Aventuras de una profe
Una profesora nos cuenta oscuros secretos que suceden en un colegio de solo niñas.
Cuenta esta pequeña saga la profesora Amanda.
Hola a todos, me llamo Amanda, tengo 34 años, soy docente de un colegio femenino ubicado en el centro de la ciudad, es un colegio donde se imparte enseñanza a niñas y jovencitas desde el kinder hasta el grado 11, yo soy una mujer casada sin hijos ya que mi esposo es estéril, me considero una mujer de aspecto normal, soy de piel morena, bronceada por el sol ya que mi marido todos los años me lleva de vacaciones, cabello negro y rizado, ojos café, mirada intrigante ya casi que seductora, senos grandes, cintura media es decir, no tan gorda y un trasero relativamente grande, mido 1,58 de estatura, lo cual es bajita, soy licenciada en matemáticas y en pedagogía escolar avanzada así que tengo alumnas tanto en la primaria como en la secundaria, y mi primera historia sucede con una de mis alumnas de secundaria, la llamaré Lina, ella es una nena de noveno grado, tiene 13 años, cabello rubio y liso, tenía la costumbre de traerlo peinado en dos coletas, ojos verdes, mirada inocente, piel blanca, casi de mi misma estatura, senitos pequeños pero ya con asomo de desarrollarse, flaquita pero con un culito que la jardinera escondía digamos que bien, Lina era una niña inteligente, pero no tanto en mi materia, a ella se le dificultaba tanto que hasta corría el riesgo de perder la materia. Yo tampoco se la iba a dejar fácil, pero se me iba ocurriendo una idea muy pervertida, como yo me la paso sola en casa ya que mi marido mantiene viajando, quería aprovecharme de ella y pues, intentar llevarla a la cama a cambio de la nota, lo sé es muy feo pero…. En el fondo me gustan mucho las mujeres y más si son así chiquillas e inocentes así que entendí que era mi oportunidad.
Eran los exámenes finales de la materia, Lina por promedio tendría que pasar la última evaluación con la máxima nota para que el promedio le diera para pasar, la notaba nerviosa, ese exámen era la semana siguiente así que antes de sonar el timbre ordené:
– Bueno, ahora después de clases, la señorita Nuñez (apellido de Lina) se queda tengo que hablar con usted una cosa, los demás vayan estudiando ya que la prueba va a ser fuerte.
Terminaba de hablar y sonaba el timbre, lentamente todos los alumnos abandonaban el salón de clases camino a sus casas, solo Lina quedaba inmóvil, esperando a ver qué decía, se veía en su inocencia su carita de angustia, al quedar el salón solo con nosotras, comencé a hablar:
A: señorita Nuñez, veo que no logras los resultados requeridos para pasar mi materia, dependes únicamente de esta prueba sacar la nota mas alta para poder pasar, veo muy complicada tu situación.
L: Profe, la verdad me esfuerzo mucho pero hay cosas que realmente no entiendo y hay veces que por más que me las explique no las logro entender, adicional a ello pues yo participo profe.
A: Eso es verdad, a pesar de todo eres juiciosa en mi clase, y quiero ayudarte, tengo esta oferta, tu vas a mi casa todas las tardes y te daría asesorías personalizadas para que entiendas mejor mi materia y puedas pasar, esa es mi oferta tu dirás o estudias por tu cuenta.
L: uhhmm profe, la oferta es llamativa, no lo sé, lo puedo pensar?
A: Tienes que darme una respuesta ahora, porque si es afirmativa esta misma tarde comenzamos.
L: Profe, está bien acepto su propuesta.
A: A tu teléfono envié mi dirección y nos vemos en dos horas, así que almuerza, descansa que esta tarde comenzamos a trabajar.
L: Gracias profe.
Lina salía con otro semblante, semblante de esperanza, lo que no sabía era que era mi plan de soborno, ella sería mía y yo le dejaba el exámen para que lo estudiara, memorizara y pasara.
Eran las tres de la tarde y estaba en mi casa en un sector medio de la ciudad, mi marido estaba en viaje de negocios este resto de semana así que tendría casa sola, a ratos sentía que mi conciencia hablaba pero decidí que era mi oportunidad, yo me había dejado mi uniforme pero sin mi ropa interior, mi blusa la dejé escotada para mi futura amante.
