Los temores que tiene un nene al ir descubriendo su sexualidad.

Este relato trata de cómo un nene va descubriendo su sexualidad y tendencia homosexual, con los temores que le infunden su padre y madre al decir que el sexo es cosa del diablo..
Como en todos mis relatos los escribo para que les guste a los lectores de varias categorías, este está en la de masturbación masculina, gay, exhibicionismo, travesti y un poco de incesto.

Los que han leído mis relatos saben que no son reales —– Nada es verdad nada es mentira todo depende del cristal con que se mira —- seguro muchos de los que lean el relato recordaran que tuvieron temores similares o parecidos a este nene en su despertar sexual, espero les guste.

Vivíamos en una ciudad puerto por lo que el clima era caluroso casi todo el año, la familia se componía por mi papá Isaac, mi mamá Ana, mi hermana Sara dos años menor y yo David.
En la misma ciudad viví un hermano de mi papá que se llamaba Mateo casado con Estela y tenían una hija Gabriela un año más chica que yo y Samuel que era cinco años menor que yo, mi papá tenía una hermana Sofía que vivía en otro país y no la conocía.
Por parte de mi mamá toda su familia vivía en otro país y no los frecuentábamos por lo que no los conocí bien.
Mi familia descendía de afroamericanos, por lo que éramos negros, no tenía problemas con los amigos ni en el colegio aunque yo era el único negro, no pasaba de algunas bromas a veces.

Mi papá era pastor de una congregación Cristina y tenía a cargo el templo y las asambleas de la ciudad donde vivíamos, con eso recibían dinero para vivir bien, mi tío Mateo no estaba muy metido en la congregación por lo que no tenía un puesto alto en ella, pero tenía un buen trabajo.
La congregación Cristina donde era pastor mi papá tenía reglas algo estrictas, a los nenes les hacían la circuncisión a los ocho días de nacidos, teníamos que orar al despertar, antes de desayunar, comer, cenar y de dormir, no podíamos asistir a fiestas de cumpleaños o escolares, de música tenia que ser solo Cristina, en la televisión solo veíamos películas religiosas, canales culturales, canal Cristiano, podíamos ver algunas películas de dibujos animados o de corte familiar y todos los deportes.
Empiezo mi historia diciendo que desde los cinco años tengo recuerdos que ya me gustaba andarme tocando la pija, mas cuando se me ponía dura porque me daban mucho cosquillas sintiendo placer, pero si mi papá o mamá me veían que me la tocaba, me decían que no fuera cochino, que no me tocará el pene, por lo que solo me tocaba si no me veía.

Cuándo cumplí ocho empezó mi curiosidad y morbo por el sexo, todo fue porque desde bebé me hicieron la circuncisión por cuestiones religiosas, por lo que cuando no la tenía parada solo se veía la cabecita pegada al cuerpo y las bolas pequeñas colgadas abajo, al ir a los baños en el colegio y mirarle las pijas a los amigos y compañeros que no estaban circuncidados pensaba que tenía una pene muy pequeño, porque varias veces los amigos al vérmela decían riendo que no tenía pija, me daba vergüenza por lo que no dejaba que me la vieran, pero entraba en los recesos al baño dos o tres veces a ver el tamaño de las pijas de los otros, sin saberlo eso me excitaba provocando que se me parara y no se me viera tan chica.
En ese tiempo fue cuando me empecé a tocar y jugar más con la pija y bolas para tenerla parada y no se me viera grande, no tarde en aprender solo a hacerme la paja de diferentes formas, como tocándome con dos dedos la cabecita, agarrando con toda la mano jalándola lentamente o muy rápido, a veces sobándola con las bolas, me recostaba boca abajo en un sillón a ver televisión y me movía para apretar la pija, hacía lo mismo en el respaldó del sillón o sillas y costado en la cama para sentí esas sensaciones de cosquillas.

Cuando casi cumplía los nueve años un día que me estaba duchando, al estarme enjabonando la pija empecé a sobarla y jalarla porqué la tenía parada, con la otra mano me untaba jabón en las nalgas deslizando la mano pasando los dedos entre el surco tocándome el ano haciendo que sintiera una sensación muy placentera, estaba tan entretenido disfrutando eso que no me di cuenta que entro mi mamá mirando lo que hacía, al verla deje de hacerlo por lo que miró la pija parada apuntando al ombligo dándome vergüenza, para ella también fue una sorpresa y tardó en reaccionar diciéndome.
—– que estás haciendo cochino, dios te va a castigar por tocarte el pene —-
Al ser mi papá pastor, me daba más clases de biblia para que cuando creciera yo fuera pastor como él, por lo que muchas veces me decían que el sexo era cosa del diablo, no le contesté y termine de ducharme mientras me decir.
—— nuca más juegues así con tu pene, porque es cosa del diablo —-
Al terminar la pija ya no se me veía al tenerla pegada al cuerpo.

Ella se lo dijo a mi papá que me castigo y me puso a leer y aprender de memoria unas partes de la Biblia referentes al sexo.
Eso no sirvió de nada porque después de una semana ya estaba jugando otra vez con la pija y ano, cuidándome más para que no me viera mi papá, mamá o hermana, el terminar me sentía culpable y sucio por hacer eso que decían era cosa del diablo, pero días después ya andaba otra vez haciéndolo porque me gustaba lo que se sentía.
Por sus creencias religiosas de mi papá y mamá solo me compraban de ropa interior trusas clásicas blancas, porque los bikinis de colores con estampados era para homosexuales, pero a mi hermana si le compraban pantis y bikinis de colores y estampados, eso sí todas sus faldas y vestidos le quedaban un poco arriba de la rodilla, porque mas arriba era de mujeres fáciles.

Al ver las trusas o bikinis que usaban mis amigos y otros nenes, me gustaban pero yo no podía usarlas porque no me dejaba mi papá, eso provoco que un domingo después de ir al templo fuimos a comer a casa de hermano de mi papá, al llegar mi primo Samuel que tenía tres años al hacer calor solo traía puesto un pañal entrenador que paresia trusa con estampado del hombre araña, antes de comer estuve jugando en el jardín con Samuel, Gabriela y hermana, en la tarde llovió mi hermana y prima hablaban porque casi tenían la misma edad, yo jugaba correteando a mi primito, al entrar a su cuarto vi sobre un mueble un paquete con los pañales, estaba solo con el así que saque uno mirándolo pensando como se me vería, sentí que la pija se me iba parando, decidí ponérmelo a ver si me quedaba, le metí bajo el pantalón deportivo y fui al baño a ponérmelo, mientras iba el corazón me latía muy rápido por lo que iba a hacer y que alguien se diera cuenta.
Entre al baño poniendo el seguro, me quite el pantalón y trusa la pija apuntaba al ombligo, agarré el pañal trusa y me lo puse, pensé que no me iba entrar pero si me quedo un poco pegado, me miré girando frente al espejo para ver cómo me quedaba, en eso estaba cuando tocó la puerta mi tío porque quería entrar, el corazón casi se me sale del susto, diciendo.
—- ya salgo tío —-
Me puse la trusa sobre el pañal y el pantalón, nervioso jale la cadena del agua para fingir que lo usé me lave las manos y abrí, con el corazón aún latiendo rápido entro mi tío y fui a jugar con Samuel, me fui tranquilizando al saber que no se darían cuenta que agarré un pañal y lo traía puesto y me lo quitaría antes de regresar a casa.
Cuando dijo mi papá que ya nos íbamos, fui al baño para quitármelo, al bajar el pantalón y trusa mirándome el espejo y sintiendo la pija muy dura bajo el pañal, con una mano me sobe las bolas y pija y con la otra la nalgas sobre él y decidí llevármelo puesto, me subí la ropa y salí a despedirme con algo de temor que me descubrieran.

Ya en casa cuando me fui a dormir me quite rápido la ropa poniéndome un short para que no notarán en la trusa el bulto del pañal, al otro día al desnudarme para meterme a duchar escondí el pañal por si entraba mi papá o mamá, al terminar me seque poniéndome otra vez, me envolvió en la toalla y fui al cuarto a ponerme el uniforme, del cajón saque una trusa para ponerla y tapar el pañal, pero tenía la pija muy dura así que deje la trusa poniéndome solo el pantalón del uniforme, me termine de vestir y al bajar a desayunar, el corazón me latía tan rápido que sentía que se me salía por el miedo, me fui al colegio solo con el pañal y me fui calmando al darme cuenta que nadie se daría cuenta si no dejaba que lo vieran.
Los siguientes tres días fui al colegio solo con el pañal, porque por el uso se fue rompiendo y lo tuve que tirar a la basura.
Me gustó usarlos porque era lo más parecido a usar trusa bikini estampada, así que en otras visitas a casa de mis tíos, agarré otros pañales para usarlos hasta que a mi primo ya no le compraron porque ya no requería y usaba trusa o bikinis de colores estampados.

