4 lecheadas de pibe pijón y pajero en público
No sé si es que se está acercando el verano o qué pero últimamente ando muy caliente, la pija se me pone dura de la nada y sí o sí tengo que sacarme la calentura. .
Durante las últimas semanas, me hice varias pajas públicas en un mismo lugar que ya tomé de punto. Es un puente sobre un arroyo que queda muy cerca de mi casa. Está rodeado de árboles y vegetación bastante alta. A lo lejos hay casas quinta o de campo. Les voy a relatar las 4 pajas que me hice ahí en estas últimas semanas.
1. La primera ocurrió una noche después de salir del gym. Volviendo en mi bici, pasé por mi casa pero seguí de largo para llegar a ese lugar. Tomé la calle para ingresar a ese puente, rodeada de árboles. Al final de la calle, hay una máquina excavadora abandonada, justo antes de la curva para doblar sobre la calle que da al puente del arroyo. Se me ocurrió que era una idea muy morbosa hacerme una paja ahí dentro. Así que así fue, me aseguré de que no hubiera nadie cerca, apoyé mi bici en las ruedas de la máquina y me subí a ella. Tenía la puerta abierta, cada tanto alumbraba un poco con mi linterna porque estaba todo oscuro. Por la calle por la que fuí, podía verse completamente la máquina. No dudé y pelé verga para hacerme una buena paja post entrenamiento. Me bajé la bermuda hasta las rodillas y empecé a pajearme frenéticamente. La adrenalina era tanta que en unos pocos minutos mi pija disparó 3 o 4 chorros de leche bien cargados sobre el volante, palanca y tablero de la antigua maquinaria. Justo después de acabar y guardar mi verga en mi bermuda (cabe aclarar que estaba sin bóxer y se podía ver claramente mi bulto y como se balanceaba mi verga mientras andaba en bici) veo que por la calle se asoma una bici, era un chabón que pasaba. Apareció justo después de que guardé mi verga. En ese momento pensé que si hubiese tardado unos segundos más para terminar, me iba a atrapar en plena paja porque yo estaba tan concentrado que no le estaba prestando atención a lo que estaba pasando a mi alrededor. El chabón me vió bajar de la máquina y después siguió su camino. Me pregunto qué habrá pensado al verme ahí o si desde lejos, mientras iba en la bici, llegó a ver mi silueta de pibe atlético y mi mano pajeando mi verga a toda velocidad.
Por supuesto que no limpié mi acabada y dejé todo el desastre ahí. Total era una máquina que nadie usaba.
2. La segunda también fue luego de salir del gimnasio pero un rato antes del mediodía. O sea, que era de día. Fuí al mismo lugar. Había dejado mi bicicleta apoyada contra el puente y me paré apoyado contra este al lado de mi bici. Saqué mi verga y me empecé a pajear un rato. Habrán pasado dos o tres autos, cada vez que pasaba alguno, me volvía a guardar la verga. En un momento la tenía guardada pero me estaba tocando sobre la bermuda de gym, de la nada, desde la calle por la que se entra se asoma un viejo en bici, venía muy lentamente. Me vió apoyado contra la pared (en ese momento no estaba haciendo nada). «Eh! Buen día,¿qué tal?» Me dijo. Lo saludé muy amablemente mientras pasaba, no lo conocía y el a mí tampoco. Justo después de que el pasara, me bajé un poco la bermuda para sacar la chota (ya dura) y los huevos y me empecé a pajear mientras veía como el viejo se alejaba. No se volteó en ningún momento pero si lo hacía, seguro que a la distancia llegaba a ver como el pibe amable que se había cruzado hace unos minutos se estaba clavando tremenda paja en aquel camino. Después de que el viejo terminó de pasar por el puente y desapareció a la lejanía, continúe por la calle y me senté al lado de un árbol, con la bici apoyada en este. A la izquierda, el camino que continuaba y a lo lejos había una casa de campo. A la derecha, el camino que llevaba de nuevo al puente. En frente, un campo con vacas y una tranquera que estaba abierta, lo cual me daba la pauta de que alguien podía andar por ahí. Era el momento perfecto, así que saqué mi verga por un costado de la bermuda y continúe con mi tan ansiada paja. Ya les conté que mi verga mide 17 cm, es gruesa y está ligeramente doblada en la punta. Es muy venosa, peluda y también tengo dos huevos bastante grandes. Le estaba dando una paja muy buena ahí sentado. Cuando acabé, se sintió como la gloria, los chorros de leche salieron disparados hacia el pasto. No sé si era por la calentura del momento pero eran bastante espesos y blancos, más que lo habitual. Sacudí un poco mi verga, la metí en mi bermuda, me levanté y me fuí. No se veía a nadie cerca.
