con una universitaria desconocida.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por novatohot.
Eran aproximadamente cuarto para las siete de la mañana, arranqué el auto como era costumbre y le llamé a mi novia diciéndole que iba a pasar por ella para llevarla a la Universidad.

Me dijo que ya me estaba esperando en la puerta de su casa.

Ese dia tuve un sueño erótico con ella, y pensaba en contárselo y así ganar esa mamada matutina que cuando había chance y poco tráfico era de lo más placentero.

Me puse un short holgado, sin trusa y me jugué varias veces la verga para que se semi parara.

logré el primer cometido. mi verga se puso a mil de solo pensar que mi guapa novia lo chuparía.

Pero cual fue mi sorpresa que al llegar a su casa (cinco minutos después), estaba en la puerta ella con su mamá.

Mi pene se apenó.

Volvió a su estado original y pareciera que tuviera frio..quedó arrugado y saludé con una amable e hipócrita sonrisa.

-Decía mi mamá que si la llevas conmigo a la escuela, que tiene que ir por lo de la inscripción de mi hermanita- Dijo ana, mi novia.

-Claro que sí – murmuré… ya sin otra cosa que decir, subieron las dos al auto y las llevé a su destino.

Se despidieron con un beso en la mejilla, y no pude evitar tocarme nuevamente la verga viendo esos dos traseros de los cuales solo uno podía tocar y el otro, ciertamente hermoso (el de mi suegra) solo lo veía balancearse de un lado a otro.

Di vuelta en la glorieta y en mis pensamientos morbosos nació una nueva idea.

Masturbarme en el auto.

Inmediatamente estacioné a la orilla de la avenida, que por cierto pasaban muchos autos, por que era la hora de entrada a la Uni. y empecé a sobar mi entrepierna, mi verga se estaba poniendo muy dura.

Del otro lado de la calle pasaban dos chicas muy lindas, faldas de mezclilla y culos respingados.

Inmediatamente saqué mi verga y entre abrí la puerta, una discretamente me vió…pero se hizo la desentendida y le dijo algo al oido a su amiga.

Mientras tanto yo ya me estaba haciendo una deliciosa puñeta a toda velocidad.

Pero no me di cuenta que en una banca justo detrás del auto se había sentado una chica en falda corta blusa pegada y unos bonitos senos. grandes jugosos, y sus ojos no dejaban de verme.

Como asustada y sin saber que decir solo se paró y seguía viéndome.

Al verla yo, por el retrovisor, guardé mi verga en mi short y como pude traté de disimular pero ya era demasiado tarde.

Se aproximó a la puerta del auto y me dijo.

Continúa o grito en este momento.

se paró justo en la puerta y en un segundo abrió y se sentó en la silla del copiloto.

No lo podía creer.

La había visto en la uni. estudiaba en el salón de al lado de mi novia.

Pero ella quería llevar las riendas del asunto.

Sácatela. Me dijo en un tono autoritario.

Yo estaba lleno de nervios pero al ver esas ricas piernas se me olvidó y volvió a mi el espírito exhibicionista.

Wow Exclamó, no pensé que tuvieras todo eso guardado ahi…

Y ahora que hago, le dije.

– Lo que estabas haciendo antes de que me descubrieras- contestó.

Me la empecé a jalar nuevamente y que sensación era ver que una chica casi desconocida estuviera sentada a centímetros de mi. cerré los ojos, subí los cristales semi polarizados y uff que delicia, no me di cuenta cuando me dijo que me la chupara, creo que no lo dijo pero cuando volví a abrir los ojos, la preciosa nena estaba comiéndome la verga de una manera deliciosa.

No tardé nada.

Me vine inmediatamente en su cara. Mojé mi short y el cuello de su blusa, y su boca parecía que acababa de comer manjar.

No lo puedo creer dije en voz baja.

Yo tampoco me dijo en lo que se quitó la tanga y la puso en la guantera.

Se alzó la falda y dijo: "Ahora veamos como me pagarás este favor que te acabo de hacer"…

Saludos.