En la ducha………… por MARQUESADE
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por MARQUESADE.
Como te comenté, voy a darme la ducha necesaria para rebajar mi tensión sexual (Porque… ¡Cómo me pones nena!).
Tengo tan fresco en mi memoria e imaginación las cosas que nos dijimos, que te noto aquí presente, a mi lado.
Sigo notando la tibieza de tus besos, el ardor de tus caricias, la calentura de tu cuerpo (¡¡Buffffffff!! Nena… ¿Porqué mi imaginación es tan grande y tú te conviertes en un imán tan atrayente para mí?).
Cómo me cuesta bajarme los pantalones y los calzoncillos al estar mi sexo tan henchido del deseo que siente hacia tí, nena.
Cuando se libera de la prisión de mi ropa se eleva hacia el cielo, libre, anhelando tus caricias y tu cuerpo.
Nena estoy desnudo delante de la ducha, y tengo la sensación de estar ardiendo…Creo que me ducharé con agua fría para calmarme un poco.
Pero no sé si mi cabeza e imaginación me dejaran calmarme y menos aún mi sexo tieso y palpitante, desafiante a todo. Lo mismo me dejo sucumbir pensando en tus encantos, y es que estoy tan excitado que casi duele la hinchazón de mi pene.
Me meto en la ducha, cierro la mampara, regulo la temperatura del agua, y cuando noto que está a la temperatura que deseo, cierro los ojos y me dejo inundar por el agua tibia…¡Qué sensación más agradable notar cómo mi cuerpo, poco a poco, es bañado y empapado por esos chorros de agua!
Cuando ya noto todo mi cuerpo empapado, mis manos empiezan a frotarlo, por todas partes, para que esa agua limpie bien mis poros y esas partes mías un poco más ocultas a ese agua. En esos momentos, sin poder evitarlo, deseo que mis manos fueran tus manos, que serían más suaves y delicadas con mi cuerpo, ¿o tal vez no serían tan delicadas?, Quizás, acariciarías con fuerza dejando las marcas de tus dedos en mi piel ( uhmmm ¿Porqué no dejo de pensar en esto?, Así no arreglaré nada y seguiré tan excitado como hasta ahora… )
Corto el agua, ya estoy plenamente empapado por ella, y detengo toda actividad unos segundos, cierro los ojos y me dejo llevar por las sensaciones de ese momento.
Noto todo mi cuerpo mojado y cómo las gotas de agua lo recorren, cayendo y goteando a mis pies, esas gotas de largo recorrido que caen por mi cuello, siguen por mi pecho, algunas se introducen en mi ombligo llenándolo, y al momento surgen en un chorro más grande atraídas por la fuerza de la gravedad, después siguen por mis ingles y ya caen libres por mis muslos y pantorrillas hasta llegar al plato de la ducha e irse por el desagüe…
¡Cómo puedo notar los miles de regueros de gotas que recorren mi cuerpo!, Y es que estoy tan sensible nena…, Y eso lo consigues tú: Tenerme así de excitado para que note cualquier sensación y mi deseo se haga más intenso.
Ahora me detengo en las gotas que caen desde arriba, de mi cabeza, de mi pelo mojado hacia mi espalda, hombros y pecho. Casi puedo percibir el sonido que hacen al golpear mi piel. ¡Dios mi miembro está a punto de explotar de henchido que está!, Lo noto tan sensible, que las minúsculas gotas de agua rodando por él son como arañazos de unas uñas afiladas… Esas uñas que imagino que tienes: largas y pintadas de rojo pasión, arañando la punta de mi glande, noto como cada gota recorre y al final cae con un golpe sordo al suelo.
Estoy como en trance. Escucho todos los ruidos con los ojos cerrados. Mi cuerpo se arquea y mi vientre sube hacia arriba y mi pene erecto.