Instantes después llega un carro, era Lina, con una blusita blanca, sin brasier, un jean suelto, y unos tenis, y sus coletas de siempre, parecía una niña rebelde, estaba por mojarme. Su madre la había traído y me dijo:
ML: profesora gracias por lo que está haciendo por mi hija, de verdad, maestros como ustedes no hay casi.
A: Señora, no se preocupe, es lo menos que puedo hacer por Lina, ella es juiciosa en mi clase y por eso decidí ayudarla.
ML: gracias profe, hija, juiciosa y ponle cuidado a la profe y estudia aprovecha esta oportunidad.
L: Si mami, lo haré.
Luego la mamá de Lina se fué, invité a pasar a Lina a la sala de estudio de mi casa, sala que utilizo para calificar trabajos y evaluaciones y preparar mis clases. Comenzamos las tutorías, y le explicaba una y otra vez y nada que me lograba entender, tampoco yo sabía más métodos de como explicar y ella me dijo:
L: Profe, no entiendo nada, no sé que hacer…..
A: Tranquila Lina, te voy a ofrecer un trato, pero ésto no lo puedes contar a nadie, ni a tu mamá ni a tu papá ni a tus amigas a nadie vale?
L: Pues profe, no me queda otra que aceptar claro que sí.
A: pues como verás (le decía mientras le acariciaba la mejilla), me pareces una nena muy linda, así que si haces y te dejas hacer lo que yo quiera (ahí pasaba a acariciar su cintura), yo te paso la hoja de la prueba para que la estudies y te daré una ventaja sorpresa está bien?.
Lina, absorta por la propuesta que le hice, asintió y de ahí en adelante tomé el control, comencé a acariciar su cintura, mientras pasaba mi nariz por su cuello, pasé también mis labios, ella cerraba sus ojos, dejándose llevar, luego le quité su blusita, mostrándome unas teticas en crecimiento, la cual quedé absorta, lentamente me agaché para comenzar a chuparlas, ella miraba como yo chupaba sus teticas, y me prendía su mirada, luego me levanté, tomé la mano de ella y fuimos a la habitación matrimonial, ella me miraba con una inocente curiosidad, cuando llegamos a la habitación la tomé del mentón y le robé un beso, un beso con lujuria, ella llevaba mi ritmo y acariciaba mi cintura, yo desabotone el pantalón de ella, y fue cayendo, mostrándome unos cacheteros rosados, combinaban bastante con su piel blanca, luego se los quité y la acosté en mi cama, ahí me volví una fiera total, la besaba con una lujuria increíble, chupaba sus teticas mientras con mi mano acariciaba su vientre y su vagina, que por cierto era rosadita y bien estrechita, lina respiraba pesado, y salían unos gimoteos, le gustaba lo que estaba haciendo, luego me levanté y haciendo un baile me quité mi blusa, mostrando unos senos grandes, morenos y empitonados, Lina preguntó:
L: profe, mis senos pueden llegar a ser grandes como los tuyos?
A: si claro linda, hasta ahora te estás desarrollando y vas a ser más hermosa que ahora.
Luego, mientras yo pasaba mis manos por sus piernas, ella instintivamente tocaba mis tetas, luego me aparté e hice poner en cuatro a Lina, su vagina y culito, que se veía divino iban a ser mios, así que fui y comencé a lamer desde la vagina hasta el culito y viceversa, Lina gemía ya y cuando puse uno de mis dedos en su vagina replicó:
L: profe, eso me va a doler?
A: Tranquila linda, al principio te va a doler lo que te voy a hacerte, pero después vas a querer más y tú me buscarás.
L: bueno profe.
Luego metí mi dedo en la vagina, Lina estaba dando su grito de dolor, dejé mi dedo quieto en su vagina, ella del dolor se movía pero eso hacía que mi dedo se hundiera más, llegó el momento en que sentí que ella ya se había acostumbrado y comencé a desearla, ya el quejido de dolor se transformaba en gemido de placer, con el paso de los minutos, mis dedeadas eran mas fuertes.
L: ahh ahh si profe no pare por favor sigue sigue ahh ahhh
Luego aproveché su éxtasis y metí mi dedo de enseguida en su culo, su grito se escuchó fuerte, pero también se acomodó hasta que se acostumbró al invasor, movía los dos dedos de mi misma mano en su vagina y su culo, lina seguía gimiendo
L: uhhmm ahh ahh ahh dame duro profe dame duro ahh me encanta.
