Le hice una paja a un oficial de la policìa en el autobus y asì empezò esta historia.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Esa mañana yo habìa salido muy de madrugada de la casa de mis padres, regresaba a la ciudad en la que vivo desde esa època, despuès de haber viajado 1 hora, pasamos por un pueblo grande, subiò un grupo de personas las que descendieron en la localidad siguiente, con excepciòn de un oficial de policìa, el mismo se habìa sentado en el asiento vecino al mio, pero del otro lado del pasillo.

Pasamos por dos localidades mas, la gente que quedaba en el autobùs fue descendiendo y quedamos solo dos viajeros, el policìa y yo, ya estaba amaneciendo, generalmente yo no duermo viajando, mirè hacia mi costado derecho y vi al oficial de policìa profundamente dormido, aprovechè para mirarlo y estudiarlo bien, el hombre vestìa su uniforme azul marino y como era pleno verano estaba en mangas de camisa arremangadas, me detuve a contemplar su rostro, fue un deleite poder hacerlo y que el no pudiera percatarse de eso.

El hombre era muy alto, rubio, su tez muy blanca contrastaba con el azul marino de su uniforme, yo soy gay y estaba fascinado contemplando a ese hermoso hombre, su perfil, podìa decirse que era perfecto, la frente que dejaba ver su gorra era amplia, cejas bien arqueadas que nacìan de la base de una nariz perfecta, su boca entrabierta, no era menos perfecta que su nariz, tenìa unos labios carnosos, especialmente el inferior y un mentòn con un hoyuelo en el centro, mas parecìa a un conocido galàn de cine que a un oficial de policìa.

Estaba profundamente dormido, baje mi vista para ver su paquete y mi sorpresa fuè monumental, se le habìa parado la pija y se apreciaba que la tenìa de un tamaño que yo imaginaba, era descomunal, esa maravillosa verga le habìa levantado el pantalòn de tela muy fina y formaba un arco que le llegaba hasta la cintura, parecìa que el cinto le quitaba espacio y entonces la tenìa arqueada, yo sentìa un loco deseo de sobàrsela, de sacàrsela y darle una mamada hasta sacarle toda la leche.

Me habìa calentado de tal forma que se me habìa parado la pija, me sentìa agitado, mi pròstata latìa con fuerza y comencè a estimular esos latidos con fuertes movimientos musculares y mi placer fue aumentando, yo seguìa estimulàndome a la vez que contemplaba a ese hermoso macho dormido, centrè mi mirada en ese tremendo bulto que este macho tenìa, mi placer fue aumentando, me estaba pajeando sin tocarme siquiera, con la mente a ful llevaba la paja ya a un grado de goce maravilloso, ya no habìa vuelta atràs, los espasmos de mi pròstata me avisaban que ya eyaculaba, el macho dormìa como un liròn y yo comecè a sentir que llegaba a lo màximo del placer , sin quitar mi vista de su cara, sentì que me llegaba la acabada mas larga y gozada que yo haya tenido.

Contuve las ganas de gemir de placer mientras eyaculaba y me mojaba el calzoncillo, luego cerrè los ojos, me quedè un instante asi, ese macho habìa logrado sin saberlo que yo me hiciera una paja, con el solo esfuerzo de la mente, sin tocarme, me quedè contemplàndo ese inmenso paquete que este macho tenìa y no me percatè que el se habìa despertado y me estaba mirando, cuando me di cuenta ya era tarde, me habìa descubierto miràndole la pija parada, para mi sorpresa, el se la agarrò como demostrando satisfacciòn por haberme descubierto miràndole la pija, me sonriò y me guiñò un ojo, yo le devolvì la sonrisa y ya mas seguro lo saludè dicièndole:

yo -Buen dìa.

el – Buen dìa (sonriendo)

yo – ¿Puedo sentarme al lado tuyo?

el – Por supuesto, es un placer (sonriendo) Veo que me estabas mirando.

Yo, ya sentàndome al lado suyo y totalmente animado por su sonrisa le dije.

