y a llevarla hasta el sofá, allí la sento, y se arrodillo, le hizo, una mamada en su coño, que yo escuchaba los lametones que le daba y cuando lo sorbia mientras ella gritaba de gusto, hasta que se corrió, a chus ni le importo, ella intento que el la dejara al menos descansar, pero se lo impidió ahora mi esposa era la sometida la obediente, cuando, vi como el a pesar de ella intentar impedirlo le levanto las piernas, diciéndole abre bien esas piernas zorras si te voy a joder ese coño como me venga en ganas y eso hizo Chus, le metio su polla entre espasmos gritos y movimientos de piernas de mi esposa que no impidieron le metiera semejante, verga, cuando termino de darle el ultimo empellón que pego sus huevos al coño de mi esposa, esta lanzo un grito seguido propfundo no muy alto que no dejo de emitir mientras el la bombeaba mi polla estaba dura, y comencé a meneármela primero, uavemente disfrutando de aquello pero al poco, Chus la quito de allí la coloco como a una perr sin dejar de decirle obsenidades, le dio unos azotes en su culo una vez colocada, le bajo las bragas hasta casi la rodillas y volvió a calzarsela, y ella a dar unos gritos a cada embestida de él, esta vez mi esposa, se corrió, como una loca de nuevo, el la tenia agarrada como a una muñeca aquello le tenia calentísimo ver a mi esposa de esa forma tan sometida.

Chus se levanto sin soltarla la levanto a ella, mi esposa estaba totalmente a su merced a lo que el quisiera hacer con ella, yo estaba casi a punto de correrme disfrutando como un loco de aquello, cuando el se sento en el sofá sin soltarla y la hizo sentarse encima de el pero mi esposa dándole la espalda, la agarro sin decir nada sin preguntarle la hizo levantarse un poco el culo y le endiño de nuevo su polla mi esposa tuvo que tirarse atrás pegándose a Chus este le tenia ya pasado un brazo debajo de su hombro que terminaba su mano agarrando su pierna y alzándola con la otra mano hacia lo mismo con la otra y se la jodio de esa forma, vi frente a mi a mi esposa, toda abierta las piernas jodiendosela Chus, ella con los ojos cerrados, cansada, de la que le estaba dando el tipo, y empece a gritar de gusto, me corri poniendo mi mano para que mi leche cayera en ella, Chus me miraba, cuando termine me dijo, por primera vez ven aquí cornudo, quiero que veas bien el coño de tu esposa como se lo he puesto, me levante me arrodille frente a ellos, mi esposa daba grititos de nuevo, se iba recuperando, el tio aguantaba lo que le echarany vi en primer plano como su gorda y larga polla entraba en el coño de mi esposa y salía, el coño lo tenia enorme de abierto, y ante mi ella estaba sometida, sumisa, recibiendo aquella verga, chus se la saco, y puso su mano, diciéndome míralo bien, se lo he abierto bien a la puta de tu mujer, y le dije si, vaya si lo tiene abierto, si esta zorra es lo que necesita que un buen macho se la joda, de verdad, y la ponga en su lugar mi esposa solo gemia callada entre el cuerpo de Chus, este volvió a meterle su polla a escasos centímetros de mi cara, vi como de nuevo entraba ese enorme trozo de carne y volvia a darle, aquello a mi esposa, la había excitado de nuevo el escuchar pues al poco volvió su griterío viendo yo como salía y entraba la polla a una enorme velocidad, y vi como mi esposa se corria como su coño, emanaba jugos como la polla de Chus, se mojaba mas y mas, mi mano comenzó a mover mi polla de nuevo dura sin dejar de mirar aquello, hasta que mi esposa quedo muy quieta y callada, toda corrida, entonces de rodillas ante ellos me corri, con un largo orgasmo, Chus sin embargo seguía sin correrse, se levanto, mi esposa, quedo sentada, toda cansada pero el volvió a meterle la polla pringosa y obligarla a comerla, se hio una paja de esa forma, y mi esposa se bebio su leche y otra parte quedo esparcida en su cara, entre gritos de él.

Nos duchamos ellos dos juntos yo solo, el ultimo cuando sali ellos estaban en la cama, volvi a servirles otra copa, y me dijo mi esposa limpiara todo y obedecí, cuando volvi ya hacia tiempo que escuchaba gritos en la habitación, abri y vi a mi esposa a 4 patas mientras, Chus le daba de lo lindo, me hizo sentarme en el borde, diciéndome siéntate ahí cornudo y disfruta de como hay que joderse a una hembra como la que tienes, de nuevo chus estuvo mas de hora y media jodiendola, no pudo encularla, aunque le dijo que la prepararía para otro dia quería probar ese culo decía, y mi esposa, sonriente bien follada y contenta le dijo que claro, que lo estaba deseando, pero para hacerlo bien, no este dia y que le doliera mucho, yo por mi parte lo había pasado he de reconocer muy bien los dos orgasmos que consegui además de como en la cama se la follo de todas las posturas y sobretodo la domino me hizo tener una colección de recuerdos, para, hacerme pajas y tenerme bien caliente bastantes días.

Chus se convirtió hasta hoy en el amante de mi esposa, en estos tres años, no la he follado mas de 10 veces, tampoco me excita como verla cogida, a Chus sobretodo como la trata, sigo por supuesto siendo maltratado por ella, a solas o ante Chus, él no el solo me dice cabron cornudo, o que le sirva esto o aquello, me gusta y excita hacerlo, no soy gay ni el, nunca le he tocado siquiera su polla, ni el lo a pedido, esa es mi extraña relación con mi esposa, y como una droga que soy incapaz de dejar.