No pasó mucho en que estando de visita en casa mis tíos, entre con Samuel a su cuarto sacando de su cajón una trusa bikini azul cielo con estampado de aviones y nubes, me fui al baño cerrando con seguro miré la trusa que era para nenes de seis años aunque el tenía cuatro, me quite el pantalón y trusa saltando la pija muy dura, me puse la de el entrando fácil aunque me quedaba entallada, me miré en el espejo como se me veía antes de ponerme mi trusa encima para llevármela, por sentir la trusa me puso caliente y se me quedó la pija parada todo el tiempo que estuve en casa de mis tíos.
Ya en casa estando acostado para dormir me sobe la pija y bolas sobre la trusa hasta que me gano el sueño, al otro día me la llevé al colegio sin ponerme trusa mía encima, a la noche al ducharme la llave rápido y me la puse mojada con una trusa mía encima para que no me descubrieran mis padres que la traía trusa de colores.
Aún que sentía miedo y nervioso cuando las traía puestas, al ir a casa de mi tío regresaba la trusa dejándola en la ropa sucia y a veces agarraba prestada otra para usarla, sin saber que al usarla me excitaba provocando que se me pusiera dura la pija y me hiciera la paja.
En una de las visitas con mis tíos me fui sin trusa y entre directo a agarrar un bikini blanco con estampado de autos y me metí al baño a ponérmela, la pija dura la levantaba haciendo carpa de circo me puse el short y fui a jugar con Samuel, Gabriela y mi hermana con la pija dura, después de la comida mi prima y hermana se pusieron a jugar con sus muñecas, así que me lleve a mi primo a jugar a su cuarto, mientras jugaba me tocaba a veces la pija parada sobre el short, desde que me ponía sus pañales y trusas quería que alguien viera que usaba de esas trusas, pero me daba vergüenza que los amigos o compañeros me vieran.

Ese día estaba más excitado que decidí dejar que Samuel me viera la trusa, me puse de pie me fui a la puerta fijándome que nadie viniera, el corazón latía rápido por el miedo, no me atreví y regrese a jugar con él, dos veces más hice el intento sin atreverme, me sentaba a su lado y me sobaba la pija dura, casi era hora que nos íbamos y tenía que decidirme, me puse de pie frente a él, respiré profundo para calmar mis nervios y baje short hasta las rodillas, en el bikini se miraba la carpa de circo que hacía la pija dura, el se me quedó mirando y me rasque el muslo
—— Tengo comezón aquí —-
Después agarré con dos dedos la punta de la pija apretándola antes de acomodar la trusa y subir el short, el miró atento lo que hacía sin decir nada, me puse a jugar un poco hasta que me llamaron para irnos, espere la noche y ya acostado para de dormir me jale la pija y toque las nalgas sobe la trusa recordado como me mirando Samuel.
Continúe poniéndome a escondidas las trusas bikini de mi primo, al tenerla puesta la pija la tenía más tiempo dura con ganas e hacerme la paja, así que a escondidas en mi cuarto la bajaba ponía crema en las manos, con una me jalaba la pija y la otra me acariciaba y picaba el ano para quitarme lo caliente, cuando íbamos a su casa dejaba la que me había llevado y agarraba otra.
Un día el regresar del colegio al ir a mi cuarto a cambiarme el uniforme antes de entrar vi que en el cuarto de mi hermana en la cama estaba su ropa interior limpia, ella estaba abajo hablando con mi mamá así que entre para mirar sus pantis y corpiños, agarré un bikini blanco con los resortes rojos y un estampado en las nalgas de la sirenita, al tenerla en las manos sentí como la pija se iba parando, Sara tenía dos años menos que yo y seguro si me quedaría su panti, escuché que ella ya venía, me pase rápido a mi cuarto llevándome la panti para ponérmela, empareje la puerta y me quite el uniforme, en la trusa se marcaba la pija parada, me la quite poniéndome la panti bikini que al ser de tela delgada dejaba que la pija no quedara atrapada sintiéndola más cómoda, me puse una bermuda y guarde la trusa para ponérmela cuando me fuera a dormir y no se dieran cuenta que traía la panti de mi hermana.

Me gustó sentir la panti como las trusas de mi primo porque hacían que la pija se me quedara dura cuando las traía puestas.

Continúe haciendo eso a escondidas, cuidando que nadie se diera cuenta que a veces me ponía trusa de mi primo o panti de mi hermana hasta que cumplí los diez años.
A esa edad en el colegio seguía entrando a los baños para ver el tamaño de las pijas de los compañeros de once y doce hasta que un día paso lo que me temía, ese día me había puesto una panti bikini a rallas amarillas y blancas con elásticos anaranjados, me puse a orinar a lado de un nene de doce para verle la pija, al estar distraído no me di cuenta que al desabrochar la bermuda del uniforme se bajo de la parte de atrás descubriendo las nalgas dejando ver la panti, dos amigos de ese nene estaban tras de nosotros por lo que me vieron, el que estaba a mi lado orinado se dio cuenta que lo veía diciendo
—- negro, eres marica y te gusta mi pija por eso me la vez jajaja —
Moví la cabeza negándolo, uno de los que estaba tras de mi me acaricio las nalgas sobre la panti.
—- pinche negro, si eres joto hasta usas calzón de nena y tienes unas nalgas paraditas muy ricas jajaja —
Todos se rieron mirándome la panti, el que me toco las nalgas me agarro de la cintura pegándose a las nalgas y moviéndose como si me hiciera sexo diciendo.
— que ricas nalgas tienes pinche negro, cuando quieras te meto la pija jajaja —
Todos reían por lo que hacia el amigo, estaba muy nervioso y asustado, me retire subiéndome la bermuda diciéndoles.
—- no me gusta que me hagan eso —
Me salí corriendo del baño escuchando sus risas diciéndome que era un negro marica, en el receso los vi otras veces, se tocaban la pija sobre el pantalón y me sonreían, todo ese día y otros más estuve nervioso de que fueran a decirle a otros compañeros que usaba panti y me molestaran también.

Después de eso me cuide mas cundo me ponía panti y no me la vieran, pero seguí entrado a ver pijas a el baño y andaba atento para ver si a alguno nene se le subía la camisa o playera para ver de qué trusa usaba, eso me excitaba por lo que me andaba tocando la pija dura y por lo menos me hacía la paja una vez al día para bajarme lo caliente.
Algunas tarde salía a un parque cercano a casa a jugar con los vecinos, los que ya tenían doce, trece y catorce años a veces se ponían a hablar de sexo y de películas porno que veían, de morboso me quedaba a escuchar aunque luego me molestaban diciendo que estaba muy chico para oír de eso y mi papá el pastor se iba a enojar, aún así me quedaba y no pasó mucho en que me invitaron a ir a casa de uno de ellos ver una película porno, donde por primera vez vi lo que decían los amigos, mujeres desnudas chupándole la pijas los hombres, hombre chupándoles los pechos y conchas las mujeres, las diferentes poses para meterles la pija por la vagina o ano, al mirarla sentía la pija más dura que otras veces, con ganas de jalara pero por vergüenza no me la tocaba, en la noche estaba tan excitado que acostado en la cama me jale y toque el ano recordado lo que vi en la película, hasta que medio sueño.
Aunque mi papá me tenía prohibido lo referente al sexo porque era pecado, en otras ocasiones me atreví a ir con los amigos a la casa de ese vecino a ver películas porno, ellos a veces se sacaban la pija y se hacían la paja hasta que a unos les salía la leche, eso me excitaba mucho pero por vergüenza no me sacaba la pija frente a ellos por lo que a veces me tocaba sobre la ropa, eso me despertó más el morbo por el sexo, sin importarme que mi papá decía que el sexo fuera del matrimonio o hacerse la paja era cosa del diablo.

