Luisa, Leticia y Natalia (segunda entrega)
Tres mujeres, madrastra, suegra y nieta .
Al día siguiente Luisa escucha un toc toc en su puerta, es Leticia quien llama, son las 9 de la mañana, Luisa se levanta para abrir pero se da cuenta que Natalia está desnuda en su cama, por lo cual bruscamente llama a su hijastra quien de manera abrupta se levanta, en ese momento Leticia vuelve a tocar y llama a Luisa quien no sabe que hacer, Natalia se pone su pijama y se mete en las sábanas fingiendo estar dormida , unos segundos después Luisa abre la puerta con una visible cara de cansancio, Leticia se da cuenta que su nieta paso la noche con su nuera pero antes de que Leticia diga algo , Luisa interviene;
– pobre , paso una noche muy jodida , tiene mucho miedo de perder a su padre y es apenas obvio , Fernando es un excelente padre; el a pesar de su trabajo siempre ha estado muy pendiente de su hija, se ha esforzado para poder estar con ella; eso es lo que más admiro de el, a lo que Leticia entre sollosoz replica mientras una lágrima baja por su mejilla – pobre mi niña , debe estar pasando por una situación muy dura.
Y usted doña Leticia cómo está; yo estoy desecha, tengo mi corazón roto respondió Leticia. Ambas mujeres se abrazaron mientras Luisa en medio de su angustia le da consuelo a su suegra no se preocupe doña Leticia, el es un luchador y saldrá bien, mientras se apretan mutuamente y en ese justo momento aparecen los brazos de Natalia que interrumpen ese abrazo para sumarse , los brazos de su madrastra y abuela se abren y ella queda metida en el regazo de los dos seres que más ama en su vida.
después de su padre.
De pronto Leticia recuerda que dejó el desayuno servido y rápidamente se separa, da media vuelta con rumbo a la cocina mientras les dice; las espero en la mesa porque el desayuno está servido.
Pasa la mañana y en la tarde van al hospital donde el médico les da buenas noticias y dice que va bien y que hay que seguir esperando, en dos o tres días lo despertarán del coma inducido en que está.
Llega la noche, Luisa está en su cama pensando en su querido Fernando, cómo estará, como será después de que salga del hospital, le rompe el corazón el que se halla ido disgustado, yo y mis estúpidos arranques de celos, se recriminaba en silencio mientras recuerda que siempre antes de irse al área su Fernando le hacía de todo. Al recordar, Luisa se moja los labios pensado en su ritual favorito, una buena mamada a su semental para sacarle y tragarse toda su eche y así quedarse con el sabor y el olor de su macho, pero luego la invadió un sentimiento de amargura al recordar que esa noche en su orgullo desprecio tan deliciososo manjar, con eso en su mente Luisa ahora está lista para hacerce una feroz paja, pero la puerta de su cuarto suena y corre presurosa a abrír pensando que es Natalia; su vagina va mil, va con la intención de de meterle la lengua en la boca y después bajarle su ropa interior, Pero la sorpresa es inesperada, es Leticia, Luisa la mira unos instantes, ve a su suegra en un baby doll negro de encaje, que resaltan sus curvas, sus senos se muestran imponentes, sus piernas son increíbles, Leticia tiene la constextura física de una mujer gruesa pero con sus curvas bien definidas, Luisa queda impresionada, nunca había visto a su suegra así y tan buenota. Dooñaa Leeticia que nnnesecita; unos segundos después reaccióna y la invita pasar.
Leticia – nada hija es que tenía una duda ,
Luisa- digame doña Leticia
Leticia- Nada, quería hablar contigo
Luisa siente un jalón en su estómago y se prepara, en silencio piensa; me jodieron. Nos descubrieron; alejarán a mi Natalia de mi lado. Verás Luisa, yo se que este no es momento, pero esto ya es inaguantable, en ese instante; toc toc; es Natalia: Luisa ¿la abuela está contigo? si amor aquí estoy , réplica Leticia, que te pasa, crei que te habías ido, Luisa aprovecha el momento; pasa cariño, ¿no puedes dormir? Natalia asiente y Luisa la abraza, acuéstate cariño en mi cama, Natalia se mete entre las cobijas, Luisa vuelve su mirada hacia Leticia:
¿que me quería decir doña Leticia? Nada; contesta Leticia en tono más calmado; no es importante , mañana hablamos y sale del cuarto de Luisa .
Perturbada Luisa se queda pensando unos minutos , va al baño orina y se queda algo pensativa por lo que le dijo Leticia y no puede sacarse la imagen de su su suegra, casi desnuda frenta a ella, eso era extraño, sacude su cabeza un tanto aterrorizada, sale del baño y se mete entre las sábanas con mucho cuidado creyendo a Natalia dormida, minutos después se queda dormida, una hora después se despierta, algo inquieta; soñolienta, siente algo apretar su vagina, es Natalia que está encarnizada dándole dedo a su botoncito rosado mientras le masajea su raja;
– Que haces pendeja, déjame dormir.
-Hoy es tu turno mami; anoche te alimente yo, ahora es tu turno de alimentarme, se buena madre;
– ¡tonta!… tu abuela está afuera y acabó de salir;
– le eché seguro a la puerta , relájate y dame tu cosita rica, Luisa no desaprovechó, además estaba ya bien caliente, así que dejó a su adolescente amante que hiciera lo que quisiera, de repente sintió como Natalia la despojaba del short de su baby doll y empezó a dar lengua como si de eso dependiera su vida , entre chupadas , mordisqueos , succiones y metidas de su enorme lengua Luisa se retorcía y trataba de no gemir muy fuerte para no ser escuchada por su suegra, entre susurros le ordenaba a su virginal amante; dale, dale mi perrita hermosa, así putica, no pares, si lo haces te mato zorra … Natalia por supuesto no soltaria esa vagina depiladita y con tonos marrón y un inetrior rosado, entre mamadas y mordisqueos se detenía unos segunditos para capturar en su nariz los aromas que salían de la raja de su madrastra, pronto esa rica vulva empezó tener pulsaciones y Natalia sabía lo que venía, algo que no todas las mujeres pueden experimentar, un delicioso squirting, que en Luisa es muy frecuente, Natalia siente como su amante tensa sus músculos mientras muerde las sábanas para ahogar su grito y después sale disparado ese chorro tibio, una mezcla deliciosa de orina y fluidos que se estrellan en la cara de Natalia , Luisa empieza a relajarse y Natalia como buena hija juiciosa deja la mesa de dónde ha comido muy limpia, sube de nuevo los short de Luisa y se mete de nuevo entre las sábanas , mientras le dice; hasta mañana mamá que duermas , Luisa se queda algo perturbada y desconcertada pues su inspiración para semjante chorro fue la imagen de su suegra parada en su puerta metida en ese precioso baby doll.
Su mente divagava y muy confundida pensaba en que por primera vez le era infiel con el pensamiento a su señor y a su pequeña y no podía creer que el motivo de aquello fuese su suegra y a la vez abuela de su pequeña.
Hasta aquí está segunda entrega , por favor sientanse libres de opinar , pronto habrá una tercera entrega .
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