A: que puta saliste niña, te voy a dar duro para que lo sientas de verdad.
Acto seguido con mi otra mano, agarré sus dos coletas y las jalaba, dominaba totalmente a placer a Lina.
L: ayy ahh ahh ahh dale profe dale creo que me orino ahh ahh ahh ahh uhh uhh.
Las masturbadas eran mas fuertes todavía, plap plap plap sonaban hasta que de un gemido fuerte y de un movimiento casi epiléptico, Lina llegaba a su orgasmo. Cuando sentí sus líquidos pasar por mis dedos, los saqué violentamente, sonando como si destapara una campaña. Ella acostada boca abajo me decía:
L: profe, eso estuvo rico, me encantó.
A: me encanta que te haya gustado pero no hemos terminado.
L: como así profe?
A: Ahora tu tienes que darme placer a mi.
Y diciendo esto, me quité mi falda, mostrándole a ella mi piel desnuda morena, bronceada por el sol, una vagina con mucho vello rizado, ella miraba con sorpresa mi vagina, la verdad parecía ser complicado para ella, aún así ordené:
A: Lina, baja de la cama y arrodíllate.
Ella, hizo casi y se bajó a arrodillarse, yo me puse de espaldas, y abrí mi gran trasero mostrándole mi ano y ordené:
A: ahora, comienza a lamer.
Ella acercó tímidamente su lengua a mi ano, hizo su primera lamida, hizo una pequeña pausa luego siguió lamiendo, hasta comenzó a chupar, yo empezaba a gemir:
A: ahh ahh que puta saliste ahh uff, me encanta como chupas mi culo, ahh ahh ahh.
Lina agarraba mi cintura, yo agarraba su cabeza, ninguna de las dos quería que ella soltara su boca de mi culo, era una aberración y depravación a la cual yo tenía sometida a esa niña.
Luego aparté su boca de mi culo, y al mirar su cara y ver sus labios brillosos me excité más, me senté en la cama, y yo, con una señal, se acercó a mi vientre, con sus manos acariciaba los vellos de mi vagina
L: profe, cuando sea más grande tendré esos pelos ahí?
A: claro que sí nena, además, saben muy rico, pruebalos y verás.
Lina, ni corta ni perezosa, empezó a pasar su lengua en mis vellos, era un espectáculo, luego le ayudé despejando un poco el camino hasta que su lengua tocara mi clítoris, negrito por supuesto, ella lo lamía y yo empezaba a gemir otra vez, solté mis vellos y comenzaron a pasar por su nariz, lengua y labios, observaba a Lina como me lamía y chupaba mi cuca, le encantaba mucho.
A: ohh si putica, cómete toda mi cuca ohh ahh ahh cómetela toda ahh ahh.
Con mis manos tomé sus coletas y jale su cabeza pegandola más a mi vagina, hasta rodeé su cara con mis piernas, subiendolas en sus hombros, movía más rápido mi pelvis estrellandoselo en su carita.
A: ahh ahh chupa puta chupa puta chupa ahh ahh uhhmm ahh me vengo me vengoooooo.
Hice una contracción agarrando más duro a Lina y sentí que salía un rio de mi, tuve un gran orgasmo y retuve a Lina hasta que se lo tomara todo.
Luego bajé mis piernas de sus hombros y me senté a descansar mientras Lina se sentaba en el piso, tenía sus coletas casi despeinadas, un vello pubico en su labio inferior, y muchos restos de liquido vaginal mio en sus labios, mentón y nariz, era espectacular.
A: bueno Lina, lo prometido es deuda te entrego lo que va a ser la evaluación, solo es para tí vale?
L: Si señora.
A: acuérdate, a nadie le dices de ésto es algo entre las dos vale, ahh y otra cosa, limpiate y alístate tu mamá no demora en llegar.
Lina fue a mi baño a alistarse, luego de una breve despedida y agradecimiento de su madre, Lina se fué.
Toda la semana fue lo mismo, finalmente presentó el examen final y lo pasó logrando aprobar mi materia, además le puse el cuerno a mi marido y el no lo sabe, creo que encontré otra forma de divertirme …
Uff me encanta cunado son mujeres quienes abusan y follan a las nenitas