No puedo más: ¡Necesito tocarme e imaginar que tus manos me tocan! ¡Que mis manos son tus manos acariciando mi cuerpo!, …
Me pongo en la palma de mi mano una buena cantidad de gel, lo noto cremoso y blanco en mi piel, unto también mi otra mano y así con las dos llenas, restrego el cremoso y blanco jabón por mi cuerpo…¡¡¡Uhmmm me gusta sentirlo frío en mi piel caliente!!! Aprecio que se convierte por arte del gel, en más suave y resbaladiza, y, pienso inmediatamente en cómo se escurrirían nuestros cuerpos si estuvieran embadurnados del mismo los dos, notaría tu cuerpo restregándose con el mío, tus pechos frotándose con el mío, tus pezones erectos, casi clavándose en mi torso, cómo mi pene se restregaría, creciendo entre tu sexo, cómo mi glande se atrevería a entrar, casi escurriéndose, por los labios mayores de tu sexo, perdiéndose en el interior de ellos…
Te oigo gemir y suspirar mas rápido, humedeciendo mi oído, te siento morder mi lóbulo de la oreja…
Me estremezco sólo de notarlo, siento mis manos que van solas, ¡no obedecen a mi cabeza!, es como si fueran las tuyas, pienso en tus ojos y como recorrerían mi cuerpo y mis manos: Obedecen a esa mirada…
Acarician mi pecho y bajan por mi vientre, se entretienen mucho en untar bien de gel mi miembro, dedicándose a masajearlo bien, delicadamente, con tus dulces manos… Siento como se escurre entre ellas y lo sensible que está, percibiendo cada caricia tuya… Con una profundidad casi…¡Lujuriosa!. Tu otra mano pasa a acariciar mis testículos, los aprieta con ganas y tira suavemente de ellos, estrujándolos delicadamente, mientras la otra pajeaba sin contemplaciones mi pene.
Cómo se tensa mi cuerpo, cómo se inclina hacia atrás para sentir más todas las sensaciones que me estás dando nena…
Con mis ojos cerrados, sintiéndote a mi lado, acariciándome con esa lujuria escondida detrás de tus ojos, no puedo evitar que mi boca se abra un poco y deje escapar unos gemidos… como los aullidos que el lobo daría a la luna…mis gemidos son las palabras con las que quiero acariciar tus oídos.
Mi culo aprieta hacia delante como queriendo penetrar una vagina invisible, pero muy real en mi imaginación, haciendo que mi pene crezca más y más entre mi mano.. que es la tuya..
Decido, al fin, abrir de nuevo el agua y regulo la temperatura un poco más fría que antes, ¡Me encanta que el agua enfrié la calentura de mi cuerpo!, Pero esta vez dejaré que sólo caiga sobre la mitad de mi cuerpo: La mitad derecha, donde mi mano…, que es la tuya, masajea sin tregua mi miembro a punto de explotar…
¡Qué difícil es explicar la sensación que me da el agua fría en la mitad de mi cuerpo, mientras la otra mitad mantiene la calentura! Es como si tu cuerpo estuviera sólo encima de una parte mí, y tu piel sedosa tapara sólo un costado de mí, dejando el otro costado a los fríos elementos…,
Uhmmm, tu mano agarra con más fuerza mi pene y se mueve hacia arriba y abajo con más detenimiento, oculta y libera a un ritmo sosegado y ,a veces, más rápido, a mi glande, casi encarnado ya por la pasión…
¡¡¡Buffff, entre el frío, el calor, y la sensación de tenerte enfrente de mí mirándome con lujuria, tocándome como me tocas, y mordiéndote los labios con esa mueca pícara, me doy cuenta que no aguantaré mucho mas!!!!…, Así que… suelto un momento mi pene, hago un pequeño giro de muñeca, colocando el pulgar hacia abajo en vez de hacia arriba, ahora el pulgar es el que más cerca está del nacimiento de mi miembro, mientras mis otros cuatro dedos están por encima… De este modo, imagino, que en ese momento has decidido ponerte de rodillas, despacio y mirándome a los ojos, y que durante la maniobra tu pecho ha rozado mi polla…¡¡como por casualidad!!…