Un sábado después de la comida salí con los amigos y fui a ver una película porno, en la noche estaba muy excitado por lo que ya acostado espere a que todos durmieran y estuviera la casa a oscuras iluminada solo por la poca luz que entraba por la ventana, me quite el short y trusa, me recosté boca arriba metiendo una almohada en las nalgas separarlas del colchón, encogí y abrí las piernas, puse crema en la pija y empecé a jalarla despacio, mientras con la otra mano con crema me acariciaba las nalgas y picaba el ano, al hacerlo recordaba las escenas de la película o que algún amigo me metía la pija gozando y disfrutado lo que sentía, por lo caliente que estaba me picaba el ano y poco a poco fui metiendo el dedo hasta que termine por meterlo todo, solté la pija y empecé a mover el dedo o sacarlo y meterlo sintiendo unas sensaciones muy placenteras, cuando me cansaba dejaba dentro el dedo y me jalaba la pija, no sé cuánto tiempo estuve haciéndolo por las cosas que sentía en el cuerpo, estaba sudando, el corazón me latía rápido, respiraba entre cortado y sin querer a veces se me salían pequeño gemidos cuando sacaba y metía rápido el dedo del ano, sin saberlo estaba a punto de tener mi primer orgasmo.
Todo pasó muy rápido, me empecé jalar muy rápido la pija gimiendo más, deje muy adentro del ano el dedo, no pasó mucho en que se me tensaron los músculos del abdomen y muslos, la pija quería ponerse más dura de lo que estaba, eran una sensación que nuca había sentido, solté la pija y sentí como corría algo por dentro y vi salir varios chorros de ella mientras que el ano apretaba el dedo gozando lo que sentí, cuando termine me sentía relajado, me quedé quieto mientras se normalizaba el corazón y respiración sin saber qué pasó, cuando me recupere creí que me había orinado, por lo que miré el líquido que me cayó en el pecho y abdomen, lo toque con dos dedos viendo que era algo espero porque hacía hebra parecido a la leche que le salía a los amigos pero era trasparente, ya sabía que me saldría leche pero lo que me salió era trasparente, me pare y fui desnudo el baño a orinar y ver con la luz lo que me salió, lo toque otra vez, olí y terminé untándolo en el cuerpo hasta que desapareció, regrese al cuarto aponerme la trusa y short para dormir, me gustó lo que sentí pero como siempre después de hacerlo me sentía culpable y sucio por hacer cosas del diablo como decís mi papá.

Al otro día desperté con la pija muy parada, recordé las sensaciones ricas que tuve en la noche al hacerme la paja, metí la mano bajo el short y trusa tocándome bolas y pija recordado como los amigos se hacían la paja sin darles vergüenza que los mirarán, así que decidí tratar de quitarme la vergüenza de que me vieran desnudó.
Al ser domingo no tardo en ir mi papá decirme que me duchara porque teníamos que ir el templo, al estarme enjabonado aproveche para jala la pija y meterme el dedo un poco, aun con el miedo a que entrara mi papá o mamá esos nervios hacían que me excitada más, lo hice poco porque si tardaba seguro entraría mi papá a apurarme, salí del baño envuelto en la toalla a mi cuarto a ponerme la ropa, empareje la puerta para que mi herma que estaba en su cuarto no me viera, me quite la toalla la pija apuntaba al ombligo por las jaladas que le di, desnudó saque del clóset y puse en la cama una camiseta blanca, camisa blanca, corbata negra, pantalón y calcetines azul oscuro y trusa blanca, me puse primero la camiseta de tirantes que me quedaba dos dedos bajo las nalgas, al verme en el espejo la subí un poco viendo las bolas y pija la baje, estaba muy excitado con ganas de que me vieran como tenía la pija, sabía que no me atrevería menos en casa, pero de caliente sin ponerme más ropa abrí la puerta mirando a Sara en su cuarto que se estaba peinando, de los nervios sentía que se me salía el corazón mi papá se estaba duchando y mi mamá en su cuarto terminándose de arreglar, con miedo decidí ir así al cuarto de ellos, cuando entre y me miró mi mama sentí más miedo de que se diera cuenta que no traía trusa, respire profundo para tranquilizarme y le pregunté
—- ¿ Mami, después de ir al templo vamos a ir a otro lado ? —–
Dejo de mirarme y continúo poniéndome maquillaje.
—– no sé que decida tu papá —-
Regrese a mi cuarto parándome en la puerta haciendo ruido por lo que Sara me miro y después continuó peinándose, ni una de las dos se dio cuenta que solo traía la camiseta, entre al cuarto, me puse la camisa, corbata y calcetines, cuando agarré la trusa estaba tan excitado que decidí solo ponerme el pantalón, metí la trusa al cajón y me quedé así hasta que mi papá salió del baño me puse el pantalón.
Estando en el templo sentía las bolas colgada y la pija muy dura apuntando al ombligo, no era la primer vez que estaba muy excitada en el templo, en otras ocasiones al ir a la clase de biblia o asamblea con trusa de Samuel o panti de Sara la pija se me paraba, metí una mano a la bolsa del pantalón agarrando la punta de la pija para acariciarla o apretarla discretamente imaginado que le tocaba o mamaba la pija a un amigo, disfrutando lo que sentía, manoseándome en el templo.
Salí de templo muy excitado, mi papá nos llevó comer aún restaurante del centro, Sara quería ir al mar pero al no traer los bañadores nos dijo que otro día íbamos a la playa, al estar sentado comiendo por lo caliente que andaba me baje el zipper del pantalón abriéndose un poco mirándose la camisa, camiseta y parte de mis bolas, me quedé así hasta antes de ponerme de pie subí el zipper.

De regreso a casa en el auto Sara no tardo en dormirse, al estar muy excitado con miedo baje el zipper y saqué la pija tapándola con las manos, con dos dedos empecé a apretar la cabecita sin mucho movimiento, no podía creer que me estaba pajeando en el auto con la familia, estaba muy nervioso de que mi hermana despertara o mi mamá se diera cuenta, pero eso hacía que me pusiera más calientes y lo seguía haciendo hasta que llegamos a casa metí la pija y subí el zipper.
Quede muy excitado hasta que nos fuimos a dormir, así que ya acostado con crema me jale la pija y metí el dedo al ano, hasta que después de un mes y días me llegó mi segundo orgasmo disfrutando y gozando por lo que sentí, al terminar me sentí mal y me arrepentí de lo que hice en el templo durante la asamblea.
Me gusto el andar sin ropa interior porque me excite, así que otros días lo hice atreviéndome a andar así en la casa, ir otras veces el templo, colegio y otros lugares cuando salía con la familia, pero cuidado que no se dieran cuenta como cuando traía trusa de Samuel, panti de Sara o de mi prima Gabriela, mis trusas ya solo me las ponía por las noches para dormir para tapar y cubrir si traía puesto otra cosa.
Después de tener mis primeros orgasmos se me despertó más el morbo por el sexo, tratando de verles las pijas a amigos y compañeros comparándola con la mía, también empecé a darme cuenta que no me llamaba la atención verle las pantis a las amigas como lo hacían los amigos.
Me tranquilice un poco del tamaño de mi pija al darme cuenta que cuando la traía parada era más grande que dela de mis amigos de mi edad, lo que no me gustaba era que cuando no la tenía parada se pegaba al cuerpo y solo se miraba la cabecita y las bolas colgadas.
Al seguir mirando películas porno me ponía muy caliente queriendo hacer sexo, pero por mi edad y lo tímido que era, si me daba vergüenza que los amigos me vieran desnudó, más pena me daría desnudarme frente a un hombre para hacerle sexo, sabía que tenía que quitar esa vergüenza si quería hacer sexo con alguien.

En las películas que mirábamos a veces solo eran dos mujeres que se besaban, tocaban, se chupaban los pechos, concha y vagina, también se metían los dedos o unas pijas de plástico a la vagina y ano, al hacerlo se miraba que disfrutaba y gemían, también me gustaba ver cómo les gustaba chuparle la pija a los hombres y cuando les salía la leche se la tragaban saboreándola, o se la untaban en el cuerpo como crema, en las noches cuando me jalaba la pija y metía el dedo para bajarme lo caliente recordaba las películas hasta que me llegaba el orgasmo cuando me salía ese líquido me lo untaba en el cuerpo, disfrutaba y gozaba mucho eso, pero cuando terminaba me ponía la trusa y short para dormir, me sentía mal por lo que imaginaba y recordara lo que me decía mi papá del sexo, pero al otro día al despertar con la pija parada me la tocaba y no me importaba que fuera pecado.
Cuando casi cumplía los doce años cada vez me excitaba más y continuaba haciendo esas cosas para bajarme lo caliente, hasta que un domingo me atreví a dejarme ver por Samuel que ya tenían seis años.
Ese día desperté como siempre con la pija muy dura, me despertó mi mamá temprano para desayunar y ducharme para ir al templo y después comer a casa de mis tíos, mientras me duchaba me jale la pija y metí el dedo al ano, al terminar me fui al cuarto a ponerme la ropa, decidí no ponerme trusa porque después del templo iríamos a comer a casa de mis tíos, me puse la camiseta, camisa, corbata y calcetines, me la jale muy rápido antes de salir así para ir al cuarto de mis padres aunque estaba mi papá ahí, me daba miedo de que el se dieran cuenta lo que hacía que sintiera se me salía el corazón y me excitaba más, me pare en la puerta y puse una mano en las nalgas picándome con un dedo el ano, respiré profundo para controlarme y le pregunté
—- papi, me pongo el pantalón negro o el azul oscuro ? —-
Cuando me miró me puse más nervioso dejando el dedo en el ano con mucho miedo que se diera cuenta, mientras decía.

