ALICIA Y SUS AMIGOS 7
pasamos el verano puteanto.
Pasamos el verano puteando mucho Mercedes y yo, como mis padres se fueron dos meses de vacaciones nosotras nos quedamos en casa haciendo nuestras cosas de putitas,
Nos compramos unas cuantas prendas de lencería erotica para que los hombres cuando llegasen se entretuviesen un rato, la verdad es que acabamos en pelotas rápidamente. Lo habitual era que los días de diario recibíamos unos cinco o seis hombres cada una, los que Kevin nos traía, la cosa estaba en que primero le chupábamos la polla un poco hasta que se ponía bien dura, alguno habia que se corría en nuestra boca antes de tiempo y luego pues ya nos penetraban por donde ellos quisiesen, algunas veces de dos en en dos, uno por delante y otro por detrás, también alguna vez nos habían penetrado a las dos analmente dos a la vez, pues si, me caben dos pollas en el culo. Los fines de semana la cosa se animaba bastante, de tal manera que nos podían follar alrededor de treinta hombres a cada una, yo calculo que en los dos meses pude haber follado con al menos quinientos hombres, estaba encantada.
Esto no quiere decir que algún día de la semana no le dedicara algo de tiempo a nuestro perros, también tienen derecho.
Ya a primeros de septiembre me dijo Kevin que muchos hombres preguntaban por Sofia y Leonor, las dos niñas, pero sobre todo por Sofia. Ya habia cumplido los nueve años y estaba igual que con ocho por mucho que ella dijese que se sentía adulta, entonces tendría mas o menos un metro treinta de estatura, nada de vello púbico y nada de nada de tetas, eso si un culito respingón muy apetecible y según dice ella muy tragón.
Las llame en ese momento y les dije lo que Kevin me habia dicho, se pusieron como locas, dijo Sofia que lo primero que quería es que Kevin se la follase varias veces. La semana siguiente no pudo ser, mis padres se quedaron en casa. Aquel finde estaba yo especialmente caliente, así que como mis padres estaban en la planta de abajo de la casa yo me lleve unos de los pastores belgas, precioso perro y muy bien dotado, me dio mucho morbo follar con el perro estando mis padres en casa, le dije a Mercedes que vigilara por si acaso, pero la verdad es que si estaba penetraba y anudada poco podría hacer, me monto y me penetro enseguida y me anudo como era de esperar, cuando empecé a tener los orgasmos correspondiente me tuve que tapar la boca para no gritar, yo creo que el riesgo habia aumentado mi placer.
A la semana siguiente se vinieron las niñas, llegaron el viernes por la tarde, poco después de que mis padres se fuesen como siempre, cenamos las cuatro juntas y estuvimos hablando mucho rato, ya sabíamos que el sábado iba a ser intenso, a la niña se la iban a follar de lo lindo, pero era lo que ella quería, follar con adultos.
Nos fuimos todas a la cama y como siempre Sofia se acostó a mi lado junto a su osito de peluche, estábamos todas desnudas, nos gusta dormir así, parece que los pijamas de unicornio habían desaparecido.
Estuve charlando unos minutos con la niña y de pronto me beso en los labios, ya me habia dicho que quería tener sexo conmigo, fuero unos piquitos muy húmedos y agradables, me deje hacer, al oso que aun lo tenia en su regazo le dijo «osito no mires que mami va a hacer guarrerias», y entonces me beso en los labios con mucha pasión metiendo su lengua y enroscándose con la mía, fue bajando a mis tetas, entonces ya las tenia bien gorditas y duras y se relamío con ellas, siguió a mi vientre y también se entretuvo un rato con mi ombligo, me gusto eso un montón, me abrió las piernas y me besaba y mordía la parte interior de mis muslos, estaba ya loca por que me comiese el coño, plegó mis piernas hacia mi pecho y me lamia el ojete que tenia vida propia se movía solo del gusto que tenia , al final lo hizo, hundió su lengua en mi chocho y comencé a tener orgasmitos uno de tras de otro, se giro y me puso su coño en la boca el cual me comí con absoluta devoción, el orgasmos que nos sobrevino a las dos fue colosal, cuando nos dimos cuanta estaban Leonor y Mercedes sentadas en la cama mirándonos.
