Mi novio y un amigo se cojen a mi pequeña hermana
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Bueno esta historia es una mas que me enviaron.
Hola, me llamo Karina, tengo 19 años, soy blanca, con el pelo largo y castaño mido 1.67, mi cuerpo es proporcionado.
Mis padres tienen un apartamento en un pueblo de la costa y el pasado julio, mi novio Jorge, otra pareja de amigos y yo decidimos pasar unos días en el apartamento. Mis padres no iban a acudir hasta el mes de agosto, ya que estaban trabajando y yo tenía unos días libres.
Lili, mi hermanita quiso ir con nosotros, tiene 8 añitos recién cumplidos y es demasiado hermosa, blanca, labios rojitos, delgadita, una carita limpia y juvenil y unos enormes ojos azules que potencia con una melenita rubia un poco larga y risada. Por su lado, Jorge mi novio, de 24 años, mide 1.76, delgado pero bien dado tiene unos gluteos que me buelven loca y sobre todo, guapísimo. Claudia y Edgar, nuestros amigos: ella es linda, morena clara, un cuerpo proporcionado, cabello oscuro, es de mi estatura y de la edad de Jorge, y Edgar su novio tiene 32 años aunque aparenta unos 26, es un muchacho muy atractivo, casi 1.80, delgado muy marcadito la verdad tiene un cuerpo increible, con unos ojos aceitunados y unas pestañas muy rizadas y muy obscuras, un pelo castaño corto, pero algo ensortijado que dan ganas de acariciar.
El apartamento de mis padres es amplio y luminoso, y cuenta con una maravillosa terraza abierta al Mar, desde la que en innumerables ocasiones he estado contemplando ensimismada durante horas. Laura me había preguntado, algo azorada si me parecía mal que durmiese en la misma habitación con su novio a lo cual no le vi inconveniente ya que yo dormiria con Jorge y en mi condición de hermana mayor, elegí la mejor habitación para Lili, con un gran ventanal mirando al mar. Edgar y Laura se acomodaron en la habitación contigua a la mía. Esa primera noche transcurrió tranquila, cansados del viaje y del acomodo, nos fuimos pronto a dormir.
El día siguiente era viernes, y se notó la afluencia de
domingueros de fin de semana, pues la playa estaba a rebosar. Pasamos el día en la playa, y ya entonces pude comprobar el cuerpazo que lucía Edgar, moreno y fuerte, algo más musculoso de lo que había observado en otras ocasiones, pero sin resultar exagerado. En un par de ocasiones vi por el rabillo del ojo cómo su mirada se posaba sobre mi hermanita, que lucia una piel blanca pero con un toque rosadito y su figurita esbelta que apenas era contenida por un pequeño biquini. Tampoco quise darle más importancia, sobre todo porque reconozco que es difícil contenerse en echar una mirada a una niña tan demasiado hermosa y poco comun aqui en México, como lo es Lili, ya que se llevaba las miradas de todos en la playa.
Esa noche salimos a cenar fuera, a un tipo bar-familiar en la costa. Lo pasamos bien, bebiendo, riendo. Pasadas las tres y media decidimos que era hora de retirarnos a casa ya que habiamos bebido bastante.
Al llegar a casa lleve a Lili a su cuarto y la arrope, regrese al a la sala de estar, Jorge saco una botella y seguimos tomando, pero yo ya me sentia muy hebria, Jorge y Edgar nos daban una copa tras otra de repetente abri los ojos, me habia quedado inconsciente, mire a mi alrededor y solo vi a Laura completamente dormida y borracha me levante como pude ya que de lo hebria no podia sostenerme y trate de buscar a los muchachos, me fui a mi habitación pero no estaban, al salir de la habitación pude ver que en la habitación de Lili se veía un leve resplandor, fruto sin duda de la lámpara de la mesita. En ese momento no se percibía sonido alguno. Me senté en una tumbona de la terraza, la suave brisa marina no tardó en refrescar mi cuerpo, Fue entonces cuando oí detrás de mí un sonido, callado pero inconfundible, la profunda respiración de un chico. La ventana de la habitación de Lili, daba a la terraza, y de ahí era de donde procedía el sonido.