—- ponte el que tú quieras, pero rápido porque casi nos vamos —–
Cuando me lo decía pensaba para mí —- papi ando de caliente sin trusa y con un dedo dentro de ano, no me vas a decir nada —- como no me miraba me agarré la pija y le di dos jaladas y salir del cuarto, antes de entras a mi cuarto me pare en la puerta del de Sara que estaba por salir, le sonreí mientras me picaba el ano, diciéndole.
—— espérame me voy a poner el pantalón para bajar juntos —
Entre al cuarto y ella se quedó mirando desde el pasillo, de los nervioso seguía latiendo rápido el corazón, agarré el pantalón negro me lo puse parado frente a ella sin sentarme, metí la camiseta y camisa tocándome las bolas y pija que apuntando al ombligo, ya listo bajamos los dos a la sala a esperar a mi papá y mamá.
En el templo durante el sermón de mi papá, metí la mano a la bolsa del pantalón para estarme tocando las bolas y pija discretamente, al hacer eso era como estar retando a mi papá de que me hacía la paja y pensaba en sexo mientras el daba sermón, cuando salimos del templo estaba muy excitado con ganas de agarrar la pija y jalarla hasta que se saliera el líquido pero no sé podía porque íbamos a casa de mis tíos.
Llegamos al mismo tiempo porque ellos también fueron al templo, mi tío y papá se sentaron en la sala a hablar, mi tía y mamá a preparar la comida , me quite la corbata y camisa quedado solo con la camiseta , mis primas y hermana hablaban en el jardín, yo sentía la pija muy dura y decidí ponerme una trusa de Samuel, así que le dije que fuéramos su cuarto a ver sus juguetes, estando ahí mientras jugábamos con un futbolito de mesa, espere que estuviera distraído para sacar de su cajón una trusa bikini anaranjada de resorte negro metiéndola a la bolsa del pantalón y le dije que iba al baño, entre y cerré con seguro, me quite el panteón y me puse la trusa que me quedaba muy pegada por lo que la pija dura la metí con trabajo al lado derecho marcándose muy bien, me puse el pantalón y regrese a jugar con él.

Me excite más por traer su trusa y sentir la pija parada atrapada en ella, decidí dejar que viera la trusa así que sin que se diera cuenta baje el zipper saque la camiseta para que se viera la trusa, no pasó mucho en que se dio cuenta diciéndole de broma.
—– se te va a salir el pajarito jajaja —-
sonreí mientras desabroché el pantalón bajándolo un poco para acomodar la camisa dejando que viera su trusa y me dijo.
—- yo, tengo unas trusas iguales —-
Estaba muy nervioso de que fueras decir algo, pero también estaba muy excitado porque miraba la trusa y el bulto que hacía la pija para un lado, subí el pantalón y decidí ir al baño a darme unas jaladas.
—- voy a orinar no tardo —
El me siguió diciendo que el también iba a orinar, entre con el al baño con miedo que se dieran cuenta que entramos los dos porque también era pecado para mi papá, el se bajó sin vergüenza el pantalón y trusa hasta las rodillas dejando ver sus bolitas y cabecita de la pija pegada al cuerpo, se las agarro y empezó a orinar, era mi oportunidad de que alguien me viera la pija, el corazón me latía muy rápido por el miedo, respire profundo y con temor me baje el pantalón y trusa saltado la pija dura apuntado al ombligo, Samuel se le quedó mirando diciendo.
—- tienes un pajarote, el mío está chico —-
Me toque las bolas que ya estaban pegadas al cuerpo por lo que supe que estaba a punto de tener orgasmo, contestado.
—- cuando crezca tu pájaro va a ser como el mío —-
Agarré la pija con dos dedos jalándolo lentamente, el ya había terminado de orinar soltando su pija y vi como se le iba parando al ver la mía, estaba tan caliente que no aguanté y sentí que se contraían los muslos y me dio el orgasmo, apunte la pija a la taza del baño y salieron disparados los chorros del líquido que para entonces ya me salía más, al terminar solté la pija que punzaba, el me la agarró sonriendo.

—- tu pájaro se mueve solo jajaja —-
Cuando me lo agarró por todo el cuerpo me corrió una sensación de gozó, me atreví a agarrar su pija sobándola y después se la jale con dos dedos, diciéndole
—- cuando se me pone así el pájaro, es porque quiere que juegues con el —-
Nos quedamos sin hablar mientras se la jalaba un poco y él me apretaba la pija poniéndome más caliente, quería continuar pero si nos encontraban en el baño me iba a tocar regañada, así que le subí su ropa, me subí la mía y nos fuimos a su cuarto.

Mientras jugábamos estaba muy nervioso de que Samuel contará lo que paso en el baño, así que antes de que nos llamarán a comer, le toque la pija sobre la ropa diciéndome
—- cuando juegues con tu pajarito, cuida que nadie te vea y no se lo digas nadie, porque te pueden regañar o castigar —
El me toco otra vez la pija dura sobre el pantalón.
—– lo sé, mi mamá siempre me regaña cuando me lo ando tocando —-
Eso me tranquilizo un poco esperando que no fueras a decir lo que pasó en el baño, después de la comida regresamos a su cuarto continuaba muy excitado pero no me atreví a dejar que me viera otra vez la pija.
Al estar jugando vi en su caja de juguetes varios tubito de aluminio donde venían unos puros que fumaba mi tío, la punta era redondeada como la cabeza de la pija los saque mirándolos, uno media quince centímetros y otro veinte tenían una circunferencia de unos tres centímetros, el otro extremo tenía una tapa de rosca, se me vino a la mente meterlo al ano como veía en las películas porno que las mujeres se metían pijas de plástico, pero lo deje y continúe jugando mirándolos a veces pensando que eran muy grueso y a lo mejor ni me entraba, por los pensamientos morbosos seguía muy caliente, ya casi era hora de que nos íbamos así que agarre dos tubos diferentes y los metí a la bolsa del pantalón sin que Samuel se diera cuenta.

Al llegar a casa los guarde esperando la hora de acostarnos a dormir para probar si entraba al ano los tubos, apenas quedó la casa a oscuras y en silencio, me quite el short, mi trusa y la de Samuel metí la almohada en la cintura separando las nalgas de la cama, encogí y abrí las piernas y metí con un dedo con crema al ano hasta que entro fácil todo el dedo, agarré el tubo de quince centímetros porque era más chico, le puse crema en la punta, estaba muy excitado por lo que ibas hacer pero con miedo y nervios.
Puse la punta del tubo y empujé sintiendo como entraba la punta y un poco más de la cuarta parta antes de que me doliera y pare de meterlo, la pija punzaba haciendo que disfrutara el momento, cuando se pasó el dolor le di otro rempujón entrando casi la mitad doliéndome otra vez y pare de empujarlo, estaba tan caliente que eso fue suficiente para que me diera el orgasmo, los músculos se tensaron haciendo que subiera el culo un poco más apretando con el ano el tubo mientras la pija echaba unos buenos chorros de líquido sobre de el pecho y abdomen gozando.
Cuando termine baje las nalgas y me quedé quieto esperando a que se normalizará la respiración y corazón, la pija continuaba punzando y goteando líquido, también sentía como el ano punzaba apretando el tubo como para echarlo fuera, pero no lo solté dejándolo dentro mientras con la otra mano untaban el líquido en el pecho abdomen pija bolas, a los tres minutos sentí que me llegaba otro orgasmo que hizo que arquera el cuerpo hacia arriba mientras la pija dejaba salir varios chorros más de líquido, el ano aprestaba fuerte el tubo y sentí mucho más rico está vez que deje escapar un gemido de gozó, al terminar me relaje mientras se normalizaba el corazón y respiración, me unte el líquido y vi que la pija se estaba bajando.
Fue la primera vez que tuve dos orgasmos seguidos disfrutándolos mucho, ya era muy tarde y al otro día tenia clases, saque del ano mi nuevo juguete y me fui desnudó al baño a orinar, lavar el tubo que se ensucio y regrese a ponerme las trusas y short para dormir, pensando que dios se enojaría conmigo por hacer eso, al otro día desperté con la pija parada aunque en la noche tuve dos orgasmos.

