Un fin de semana movidito (Parte 2)
Lo que parecía un fin de semana sin follar junto a otra pareja, terminó siendo un fin de semana de mucho sexo..
Continúo con otro relato de lo que fue un fin de semana con mucho sexo y cosas nuevas para los cuatro, después de lo sucedido en la noche me despierto, era casi las 7 de la mañana, lo primero que veo es que estábamos prácticamente en la misma posición que nos quedamos dormidos, los cuatro totalmente desnudos, solo que Lucía la mujer de mi amigo Juan se había dado la vuelta y estaba de frente a él, dándome una vista de su gran culo, pasé un rato mirando ese culo que tantas veces quise ver y sólo lo había hecho de forma fugas.
Noto que mi mujer María se mueve y le pregunto si estaba despierta a lo que me responde que sí, Lucía al sentirme hablar se da vuelta y queda boca arriba, dándome una buena vista de sus tetas, y su coño claro, María hace lo mismo y se pone boca arriba, Juan que estaba en mi misma posición se queda mirando las tetas de María y su coño, ya estábamos los cuatro despiertos, totalmente desnudos y hablando como si nada pasara, cosa que me ponía muy caliente, fue Lucía la que comenzó a hablar.
Lucía: Menos mal que ya se despertaron pensé que no lo iban a hacer.
María: Ya yo llevaba un rato despierta lo que estaba esperando a que Marcos se despertara.
Yo: Parece que el más dormilón soy yo jajaja.
Juan: Bueno que hacemos hoy, vamos a salir a dar una vuelta no.
Yo: Por supuesto tendremos que salir, pero alguien quiere decir algo de lo sucedido anoche jajajaja.
María: Que me follaste como nunca jajaja, aunque no le quitaste ojo a Lucía.
Yo: Bueno tú no te quedaste atrás mirando la polla de Juan jajaja.
Lucía: La verdad que a mi me gustó como me follo Juan, pero disfruté mucho viendo como Marcos le clavaba la polla a María, eso me hizo disfrutar más.
Juan: Disfrutabas mirando como Marcos se follaba a María o mirando la polla de Marcos jajaja.
Lucía: La verdad que las dos cosas me gustaron, nunca había visto la polla de otro hombre tan cerca, además se parece mucho a la tuya, son del mismo tamaño creo jajaja.
Yo estaba la verdad impresionado con la naturalidad que estábamos hablando los cuatro como si lo que sucedió lo hubiéramos hecho muchas veces, ya tenía la polla muy dura y no dejaba de mirar el coño de Lucía con unas ganas enormes de follármela, por lo que decidí preguntar por otra cosa pues la conversación solo era de como follamos cada uno con nuestras parejas.
Yo: Bueno Lucía la verdad es que mirándote el coño lo tienes como el de María también, lo que no se si mas apretado o no jajajaja.
Lucía: No sabes si lo tengo mas apretado o no??? Que extraño pues anoche me hiciste una muy buena paja y me metiste mas de un dedo jajaja.
María: Bueno Juan di tú cual de las dos lo tiene mas apretado pues ayer cuando me hiciste la paja que me hiciste me puse tan caliente que perdí la cuenta de cuantos dedos me metiste jajaja.
Juan: Jajaja, la verdad es que no se decir solo se que lo tienes muy caliente y suave jajaja.
Yo: Bueno por lo que veo ustedes nos llevan ventaja a Juan y a mi porque nosotros le hicimos una paja a cada una y después follamos pero faltó la paja a nosotros jajajaja.
María: Si quieren se la hacemos ahora antes de salir y así estamos iguales jajaja.
Yo: Pues no es mala idea con lo caliente que estoy.
María se puso de pie a los pies de la cama dando una muy buena vista de todos su cuerpo, sus tetas y su coño totalmente depilado, me dijo que me pusiera boca arriba, cosa que hice sin dudarlo y se subió a mis piernas con las de ella totalmente abiertas, por lo que dejo su coño totalmente abierto para deleite de todos, cogió mi polla con una mano y comenzó a pajearme.
Lucía: Tu quieres lo mismo Juan.
Juan: Por supuesto.
Por lo que Lucía hizo lo mismo que había hecho mi mujer, se puso con la piernas abiertas sobre las de su marido y comenzó a pajearlo.
Pude ver con detalles el coño abierto de Lucía, pero yo quería hacer un cambio de parejas ya, quería que Lucía me cogiera la polla y ver como María cogía la de Juan, mire las dos pollas y de verdad que eran mas o menos del mismo tamaño unos 18 cm.