Entre el sábado y el domingo llegaron un montón de hombres que nos follaron a todas sin parar, de echo pasamos la noche del sábado así hasta que empezó a clarear, y el domingo también llegaron unos cuantos mas, Creo recordar que a la que mas se follaron fue a Sofia, nos dijo que aunque habia perdido la cuenta fueron unos cuarenta los que se la follaron, las demás no andábamos muy lejos de eso.
Ya con el curso empezado bajamos el ritmo bastante, pero unos cuantos polvos nos caían a todas los fines de semana.
Como ya llegaba el fin del trimestre y Leonor no mejoraba con la física y las matemáticas, se venia a mi casa un día a la semana a que le explicara estas materias que se me daban bien.
Fue un día de diciembre muy soleado cuando decidimos descansar un rato y nos salimos a la terraza de detrás de la casa. Tumbado al sol estaba uno de los perros dormitando y nosotras nos sentamos a tomar un refresco, ella llevaba una blusa y una falda plisada mas bien corta, hasta aquí nada fuera de lo común. Tenia un pie en el suelo y el otro apoyado en el filo de la silla, desde yo estaba le veía las bragas perfectamente, seguíamos con nuestra charla cuando el perro se levanto y metió su hocico entre sus piernas y comenzó a lamer su chocho, ella le daba palmadas en la cabeza para que se quitase y el pero entendió que le gustaba, empezó ella con los ay madre mía y ay por dios y que me voy a correr y se corrío sin remisión, ya me atreví y le dije déjate, dale facilidades, el perro seguía dale que te pego con su lengua, así que me levante quite al perro y metí mis manos bajo su falda y le quite las bragas, le coloque cada una de sus piernas en los reposabrazos y le dije que adelantara el culete un poco, le di unas palmadas un el chocho y el perro acudió de nuevo, tuvo varios orgasmos, algunos pequeños y otro grandes, al final me dijo que no podía mas y quite al perro que tenia toda la polla fuera, esta loco por meter.
Le conté que yo la hacia con frecuencia y que también me montaba y que ya puestos debería hacerlo y nos dejar al pobre animal empalmado, al final la convencí para que se dejara montar, la asesore con lo que yo sabia.
Le preste una camiseta y se la anude a la cintura, el perro salto sobre ella, la sujeto bien por las caderas y comenzó a culear hasta que oí un ay, dijo, me la ha metido en el culo y me estoy corriendo, la anudo enseguida y estuvo encima de ella casi media hora, tuvo numerosos orgasmos hasta que el perro con el plof característico se bajo de ella.
No habían pasado cinco minutos cuando sonó el interfono de la cancela exterior, eran los padres, así que se vistió corriendo y se fue tal cual, sin las bragas que se quedaron en la terraza, la acompañe, las dos con caras de inocentes, salude a los padres y a Sofia que estaba sentada detrás, cuando entro Leonor Sofía le dijo, «hueles a perro», nos miramos y nos quedamos un tanto perplejas.
Lógicamente no tenia intención de contarle nada a su hermana menor pero las cosas cogieron el camino que le vino bien al destino, fue a ducharse Leonor y la avispada de la hermana se dio cuenta de que tenia la espalda y el culo lleno de pelos de perro y que por sus muslos corría un reguero de semen perruno, al final se lo tuvo que contar, con lo pesada que se pone.
Me llamo Sofia al rato ya con toda la información y lo primero que me dijo fue «mira que eres puta prima», no contarme a mi una cosa así con lo que a mi me gusta experimentar y lo bien que me caen tus cuatro perros, el próximo día que vaya quiero que me follen todos los perros, le tapare los ojos a mi osito, no quiero que vea eso, se puede deprimir, así fue como me lo dijo.
Esto ya os lo cuento otro día.
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