Desperté adolorido del ano, pero lo que sentí esa noche me despertó más el instinto sexual para buscar otras formas de disfrutar las cosas que se sentían en el cuerpo cuando hacía cosas de sexo.
Durante la semana me puse la trusa de Samuel un día y una panti de Sara mojándolas con el líquido, un día fui sin trusa al colegio regrese muy caliente al cambiarme me quite el uniforme poniéndome un pantalón corto de mezclilla con una playera larga, para dejar abajo el zipper y sacarme la pija y bolas, con temor así baje a comer y hacer tarea, al estar sentado destapaba la pija y la tocaba a veces discretamente aunque estaba mi mamá y hermana, aunque llegó mi papá me quedé con las bolas y pija de fuera tocándome a veces aunque tenía miedo que se diera cuenta y calentarme más, cuando me fui a dormir me jale la pija y metí el dedo al ano hasta echar fuera el líquido para dormir tranquilo porque tenía colegio al otro día.
El sábado por la noche antes de irme a acostar fui al baño a desalojar las tripas para meter el tubo y no ensuciarlo mucho, mientras esperaba a que durmieran todos y me desnude para meter crema al ano y el tubo, no me toque la pija para aguantar más y tratar de que entrara todo en el ano.
Tarde algo en ir metiendo poco a poco todo el tubo porque si me dolía paraba, al tenerlo todo ensartado lo deje ahí sintiéndolo en las tripas, cuando me acostumbré lo empecé a sacar y meter lentamente disfrutando lo que sentía, la pija brincaba a cada rempujos que me daba, a veces lo hacía más rápido gozando y se me salían gemidos como cuando a las mujeres les metían la pija en las películas, no pare de sacarlo y meterlo imaginado que algún amigo me metía la pija hasta que eche fuera el líquido, al terminar mientras me recuperaba me unte el líquido.
Aunque tuve orgasmo continuaba muy excitado, me puse de pie con el juguete dentro, abrí un poco las piernas y empecé a sacar y meterlo lentamente, después me subí a la cama poniéndome de a cuatro mientras seguía metiendo y sacando aunque me dolía un poco disfrutaba las sensaciones que sentía al hacerlo, tarde en sentí que me llegaba otro orgasmo por lo que me puse de pie haciéndolo muy rápido mi respiración entrecortada y gimiendo, al sentir que terminaba empujé el tubo muy adentro y me acosté boca arriba mientras la pija echaba fuera los chorros de líquido, espere a recuperarme untándolo en el cuerpo y me fui así al baño con riesgo que alguien me viera, sin prender la luz, orine, me saque el juguete lo lave y seque, regrese al cuarto con el ano adolorido a ponerme trusa y short para dormir pues ya era muy tarde.
Al otro día me quedé dormido hasta que mi papá me fue a despertar mandándoles duchar para desayunar, para ir al templo y después a la playa, por lo que me dijo que me llevará puesto el bañador y una mochila con una toalla, un short playera para regresar.

Al levantarme me dolía el ano pero traía la pija parada, al ducharme me jalaba la pija y lave el ano con mucho jabón sin meterme el dedo por el dolor, al terminar fui al cuarto a vestirme poniéndome un bañador azul oscuro tipo short pegado por lo que se notaba la pija parada, me termine de poner la ropa para ir al templo, baje a desayunar y nos fuimos al servicio religioso.
Salimos del templo a las once de la mañana y fuimos a la playa, estuvimos jugando en la arena y metiéndonos al mar los cuatros, después mi papá y mamá se fueron a sentar a tomar unos juegos, me quedé jugando con Sara que traía un bañador rosa de una sola pieza que al jugar se le metía entre las nalgas y por el frente se le marcaba la raya de la concha, al mirarla morbosamente se me puso dura la pija y tuve que poner hacia arriba para que no se notará tanto en el bañador, fuimos a tomar jugo a donde estaban mi papá y mamá cuidando que no la notaran, regrese solo a meterme el mar porque Sara ya no quiso, aún me dolía un poco el ano pero estaba muy excitado por ver a unos nenes que traían bañador tipo bikini y se le marcaban las nalgas, bolas y pija, me metí hasta donde el agua me llegará al pecho, me baje el bañador un poco dejando fuera las nalgas, bolas y pija, la agarre y empecé a jalármela mirando a los nenes jugando en la arena, eso me puso más caliente y decidí quitarme el bañador para estar desnudó, nadie estaba cerca de mi y aunque tenía miedo que se dieran cuenta me atreví a quitármelo, lo agarre con la mano izquierda y con la otra me jalaba la pija, a veces me acercaba a nenes aunque sentía que se me salía el corazón por estar desnudó, no sé cuánto tiempo estuve así hasta que escuche a Sara que me decía desde la orilla que mi papá decía que ya me saliera para ir a comer.
Cuando ya no me veía me puse el bañador acomodando la pija hacía el ombligo, fui con ellos agarrando la toalla para secarme y cubrir el bañador porque la pija punzaba lo movía.
Nos fuimos a comer a un restaurante frente a la playa en bañador para que se secaran antes de subir al auto, de lo excitado que quede por andar desnudó en la playa la pija no se me bajo y seguía punzando atrapada en el bañador cuando salimos del restaurante, antes de subir al auto nos pusimos encima los shorts sino se enojaba mi papá.

De camino a casa Sara iba somnolienta, estaba tan caliente que el movimiento del auto terminó por hacer que me diera un orgasmo, se me tensaron los músculos del abdomen y muslos provocando que separara un poco las nalgas del asiento ahogando un gemido de placer mientras sentía como se salían los chorros del líquido mojando el bañador, me di cuenta que Sara me miraba y le sonreí, al terminar cuando ya no me miraba metí una mano bajo el short para untar el líquido y no lo mojara mucho.
En la noche acostado para dormir solo me jale la pija sin tocar el ano que aún me dolía recordado como me atreví a andar desnudó dentro del mar y como eche fuera él líquido estando mi hermana sentada a mi lado sin que se diera cuenta.
Unos meses antes de cumplir los doce años ya había empezado mi desarrollo, por mi cuerpo corrían las hormonas, en pocas semanas me crecieron mucho las bolas y pija que parada de medir diez centímetros ya media catorce, pero cuando no estaba parada la cabeza se pegaba tanto al cuerpo que parecía que no tenía pija.
Todos los días buscaba maneras para bajarme lo caliente, quería dejar que me vieran la pija dura y jalándola como lo hacían los amigo, también a veces me daban ganas de ponerme ropa de mi hermana y salir a la calle, pero me daba vergüenza y miedo que mi papá se enterará de lo que hacía de sexo, me regañara y castigará diciendo que era cosa del diablo, pero a mí me gustaba disfrutar lo que se sentía al jugar con la pija y ano.
Después de meterme el tubo de aluminio al ano, quedé muy adolorida por unos ocho días por lo que no me lo metí otra vez hasta dos sábados después que vi una película porno con amigos y regrese muy excitado, fui al baño a desalojar las tripas para no ensuciar el tubo, puse la crema en la cama, espere a que todos estuvieron en sus cuartos con las luces apagadas y me desnudé, empecé por untar crema en la pija ya muy parada y a meter crema al ano con un dedo dando tiempo a que durmieran porque la puerta tenia que estar emparejada no me dejaban cerrarla, ya más calientes me acosté con las piernas hacia la cabecera subiéndolas y abiertas como la mujeres cuando les metían la pija, metí dos almohadas bajo las cintura para separa las nalgas del colchón, puse crema en el tubo, coloque la punta en ano y lo empecé a meter sintiendo como se deslizaba a dentro de las tripas, está vez entro la mitad sin sentir dolor y pare de empujarlo, me acaricie los muslos, nalgas, cintura, abdomen, pechos, bolas y pija mientras se pasaba el dolor, cuando se pasó lo empuje sintiendo como entro fácilmente lo que faltaba hasta que mi mano tocó las nalgas.

