NUESTRA MEJOR AMIGA (HOY MUCHO MAS QUE AMIGA) 1º PARTE
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
No tengo un pollón como leo aquí, tampoco me quejo por supuesto, mide 19 centímetros, eso si bastante gorda y mis huevos, también, después aguanto mucho en la cama, desde siempre no me corro facilmente me encanta el morbo imagino como a todos, bueno prosigo, con 32 años, nos fuimos a vivir a la capital, vivíamos en un pueblo grande pero tuvimos un golpe de suerte mi esposa y yo, nos ofrecieron trabajo a los dos en una empresa, no lo dudamos, cuando llevábamos dos años con 34 años, habiendo, sido esa la mejor decisión de nuestra vida, conseguimos trabajo para Rita también en la empresa, vino a vivir y trabajar con nosotros estuvo dos meses viviendo con nosotros, no ocurrio nada, que hubiera sido lo fácil, sin embargo, se fue a vivir sola, a un apartamento de alquiler, aunque nosotros no queríamos, para nosotros era casi una hermana, sin suerte con los hombres a pesar de su atractivo.
Todo fue casual, sin esperarlo, sin decidirlo y por lo tanto, mejor, nuestra hija, de 8 años, los fines de semana, solo quería estar con sus abuelos, mis padres y los de mi esposa, a veces ibamos todos, pero la niña tenia que ir todos los fines de semana, solíamos o mi esposa o yo si no podíamos ir al pueblo subirla al autobús, apenas hay una hora de trayecto, y recogerla uno de sus abuelos, allí en el pueblo, eso hice ese viernes, deseábamos pasar el fin de semana solos, no me refiero a sexo sino divertirnos descansar de trabajo y niña.
Recogimos a rita y nos fuimos a cenar, de ahí a un bar de copas, hablamos de todo, entre ello el sexo, mi esposa le había dicho mil veces, como era yo en la cama, ante mi, desde hacia muchos años y desde siempre decía vamos a tenernos que acostar las dos, para que se quedé este tranquilo por una vez, yo me lo tomaba siempre a broma lo había escuchado miles de veces, terminamos la noche en casa, un adosado, los tres, algo bebidos, hablando Rita de su suerte con los hombres, sentados mi esposa y yo en el sofá, Rita en un enorme sillón, en el salón, el tema pasó de nuevo al sexo y abordamos un tema sobretodo ellas dos, los trios, mi esposa dijo pues yo para un trio al menos con dos hombres no me iria ya este dirigiéndose a mi me deja mas que cansada como para estar con otro mas, Rita dijo yo tampoco ante me lo montaba con una chica, entonces, me dijeron y tu te lo montarias con otro chico y yo por ejemplo, decía mi esposa, pero ambos también juntos, dije, no ellas comenzaron a decir ves los hombres si quieren ver mujeres acostarse pero entre ellos no, pues a nosotras nos gusta verlo, también, entonces, le dije es que es distinto, el hombre en el sexo, es el exponente de la agresividad, al menos para mi, es decir dos hombres juntos para mi tendría que ser un sexo agresivo, para poderme excitar creo yo mientras que las mujeres, buscais algo mas estimularos el cerebro, un hombre con otro hace lo mismo que con una mujer, metérsela, y joderlo, mientras que dos mujeres, tienen otras sensaciones, y forma de hacerlo las dos, mi esposa y rita escuchaban mi punto de vista, mientras bebían,proseguí, si yo me lo montara con dos mujeres, seria una parte mas, no creo en eso de machitos con dos hembras como si fueran objetos, entonces mi esposa dijo nunca me lo he montado con una mujer, pero tampoco se si la rechazaría sin embargo tu ya rechazas, a un tio, no lo he rechazado dije, simplemente he dicho que seria un sexo agresivo, incapaz de besos caricias ni nada de eso, creo que el hombre es mas animal, entonces Rita dijo, yo se lo que quieres decir, yo lo he hecho con un hombre, no me he corrido sin embargo, he quedado contenta, sin embargo el hombre tiene que correrse, por cojones, no sabe de follar sin haber orgasmo, lo pensé y le dije si mas o menos entonces, mi esposa se levanto, cogio a Rita y la rodeo con el brazo por la cintura las dos frente a mi, diciendo riendo, esto no lo harias con un hombre, rei diciendo no, ni cogerle la mano como hago yo dije que va, Rita le cogio una nalga a mi esposa, apretándola y dijo, riendo menos esto, entonces se dieron un pico, las dos, se lo habían dado mil veces, Rita me dijo y un pico menos aun, serias ya maricon maricon, las dos me estaban ahora tomando el pelo, mi esposa dijo que tiene que ver un pico, con esto, no se quien se sorprendio mas Rita o yo, la volvió sin esperarla rodeándola de nuevo por la cintura pegándola contra si, la beso de verdad, Rita primero quedo con los brazos caidos sin rechazarla pero apenas unos segundos la abrazó, a sido el momento, mas intenso, de mi vida.