Me giré despacio, y sigilosamente me acerqué a la ventana, que estaba entreabierta, la luz de la mesita permitía apreciar con bastante claridad lo que sucedía dentro de la habitación. La profunda respiración procedía de Jorge, que tumbado sobre la cama presentaba un rostro desencajado de placer. Más abajo, y cubierta por la sábana, mi hermanita se afanaba en aplicar a mi novio una monumental mamada. Según el gozo de Jorge se empezó a hacer más evidente, éste quitó la sábana de encima, desvelando el cuerpo desnudo de Lili, y abajo de ella los gruesos labios de Edgar se aplicaban sobre la vaginita de ella, subiendo y bajando la cabeza hasta prácticamente engullir la cara de Edgar. La escena me dejó, en un primer momento atónita, de que mi novio y nuestro amigo se estaban cojiendo a mi hermanita de tan solo 8 años y de lo hebria que me encontraba fuera de hacer algo que lo evitara senti una tremenda exitacion al verla en acción, chupándo polla como una descosida, y demostrando, por otro lado, que mi hermanita es toda una experta mamadora. Chupaba, lamía y vuelta a empezar, mientras Jorge disfrutaba como un enano y acariciaba la cabeza y el pelo de Lili.
Su lengua se deslizaba en círculos alrededor del glande y sin previo aviso, lo probaba entero para aplicarse de nuevo sobre toda la longitud de la enorme verga de Jorge. Cuando Jorge empezó a presentar síntomas de ir a correrse, separo la boquita de Lili, abandonó su verga. Edgar pasó de la vagina a uno de sus pezoncillos erectos por la punta de su glande, lo que le provocó un pequeño espasmo, y pude ver esa enorme verga y esos huevos tan grandes y colgantes que tiene. Lili, tomó el sexo de Jorge con su mano y los guió hasta la entrada de su sexo. Hasta entonces no me percataba que mi hermanita tenía el sexo completamente lampiño, lo que combinado con su cuerpecillo y carita de niña, se veía verdaderamente sexy. Las manos de Jorge sostenían el culito de ella, que lentamente fue descendiendo mientras la verga de Jorge desaparecía en el interior de su coñito de mi hermanita, cuyas manos acariciaban el pecho de su amante. La preciosa cara de Laura demostraba un intenso placer, su boca abierta emitiendo un profundo suspiro y sus pequeños pezones erectos, al tiempo que la verga de Edgar, se iba introduciendo en su culito. Su hermoso trasero acabó chocando con los tremendos huevos de Edgar, completamente ensartada. Poco a poco, Edgar comenzó a saltar y rebotar sus huevos sobre las nalguitas de Lili, mientras Jorge chupaba sus pesoncitos. Yo disfrutaba del festín visual y auditivo, el tremendo cuerpo cuerpo de edgar su espalda marcando sus musculos y sus gluteos contrahiendose hundiendo tremenda verga en ese culito sus enormes bolas rebotando, venciéndose hacia adelante, y sin dejar de mover el coñito arriba y abajo contra la verga de Jorge, Lili agarró el pelo de mi novio y comenzó a besarle, rozando los pezones con el pecho de Jorge. Los bramidos de Jorge y Edgar demostraban el intenso placer que sentía cada vez que el sexo de mi hermanita engullía sus vergas.
– sss… ha ha haaaggg….
y los suspiros y gemidos de Lili, demostraban que mi hermanita estaba también disfrutando lo suyo.
-mmm…aaay… m…ay… ay….ayyy…..ayyy
Las manos de Edgar se aposentaron sobre el culo de mi hermana, y comenzó a atraerlo hacia sí de manera cada vez más rapida, de modo, que a juzgar por los quejidos de Lili, la penetración se hacía más y más profunda.
Mi cuerpo había reaccionado acalorándose ante la tórrida escena que estaba presenciando. Mi sexo se había humedecido y mi respiración se había acelerado. Mis pezones se habían excitando, endureciéndose bajo la camiseta. Casi inconscientemente deslicé mi mano por dentro de mis bragas y, pasando un dedo entre mis labios, comencé a acariciarme la vagina, mientras introducía la otra mano por dentro de mi camiseta para acariciarme los pechos y pellizcar mis duros pezones. Mis caricias no tardaron en comenzar a agitarme la respiración….