Al tenerlo ya adentro me quedé quieto solo apretaba el ano para sentirlo, por mi mente corrían muchos pensamientos, como el que si mi papá se apareciera y me encontrará con eso metido en el ano me diría que era un marica y eso no lo perdonaba dios, pero al mismo tiempo recordaba las películas porno donde las mujeres hacían lo mismo que yo.
Empecé a sacar y meter el tubo lentamente imaginando que algún amigo me estaba metiendo su pija, imaginaba ver a los amigos jalándose la pija mirando porno y me decían que me dejara meter la pija, me imaginaba que amigos y amigas me vieran desnudó haciéndome la paja, por imaginar eso a veces metía y sacaba rápido el juguete, gozaba tanto que hacía que se me salieran gemidos de placer, no sé cuánto pasó antes de que sentí que me estaba llegando un orgasmo aunque no me jalaba la pija, continúe metieron y sacando el juguete aunque la pija empezó a echar el líquido sobre el pecho, abdomen y vientre, disfrutado las sensaciones ricas de placer y gimiendo fuerte.
Aunque termine, estaba tan excitado que no pare de sacar y meter el tubo, no pasó ni tres minutos cuando sentí que me llegaba otro orgasmo fuerte que hizo que metiera el tubo hasta el fondo, subí las caderas gimiendo y salieron disparados varios chorros más de liquido, tres fueron tan fuertes que por la posición que estaba el líquido fue a parar en la nariz, boca y barba, al terminar baje las nalgas, me sentía relajado mientras la pija y ano seguían punzando, el corazón y respiración se normalizaba, saque la lengua limpiándome el líquido de los labios, no me supo a nada así que en un dedo empecé a untarlo y chupando el liquido que estaba en el pecho, abdomen y vientre tragándome todo y lo que quedó lo unte.

Después del orgasmo se bajó la pija, me puse de pie teniendo dentro el tubo y fui así al baño a orinar, lavarlo el juguete y limpiarme el ano que esta vez no me quedó muy adolorido, regrese a ponerme la trusa y short para dormir después de lo que disfrute por lo que sentí al tener dos orgasmos seguidos, aunque mientras me dormía me sentía arrepentido por hacer esas cosas del diablo como decía mi papá, porqué al otro día Sara y yo íbamos a participar en la asamblea leyendo unas partes de la biblia.
Al otro día desperté con la pija dura con ganas de jalármela, ya era tarde y me despertó mi mamá diciendo que me levantara y apurara para irnos al templo.
Me levanté poniéndome una playera para bajar a desayunar y no notarán en el short la pija dura, al terminar se metió mi mamá a duchar en el baño de su cuarto, mientras Sara y yo tendíamos nuestras camas y acomodábamos nuestros cuartos, después mi hermana se ducho, mientras se bañaba mi hermana yo continuaba excitado así que entre rápido a su cuarto agarré una panti bikini rosa con corazoncito rojos, al ducharme aunque tenía la pija parada no pude jalármela porque mi papá me apuraba y podía entrar.
Al terminar salí envuelto en la toalla a mi cuarto alcance a ver a mi hermana por la puerta entre abierta, estaba en corpiño y panty anaranjada con un estampado de halló kity, me metí a mi cuarto porque entro mi papá de su cuarto para meterse a duchar, me metí a mi cuarto rápido me puse la panti y la camiseta para que no se viera, salí y con cuidado miré a Sara que se estaba desenredando el cabello frente al espejo, me agarré la pija sobre la panti dándole unas apretadas mirando también sus nalgas en la panti, por lo que hice en la noche continuaba caliente, de curioso quería entrar así a su cuarto para mirarla de más cerca pero me daba miedo y nervios que fuera a decir algo.

La miré unos instantes sintiendo que se me salía el corazón en una lucha por tratar de decidirme de entrar con ella o meterme a mi cuarto, pensé que tenía que irme quitando el miedo y ser más atrevido y arriesgado, respire profundo y entre pareándome a su lado mirándola mejor, tenía miedo a su reacción pero me controle diciendo.
—– a ti no te dan nervios leer la biblia frente a tanta gente —
Ella me miró de cabeza a pies sonriendo.
—- si me da un poco pero me aguanto —-
Creo notó mi mirada morbosa por verla en ropa interior, sonrió otra vez tocándose las nalgas con una mano diciendo.
—- ya vete porque si papi o mami ven que estamos hablando en ropa interior, nos van a regañar —
Le sonreí y salí para terminaré de vestir sin ponerme trusa para cubrir la panty.
Al terminar baje a la sala a espera, no tardo en bajar ella con un vestido a las rodillas blanco y azul fuerte combinado y se había puesto mallas blancas, me miró y sonrió.
—- ya se te quitaron los nervios —
la miré disimuladamente recordándola en panti.
— si un poco, espero controlarme como las otras veces que he leído —-
No tardaron en bajar y nos fuimos al templo, nos sentaron a lado del micrófono con otros nene y nena que también iban a leer, empezó el servicio religioso habló mi papá, canto el coro y los asistentes, por la vergüenza y nervios de tener que pararme al frente de todos a leer la pija la tenía pegada al cuerpo, primero pasó a lee la nena después el nene, cuando Sara se paró en el micrófono a leer al verla la imagine en corpiño y panti, sentí como la pija se me puso dura, ni escuchaba lo que leía por imaginarla en ropa interior y como se le notaba las nalgas, reaccione hasta que escuche que mi papá decía que me tocaba leer, al pararme metí una mano a la bolsa acomodado la pija hacía el ombligo porque al traer panti de tela delgada la pija parada se notaba más en el pantalón.
Parado frente a todos respire profundo para controlarme, empecé a leer mi parte aunque sentía la pija dura como un palo, cuando termine pensé que si Dios me ponía así de caliente cuando tenía que estar en el templo era porque no era muy malo el sexo.
La pija se quedó dura de lo excitado que seguía al recordar mi hermana en ropa interior, aunque ya sabía que no me gustaban las nenas.

Al salir del templo nos llevó mi papá a comer a un restaurante y después al cine, ahí me senté a lado de Sara lejos de papa y mamá porque aún traía la pija dura, cuando empezó la película con cuidado baje el zipper del pantalón metiendo la mano para discretamente apretar la cabecita de la pija sobre la panti para bajarme lo caliente, a la mitad de la película me llegó un orgasmo controlándome para no moverme mucho y no gemir disfrutando, sentí como el líquido paso la tela delgada de la panti mojando los dedos y mano, los saque y chupe el líquido, metí los dedos dos ve es más para quitar y chupar lo más que pude de líquido para no mojar el pantalón, aunque termine seguí tocándome la pija hasta que terminó la película subí el zipper, otra vez me había sacado el líquido estando con mi familia aunque no se enteraban de lo que hacía.
Entre semana no me puse trusa, solo el miércoles y viernes que tenía clase de deportes y al estar en short podría ver que no traía ropa interior, cuando regresaba del colegio al quitarme el uniforme me ponía pantalón corto o bermuda con playera que me tapaba el frente para bajar el zipper para sacar las bolas y pija cuidado que mi mamá y Sara no me vieran, al estar así por el miedo que me vieran me ponía más excitado por lo que tocaba las bolas y pija aún estando a lado de ella, al llegar mi papa me cuidaba más o me metía las bolas y pija subiendo el zipper, ya acostado antes de dormir me jalaba y metía el dedo hasta sacarme líquido una o dos veces antes de dormir.
Una tarde después de la comida mi papa se fue al templo y mi mama llevo a Sara a una consulta médica quedando solo, casi no me quedaba solo en casa y era mi oportunidad de vestirme de nena como quería desde hace tiempo.
Cuando estuve solo fui al cuarto de Sara, saque de un cajón un corpiño y panti bikini rosa con puntitos rojos y blancos, una falda tableada gris oscuro de su uniforme de cuando era más chica, unas mallas blancas y una playera rosa de tirantes delgados y lleve todo a mi cuarto.
Estaba nervios por lo que iba a hacer pero con la pija ya muy parada por lo excitado que estaba, me desnude y fui al baño a desalojar las tripas al regresar me metí el tubo en el ano, me puse la panty y corpiño mirando en el espejo como me quedaba, después me puse las mallas que me costó algo de trabajo al no saber bien como se ponían, gire mirándome en el espejo antes de ponerme la playera y falda que me quedaba un poco más arriba de medio muslo, mire en el espejo girando y caminando viéndome, al sentir el tubo ensartado hacías que me punzara la pija.
Vestido de nena con nervios salí del cuarto caminado por toda la casa entre al cuarto de mi hermana imaginado que le decía —- come ve veo vestido como tu hermanita —- después fui al de mis padres parándome con las piernas un poco abiertas rempujadme el tubo con una mano y la otra subiendo la falda dejando ver la malla y panti imaginado que decía —- ando vestido de nena porque me gustan los nenes —- después camine por la sala, comedor y cocina, me atreví a salir al patio de atrás y de adelante rempujado a veces el tubo dentro del ano, cuando sentí que casi me llegaba el orgasmo me recosté en uno de los sillones con las piernas abiertas en el respaldo rempujando rápido el tubo sobre la malla y panti diciendo —- que rico dios, quiero sentir una pija en el ano —– me dio el orgasmo subiendo las caderas apretando el tubo con el ano mientas echaba fuera los chorros del liquido mojando la panti y malla.

