Reencuentro de exalumnos caliente
Relaciones inconclusas, amigos con derechos y experiencias nuevas con amantes inucitados..
Esto es una anécdota de una noche muy especial de las muchas experiencias sexuales que he tenido.
Y esto fue en la reunión de generación de excompañeros y amigos de la prepa.
Después de varios años volví a encontrarme con Alejandro, un ex… con el que había tenido un romance fugaz que terminó abruptamente cuando él se mudó a otra ciudad para aprovechar una oportunidad laboral, dejando todo atrás, incluyéndome a mí.
Ahora nos volvíamos a encontrar tan solo unas horas, así que quise que se llevará un recuerdo inolvidable de mi parte, algo que en el poco tiempo estuvimos juntos, no fue posible y fue que nunca tuvimos relaciones íntimas, y ahora no dejaría pasar otra vez la oportunidad.
Después que se fue intentamos una relación a distancia, que obviamente no funcionó y terminamos por continuar con nuestras vidas cada uno por su lado, sabía que se había casado y tenía hijos, y yo me había convertido en una mujer sin compromisos, totalmente independiente, disfrutando de su soltería al máximo.
Así que esa noche nos reencontramos y convivimos junto con otros amigos, recordando viejos tiempos y anécdotas pasadas, discretamente le pedí a Alejandro que me acompañara a buscar a alguien de la administración.
La oficina estaba sola al fondo del salón en el segundo piso, yo sabía perfectamente que no había nadie
porque ya conocía previamente ese lugar y sabía que había una sala dónde podíamos estar sin problemas en total privacidad.
¿Todo estaba apagado, había poca luz adónde vamos? Me preguntó Alejandro. Quería estar en privado contigo, le dije.
Nos sentamos en la sala y platicamos, hasta que entramos en el tema de lo que había quedado entre nosotros, sin más lo besé y él correspondió a mis atenciones.
Comenzamos a acariciarnos mutuamente, sin dejar de besarnos.
Mientras él tenía sus manos debajo de mi falda, acariciando mis piernas, poco a poco me recostó sin dejar de besar y recorrer con sus manos mi cuerpo.
Hábilmente, desabroche su pantalón para sacar su miembro y le dije que se levantara mientras yo quedaba sentada y él parado frente a mí, comencé a masturbarlo. Entonces me puse de rodillas para meter su miembro en mi boca, mientras él me sujetaba de mi cabeza.
Chupé con placer todo su miembro cada vez más rápido y más profundo.
Después de varios años y varios amantes me había vuelto una verdadera experta chupando vergas.
Alejandro lo tenía de buen tamaño y estaba completamente excitado, por la manera que se lo chupaba, mientras él me observaba introduciendo su verga completamente en mi boca.
Chupaba con ansias esperando que me llene la boca de su semen y así lo hizo, tragué hasta la última gota de su espesa leche.
Aun con ganas de seguir cogiendo, me monté en sus piernas, y continuamos besándonos, mientras Alejandro bajaba mi vestido descubriendo mis pechos para chuparlos y morder mis pezones.
Entonces que me dijo que quería cogerme.
Ambos nos levantamos y Alejandro me volteó, poniéndome sobre la pared y bajó mi tanga hasta las rodillas.
Se colocó detrás de mí, levantó mi falda para descubrir mi trasero y colocó su miembro entre mis nalgas.
Y yo con mi mano, guíe su rica verga a la entrada de mi vagina, así me penetro y comenzó a cogerme con fuerza, haciéndome gozar por varios minutos, recibí con placer sus embestidas entrando y saliendo haciéndome gemir de placer deliciosamente.
Entonces Alejandro me preguntó: ¿te lo meto por el culo?
¡Sí! ¡Por dónde tú quieras! Respondí de inmediato.
En un movimiento rápido, su miembro habría mi culo con poca resistencia, debido a la gran lubricación que tenía en mi cuerpo.
Por varios minutos me siguió cogiendo contra la pared, hasta que sus movimientos fueron más fuertes, hasta sentir cómo descargaba toda su leche caliente dentro de mi culo.
Wow, ¡qué rica estas de lo que me perdí contigo!, me dijo, mientras recuperábamos el aliento, mientras él seguía con su miembro aún metido dentro de mí.
¿Te gustó? Le pregunté a Alejandro.
¡Claro que sí!
¡Eres una mujer muy sensual y atrevida!
Fue su respuesta mientras nos acomodamos la ropa y volvimos al salón con discreción.
Una hora más tarde, Alejandro empezó a despedirse, pues temía perder su autobús de regreso.
Mientras él se despedía, se me ocurrió pedirle a otro de mis amigos, Luis que tenía auto, que me hiciera el favor llevarnos a la terminal para dejar a Alejandro y luego regresar de nuevo a la reunión, cuando se lo pedí Luis aceptó y los tres salimos en su auto unos minutos después me despedí de Alejandro en la terminal y esa fue la última vez que supe de él.
Ya de regreso con Luis, le pregunté que cómo le agradecería el favor.
¿Ya sabes cómo?
Me dijo.
Luis y yo éramos amigos, pero al contrario que con Alejandro.
En el pasado habíamos tenido varias experiencias íntimas, aunque lo nuestro nunca había funcionado.
En serio, ¡qué quieres! Le cuestioné.
Y Luis se quedó en completo silencio con una sonrisa pícara.
¡Está bien! ¿Tú me dices cuándo?
Fue mi respuesta.
Rápidamente, se estacionó en una calle solitaria y me dijo.
¡Ahora mismo quiero hacerlo aquí!
