Mi Primera Vez …por bi1596
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por bi1596.
Habia apagado las luces. Lo unico que iluminaba mi despacho era la luz del ordenador. Habia descolgado un cuadro de la pared y en su sitio habia colgado un espejo. No se como consegui que quedara enfocando mi coño.
Estaba sentada en mi silla del despacho, mi falda tirada en el suelo, mis pies en la pared y mi otra mano en mis tetas. Mi mente volaba mientras mis propios dedos me acariciaban el clitoris, recorrian mi vagina, se mezclaban con mis jugos, y mis ojos miraban curiosos las escena en el espejo como si de una pelicula porno se tratara.
Estaba completamente mojada, jadeando, y pensando que seguramente los vecinos me estarian oyendo, lo que por otra parte aun me excitaba mas. Mis dedos cada vez mas mojados jugando con mi botoncito particular, mi mano izquierda pasando de un pecho al otro, jugando con los pezones, duros, imaginando que eran tus manos las que me daban tanto placer.
Tuve una sensacion muy extraña, como cuando notas que alguien te mira por detras. Me gire y alli estabas tu. Una mano apoyada en el cristal para ver mejor, tu nariz pegada a el. Mi primera reaccion: ponerme roja como un tomate… hasta que baje la vista y vi tu otra mano: perdida en tu pantalon. Entonces sonrei. Recuerdo tu mirada atonita, no pensabas que me giraria y te veria alli, mirandome mientras me follaba a mi misma. Te lei el pensamiento. Querias irte, pero fui mas rapida que tu y le di al mando a distancia. La persiana se cerro enseguida dejandote entre ella y la puerta del establecimiento.
Me levante y sin vestirme ni taparme me dirigi hacia la puerta. Mis jugos recorrian mis piernas, dejandose arrastrar por la gravedad. Tu rostro cambio y tu mirada se volvio provocativa, sucia, ambiciosa. Te humedeciste los labios y tus ojos recorrieron mi cuerpo desnudo ante ti. Me puse justo enfrente tuyo, sin abrir la puerta, mi cuerpo pegado al cristal. Mis tetas quedaban chafadas contra el, pegue tambien mi coño, humedo, lo que hizo que el cristal se medio empañara. Bajaste tu boca a la altura de mis tetas y lamiste el cristal. Bajaste un poco mas y lamiste a la altura de mi coño.
Yo sonrei al ver la escena, me levante, fui a la puerta y abri. Te pusiste delante mio y sin mediar palabra te pusiste a follarme con la lengua. Mis gemidos se oirian perfectamente al otro lado de la persiana, pero no me importaba. Cogi tu cabeza con mi mano derecha y te aprete fuerte contra mi. Tu lengua se hundia cada vez mas entre mis labios y comenzaste a dirigir tu mano derecha a mi culo. Pasaste primero tu dedo por mi coño para humedecerlo bien y luego lo llevaste a mi otro agujero. Lo metiste con cuidado. Tu lengua iba cada vez mas rapido y tu dedo intentaba seguir su ritmo. Mis gritos de placer los callaste con tu mano izquierda, metiendo tus dedos en mi boca para que te los chupara.
Me dejaste libre por un momento, me empezaste a besar la boca, a comermela con ganas mientras me empujabas poco a poco hacia al mostrador de enfrente de la puerta. Me apoyaste en el y comenzaste a bajar otra vez hasta mis piernas, tu lengua recogia los jugos que caian por ellas. Me las limpiabas bien para que no quedara ni rastro de mi primera corrida en ellas.
Entonces te quitaste la camiseta y por fin pude ver lo que ansiaba ver desde hacia meses. No llevabas sujetador, como otra muchas veces. Las tenias tan bien puestas que no te hacia falta. Redondas, perfectas, tus pezones duros ya por todo lo anterior. Me puse a comertelos con un afan desmesurado, tomandolos con mis manos, pasando del uno al otro, apretandolos como queriendo exprimirlos, lamiendo cada milimetro suyo. Pasando mi lengua por tus pezones. Y me vino una imagen que he tenido muchas veces en mi cabeza. Te tumbe en el suelo. Me sente encima de tus tetas, haciendo coincidir tu pezon derecho con mi coño humedo.
Me movi adelante y atras. Tu teta quedo empapada por mis jugos. Repeti en el otro pecho. Tu gemias fuerte. Y repeti tambien en tu boca. Hiciste jugar tu lengua sabiendo donde y como hacerlo. Me levante de nuevo y volvi a recrear esa vision con tus pechos, cada vez mas pringados con mis jugos. Baje hacia tu coño y comence a comertelo lentamente. Abriendo tus labios con cuidado y metiendo mi lengua hasta hacerte explotar en un grito.
Tus manos jugaban con tus pezones pringados de mi, te acercaste tus pechos a tu lengua y te los lamiste. Te ayude a dejarlos bien limpios, al igual que habia hecho con tu coñito. Te pedi que hicieras tu otra vez lo mismo con el mio y asi lo hiciste.
Fue mi primera experiencia lesbica y todavia hoy la recuerdo y me mojo entera. Y todavia hoy me masturbo en mi despacho esperando girarme y verte alli, mirando con una mano dentro de tu pantalon.
Autor: bi1596
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