la vaginita de mi hijastra

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Tengo 23 años me case con un abogado el trabaja para un prestigioso banco y me atrajo desde el principio su seriedad nunca me imagine que fuera lo q mataría nuestra relación buscaba algo formal el tenia su futuro resuelto, profesional, buen empleo, casa, carro una buena vida asi que me case pero después de algunos meses poco sexo, siempre casado, estresado, el es viudo y producto de su anterior matrimonio su hija Noelia; prácticamente mi única compañía era una niña muy dulce bueno estaba todo el tiempo detrás de mi parecía que me seducía a veces sentada en el sofá con sus pequeños short que de vez en cuando dejaban ver su vaginita, unos labios vaginales totalmente blanquitos y su clítoris pequeñito y rosadito uuufff…

Yo la llevaba a la escuela me encargaba de sus tareas, de llevarla a clases de natación y los domingos íbamos algún parque con mi marido y ella el era feliz si Noelia era feliz le encantaba que en casa todo marchara excelente.
Noelia hasta se parece a mi y me llama mamy.

Comencé a fijarme como le queda su bikini de bonito se le siñe la pepita y a veces sus pezones que apenas nacen se ponen duritos supongo que es el frio de la piscina, en fin la observe en varias ocasiones tocándose la rajita o sobándosela en una almohada redonda que tenía en su cama, o poniéndose un masajeador para la espalda de mi marido sobre la vaginita en fin ese tipo de situaciones me excitaba demasiado sentía corrientazo en mis pezones y mi vagina eran noches de total lujuria con mi marido y si el no quería como algunas veces me iba a nuestro jacuzzi para hacerme una paja me metía cualquier cosa con las ganas que tenía ni me daba cuenta a veces dildos a veces mangos de peines, botes de crema lo que fuera, mi querida hijita me dejaba como gata en celo.

En una ocasión estaba en el sofá y traía aun el uniforme de la escuela pero su camisa estaba desabotonada dejaba ver sus pechitos con esos pezones rosaditos que me ponían a mil, mirándola detenidamente vi su carita rosadita y su mirada totalmente distraída escuche un ruido extraño y me di cuenta q bajo su faldita tenía el masajeador de mi esposo el ruido era las vibraciones que emite ella se percato que la miraba y dijo: -me hago cosquillitas mamita, de una forma tan inocente que me lleno aun mas de morbo y ganas, -Es rico mimor? –Aaagghh aaaggh me gusta mamy quieres probar? Yo me quede completamente fría sin saber ni que decir me miro y replico: – Me da una cosa muy rica en mi rajita ven mamy quiero enseñarte a ti como se hace.

Yo traia un vestido no podía abrir las piernitas como ella asi que me ayudo a subirme el vestido lo que me excito tanto yo ya soy caliente pero Noelia me ponía como yegua despotrada me fui acomodando en el sofá para que pudiera ponerme el masajeador en mi cuquita me encantaba eso fue una fantasia completamente que mi hijastra estuviera ahí masturbándome aaggh yo daba gritos y gemidos de placer –Mamita te gustando verdad, comencé a ponerme mojadito y mi hijastra me tocaba la vagina inentando secármela pero solo la ponía mas mojada.

–Hija porque no se quita la ropa para irnos preparando para la ducha, ella se comenzó a desvestir y yo también me deje solo mi hilo traia un hilo rojo transparente, amo la forma en la que me roza la rajita los hilos en fin mi niña traia un calzoncito rosado de la pepa pig yo lo cogi para olerlo y me encanto la verdad, -mamita cuando sea grande quiero ser como tu, con ese culote y esos pechos yo me sentí totalmente halagada y la abrace ella puso su cara en medio de mis tetas no se que me dio que me movia de derecha a izquierda con su carita en medio d ellos, mi hija agarro una de mis tetas y la metió en su boca empezó a chupar mis pezones lo hacia cada vez mas duro yo empece a gemir ella se fue llenando de ansias y me mordió pero esa mordida me supo a gloria -bebe quieres que te haga cosquillas a ti? –si mamita quiero mas yo le puse el masajeador pero estar tan cerca de esa vaginita tan blanca, pura me dio un deseo descontrolable de mamar, jamás había probado una vagina menos una como la de mi hijita jiji asi que me puse como de perrito apreté entre mis piernas el masajeador y empece a mamar, -mamita que aagghh mamita mmmh que rico me gusta, quiso detener mi cabeza al principio pero me daban mas ganas aun y mamaba mas metia la lengua de manera mas profunda chupaba tan rápido como podía ese clítoris rosadito de mi hijita se ponía mojadita pero yo me tragaba todo ese liquido me enloqueció por completo no quería dejar de mamar esa rajita virgen mi hija abria y cerraba las piernas entres gemidos y quejas me imploraba mas intentaba meter mi lengua en vagina pero estaba totalmente sellada le dije que si quería sentir aun mas rico, pero que al principio le iba a doler un poquito, ella solo asento con su cabecita tenia aun la cara muy rojita y se miraba como ebria de placer le meti la puntita de mi dedo mientras le chupaba la punta de clítoris tenia la vagina toda rojita ella apretaba y abria las piernas

Le fui metiendo mas mi dedo se tapo la carita con uno de los cogines del sofá pero podía oir aun sus gemidos aaggh estaba ahí desvirgando mi querida hijita podía sentir en mi dedo sus palpitaciones de las paredes vaginales me encantaba su vagina sera tragadora de vengas cuando sea mas grande mmmh me gusto definitivamente y a ella también –mamita quiero meterte a ti yo me puse siempre de perrito pero esta vez frente a su cara me comenzó a lamer el ano, mi marido jamás ha querido y ella lo hizo sin perdirselo fue tan riquísimo y dulce bajo hasta mi cuquita y comenzó a comérmela toda –asi mamita? Asi se hace? –si amor sigue asi mmmhh yo gemia y gemia y pedia mas también mamaba la pepita rosadita de mi niña cuando mmmmh sentí como metió sus deditos no eran tan grandes pero los metia y sacaba con tanta fuerza me clavo dos pero desde enteros comencé a mover mi trasero en su carita y callar mis gemidos en su vaginita disfrute tanto cada segundo asi a Noelia no le basto con clavarme sus deditos con su otra manita me puso el masajeador en el clítoris yo no resisti mucho asi y me vine mi hijita me puso su boquita para tragar todo eso –que rico mamita me gusta yo le restregué mi rajita en la suya hasta que ella se vino ambas quedamos exaustas se acosto sobre mi con su manita en una de mis tetas y dormidos un ratito después la bañe mientras la tocaba poquito –hijita me haces un favor? –dime mamita –no le digas a tu papa que sabes que es un poco celoso nena – si mami sera nuestro secreto y me beso el pezón.

Después tuvimos otras aventuras en diferentes lugares en unos años me divorcie del papa pero Noelia aun viene a quedarse conmigo fines de semana y vacaciones