Inceto Lesbo Madre E Hija
Como nace una relación incestuosa lésbica entre madre e hija.
Ingrid y Nataly son madre e hija. Ingrid es una mujer de 49 años y su hija Nataly 28. Dos mujer bellísimas que comparten todo, que siempre han compartido todo. Su relacion va mas alla que de madre e hija, es una relacion amor/incesto.
Todo esto comenzó cuando Ingrid tenía 34 y Nataly 13. A sus 13 años le hicieron una clase de educación sexual, la cual le entró mucha curiosidad. Llegando a su casa lo primero que hace es contarle a su madre Ingrid sobre que que hicieron en clase, lo cual Ingrid le explico más sobre el sexo y teniendo mas confianza entre ellas. Llegando hasta el tema de la masturbación, en este punto Ingrid decide comprarle un juguete sexual a Nataly, un dildo de 16 cm de largo por 8 de ancho. En este caso, en su “inocencia” Nataly le pregunta si le enseña a usarlo. Ingrid le dice que es mejor que ella lo descubra, pero en la insistencia de Nataly finalmente aceptó.
Ingrid y Nataly fueron a la cama grande los cuales se fueron quitando la ropa de a poco y con caricias para ir armonizando el ambiente. comenzaron los besos cortitos y caricias más intensas. Poco a poco se fueron poniendo más caliente, Incluso Ingrid se le fue olvidando que Nataly era su propia hija, la calentura la estaba dominando y ni hablar de Nataly una chica de 13 años con las hormonas muy alborotadas.
Nataly en su instinto comienza a succionar los pezones a su Madre mientras que Ingrid le toca por encima de la vagina de su hija, estimulando y provocando que vaya lubricando. En este ambiente tan caliente, comienzan a sudar y a besarse intensamente, para ambas es la primera vez. La primera experiencia sexual de Nataly y la primera relación lésbica de Ingrid. La lujuria se apodero de ambas, ya no podían parar de tocarse y meterse los dedos dentro el aroma a sexo las embriagaba mas y mas. Y el juguete de Nataly ya estaba dentro de ella, Ingrid moviendolo lentamente penetrando suavemente, Nataly no podía ahogar sus gemidos intensos y eso a Ingrid le gustaba oír. la motivaba a mover el dildo más fuerte, hasta llegar al punto de que Nataly tuvo una maravilloso orgasmo haciéndola estremecer y a la vez asustando a Ingrid por el fuerte grito que la pequeña dio.
Finalmente acostadas frente a frente dándose un placentero beso se quedaron acostadas descansando y conversando. lo cual llegaron a la conclusión de que debían repetir la experiencia y así nació la relación entre madre e hija. lo cual las llevó a ir experimentando más cosas juntas hasta el punto de llegar a quedar embarazadas del mismo hombre y al mismo tiempo, pero eso es otra historia.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!