Yo: Lucía pero así no vas a poder salir de la duda si tenemos las pollas iguales jajaja.
Lucía: La verdad es que no, además lo justo es que hagamos lo mismo que ustedes anoche, que cada uno pajee al de la otra pareja, que tú crees María.
María: Pues yo creo que es lo justo jajaja.
Así que María me soltó la polla y se puso de pies nuevamente, Lucía por su parte paso de arriba de Juan y se puso con las piernas abiertas sobre las mías, dejando su coño totalmente abierto para que me deleitara mirándolo, María hizo lo mismo sobre Juan dejando su coño totalmente abierto de frente a Juan, no se si me ponía mas caliente el coño de Lucía en frente mío o el ver el de mi mujer de frente a Juan y como se lo miraba.
María: Tienes razón Lucía son casi iguales yo creo que hasta del mismo gordo son las dos pollas, deja que las compare.
María cogió una mano y me cogió la polla y me la empezó a pajera mientras con la otra seguía con la de Juan, me sorprendió ver que mi mujer era todo una puta con una polla en cada mano pero me ponía muy cachondo, en eso Lucía dijo, deja que pruebe yo y quito las manos de María y fue ella la que cogió una polla en cada mano y así nos pajeaba a los dos, en eso María que no dejaba de sorprenderme lo puta que era, dijo:
María: Lucía son casi iguales pero tendrán el mismo sabor jajajaja.
Lucía: Pues vamos a probar.
Las dos se echaron hacia atrás en 4 y cada una se metió una polla en la boca, María se la chupaba a mi amigo y Lucía a mí, ver como chupaban las dos como unas autenticas putas me ponía más cachondo aún.
Yo: Juan creo que ahora son ellas las que van adelante pues nos la están chupando.
Juan: Así es, ahora ellas nos la han chupado.
Lucía: Eso podemos arreglarlo, nos damos la vuelta María.
María: Por supuesto.
Lucía se Puso encima de mí de espaldas, dándome la vista de mi vida, y volvió a chuparme la polla, dejando delante de mi cara ese coño que tanto quería y ese culo perfecto, para que hiciéramos un 69, María por su parte hizo lo mismo, Juan no perdió un instante y comenzó a comerle el coño a mi mujer mientras ella le comía la polla, yo comencé a comerle el coño a María mientras le tocaba y le abría bien el culo, así estuvimos un rato haciendo un 69 yo con la mujer de mi amigo y el con mi mujer.
Fue entonces cuando le pase la lengua por el culo a Lucia que se movió un poco, pero no dejaba de apretar su culo y su coño contra mi cara, después de un rato así Lucía tenía el coño muy mojado y el culo también con lo que le hacía con mi lengua así que probé a meterle un dedo en el culo a ver si le gustaba, sin dejar de comerle el coño le puse un dedo en el culo y empecé a jugar con el hasta que se lo empecé a meter, ella se hecho para adelante como en señal de protesta.
Yo: Que pasa Lucía que no te gusta jajaja.
Lucía: Que no me gusta que jajaja.
Yo: Lo que te estoy haciendo.
Lucía: Claro que me gusta que me comas bien el coño jajajaja.
Yo: No me refiero a eso jajaja
María: Que pasa Lucía te esta haciendo algo malo jajaja.
Lucía: Que me quiere meter un dedo en el culo jajaja.
María: Que tiene de malo, a mi me encanta que Marcos me meta el dedo en el culo y lo que no es el dedo también jajajaja.
La verdad es que a María le encanta que mientras me la follo le meta algún dedo en el culo o mientras le como el coño, lo de follar por el culo folla pero no le gusta tanto.
María: Juan porque no me metes un dedo en el culo que me encanta, hacía Lucía ve que bueno es jajaja.
Juan: Si me lo pides lo hago, no te lo había hecho porque a Lucía no le gusta jajaja, me separo a mirar y veo que Juan le empieza a meter un dedo en el culo a mi mujer, eso se que la vuelve loca y lo demostraba con sus movimientos de cadera.
Yo: Vez Lucía como no es tan malo, prueba para que veas.
Lucía: Esta bien méteme un dedo pero despacio que nunca he dejado que Juan me meta ni un dedo en el culo.
No podía creer lo que estaba escuchando, tenía el Culo de Lucía para mí y al parecer era virgen, comencé a meterle un dedo con mucha saliva, al principio parecía que le incomodaba un poco, pero a medida que pasaba el tiempo se notaba que comenzaba a disfrutar, pues sus movimientos de cadera lo decían, entonces probé a meterle otro y no decía nada, seguía disfrutando y mamándome la polla como toda una puta.
