Historias de playa 2
Otra historia de tantas que se cuentan en murmullo en secreto pero solo ustedes deciden si continúo contando.
En la muralla, en desarrollo de su actividad turística, hay personas que alquilan cabañas para los turistas que van a disfrutar de sus hermosas playas, su tranquilo mar y su pacífico ambiente, también hay cabañas cuyos dueños son los mismos que las disfrutan, y contratan cuidadores para que las mantengan organizadas mientras sus dueños no están, esta historia sucede en una de esas cabañas, cuyos propietarios, una pareja de exitosos comerciantes normalmente para los días de largo verano llegaban a su cabaña a pasar vacaciones con su pequeña hija llamada Angélica, una niña de 10 años de piel blanca, cabello castaño largo, ojos café claro y saltones, delgada pero con una bella cola, y piernas torneadas ya que aparte de sus actividades académicas va mucho a clases de gimnasia rítmica, lo cual la hacía ver cómo una niña delicada y refinada. Los padres de Angélica tenían contratada para la administración y organización de su cabaña a una mujer llamada Rosaura, una mujer nativa del lugar de 35 años, piel morena, cabello largo y crespo, contextura gruesa sin llegar a ser gorda, grandes senos y bellas piernas y rostro hermoso, en general una mujer muy bella; la madre de Angélica a veces cuestionaba a su marido por contratar a Rosaura, a veces sentía celos, pero luego veía el trabajo en la cabaña y la discusión cesaba.
El primer día de vacaciones, Rosaura recibió de buena manera a sus patrones, pero algo la inquietó, más exactamente Angélica, la niña que luego de saludar con un abrazo, sintió algo que en mucho tiempo no sentía, la veía tan hermosa, ( cosa que era cierta, Angélica es una niña hermosa) se quedó absorta y no atinó más que preparar las habitaciones para los señores.
En el segundo día, Angélica después de la playa, miraba con curiosidad el trabajo de Rosaura, ella con tal de tenerla cerca, dejaba que le preguntara de todo y respondía con cariño y atención, tanto así que se había ganado la confianza de la niña, y pues a los padres no les molestó en lo absoluto ya que también son buenos jefes.
Al tercer día…..
– Rosaura. – Dígame, señor. – Lo que pasa es que mi esposa y yo tenemos que viajar inmediatamente por asuntos de negocios, y no tenemos con quien dejar a Angie, será que nos puede ayudar con el tema? Vamos a estar por fuera dos días y volvemos. – Claro si señor, por mi no hay problema. – Gracias Rosaura. – Angie. – Señor papi. – Hija, lo que pasa es que tú mamá y yo tenemos que viajar urgente, ya se que tú querías que pasáramos tiempo juntos pero los negocios son así, pero si tú quieres te puedes quedar con Rosaura acá en la cabaña mientras volvemos. – Aunque no me gusta la idea pero si Papi. – Gracias hijita por entender nos.
Los padres de Angélica partieron en su carro y Angélica quedaba con Rosaura a solas.
– Oye Rosaura. – Dígame niña Angélica. – Eso que le pones a la piscina que es? – Niña Angélica eso es un cloro que se le echa para que el agua no se dañe y lleguen los insectos y sus papás y usted se puedan bañar tranquilos. – Ahhh que bien Rosaura. Y en la tarde después de almuerzo que va a hacer? – Mi niña, organizar la cabaña, poner al día el jardín, organizar el cuarto de sus papás para cuando vuelvan para que sería mi niña? – Era para ver si me podías acompañar en la piscina. – Ahh mi niña pero usted si quiere se puede meter. – Pero no quiero hacerlo sola, me puedes acompañar? – Está bien, hagamos una cosa, esta noche que ya he terminado todo la acompaño. – Pero te tienes que bañar conmigo jiji. – Ayyy mi niña me pone en unas, bueno por ahí tengo un chingue de baño me lo pongo y nos bañamos. – Gracias Rosaura. Y la niña le dió un pico en la mejilla a la señora; Rosaura no podía creer la suerte que tendría.
Esa misma noche, Angélica salió con un vestido de baño compuesto por un bikini y un brasier color fucsia, lo cual resaltaba el color blanco de su piel y no solo eso, al caminar como aprendió que parecía bailar, dejó sin aliento a Rosaura, quien no se quedó atrás, con un vestido de baño enterizo color azul, que dejaba notar más su escote y también resaltaba su buena cola.
– Oye Rosaura, estás muy bonita. – ayy gracias mi niña pero usted también está bonita. Luego dentro de la piscina – Rosaura, ayúdame a sostener para un paso de baile por favor. -Esta bien mi niña. Y Rosaura sostenía ese cuerpo de la niña mientras ella hacía su ensayo de baile en el agua, la mujer veía con deseo el cuerpo y los movimientos de la niña, tanto que su mente se alejó del mundo solo contemplando esa niña, la hija de sus jefes.
Dos horas después, ellas salieron de la piscina, tomaron ducha y se fueron a cambiar a sus habitaciones:
– Rosaura, por favor te puedes quedar conmigo esta noche? – Mi niña pero es que me da pena, y de pronto sus papás llegan a saber y me regañan. Además pues yo duermo diferente. – Tranquila Rosaura, te prometo que no le diré nada a mis papás ay pero por fis, y no importa como duermas, lo único es que no quiero dormir sola. – Está bien mi niña, pero conste. – Si señora. Y Rosaura entró a la habitación envuelta en una toalla. – Rosaura, tu no te pones pijama? – No mi niña, aquí estamos acostumbrados a dormir así. Y al instante, Rosaura dejó caer su toalla, quedando completamente desnuda, mostrando unos grandes senos, con aureola café y bien empitonados, un abdomen bien, dentro de lo normal y su vagina, con algo de vello, era su presentación para dormir, la niña la veía boquiabierta, y sonrojada y atinó a decir – entonces si aquí se duerme así, yo también dormiré así. Y también se quitó su toalla, dejando ver su cuerpito, con unas tetillas que todavía no se veían crecer, una vaginita pequeña y rosadita y un abdomen hermoso.
