tragandome su orina

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por saralesbi.
Sentia un manojo de nervios en el estomago, casi una punzada, tenia ganas de ir a la vez que sentia miedo. La razon decia no y el deseo me empujaba a probar. Fui a mi casa a dejar la compra y me duché si dejar de darle vueltas y mas vueltas, no me decidia, pero cuando me vi en la puerta de su casa llamando al timbre, descubri que ya estava mas que decidido.

Vicky me esperaba, tomamos un cafe y charlamos un rato, no era mi primera vez. Me desnudé mientras me fumaba un cigarrillo. Ya me sentia otra vez bulnerable. Me puse el collar de perra que ella me tendia y empezamos la sesión. A partir de allí yo no era más que su esclava.

Empezó por insultarme, habia llegado tarde, (no mas de cinco o diez minutos) me puso de cara a la pared. Mi frente tocaba la esquina, y no podia ver lo que ella hacia. estube un rato así, sin ver nada, esperando un grito, un golpe. Algo. noté un azote en las nalgas, solté un grito y di un respingo, era doloroso a la vez que estimulante. La oia en la habitación pero no sabia exactamente lo que se disponia a hacer conmigo. Otro golpe, otro y otro, de manera irregular, cuando menos me lo esperaba, me noto el culo caliente y el sexo palpitar. Me manda darme la vuelta, esta desnuda, tiene 10 años mas que yo, no es especialmente guapa pero me resulta muy deseable, por su rol de ama.

Me manda besarle los pies, se los beso y se los lamo, ella esta de pie, yo estoy casi estirada, indefensa, sola, lamiendo y chupando sus pies, obedeciendo humillada.

me manda besarle las pantorrillas, las piernas, me coje fuerte por el pelo y acerca mi cara a su pubis, rasurado, huele a crema de fresa o algo parecido. Deseo chuparlo, lo intento, pero me tira del pelo y no me deja. Pone dos dedos en su sexo, se estimula moviendolos, me mantiene deseosa a distancia. Luego tira de mi pelo y empuja mi cara contra su sexo. lo siento cerca, intento lamerlo pero no me deja, mi lengua choca contra sus dedos. Intento pasar mi lengua entre sus dedos, a veces lo consigo, entonces ella me tira del pero y me aparta, me da un bofeton y continua empujandome contra su sexo. Pero sus dedos se interponen siempre entre mi lengua y su clitoris. Ardo en deseos, cada vez que consigo lamerla me gano un bofeton. Me llevo unos cuantos… Me ordena que me ponga de rodillas, la cara en el suelo y el culo en pompa, lo hago, agradezco el frescor de la baldosa en mi mejilla dolorida. Me muerde el culo, me insulta, me pellizca la cintura, los brazos, los pezones, duele pero estoy tremendamente caliente.

me come el culo, me manda abrir mis nalgas con mis manos para poder lamerlo mejor, me gusta, deseo sentir su lengua en mi sexo, pero nunca llega. Me introduce un dedo por el ano, luego dos, me folla con ellos, los intoduce y los saca a placer.

Luego me manda abrir la boca, introduce sus dedos en ella y me manda lamerlos, (ahora lo siento distinto) pero en ese momento se me antoja delicioso saborear mi propio culo. La operacion se repite varias veces, asi que cuando siento que saca los dedos de mi culo, abro bien la boca y saco la lengua. cuando los saca de mi boca separo bien las nalgas con mis manos. Obediente. Como ella quiere. Mi sexo palpita, estoy muy estimulada, me siento mas que caliente, fuera de mi.

Me da un bibrador, un dildo parecido al mio pero con una ventosa en la base. Me ordena que me siente encima de el. Que me lo meta por el culo y me quede bien sentada encima. Es grande, me cuesta un poco, duele un poco. Voy dejando caer mi peso encima de el, lo siento ya casi introducido del todo.

ella se pone delante mio. de pie. me ordena que lame su sexo. Ya no soy nada mas que puro deseo, lamo su sexo, sus labios, su vagina… me encanta sentirla en mi boca, me encanta su sabor a sexo y a flujo, creo que se corre en mi boca.

Entonces me tira del pelo con fuerza y me comprime contra su clitoris, me manda no derramar ni una gota, me temo lo peor, pero a pesar de todo saco mi lengua y abro bien la boca, noto un liquido caliente fluir en mi boca, siento a la vez una terrible exitacion, mi vientre tiembla, mi sexo se contrae, noto el dildo duro en mi culo mientras ni tan siquiera tocarme yo o ella me corro de manera espeluznante, brutal, como nunca mientras trago su pis. me lo trago todo, mi boca es una ventosa que no se despega de su sexo. Me gustó mucho. Me usó como a un objeto, fué la peor amante del mundo, desconsiderada, egoista y guarra, y a pesar de ello tuve el orgasmo mas intenso de mi vida con ella.