Vacaciones

Una señorita debió ir a unas vacaciones que no quería ir y termina teniendo la mejor experiencia de su vida.
Una familia disfuncional, con un padre arrogante y ausente, una madre ocupada con los deberes pero descuidada de su hija y la hija, Gabriela, de 13 años una niña hermosa de cabello mono, ojos azules, senos incipientes, y piernas torneadas de ir al gimnasio, a veces malcriada pero relativamente bien en medio de esta familia disfuncional. Un día el padre de Gaby (como la voy a llamar de ahora en adelante), decidió ir con su familia de vacaciones a la playa, su esposa aceptó con extrañeza y Gaby sin saber por qué no quería ir a esas vacaciones no porque no le gustara la playa sino porque ya no quería pasar tiempo con su familia.

De todas formas, papá dio la orden y Gaby no tuvo más remedio que alistar su traje de baño y su ropa para salir de viaje.

Al llegar al hotel, la familia se instaló y descansó pasando la noche.

Al día siguiente todos se cambiaron, nos concentraremos en Gaby que iba con un vestido de baño azul, compuesto de un brasier de tiras que hacía relucir su adolescencia y un bikini clásico que la hacía ver espectacular, la mamá iba con un vestido de baño normal y el papá con una pantaloneta y mostrando su torso. En el camino papá se quedó mirando de demás a una muchacha en la playa, mamá se dio cuenta y comenzó una discusión, en un momento dado se enfrascaron tanto en discutir que Gaby aprovechó y se alejó de sus padres, siguió paseando hasta que encontró un lugar solitario en la playa, donde sentarse, descansar y pensar en todo. En medio de su meditación escuchó una voz de acento local pero melodiosa que le dijo-oye niña, porque tan sola en este lugar? Al dar la vuelta Gaby se encontró con una mujer negra, cabello trenzado, ojos café, escote grande, piernas torneadas iba con el traje típico de la zona, una especie de blusa blanca con motivos de la zona, una falda larga blanca. Gaby estupefacta respondió: – Nada, quería alejarme un poco de mi familia y pensar cosas. – Puedo sentarme contigo? – Claro que si. – Mucho gusto me llamo Nadia, vivo cerca de aquí, y también me gusta venir aquí a pensar, pero tu, como te llamas, cuantos años tienes y que te trae por acá? – Me llamo Gabriela pero puedes decirme Gaby, tengo 13 años y pues estoy en unas vacaciones que programó mi papá y ahorita en la playa papá discutió con mamá y me aleje y vine para acá. – Oye, pero tu estas hermosa para tus 13 años. – Gracias, pero tu cuantos años tienes? – Tengo 36 años vivo en mi almacén de trenzas allí adelante pero abro al público después de almuerzo. – Que bien, interesante, pero dejame decirte que estas bonita y pues lo de las trenzas me encantaría hacerme unas, se te ven muy bien. – Gracias, si quieres vamos a mi local y te hago unas. – Que emoción muchas gracias vamos. Y se dirigieron al almacén de trenzas y casa de Nadia, al llegar al lugar, Gaby y Nadia entraron y esta última cerró la puerta, mientras Nadia empezaba a hacer las trenzas, le empezaba a preguntar cosas de su vida, el estudio, Gaby le contó sobre su disfuncional familia, y Nadia le confesó :- Mira Gaby, a mi me echaron de casa a los 18 años porque confesé a mis padres que era lesbiana, desde los 18 vivo de esto y realmente me ha ido muy bien, ahorita no tengo pareja pero estoy bien, oye tu tienes novio? – La verdad no, los chicos son lindos pero nada que ver, a veces son como mi papá, egoísta y soberbio. – La mayoría de los hombres son así, por eso pues a mi no me gustan, además las mujeres son muy tiernas y sensibles, y las relaciones con ellas tienen una sensualidad que me atrae. – No sabía que eras lesbiana, eres muy bonita y muchos hombres deben estar detrás de ti. – Gracias por lo de hermosa, y si no lo niego tengo hombres detrás mío, pero mi debilidad son las mujeres, y más si son hermosas como tu. Y diciendo esto, Nadia empezó a acariciar de manera sensual el hombro de Gaby, esta a su vez se enrojecio y sintió algo extraño al sentir esas caricias, la empezaron a calentar y a excitar, su vagina empezaba a destilar jugos, Nadia seguía acariciandola hasta que soltó el tirante y quitó el brasier del vestido de baño de Gaby, luego tomó su cara y la empezó a besar, al principio Gaby estaba tímida, pero le gustó tanto el beso que lo correspondió y empezó a tocar la cintura de Nadia, la cual se separó y se quitó la blusa, mostrando unos senos grandes con aureola negra y pezones muy erectos, Gaby quedó boquiabierta y Nadia bajó y empezó a chupar los senos de Gaby, al sentir esa sensación, hizo un breve gemido que a Nadia la excito, luego la acostó en la cama y empezó a lamer el ombligo, Gaby cerraba los ojos y se entregaba a un placer increíble, luego Nadia le quitó el tanga a Gaby, quien le mostraba una vagina con un poquito de vello ya que hasta ahora empezaba a desarrollarse, Nadia bajó hasta allá y empezó a besarla como si fuera una boca, luego empezó a chuparla y al aumentar el ritmo de chupada, gaby gemia en una sensación que tenía su cuerpo, algo que no entendía en ese momento pero lo disfrutaba, gaby movía la pelvis mientras su vagina era chupada por una mujer mucho mayor, y gemia hasta que tuvo una contracción y terminó teniendo su primer orgasmo, el cual Nadia limpió de su vagina con su boca, dejando a gaby extasiada y con una sensación de felicidad enorme. – Wow con que así se siente estar con una mujer, me encanta. – Me alegra, pero ahora te toca darme placer a ti. Y en el acto, Nadia se terminó de desnudar, mostrando una vagina morada con un buen vello formando una v en la parte de arriba de la vagina, y un trasero grande y tonificado, que a gaby dejó con la boca abierta, Nadia le dijo a gaby, – agachate y comeme primero el cuño. Gaby bajo y al principio estaba dudosa de hacerlo, pero el olor que emanaba Nadia hizo que sacara la lengua y empezara a chuparle ese ano negro y peludo. A gaby le gustó el sabor y siguió chupando, mientras nadia empezaba a gemir y le decía :- ohh que putita eres como te gusta mi culo. Gaby seguía chupando, luego nadia la frenó y le dijo abre la boca, a lo que la niña abrió la boca y la mujer orino en la boca de ella haciéndole lluvia dorada, el sabor de la orina con los flujos vaginales le encantó a gaby, quien se encargó de limpiar con su lengua la vagina de nadia. Luego empezó a lamerla y después a chuparla, nadia estaba enloquecida gimiendo y moviendo la pelvis, luego frenó a la niña y la acostó boca arriba en la cama, luego se sentó acomodando su vagina a la altura de la cara. – Ahora chupa, como la putita que eres. La niña chupaba y la mujer movía su pelvis mientras gemia y al tener tanta excitacion y tanto placer, nadis tuvo un orgasmo cremoso y blanco que la niña bebió y le cayó en la cara, en la boca y en su pecho, gaby le limpió con su lengua la vagina a nadia y ella se bajó y se acostó al lado de gaby. Eran las 2 pm y gaby le dijo a nadia. Me gustó todo pero tengo que irme mis padres deben estarme esperando. – Está bien, pero antes, llevate esta falda y me regalas tu bikini para mi colección. – Esta bien. – Contestó Gaby. Luego se despidieron con un beso apasionado en la boca, cambiaron sus números y prometieron volversen a ver, pero esto será otra historia…