CAMPAMENTO ZOO EN JALISCO MÉXICO
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por cachorritagolden.
CAMPAMENTO ZOO
Hola chicas les contare lo sucedido en mis recientes vacaciones de verano en México, mis amigas realizaron el plan de salir de campamento a un pueblito mágico perdido entre la sierra madre occidental y cercano a la laguna de Sayula en Jalisco, en este lugar se encuentran unas piedras enormes llamadas las piedrotas, un lugar muy bello y de fácil acceso, donde se puede acampar por las noches o también en algún lugar cercano a ellas es permitido, el caso es que salimos en coche y llegamos al pueblito pintoresco con casas de teja roja y una plaza llena de gente joven, bueno ahí compramos los víveres que necesitaríamos para eso dos días.
Salimos al lugar que ya conocíamos por campamentos anteriores, el cual está cercano al camino pero cubierto por pinos jóvenes que nos sirven de cortina anti frio y controlan a los mirones, ya que fuimos tres chicas bastante liberadas y cada una con sus mascotas, estas para que nos cuidaran, nos dieran su calor en las noches en la montaña y bueno nosotras les brindaríamos un tiempo de relajación sexual siendo sus perritas cada que ellos quisieran montarnos a las tres.
Bueno para entrar en detalles este lugar posee un pequeño arroyo el cual nos brindaría horas de placer por lo fresca del agua y por ser el lugar en donde más nos montaron nuestros mechos caninos.
Las chicas Cinthya, Claudia y yo “Rocio”, decidimos ponernos los bikinis para asolearnos un poco entre los pinos que dejaban pasar los rayos del sol, así que nos tendimos sobre nuestras toallas esperando tener más tarde un buen bronceado, estando tendidas sobre el suelo una leyendo , otra dormida y yo escuchando música y viendo correr a nuestras mascotas, poco después estas regresaron a donde estábamos y se echaron junto a nosotras, queriendo jugar, entre que nos lamian y olfateaban entre nuestras piernas buscando ese olor inconfundible de hembra en celo, nos hacían retorcernos al sentir sus lenguas y narices frías y húmedas, y bueno no tardaron en excitarnos a las tres y regresamos a donde estaba montada la tienda de campaña y ahí nos desnudamos las tres y aprovechamos de calentar un poco de agua para depilarnos las rajitas que teníamos bastante descuidadas una con una mata castaña obscura muy grande y fea, la otra con los pelitos a medio salir y yo con la melena de la entre pierna que bien podría haberme hecho trencitas, bueno el caso fue que empezamos a rasurarnos dicha área entre las tres, entre que la enjabonamos y separamos un labio para pasar el rastrillo, le meto el dedo en la rajita a Claudia para jugar ella le pasa a Cinthya el rastrillo a un lado se su clítoris y después despeja ambos labios de los fastidiosos pelos para después ponerle un lubricante y desinfectante sobre y alrededor de la rajita con el consecuente masaje y metida de dedos en el culito y rajita, cosa que la puso a mil en unos segundos y Cinthya tiro al suelo a Claudia lamiéndole la rajita, besándole las tetas grandes y turgentes marcadas con unas pequeñas venas de color azul y yo dándome dedo viéndolas como empezaban a tener sexo una con la otra.
Mientras Cinthya le lamia la raja a Claudia yo aproveché y me puse un arnés de color rosa y fije el dildo negro de 25 cm de largo y 1.5” de grosor, lo lubrique bien y fui en pos de la rajita de Cinthya, mientras estas hacían un 69, la tome de las caderas y empecé a penetrar su rajita separando los labios entre rosados y morados en sus orillas como si fuera una flor exótica, le fui introduciendo el dildo negro hasta el fondo de su vagina y empezando un excitante vaivén que se prolongo varios minutos en los cuales Claudia chupaba el dildo cada que lo sacaba de la rajita de Cintya para volvérselo a clavar hasta el fondo, haciéndola gemir de placer entre las lamidas de Claudia y mis penetraciones profundas, hasta que logro un abundante orgasmo, que le hacía cerrar las piernas encerando la cabeza de Claudia entre ellas y esta le seguía lamiendo la raja, con los pezones como flechas de la excitación y le temblaban como si fueran gelatinas por el placer que le hacíamos sentir entre ambas.
Cuando terminamos de montarnos a Cinthya, yo tenía la rajita como braza de carbón, excitada, húmeda con el clítoris erecto y asomándose entre los labios de mi rajita, así que mi macho me olfateo y lamio la rajita para cerciorarse de que yo estaba con ganas de ser montada, de tal manera que lucy, lucy es mi perro que se llama lucyfer y de cariño le digo lucy, empezó a pasarme la lengua a lo largo y profundo de mi rajita, mordisqueándome el clítoris, hasta que me hizo poner a gatas y poseerme como su perrita, subió su pata delantera sobre mi cadera para inmovilizarme y después la otra y empezó con su meneo hasta que logró penetrarme por la rajita, se movía como poseído, cada vez más rápido y profundo sentía su gran miembro dentro de mi rajita, sentí hincharse su bulbo dentro, llenándome la vagina por completo, hasta que se quedo quieto, sentía su enorme bola palpitar mientras el echaba sus chorritos de semen dentro de mi esperando preñarme, después se volteó y quedamos cola con cola, cosa que aprovecha Claudia, ella se puso el arnés con el dildo, y mientras me tenia lucy abotonada con su enorme verga, Claudia lubrico el dildo y empezó a cogerme por el culito, esto me hiso ponerme mas excitada e inicie un movimiento de vaivén, estaba siendo montada por dos seres al mismo tiempo, dos penetraciones profundas que hicieron que los labios de mi rajita se inflamaran y que el clítoris pareciera una freza roja, pequeña pero muy sensible al tacto y a los movimientos de lucy dentro de mí, mientras Claudia parecía una jinete experimentada montándome como el mejor de los machos, dejando perder dentro de mí su gran vara negra lustrosa por mis emanaciones vaginales, hasta que lucy me desabotono y Claudia siguió su cabalgata sobre de mi hasta lograr que me viniera, y callera boca abajo sobre el suelo y seguir clavándome su estaca negra por mi culito hasta que me vine por última vez, lo que aprovechó lucy para lamerme la rajita y retirar el semen que escurría por mis piernas y hacerme venir otra vez con su rasposa lengua.
Más tarde les cuento que mas sucedió en este campamento.
Rocio.
WOW me pregunto si habra un campamento para hombres zoo con hembras. yo vivo cercva de esos lugares