Me quede quieto mientras me recuperaba pero continuaba muy excitado, al normalizarse el corazón subí al cuarto de mis padres me baje la malla y panti un poco dejando de fuera las bolas, pija y nalgas, abrí un poco las piernas para sacar y meter rápido el tubito gimiendo por lo que sentía y gozaba mientras pensaba que les decía —- miren como me jalo la pija y me meto el tubo al ano porque dios así quiere que lo haga para que me salga liquido —- no pare hasta que salieron disparados los chorros del liquido cayendo en el piso y colcha de su cama.
Vi que estaba oscureciendo, no sabía a qué hora regresarían pero no me podía arriesgar a que me encontraran vestido de nena.
Fui a mi cuarto quitándome todo dejando solo la panti aunque estaba mojada y el tubo ensartado porque continuaba muy excitado por lo que hice con la pija muy dura, me un pantalón deportivo, playera y fui a dejar la de mi hermana a su cuarto y me salí a la calle a hablar con unos vecinos mientras regresaban.
Llego primero mi papa y le abrí el portón para que metiera el auto, mientras se bajaba pensaba que le decía —– papi, me vestí de nena y me gusto mucho, seguro a dios le gusto verme así — cuando se bajo del auto le di su beso y le dije que me quedaría hablado con los amigos hasta que llegara mi mama y hermana, cuando llegaron le abrí el portón para que meterá el auto y entramos a casa.
Nos sentamos en la sala a ver un video cristiano que trajo mi papa, mientras la pija punzaba bajo la panti aun un poco húmeda al recortar como me vestí de nena, empecé a imaginar que me ponía de pie frente a ellos, me bajaba el pantalón para que vieran que traía la panti de mi hermana y me tocaba la pija y rempujaba el tubo en el ano diciendo.

—– miren lo que me gusta hacer para disfrutar de mi sexo aunque que ustedes digan que es cosa del diablo —- también me imaginaba caminando por las calles vestido de nena o desnudó con la pija parada y cuando me veían me la jalaba o que le chupaba la pija a los amigos que me gustaban y me daban sus líquidos y me la metían al ano llenándolo con ese líquido, o que estaba con Samuel nos jalábamos las pijas y le echaba mi líquido en su pija y después se la mamaba, pasó más de una hora pensando en eso y sentí que me iba a tener orgasmo, si se me salía el líquido iba a mojar el pantalón porque la panti era de tela delgada y seguro me descubrían, me puse de pie rápido y camine para ir al baño, pero cuando estaba tras los sillones y no me veían, me llegó el orgasmo, me detuve gozando al sentir como la pija echaba fuera el liquido, al terminar subí la playera del frente, baje del frente el pantalón para que no se mojara, gire la cabeza para ver si no me miraban, estaban distraídos así que me agarré la pija sobre la panti jaleándola despacio, aunque sentía mucho temor sin dejar de jalarla gire y me pare tras el sillón donde estaban ellos, por lo que Sara me veía de la cintura para arriba, la jale lentamente pensando —– estoy muy caliente jaleándome la pija, se me salió el líquido y quiero hacer mucho sexo aunque no les guste a ustedes—- me quedé jaleándola un poco más hasta que terminó lo que veía, así que baje la playera y fui al baño de abajo a quitarme la panti para no mojar la bermuda, mientras orábamos y cenábamos para ir a dormir.
Al cumplir doce años en el templo hacían una ceremonia para prometer ser bueno con los mandatos de Dios y ayudar más a los hermanos en el templo, por lo que para la ceremonia mi papá me compro un pantalón negro, camisa blanca, corbata azul fuerte calcetines, zapatos negros y las clásicas trusas blancas.

El sábado fui al templo para aprenderme algunas cosas de la ceremonia más por ser hijo del pastor, después de cenar me mandó mi papa a mi cuarto a meditar sobre las responsabilidades que ya tenía en el templo al cumplir doce años, subí al cuarto y como aún Sara estaba abajo entre a su cuarto a agarrar una panti para festejar mi cumpleaños sacándome líquido, agarré una panti bikini rosa con elásticos rojos y un moñito rosa al frente del resorte, de tela delgada.
Me puse a leer un libro cristiano del templo que me dio mi papá, pero tenía la pija dura de pensar lo que iba a hacer más tarde.
A las nueve subió mi papá y mamá a hablarme otra vez de la importancia y trascendencia de ya ser un jovencito y otras cosas más, antes de salir me dijo mi papá que ya me durmiera para descansar y hablara con Dios.
Cuando salieron fui al baño a descargar las tripas, empareje la puerta del cuarto desnudándome ya con la pija parada, me pare en la puerta entre abierta jalando la pija lentamente con dos dedos pensando —- papi, aunque a Dios y a ti no le guste voy a festejar mi cumple disfrutando jugando con la pija y ano —- como podía regresar me puse la panti y short con que dormía y me acosté a esperar que todos estuvieran en sus cuartos dormidos.
A las once de la noche la casa ya estaba en silencio, me quite el short la pija parada hacía carpa de circo en la panti, me puse de pie a asomarme al pasillos, abrí más la puerta y salí despacio a la puerta de ellos y aún se escucha la televisión, regrese y empareje la puerta, ya estaba muy excitado así que saque el tubito y lo lleve a la cama con la crema, me quite la panti, me acosté con las piernas para la cabecera, las abrí y subí pera quedar acomodado como nena caliente, puse crema en la pija y dedo para jalármela y meter crema al ano, cuando entró todo el dedo agarré el tubo le puse crema y me lo ensarten entrando todo ya sin mucho dolor, deje de jalármela y solo sacaba y metía el tubo gozando lo que sentí mientras pensaba que mi amigo Luis me estaba cogiendo, aunque me trataba de controlar a veces se me salían gemidos más fuertes gozando lo que sentía, ya tenía muy pegadas las bolas al cuerpo así que pare de hacerlo para aguantar más antes del orgasmo, miré el reloj de la mesita de noche y ya pasaban de las doce así que seguro ya dormían todos.

Agarré el tubo sacándolo y metiéndolo muy rápido, hacía calor y sudaba un poco, sentía que se salía el corazón y respiraba rápido sabiendo que estaba a punto y decía quedito —- si, si, si que rico se siente, quiero pija por el ano —- sentí el orgasmo y continúe haciéndolo muy rápido, al tensarse los músculos subí las nalgas de la almohada y empezaron a salir los chorros de líquido sobre de mi, al terminar me quedé quieto dejando muy adentro el tubo mitras que con la mano juntaba el líquido y me lo tragaba.
Cuando me recupere me puse de pie y camine por el cuarto para sentí como se moví el tubo en las tripas, la pija estaba apuntando al ombligo punzando, continuaba muy caliente, me puse la panti para que no se me saliera el tubo del ano, abrí la puerta y me pare en el pasillo con miedo camine a la puerta del cuarto de ellos, abrí un poco las piernas y mientras le daba unos rempujones al tubo para que entrara todo pensaba —– papi, tengo ganas que un hombre me meta la pija y me coja rico, me gustan las pijas de los amigos, aunque digas que los gay son del diablo —- por el miedo me pareció escuchar un ruido y regrese al cuarto emparejando la puerta, mirando el pasillo con el corazón latiendo rápido, espere un poco y no salió nadie, abrí y camine por el pasillo para sentir el tubo.
Regrese al cuarto para sacarme otra vez el líquido y dormí para la ceremonia en el templo, cuando me senté en la cama entro todo el tubo disfrutando la sensación, me agarré la pija sobre la panti apretándola, estaba tan excitado que en ese momento decidí hacer otra de la cosas que quería desde hace mucho tiempo, salir a la calle desnudó porque por la hora nadie me vería, me pare de la cama puse las almohadas tapadas con la cobija para que pareciera que dormía, respire profundo y salí al pasillos emparejando la puerta, camine despacio sin hacer ruido bajando las escaleras, sentía que el corazón se me salía por lo que estaba haciendo, pero aún así la pija hacía carpa de circo en la panti.