-¡Que paquete llevas ahì! No dudo que en bolas, te envidiarìa mas de un actor porno.

el sonriendo con satisfacciòn -No es para tanto, pero estoy bien armado, esta me da muchas satisfacciones y en cuanto a vos ¿Que me decis de tus gustos? ¿Acaso, te gusta la carne en barra?

yo – ¡Muero por una pija como la tuya!

el – (riendo) Me encanta lo que me decis, me alagas profundamente, gracias, no todos los dìas escucho algo asì.

Yo ya totalmente seguro de que algo pasarìa entre los dos, le dije -¿Me dejas palparla?

el -Es totalmente tuya.
disfrùtala.
aquì estamos solos.
el chofer maneja,.
no nos verà.
dame una mamada.
pajeame .
desprendeme la bragueta.
sacala.
te la doy entera.

Le bajè el cierre del pantalòn, metì mi mano y explorè todo ese interior dentro del calzoncillo, su pija estaba bien parada, mis manos se perdieron dentro de esa espesura de pendejos, bajè hasta sus bolas, el tio tenìa dos huevazos hermosos, le saque la pija afuera y comencè a masturbarlo, luego le di una mamada de esas que yo se dar, el macho se retorcìa de placer, me agarrò con ambas manos la cabeza y me la hacìa llegar hasta la garganta, yo me ahogaba pero resistìa, el placer de haberme levantado a semejante macho me habìa calentado al màximo, se la dejè meter en mi boca hasta lo que pude, creo que hasta la garganta y lo hice explotar de placer, sentì los potentes chorros de su semen en mi garganta y sus suspiros de placer, luego el relax total, el oficial de policìa se acomodò la ropa, al terminar de hacerlo, me diò un beso en la boca, me metiò su lengua y la hizo jugar con la mìa, despuès me pasò su brazo por sobre mi hombro y asi nos quedamos en silencio, al cabo de un rato, me preguntò.

el- ¿Cuando te veo nuevamente? Sos genial mamando la pija, aparte de eso, tengo muchas ganas de cogerte, tambièn me gustò como me pajeaste al principio y cada tanto me gusta hacerme la paja, espero tener con vos un conocimiento que perdure hasta que podamos los dos.

yo-¿Que puedo decir yo despuès de haberte conocido? Sos el macho que siempre he anhelado tener, vivo solo, mi casa serà la tuya, de aquì en mas estarè para complacerte.

el -Putito hermoso, hoy ha sido mi dìa de suerte, me tendràs en tu cama todas las veces que quieras.

Acto seguido nos sentamos como dos pasajeros normales, ya estabamos llegando a la ciudad, me diò su telèfono, le di el mio, quedamos en vernos muy pronto.

Pasaron varios dìas, no me llamò, pensè que no lo harìa ya, una noche estaba mirando la tele antes de irme a dormir, sonò el telèfono ¡¡¡Era el!! se disculpò por no haberme llamado antes, me preguntò si estaba solo, al decirle que si, me dijo que en dos horas estarìa libre, le dije que lo esperaba con mchas ansias, llegò dos horas y media despuès, al llegar cerrè la puerta y nos fundimos en un abrazo en un total silencio, luego besos, mucha franela en la cama, los dos en pelotas, me acomodò mirando el techo, me hizo abrir las piernas y se dedicò a jugar con su pija parada en la puerta de mi culo, la cabeza de su pija ya estaba mojada, jugaba hacièndome entrar parte la cabeza luego la retiraba y asi probò varias veces hasta que me dijo -Ahora sentiràs dentro de tu culo mis 21 cm, te voy a pegar una culeada que no te imaginas.

Dicho esto, comenzò a metermela suave, yo ya habìa tenido a esta altura varios machos, pero ninguno con una barreta como la este oficial de policìa, sentì sin dolor y con infinito placer como semejante verga penetraba mi culo y llegaba hasta lo mas profundo de mi, sentì ese acolchado de pendejos que se apoyaban en la puerta de mi ojete, ya la tenìa a toda bien adentro, el placer que sentìa yo es imposible de describirlo con palabras, ese macho al que yo habìa conocido en el autobus ya estaba en mi cama y me tenìa ensartado en su fabulosa pija de 21 cm.
,me pidiò que lo encerrara con mis piernas y lo apretara todo lo que yo pudiera, lo hice como me pidiò y comenzò a comerme la boca besos, luego me besaba por la garganta, me mordìa el mentòn mientras comenzaba a embestirme con fuerza, como un verdadero potro alzado, nadie podrìa escucharnos, estàbamos los dos solos y ese macho me culeaba con toda la polenta que tenìa, con todo el placer que el me decìa que yo despertaba en el .

