El placer propio de un chico

La masturbación juega un papel importante en la vida de todo hombre. En este relato hablaré de la forma en la que la auto satisfacción ha estado presente en mi vida y la manera tan especial en que nos hace sentir aquel placer.
El placer, una palabra que provoca que por nuestra cabeza pasen una infinidad de ideas, pero hay un tipo de placer en específico que genera en las personas sensaciones que a veces son complicadas de describir, este es el placer sexual. Hay una etapa en nuestras vidas en la que este placer comienza a tomar importancia en nuestro día a día, una etapa llena de descubrimientos y primeras veces, una etapa donde situaciones que quizá antes no percibiamos ahora son fuente de nuestra curiosidad y morbo, de nuestro despertar sexual que personalmente en ninguna otra ocasión se ha sentido más potente, donde pequeños acontecimientos logran encender nuestro fuego interior y excitarnos por completo.

Es esta etapa a la que me quiero remontar en este momento, como muchos lo habrán imaginado estoy hablando de la pubertad. Los 14 años pueden ser cruciales en la pubertad de muchos chicos así como lo fue para mí, recuerdo estar en último grado de secundaria y percibir las hormonas de los jóvenes varones que tenía de compañeros en su máximo esplendor y las pláticas sobre sexo son muy recurrentes. Debo admitir que a mi edad no tenía mucho conocimiento sobre la masturbación pero pronto me adentraria en este mundo que incluso puede llegar a obsesionarnos.

En la época en la cual mi pubertad tuvo lugar los smartphones eran algo que apenas comenzaban a popularizarse, no era común que todos tuvieran uno como actualmente pero a los jóvenes nos emocionaba la idea de adquirir uno. Recuerdo haberles pedido a mis papás un smartphone como regalo de Navidad, pero me lleve una decepción cuando decidieron darme un teléfono que si bien estaba actualizado para la época no contaba con una pantalla táctil que era la mayor novedad, mis padres creían que aún no tenía edad suficiente para tener uno de aquellos, no obstante mi nuevo celular contaba con muchas funciones de entre las cuales el acceso a internet llamo bastante mi atención. Recuerdo en aquellos tiempos estar interesado en cierto actor que cada vez que salía en televisión generaba un calor en mi que no podía comprender a mi edad, ahora se que lo que sentía por él era una fuerte atracción sexual, podía pasar horas viéndolo en pantalla, admirando su físico, suspirando por su piel, embobandome con su voz, esa atracción era tal que el buscador en mi celular estaba destinado a él, buscaba imágenes suyas y pasaba mi tiempo observandolas y fue así que en un determinado momento descubrí que agregando unas cuantas palabras en el buscador podrías encontrar imágenes que logran dilatar tus pupilas, siendo él un hombre muy atractivo con un cuerpo tan varonil y musculoso no fue difícil encontrar fotos donde modelara con nada más que un pedazo de tela en su entrepierna y el resto de su cuerpo al desnudo, aún recuerdo lo que sentí en aquel momento, la emoción, mi corazón acelerando sus latidos y un interesante cosquilleo que recorrió todo mi cuerpo y que por alguna razón se detuvo con intensidad en mi pene, había tenido erecciones antes pero tal vez de manera involuntaria, está vez era diferente y la sensación era nueva, me volví más sensible al roce de mi pantalón ¿Que me estaba pasando?, Tenía que ir al baño y saber que me sucedía, decidí bajar mis pantalones al igual que mis boxers quedando con mi pene al descubierto, comencé a tocarlo y descubrí que entre más lo apretaba más placer sentía, seguía tocandolo cada vez más rápido y como si fuera por instinto sabía que movimientos tenía que hacer, recuerdo haberlo hecho con ambas manos y a pesar de estar experimentado algo tan novedoso mi mente no dejaba de pensar en las imágenes que acababa de ver, ese cuerpo, esa piel y esa mirada estaba penetrada en mi mente, mi cabeza sentía placer al igual que mi cuerpo. No recuerdo si logré eyacular o no pero lo que si recuerdo es que como todo hombre no pensé en hacerlo de nuevo, quizá haya sido satisfactorio pero no estaba seguro de que fuera correcto, en fin, todos nos hemos mentido a nosotros mismos de esta forma, sentirnos culpables después de tal acto pero volverlo a hacer simplemente por qué es una experiencia fascinante, tu cuerpo tiembla con ciertos choques de energía que te hacen querer vivir en ese momento para siempre, solo tú imaginación haciendo realidad tus profundos deseos y tu cuerpo desnudo que provoca que cada doce con tu piel despierte en ti un fugaz calor. Y el momento final es la parte que mejor se siente, tus piernas tiemblan sin control, tus ojos pierden la vista, dentro de ti parece que algo está explotando, necesitas gritar, tu pene se pone más rígido y sientes una tibia sensación recorriendo lo hasta que por fin llega a la punta y sale disparado, es como si por un segundo experimentarás el máximo placer que existe en el mundo, sin embargo lo frustrante es que este momento dura tan poco pero toda la experiencia vale la pena.

En aquel entonces y durante casi dos años mi rutina de masturbación era encerrarme en el baño, buscar imágenes eróticas en mi celular y disfrutar de mi sin importarme nada más. Si pudiera regresar a aquella edad sería para sentir la excitación de la forma tan potente en que la sentía, recuerdo el morbo de ver mi cuerpo desnudo frente al espejo, recuerdo el intenso deseo de tocar mi pene y no dejar de hacerlo, nunca era suficiente para mí, podía llegar a masturbarme tres veces seguidas. Pero llega un momento en el que comienzas a madurar y tú cuerpo tambien, esa sensibilidad para excitarme ya no era igual y la intensidad con la que lo haces tampoco es la misma pero la intimidad que un hombre tiene con su propia sexualidad jamás termina, solo evoluciona y cada vez descubres nuevas formas de sentir placer. Esta historia continuará y les relataré más acerca de como este chico ha experimentado su propio placer.

Todos tenemos una anécdota relacionada con la masturbación, puedes compartirme la tuya en los comentarios o en mi correo: [email protected]

Gracias por leer, espero te haya gustado.