Quedé allí mirando, al menos se estuvieron besando dos minutos, sus manos pasaban de sus cinturas a sus nalgas, las dos llevaban vestidos, sus manos terminaron por dentro del vestido, mi esposa tenia las nalgas al aire las manos de Rita las acariciaba, comprendí que aquello no iba a parar.
de los relatos que leo aquí, imagino que todos hubieran salido con sus grandes pollas a decir aquí estoy yo, no lo hice, quedé petrificado, fascinado, quería congelar aquel momento tan fascinante para mi, ellas parecieron comprender, saber que eran las protagonistas, nuestro salón es grande con una enorme alfombra, hacia calor, allí y mas en esos momentos, se dejaron de besar, se desnudaron dejándose ambas la ropa interior, se arrodillaron en la alfombra, comenzando a besarse de nuevo, mi esposa, me miró, prosiguió, yo seguía vestido mi polla dura, pero no quería entrometerme deseaba, verla a las dos, Rita, le desabrocho el sujetador se habían visto mil veces desnudas,pero en esos momentos era de otra manera, mi esposa quedo estirada en la alfombra Rita le chupaba las tetas se las mordia, suavemente, su mano, paseaba por las braguitas sin quitarlas muy suave, mi esposa, comenzó a gemir, levanto su cabeza y volvieron a besarse intensamente, la mano de mi esposa desabrocho, el sujetador de Rita, sus tetas redondas preciosas, quedaron sobre la boca de mi esposa rita estaba a 4 patas encima de mi esposa, comenzó a comerle los pezones, las dos solo eran silencio, en palabras solo gemidos, entonces, Rita se volvió, quedando en un 69 las dos ambs con braguitas, me levante, colocándome ahora en el sillón mi polla me la acomode para me molestara menos, juro jamas había visto dos mujeres juntas, estaba muy excitado pero, deseaba seguir viendo mas que actuar, era como perder algo único por un polvo, quedé frente a Rita a algo mas de un metro su cabeza entre las peirnas de mi esposa, pronto esta comenzó a gemir a contorsionarse, mi esposa tuvo uno de sus orgasmos atroces, incapaz de contenerse grito, gimio se contorsiono.
Mi esposa quedó muy quieta, Rita le quito las bragas, ya alzada la cabeza, acaricio sus muslos no su sexo, este se veía brillante, rosado fuerte, supe estaba blando por la corrida, Rita me miro, supe que pasaba mi esposa estaba en esos momentos, incapaz de nada, al menos en 15 minutos y volveria de nuevo pero el próximo seria tan bestial como este y se desmayaría o caería rendida.