Entonces mi hermana, alzándose ligeramente, pero aún con más de la mitad de la verga de Jorge clavada dentro de ella, comenzó a girar sus caderas, atornillando profundamente las vergas de mi novio y amigo dentro de sus hoyitos. Giró hasta que se salieron ambas vergas, dándole la espalda a Jorge y con su verga firmemente dura la alojo dentro de su coñito, Lili, comenzó entonces a subir y bajar sobre él, mientras que Edgar tomaba las manitas de Lili y las ponia en sus gluteos metiendole tremendo pedaso de verga en su boquita. y tomandola de la cabesa Sus movimientos se tornaron cada vez más convulsos y sus aullidos más agudos,
– ssshha ha ha
hasta que sus gluteos se contraian dandole unos chorros de leche que Lili, se trago y hechandole lo demas en su carita los muslos de mi hermanita comenzaron a temblar, y en medio de un profundo rugido,
-haaaaaagggggggg
Jorge, agarrando las tetas de Laura, se vació dentro de ella, que al notar el calor de su esperma inundando su cuevita, y tras un convulso movimiento de sus caderas, lanzó un sonoro chillido ahogado que dio paso a lo que yo intuí era un enorme y salvaje orgasmo.
Estimulada por los lujuriosos gritos de Edgar y Jorge, dos de mis dedos se colaron dentro de mi empapado sexo, y en un frenético movimiento de mete-saca, en pocos segundos, justo después de la corrida de Jorge, mi cuerpo me abandonó, inundándose de calor y vertiéndome de placer, me corrí. No pude reprimir un ahogado gemido, que afortunadamente no se debió oír dentro de la casa, lo que por otro lado, era lógico, dado el escándalo de suspiros, gemidos y aullidos que estaban profiriendo.
Girando de nuevo de cara a Jorge, y vencida sobre el cuerpo de él, su culito dilatado continuó durante un rato elevándose y descendiendo sobre la verga de Edgar que se habia recostado a un lado de ellos, mientras recuperaban la respiración.
Tras asistir al glorioso polvazo que mi hermanita, mi novio y mi amigo se habían pegado, y antes de que por casualidad me descubriesen, me deslicé silenciosamente y con cuidado de no ser oída, a la estancia tomando mi lugar antes de despertar Jorge y Edgar, entraron, nos cargaron a Laura y a mi y nos llevaron a nuestros cuartos ya entre las sábanas, y sin poder quitarme de la mente la imagen de Lili cabalgando salvajemente sobre las enormes vergas de Jorge y Edgar, capte que esta no podia ser la primera vez que lo hacian cuantas veces los deje solos en casa y yo regresaba de trabajar y Jorge ya esta ahi con Lili y aveces Edgar tambien. Me quité las bragas y me masturbé en silencio una vez más, despues.
A la mañana siguiente nos levantamos relativamente pronto para la hora en la que nos habíamos acostado. Lili, Laura y Edgar ya estaban levantados cuando yo me desperté. Serían algo más de las 10. Por el contrario, Jorge aún estaba en cama. No me extrañaba, sabiendo el ajetreo que había mantenido anoche. Lili, estaba esplendorosa, con una fenomenal sonrisa dibujada en su pícara carita de niña buena. Lógico, después del polvazo que se había pegado. No pude dejar de mirarla con cierta envidia. mira que tener dentro a Jorge y a Edgar al mismo tiempo… Aún no sospechaba que poco rato después vería cumplidos mis deseos más allá aún de lo que hubiera podido imaginar.
OR.
Nice nice
Es una delicia, pero con 8 una verga le va a doler a la nena salvo quizas si se la está pone un tipo de porte como el de ella. Me encantaría verlo, pero ante riesgos yo haría que se la cojan recién a los 11 añitos.
Mientras, apoyo tenerla chupando al que le ofrezca el picho bien duro cosa que ella se prenda lindo como ternerita y lo pueda disfrutar bien, y de paso se le echa jarabe para que lo haga con más ganas y asi ya va conociendo el semen.
Van 5 estrellas aunque sea anónimo, pero es lo que hay 😊