Se desabrochó el pantalón y sacó su verga para que se lo chupará ahí.
Por unos segundos dudé y no sabía qué tenía que decir o hacer, y entonces, al ver su miembro bien erecto, lo tomé con la mano y comencé a masturbarlo, me acomodé para agacharme y meterlo en mi boca para chupársela, mientras él me manoseaba tocando mis pechos y el trasero.
Después de ponerlo bien caliente con mi boca me pidió, que nos pasamos al asiento de atrás, para estar más cómodos me acosté en el asiento, mientras él se acomodaba entré mis piernas, se bajó el pantalón por completo, me quitó mi tanga, se acomodó entre mis piernas las separó y comenzó a hacerme sexo oral recorriendo mi vagina de arriba abajo sin imaginar que Alejandro se había venido dentro de mí unos minutos antes eso me excitó mucho y entonces comenzó a cogerme, suavemente mientras nos besábamos, sin dejar de penetrarme Luis me dijo.
¡Estás muy rica y bien lubricada!
Pensando que yo estaba mojada y emocionada por estar con él.
Estuvimos cogiendo por varios minutos. Mientras me cogía, yo aún estaba pensando en la rica cogida que me dio Alejandro y entonces que se viene dentro de mi vagina cuando yo apenas estaba empezando a gozar.
¡Aún no chiquita! Me dijo Luis.
También quiero, por atrás simplemente me di la vuelta y su miembro me penetró por el culo haciéndome gemir hasta que me vine en un gran orgasmo mientras Luis me dejó otra descarga de leche dentro.
Cuando me disponía a volver al asiento delantero, le pedí que me diera mi tanga.
Pero no lo hizo y se las guardó en la bolsa, diciéndome que las conservaría como un recuerdo.
No tuve otra opción, así que me resigné y tuve que terminar la noche sin llevar ropa interior.
Regresamos a la reunión y cada quien volvió con sus respectivos asuntos y amigos.
Cuando se terminó el evento, pedí un taxi para regresar a casa y después de un rato, me había despedido de todos hasta que no quedó nadie y mi taxi no había aparecido.
Era la última, estaba sola y desesperada por no conseguir transporte para regresar.
Y justo en ese momento, una camioneta con los chicos del servicio del salón, se ofreció a llevarme con la condición de que teníamos que hacer varias paradas para ir dejando a cada uno de sus compañeros de trabajo.
Acepté y subí a la camioneta, después de dejar a varios, al final era yo solá y tres chicos, con él relajó que traíamos, nunca recordé que no traía tanga y ellos ya se habían dado cuenta y no lo habían mencionado, hasta que uno de ellos me dijo que estaba muy hermosa y tenía un rico cuerpo demasiado tentador y que nunca había conocido a una chica tan liberal como yo.
¿Por qué lo dices? Le pregunté.
¡Porque no traes nada debajo del vestido! Me respondió.
En ese momento me dio mucha pena, pero decidí seguirle el juego a esa situación.
Es para ver si alguien se da cuenta y me hace feliz.
Lo dije con toda la intención, ya que me sentí muy caliente.
A pesar de que ya me habían cogido dos veces, un orgasmo no era suficiente para mí.
Así que para no perder tiempo, les dije que si querían coger conmigo, se estacionarán en un lugar tranquilo para hacerlo.
Todavía no se estacionaba la camioneta y ya tenía a los dos chicos metiendo mano por todo mi cuerpo.
Cuando por fin se detuvo la camioneta, les pedí que me dejaran quitarme el vestido para no ensuciarlo.
Ya completamente desnuda los tres se apoderaron de mi cuerpo, chupaban mis pechos y me besaban por todos por lados, uno comenzó a hacerme sexo oral mientras los otros dos se quitaban la ropa, ya completamente desnudos, tomé la verga de dos de ellos y comencé a chuparlos alternándome con cada uno, me volví loca de placer chupando sus vergas.
Mientras otro me chupaba la vagina completamente abierta de piernas.
Después de un rato, simplemente levantó mis piernas sobre sus hombros y me penetró y comenzó a cogerme.
Otro me chupaba los pechos y mordía mis pezones, y yo chupaba la verga de uno de ellos.
Entonces uno sugirió montarme en él y así lo hice.
Me monté en él y me penetró por mi vagina, y otro se puso detrás de mí y empezó a cogerme por el culo. Yo movía mis caderas al ritmo de sus embestidas, sintiendo como ambas vergas me penetraban al mismo tiempo.
Era la experiencia más rica que había tenido, pero aún faltaba uno, entonces el tercero me tomó por la cabeza y me metió su verga en la boca y empezó a cogerme así.
El placer de tener tres vergas cogiéndome era lo mejor que me había pasado, así los tres se turnaron, y probaron cada parte de mi cuerpo en cada posición durante más de una hora, los tres se deleitaron con mi cuerpo a su gusto, recibí varias descargas de semen dentro de mi vagina, también en mi culo y mi boca, además de haber tenido varios orgasmos que me hacían sentirme feliz y satisfecha.
Me gustó tanto que me ofrecí para repetir y hacerlo en otra ocasión, pero en un lugar más agradable y cómodo.
Al final ya prácticamente estaba amaneciendo cuando me dejaron en mi casa.
Terminé tan cansada que solo entre a mi habitación y me acosté a dormir.
Y cuando desperté por la tarde, podía ver el semen que me habían embarrado en el cuerpo y la cabeza. Mi cabello estaba completamente pegado con semen secó, ni modo así sucede a veces y más a una chica caliente y puta como yo.
Jess River 💖
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