Me quite el pantalón mientras Rita acariciaba, los muslos de mi esposa esta solo respiraba fuerte pero normal, mi polla apareció y rita gateo hasta mi, la agarro con la mano unos instantes y se la metio en la boca, me quite la camisa, quedando desnudo totalmente, la deje chuparla no mas de dos minutos, me levante impidiéndole se moviera, termine colocándome tras ella, separe suavemente su braguita su sexo estaba mojadisimo entre la excitación y la saliva de mi esposa, como sus braguitas, pasee mi polla por su coño, lubricándose esta con sus jugos, Rita gemia y gemia, se la metí suavemente sin pausa lentamente pero sin parar, meintas le entraba ella emitia un gemido largo de placer, hasta que mis huevos choco con su vulva, no me movi, la tuve pegada a mi sin moverme ella comenzó a moverse suavemente, su culo, precioso en mis manos, se corrió como una loca, fui a darle mas rápido como le gusta a mi esposa pero rita me dijo no entre gemidos no lento muy lento, entonces paré y me dijo entre gemidos quédate asi por favor casi suplicando, ella se movio de nuevo grito como mi esposa, entonces, cuando se corrió, casi rápidamente aunque sin sacármela me dijo ten cuidado por favor podría quedarme embarazada, yo no me movia acariciaba su espalda, sus nalgas, cuando sentí un movimiento detrás de mi y las manos, desde atrás en mi pecho, mi esposa se había recuperado me acariciaba el pecho.
Se volvió, me beso, mientras, que Rita, que esperaba me corriera al moverse lentamente de nuevo estaba empezando a gemir, en realidad estaba sorprendida por no haberme corrido aun se movia lentamente hasta que excitadísima ella sola se quito de mi se sentó en el sillón le quite las bragas, me dijo métemela pero por favor, ya lo sabes, esta vez mis manos en sus tetas le dije tranquila cariño, se la metí, y me movi lentamente, sus piernas alrededor de mi acaricie su vientre sus pocos vellos suaves, del coño, sus preciosas tetas, mi esposa se coloco a mi lado, su mano acariciaba su cara su teta junto a mi, Rita no pudo soportar mas aquellas caricias empezó con un ay imparable, transmitia el palcer que estaba ecibiendo era inmenso verle la cara como se le desencajaba sin dejar de decir ese ay hasta que se corrió, fue algo apasionante, su sexo interiormente parecía querer pegarse a mi polla, al correrse cuando tuvo las contracciones mi esposa acariciaba su pecho entonces pego su cara a la de ella besando sus mejillas le decía eso es cariño me gusta escucharte de esta forma, eso es, mientras rita solo podía gritar sus manos se pegaron a la cabeza de mi esposa mis manos acariciaban la espalda de mi esposa sin dejar de moverme muy lentamente, calculando a mi vez no correrme, su cuerpo quedo interte entre mi esposa y el mio, sentada, saque mi polla estaba casi para explotar, quede allí de rodillas mi rabo, durísimo encharcado de jugos, pero mi mano estaba en las nalgas de mi esposa, pero esta se volvió, se coloco a 4 patas tragándose mi polla, entonces, Rita, apenas unos segundos después, se arrodillo junto a mi esposa comiéndome ambas la polla, comencé a gritar, de gusto, Rita agarro mi polla con su mano sin dejar de comérmela, cuando fui a explotar la saco fuera de su boca, y se rego con mi leche y rego a mi esposa, mis piernas me temblaron de la fuerza del orgasmo.
Fuimos a cuarto de baño, tenemos una bañera en forma de concha con jacuzzi, y nos metimos los tres, la noche iba a ser largar, pero esta primera vez, siempre, quedará en mi mente.
Estamos, así desde finales de este verano, hemos hecho algunas locuras los tres fuera de casa, como ir a un pub liberal o montárnoslo en la playa de noche, si os interesa otro dia relataré sobretodo cuando fuimos a un pub liberal los tres, por curiosidad y nos lo montamos, siendo observados por otra pareja con la condición de no meterse ellos solo mirar, fue un morbazo.
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