Y para ser un poco más malita, has jugado con tu pezón acariciando con fuerza mi glande, mientras sigues mirándome lascivamente…
Otra vez mi cuerpo se arquea más y más, mi espalda ya topa con la fría pared de la ducha, así que no puedo arquearme más…, Pero ahora mi mano empieza a moverse lentamente sobre mi polla, el frío del agua no le afecta, pues sigue ardiendo en mi mano… Ahora imagino cómo tu boca se abre despacio, dejándome ver tus dientes blancos y la lengua sonrosada y húmeda dentro de ella, saliendo como una alfombra rosada a recibir al más importante de los magnates del mundo… Tu lengua acaricia suavemente mi glande, que se hincha más ante esta caricia, y después tus labios se cierran golosos en torno a mi miembro…, Enseguida noto cómo tu boca empapa mi polla con tu saliva, mientras el agua moja tu cara y la recorren en regueros de gotas…Veo cómo gotean los chorros por tus labios y barbilla, mientras engulles mi polla… Mi mano, que ahora son tus labios carnosos y lujuriosos, acompasa al ritmo que se supone que me la mamarías.. Y, despacio, veo como mi pene desaparece en tu boca, casi tragándotelo entero, casi tocando tu garganta y después vuelves a liberarlo de tu boca, dejándolo escapar de nuevo lentamente… Y, todo eso sin dejar de mirarme… Con esa mirada que me derrite entero… Que me hace temblar las piernas…
Ahora, noto cómo tu otra mano vuelve acariciar mis huevos, amasándolos y apretándolos, tu ritmo se incrementa viéndome ya casi rendido a tus caricias…Me encanta que se mezclen los sonidos guturales que haces al tragarte mi polla y los gemidos que se me escapan del interior de mi cuerpo,¡ No voy a poder aguantar mucho más!…, Sobre todo cuando te dedicas a pellizcar suavemente mi escroto…
Así que libero mi cuerpo de la tensión, mi caderas aprietan para que mi polla penetre más y más en tu boca, a un ritmo ya loco, mi mano, que es tu boca, aprieta ya salvajemente mi pene… Y sale disparado, junto con el gemido de mi orgasmo, todo el semen acumulado en mi interior… Abro los ojos y… veo cómo sale disparado de mi glande… Tan fuerte sale que los primeros chorros van directamente a la mampara, amontonándose en un punto de ella, y después va bajando en surcos de blanca y transparente leche caliente…
Ya el ímpetu deja de ser tan fuerte y los disparos de leche bajan de intensidad, hasta que ya no son chorros si no regueros de leche caliente que mancha mi mano con ella.
Vuelvo a cerrar los ojos y te imagino de nuevo de rodillas, con tu boca pegada a mi polla, con tus labios todos llenos de leche… Allí estás, utilizando mi polla para pintarte los labios con ella, así sí que mis piernas tiemblan más y mis gemidos se agudizan aún más…Viendo tus mejillas, tus labios, tu lengua… Toda llena de mi leche caliente y… sobre todo tu mirada…. Esa mirada que me dice que has disfrutado tanto como yo de ello…
¡Bufffffffffffff nena!… Dejo pasar unos segundos guardando esas sensaciones para contártelas, como te dije que haría y como tu me dijiste que harías, así que termino de ducharme.
Son casi las cuatro de la mañana, me voy a la cama, sé que tendré unos sueños maravillosos contigo, me recreo de nuevo en las fantásticas sensaciones que he tenido junto a tí en la ducha, para que no se me olviden… Y poder contártelo con todo lujo de detalles, tal y como te comenté, en cuanto nos veamos…
De este modo, yo también estoy esperando ansioso cómo fue tu ducha, tras haber estado charlando y calentándonos mutuamente… Seguro que el relato que tú me cuentes me hará desear darme otra ducha…
Bueno, ya estoy vistiéndome más calmado, así relajado, pero sé que esto no durará mucho… que esté calmado… no, no durará mucho…, en cuanto vea tu nick como conectada ya estaré sintiendo como crece la excitación en mi…, NENA.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!