Luego se acostaron, e instintivamente Rosaura comenzó a acariciar el cabello de Angélica, la niña se sentía cómoda con esas caricias, luego la mujer fue acariciando su espalda. – mi niña, le puedo dar un masajito? – claro si señora por favor, lo necesito.
En ese momento, Rosaura hizo recostar a la niña boca abajo y le comenzó a hacer masajes, en su espalda, luego por sus glúteos, luego por sus muslos y sus pies. – Ayy Rosaura, que rico masaje, lo necesitaba. – Gracias mi niña era lo menos agradecerle por dejarme compartir con usted. Luego después de un tiempo la hizo acostar boca arriba y seguía haciendole masajes, primero por el cuello, pasando por su pecho y su vientre, la niña ya gemía de lo contenta por el masaje, pasaba por las piernas, rodillas y canillas, vuelta arriba pasó un dedo masajeando su vagina, la niña respingo: – ayy Rosaura, que haces? – Mi niña, el masaje se lo voy a hacer completo, de pronto le incomode al principio pero créame que le va a gustar. – ok.
Y Rosaura seguía en su masaje, masajeando solo la vagina de Angélica, la niña al principio daba quejidos – Rosaura, ten cuidado, que me puede doler. Rosaura trajo un aceite y se lo aplicó para masajear con más placer, extrañamente la vagina de Angélica empezaba a humedecer con ese masaje, Rosaura no aguantó y bajó su boca hasta la vagina de ella y empezó a chupar, Angélica no se atrevía a decir nada pensando que era parte del masaje, así que cerró los ojos y se dejó llevar – ayy Rosaura, se siente rico, ahhhmmm auummm ahhh. Luego al sentir el dedo de Rosaura – ayyyyy duele por fa Rosaura. Rosaura dejó el dedo hasta que la niña cambió su queja por gemido y comenzó a mover su dedo al principio lentamente y gradualmente subiendo la velocidad – ayy Rosaura, ahhh me gusta esto ahhh sigue por favor ajj ahhh ahhh ahhh- Rosaura movía más rápido el dedo, la niña empezaba a moverse casi que haciendo movimientos epilépticos, su primer orgasmo estaba por llegar – ayyy Rosaura ayy ayy ahh ahhh ahhh me orino me orino ughhhhh ahhhhhhhhhhhhhhh.
Angélica oficialmente tuvo su primer orgasmo, Rosaura subió y besó su boca con una lujuria impresionante, la niña no le quedaba otra que corresponder ese beso. Rosaura se sentó en la cama, recostó a la niña a su regazo y le puso sus senos en la boca, instintivamente, Angélica empezó a chupar esos senos, le gustaban – ah ay mi niña, me encanta como chupa mis tetas – unum glup glup ahmm – ohh si mi niña. Luego, Rosaura hizo bajar de la cama a Angélica y la hizo arrodillar, luego, en efecto abrió sus piernas y le mostró su vagina. – Rosaura, será que cuando sea grande tendré pelo ahí? – claro que sí mi niña. Mientras Rosaura le respondía, acariciaba la cabeza de la niña, quien lentamente se iba acercando a eso, que era igual a lo que ella tenía pero con pelo, tímidamente, Angélica sacaba la lengua y tocó delicadamente los vellos. – uhhmm sabe bien. Dicho esto, Angélica se dedicó a lamer la vagina de Rosaura, con vellos y todo, Rosaura gemía y cogía la cabeza de la niña para pegarla más a su vagina – ahh ohh si mi niña, lame, ahora quiero que chupes, ohh quiero sentir toda tu boquita ohhh. Y la niña en efecto, abrió la boca y empezó a chupar, torpemente, pero eso tenia excitada a Rosaura, quien al mirar hacia abajo, cruzaba su mirada con la de Angélica, una mirada de total inocencia – ohh ahh me encanta como me mira mi niña ahh ahh ahh. Del placer, Rosaura subió sus piernas en la espalda de la niña, mientras esta seguía chupando su vagina como si no hubiera mañana – ahh ahh ouuu unjmmmnn ahh ohh me vengo oh si me vengo si si si si ihhjjjjj ahhhhhhhhhhh.
Mientras se contraía agarró más fuerte la cabeza de Angélica y tuvo un orgasmo intenso en la boca de la niña.
Luego, la niña se separó de la vagina de Rosaura, pero siguió arrodillada, al verla la mujer, quedó más prendada, tenía su mirada inocente pero con rastro de corrida vaginal en sus labios, realmente la niña le había hecho tener un gran orgasmo. Luego la hizo levantar y la besó. – mi niña es hora de dormir. – si señora, gracias, me encantó y no te preocupes no le diré nada a mis padres. – Gracias mi niña, pero por ahora vamos a dormir que descanses. Luego la niña se quedó profunda, con su carita de ángel y Rosaura en su pensamiento decía: -quien pensaría que la bella hija de mi patrón me hubiera chupado mi Cuca hasta hacerme venir, se ve inocente pero es muy guarra. Y con ese pensamiento la señora también se quedó dormida.
Después de esa noche, se dice que cada año Rosaura y Angélica aprovechan para tener sexo, es algo que no se tiene certeza porque es una de las historias que no se cuentan en una reunión de familias, sino en la más absoluta oscuridad….
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