La mejor masturbacion en mi vida

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Tengo 19 años y me empecé a dar placer desde que era muy pequeña, la primera vez fue con la punta redondeada de una mesa, sentía que esta me llamaba a poner mi clitoris en esta, desde aquella vez no lo paro de hacer, me encanta.

Mi relato empieza en una cálida noche, en la que estábamos todas en casa, estaba queriendo tocarme todo el día, pero fuimos de compras y no pude, en los almacenes cuando nadie me miraba aprovechaba para rozar mi vagina con algo, estaba en vestido pero sin short y sólo con unas pequeñas bragas por lo que se sentía demasiado bien, cuando llegue a casa sentí que iba a explotar, necesitaba una polla, una grande que me llenara como mis dedos no pueden, la imaginaba entrando y saliendo de mi, estaba esperando a que ellas se fueran en cualquier momento, a dar un paseo y rechazar su oferta para poder tener mi tan esperado orgasmo, pero no pasó, se quedaron en casa viendo una película, rechace su oferta de acompañarlas y volví a mi habitación, en ese momento estaba tan excitada que me puse los audífonos y empecé a ver un video porno, en la pantalla aparecía una chica siendo penetrada por dos hombres, sentí envidia porque yo quería eso, me quite las bragas mojadas de todo el día y empecé a caminar a la sala de tv.
Me encanta sentir que puedo ser descubierta.

-quieren algo de comer?- les pregunté con voz apagada del gemido que estaba reprimiendo.

-Una gaseosa- me respondieron,
En el camino a la cocina introduje un dedo, no podía más, necesitába muchas cosas adentro, de sólo recordarlo quiero meterme todo, estoy muy excitada.

Les lleve la comida y seguí caminando por toda la casa, el sentir mis piernas mojadas, me ponía mucho, el rose de mis muslos cada que caminaba era la mejor sensación del mundo, me he mojado muchas veces en mi vida, pero esta vez era increíble, me encantaba, me agache en medio de la sala sabiendo que si alguna de las dos salía me vería de inmediato, abrí mis piernas y empecé a introducir mis dedos, una y otra y otra vez, mordi un cojin para tapar mis gemidos, quería gritar, quería que todos supieran que la estaba pasando asombroso, delicioso, cuando estaba a punto de terminar mamá me llamo.

-valentina, traeme otra por favor!!!- pare y fui a llevarle a mi madre lo que me.
pedia, antes de entrar me seque un poco las piernas

Iba a subir a mi habitación pero las escaleras parecían mejor escenario, me sentí en una y abrí las piernas, metí mis dedos una y otra vez, delicioso, en ese momento me sentía muy excitada, la mejor sensación del mundo, ojala pudiera sentir eso siempre, introduje mis dedos una vez más y cubriendome la boca con la otra mano tuve mi tan esperado orgasmo, eso pasó hace menos de 2 horas y estoy lista para otra ronda.