3. La tercera también fue de noche. Después de salir de casa de un amigo a eso de las 8 de la noche, decidí pasar por el tan visitado puente antes de volver a mi casa. Apoyé la bici contra el puente y dejé mi mochila apoyada en ella. Necesitaba algo de inspiración así que puse uno de los videos porno que tengo descargados en mi galería, era una especie de compilación. Apoyé el celular en la bici, subí el volumen del video y empecé a mirarlo. No había señales de gente, era el momento perfecto para una paja riesgosa en público. Llevaba puesto un hoodie con la capucha y un short de fútbol (sí, adivinaste bro, sin bóxer debajo). Decidí llevar las cosas al siguiente nivel y me saqué el short para que quede completamente desnuda la parte de abajo de mi cuerpo. Colgué el short en el manubrio de la bici y me pajeé un rato así. Si llegaba a aparecer alguien, no me iba a dar mucho tiempo de reaccionar y ponerme el short, así que las probabilidades de ser atrapado en el acto, eran altas. Por suerte, nadie apareció y aproveché para pararme justo en el medio de la calle del puente y dejar mi acabada ahí. Chorros y chorros de leche mía abundan en ese lugar. Sacudí mi verga para limpiar un poco los restos de leche que tenía, me vestí y me fuí.
4. La última es la mejor porque sí, en esta sí me vieron en pleno acto pajero. Esta vez, decidí pasar el puente y sentarme directamente en el costado de la calle con la bici en el suelo a un lado. Estaba sentado abierto de piernas como a mí me gusta y pajeándome la verga por el costado del short de gym. Sí, también fue una paja post entrenamiento. Aproximadamente a las 7 de la tarde, por lo que todavía había luz de sol. Estaba muy entretenido jugando con mi chota grande, como siempre. Pasó una camioneta y una moto con un hombre y una mujer. Por supuesto que me guardé la verga antes de que pasaran y solo me miraron al pasar. Sé que tal vez parezca extraño ver a un pibe sentado al borde del camino pero se puede interpretar como que estoy descansando de una bicicleteada. Estaba a punto de acabar, cuando de la nada, aparece un hombre en bici viniendo desde la calle para ingresar al puente. Al principio no lo noté pero atrás de la bici llevaba a una mujer. El hombre vió perfectamente el momento en el que cerré mis piernas y me quedé sentado con los brazos rodeando a estas. Mi pija quedó medio apretada salida por un costado del short y entre mis dos piernas. Antes que el hombre pasara, me tapé con mi remera la verga (que aún así se podía seguir viendo). Él ni me miró y la mujer que iba atrás no se percató de la situación. Pensé en irme a mi casa después de esa atrapada porque me había dado un poco de vergüenza. Después pensé «Ya fue, estoy en una calle de campo por la que casi nadie pasa. Tengo que terminar». Así que así fue, pero esta vez me dirigí hacia el puente para terminar mi paja. Dejé la bici apoyada como siempre y aun costado de ella, terminé mi paja largando un par de chorros sobre la estructura del puente.
Creo que tengo las hormonas a full. Y sí, bro, tengo sexo. Mucho. Pero también me gusta explorar este lado morboso mío, hacer cosas que no debería hacer. Nadie sabe que hago esto ni se lo imaginaría nunca. Pero trato de disfrutarlo sin que nadie me vea (a excepción de ese ciclista fisura que se cagó de risa cuando me vió, algo que cuento en un relato anterior).
¿Qué opinan, la próxima vez debería pasar al siguiente nivel y pajearme completamente desnudo en ese lugar?
1. Super la paja en la maquina. Ese chico lastima que no te vio 🤤.
2. Deli 🔥👍esos sitios asi de solitos para morbosear.
3. Super rico. Yo tambien he dejado mi leche en caminos asi, pero totalmente desnudo, aunque he cogido la costumbre de comerme mi semen, ahora no desperdicio nada.
4. Genial jajajjaja. Esos vistazos que te dan los demas y no se dan cuenta que andamos sin ropa interior y casi ya eyaculando 🥵.
Hazlo. Desnudate completo y goza como nunca, la adrenalina que sientes es suprema y te hace sacar mucha leche rica