el (mientras me culeaba) -¡Que putito divino que sos!! ¡¡¡¡Que hermoso ojete para meter mi pija que tenès!! ¡¡Que boca para mamarme la pija!! Sos un encanto,.
te amo.
putito rico.
¡¡¡Voy a vaciar toda la leche de mis huevos en tu culo!!
.
¡¡¡Ahì voyyyyy.
te vacìo mis huevos dentro del culo .
mi amor!!!!! ¡¡¡¡¡¡Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!.

Sentì que el oficial de policìa habìa acabado dentro de mi, que me habìa vaciado la leche de sus bolas y ahora respiraba cansado sobre mi pecho hasta que se quedò medio dormido, solo entonces me dijo:

-No te voy a sacar la pija, ahora dentro de poco me repongo y espera el segundo polvo, putito caliente, sediento de pija, me has calentado como nadie y ahora sabràs quien soy en la cama.

Efectivamente fue asì, el oficial de policìa demostrò en esa primera noche que pasamos juntos que era un volcàn como macho y yo mas que feliz por haberme levantado a semejante semental,ese macho en pelotas parecìa una escultura griega o romana, con la diferencia de que tenìa una sobervia pija de 21 cm, cosa que no se ve en las estatuas de la antigua Roma o Grecia.

Solo me falta hablar de como le gustaba que a veces le hiciera la paja, el se acostaba en pelotas y abrìa los brazos, tambièn las piernas y me decìa:

-Putito mio, soy tu muñeco.
jugà conmigo, besame las axilas.
chupame las tetillas.
baja luego mas abajo .
mete tu nariz dentro de la maraña de pendejos y sentì mi olor a macho.
chupame los huevos.
subì con tu lengua por la pija y chupame suave la cabeza.
cuando yo te diga .
comenzà haciendome la paja hasta que me salten los chorros de leche.
dale putito rico.
tu macho espera que lo hagas sentir loquito de placer.
dale mi amor.
solo vos sabes como acerme gozar.

De esta forma comenzaba siempre la sesiòn de paja, puedo decir ahora con conocimiento de causa que no hay mayor placer que hacerle la paja a un macho y hacer que se agarre de las sabanas y se retuerza de placer, pero a eso solo lo he podido sentir despuès de haber pajeado a un macho como este con una pija de 21 cm, el abrìa las piernas, yo me situaba en medio de ellas, le agarraba la pija con ambas manos y lo pajeaba, a veces mientras le hacìa la paja le acariciaba los huevos y el me iba pidiendo lo que le gustaba que le hiciera, a veces tambièn, en medio de la paja una
chupada de pija y asì el oficial de policìa gozaba de todo lo que yo le brindaba.

Pasò un tiempo desde que nos conocimos y solo entonces me dijo que era casado que tenìa dos hijos adolescentes que el estarìa conmigo asi en encuentros semanales, a veces una noche entera para los dos, a veces venìa cansado despuès de haber estado muchas horas en servicio y para no dormir en la subcomisarìa, venìa a mi departamento, se bañaba comìa algo y nos acostàbamos pero antes de dormir, con seguridad y sin fallar me culeaba como solo el sabìa hacerlo o yo lo pajeaba como yo sabia hacerlo.

El no vivìa en esa ciudad, de esa forma tenìa la posibilidad de quedarse conmigo casi todas las semanas, pasò un tiempo y un dìa me dijo que habìa sido trasladado a otra ciudad, de esa forma todo terminò con el oficial de policìa, la despedida fuè muy triste para los dos, nos hablamos muchas veces pero despuès el no me llamò mas, yo lo entendì y en las ùltimas llamadas le dije que habìa sido para mi, el macho total, que yo habìa soñado con el, que alguien asì como el no puede existir.

En fin estimados lectores, esta ha sido la aventura que yo vivì con un oficial de la policìa, para mi un ser casi irreal.