Juan: Marcos ya no aguanto mas quiero follarme a María.
Yo: pues no esperes mas y métesela que lo debe estar deseando.
María: Si Juan clávame la polla ya que no aguanto más.
Lucía: Marcos fóllame tú también que deseo sentir tu polla dentro.
Nos quitamos de abajo y las dejamos así en cuatro como estaban y vi como Juan empezó a penetrar a María, era muy excitante, así que hice lo mismo con Lucía le clave la polla de un golpe, pues tenía el coño muy lubricado, le acariciaba ese culo y se lo abría bien, no podía creer que fuera virgen, echándole saliva y metiéndole dos dedos, para que no dejara de estar dilatado.
Yo: Juan de verdad que nunca le has follado este culo tan rico a Lucía.
Juan: Ella nunca a querido por lo que nunca se lo he follado.
Lucía: Es que creo que me va a doler y por el coño disfruto mucho.
María: Quieres probar un culo Juan, pídele permiso a Marcos y dejo que me la metas en el culo para que goces como goza el cuando me folla el culo.
Yo: Pedirme permiso?? Si tu quieres por mi no hay problema que te folle el culo.
Juan: Pues encantado jajajaja.
Juan saco la polla del coño de María y poco a poco se la fue encajando en el culo hasta que se la tuvo totalmente dentro, después siguió follándola por el culo y disfrutando de ese culo que tiene mi mujer.
María: Vez Lucía no es tan malo, se siente de maravilla.
Lucía: Pues voy a probar, Marcos rómpeme el culo a ver que tal, pero despacio.
Juan: Mira que eres puta Lucía, nunca me has dejado follarte el culo y vas a dejar que Marcos lo haga jajajaja.
Saque mi polla del coño de Lucía y se la puse en el culo, lo tenía bien dilatado por mis dedos y bien lleno de saliva, le metí la cabeza de la polla y ella ni se movía empuje un poco mas y esperé un rato para que se relajara, ella apretaba el culo hasta que sentí que volvió a relajarse para dar paso, se la metí completa de un golpe y me quede sin moverme, ella se vio que le dolió porque pegó la cara a la cama y mordió el colchón para no gritar, estuve un rato sin moverme y con toda la polla en el culo de Lucía hasta que comencé a follárselo, primero despacio y después ya bien fuerte, se ve que ya estaba disfrutando, María y Juan por su parte no paraban, no podía imaginar que iba a estar follando ese culo y que era virgen.
Juan: Marcos ya no puedo mas creo que me voy a correr dentro del culo de tu mujer.
María: Si Juan quiero que me eches toda la leche en el culo, quiero sentirla.
Yo no daba crédito a escuchar a mi mujer diciendo eso delante de mí, vi como Juan se la encajaba hasta el fondo y se corría dentro del culo de mi mujer.
Yo: Lucía yo también quiero acabar, quieres que te llene el culo de leche.
Lucía: Si lléname el culo de leche, ya me lo rompiste así que ahora quiero sentir toda tu leche dentro.
Se la encaje hasta el fondo y le eche como tres chorros de leche que le llenaron todo el culo, las dos se acostaron hacia delante y nosotros sobre ellas, sin sacar yo la polla del culo de Lucía, ni Juan del de María, hasta que nuestras pollas perdieron la erección y salieron solas.
Busqué con mi boca los labios de Lucía y comencé a besarla, lo mismo hizo Juan con mi mujer María. Nos separamos y comenzamos a reírnos como unos niños, nos pusimos de pie los cuatro y Juan fue para el baño, nos quedamos los tres hablando de adonde íbamos a ir, me senté en el borde de la cama y ellas hicieron lo mismo, una a cada lado, las abracé a las dos y giré la cabeza hacia María y comencé a besarla, luego la solté e hice lo mismo con Lucía poco a poco fui acercando sus dos caras a mi y cambiaba una boca por otra, hasta que tuve bien cerca sus dos bocas y comenzamos a besarnos los tres, las dos metían su lengua en mi boca y sentía con mi lengua como se cruzaban las tres lenguas, fue entonces que me eché un poco hacia atrás aguantando sus dos cabezas para que no se separaran, ellas seguían besándose con mucho deseo, miré en dirección al baño y vi a Juan de pie disfrutando la escena lésbica que nos estaban regalando nuestras dos mujeres besándose.
Bueno hasta aquí este relato, ya seguiré en otro, contando como siguió el fin de semana y las sorpresas que me dio, espero lo disfruten, como yo mientras les cuento.
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