Ya abajo decidí salir por la puerta de la cocina y no se dieran cuenta, abrí la puerta con cuidado, puse el segundo para que no se cerrará y me quedara afuera, fui al patio rodia los auto de mi papá y mama y abrí la puerta de la calle, tenía mucho miedo pero eso me ponía más caliente, me asomé no había nadie, tomé valor y salí mirando las ventanas de los vecinos, al no ver a nadie camine por el frente de la casa rempujando el tubo a veces, ya estaba en la calle pero no desnudó, así que me quite la panti tirándola en la puerta, camine por el frente de la casa con la pija apuntando al ombligo y empujando el tubo para que no se saliera, vi que venía un auto y me metí rápido, cuando paso salí decidido a caminar así hasta la esquina, sabía a lo que me arriesgaba pero estaba disfrutándolo, camine lento con una mano en las nalgas para que el ano no sacará el tubo y la pija punzando, fui y regrese espere un poco y camine a la otra esquina que eran más casas, solo miraba las ventanas para cuidar que no me vieran.
Al regresar a la casa ya no se me veían las bolas, estaba a punto me pare en el portón del auto con las piernas un poco abiertas, agarré el tubo sacando y metiendo rápido por lo que sentía y gozaba se me salían gemidos y trataba que no fueran fuertes, al sentir el orgasmo continúe, solo con la otra mano baje la pija apuntando al portón, la pija disparo los chorros del líquido en el portón escurriendo, está vez me salió mucho más que las otras veces, mientras salía pensaba —– papi, estoy mojando el portón con mis líquido y tu no me ves —- cuando termine y me recupere sin soltar la pija orine echando el chorro en el portón para mojarlo, porque era otra de las cosas que no me dejaban hacer, orinar en la calle aunque no me aguantara.
Aunque me salió mucho líquido continuaba muy excitado así que empecé a sacar y meter el tubo otra vez disfrutándolo, camine así despacito y me pare a mitad del arroyo vehicular pensado —- miren lo que estoy haciendo porque estoy muy caliente —- me quedé ahí hasta que a lo lejos vi que venía un automóvil entre a casa agarrando del piso la panti, cerré la puerta y me fui al auto de mi papá parándome en la portezuela del volante, me agarré la pija jaleándola rápido pensando —- papi, voy a mojar tu auto con mi líquido —- no tarde en echarlo pero está vez fue poco y muy aguado, apenas dejo de salir la pija se bajó colgando, me puse la panti y entre con cuidado al baño para sacarme el tubo y lavarlo, fui al cuarto me puse la trusa y short, me acosté a dormir pues y eran casi las dos de la madrugada.
No desperté hasta que fue mi mamá a decirme que ya era tarde que me parara a prepararme para ir al templo, me puse de pie y baje a desayunar, saludes mi papa de beso y me preguntó si me dormí tarde, pensé que algo mejor me vio algo, pero lo más tranquilo le contesté

— es que estaba nervioso y estuve leyendo el libro que me diste —–
Ya no dijo nada terminamos el desayuno y nos duchamos en nuestro turnó.
Al estarme duchando solo se me veían las bolas colgadas y la cabeza de la pija pegada el cuerpo, al estar ya en el cuarto para vestirme en la cama ya tenía lo que me iba poner, me puse la camiseta interior y camisa, agarré la trusa blanca clásica nueva mirándola y pese —– si es mi día me voy a poner panti y me voy a ir con el tubo ensartado —- saque la panti de la noche y me la puse, saque el tubo le puse crema, baje la panti me empine un poco ensartándolo en el ano y entro fácil, de inmediato la pija despertó y se puso dura, cuando me iba a poner el pantalón decidí ponerme la trusa nueva por si se salía el líquido no mojara el pantalón, me termine de vestir y fui con mi papá diciéndolo que ya estaba listo, pero pensado para mí —– papi, para ir a mi presentación me puse panti de Sara y traigo dentro del ano un tubo, eso es lo que Dios quiere para mí, no creo que el se enoje con mingo por ir así al templo.
Fuimos al templo, durante la asamblea oraron y cantaron pidiendo por mi para que fuera un buen cristiano, mientras tenía la pija muy dura al sentir el tubo en las tripas, ya para terminar mi papá frente a todos me dijo que tenía que seguir sus pasos, hasta que llegarás ser un buen pastor como él y predicar a dios, dijo otras cosas y al terminar pase yo a leer un juramento de servicio a Dios y leer unas partes de la biblia, mientras lo hacía apretaba el ano sintiendo el tubo dentro y la pija punzaba atrapada bajo la panti y trusa, al estar en la parte final de la lectura sentí que me llegó el orgasmo, me quede en silencio, respire profundo y cerré los ojos, se tenso todo el cuerpo mientras la pija echaba fuera los chorros de líquido sintiéndolo escurrir, al terminar abrí los ojos miré a mi papá y le sonreí, pensando —- papi, dios me mandó un orgasmo porque no está mal lo que me gusta hacer — termine de leer y fui a mi lugar, el sentarme entro el tubo al fondo sintió placer aunque algo incómodo por tenerlo tanto tiempo adentro.
Terminó la asamblea y en un salón de alado hicieron una comida para festejarme con los hermanos del templo, me sentía muy mojado y me metí al baño, al bajar el pantalón vi que la trusa estaba húmeda, la baje y la panti estaba muy mojada como si me hubiera orinado, como estaba ya incómodo a aproveche para secarme el tubo, lo lave y guarde en la bolsa del pantalón, salí a mi fiesta y se iría secando la panti.

Regresamos a casa a los seis de la tarde y nos sentamos en la sala a ver una película, la película no me gustaba y pensaba lo que había echo en la noche y tenía la pija parada, traía el tubo en la bolsa del pantalón y decidí meterlo otra vez, me pare para ir el baño a ensartarlo, pero de camino por lo caliente decidí ensartármelo parado tras el sillón, regresé para pararme tras el respaldo del sillón donde ellos estaban, era muy arriesgado y tenía mucho miedo, respire profundo para calmarme y baje despacio el zipper, después desabroché el botón del pantalón, metí una mano bajando un poco la trusa y panti saltando la pija dura, saque de la bolsa el tubo y metí la mano por atrás acomodándolo en el ano, no tenía crema pero lo empuje, sentí como se iba deslizado a dentro despacio pero entro todo aun sin crema, con la otra mano agarré la pija jaleándola despacio pensado —- estoy de caliente tras de ustedes y no se dan cuenta — tenía miedo por lo que estaba haciendo y me arriesgaba a que me descubrieran, con las dos manos subí la panti y la trusa, metí la camiseta y camisa al pantalón, abroche el botón y subí el zipper, puse una mano en las nalgas y le di unos rempujones al tubo.
Me quedé tras el sillón un poco y después me senté a lado de Sara no le ponía atención a la película apretaba el ano imaginando que hacía cosas de sexo con Samuel, Luis o otros amigos, así estuve hasta que sentí el orgasmo se tensaron los músculos, cerré los ojos y ahogué un gemido de placer mientras sentía como la pija echaba los chorros de líquido mojando la panti, trusa, bolas y pija, al terminar abrí los ojos mirando a mi papá, pensando — papi, quieres ver cómo estoy mojado de mi líquido como si me hubiera orinado — me quedé así hasta que terminó la película, oramos, cenar y cuando me fui a dormí me saque el tubo y me acosté mojado en mis jugos.

En la noche mientras me dormía tenía muchos pasamientos, como si Dios me mandó un orgasmo al estar en mi iniciación era porque quería que lo hiciera, pero también recordaba lo que decía mi papá que el diablo hacía que me pusiera caliente para pecar, recordaba como retaba a mi papá y mamá al ir con ellos solo con la camiseta interior con las bolas y pija de fuera, provocarme orgasmo cuando estaba a su lado, salir al patio a jalarme la pija y echar el líquido al piso, que se dieran cuenta que me metía el tubo al ano o que me vestía de nena y salía desnudó a la calle por la noche.

Ese día también pensé que era mi iniciación para hacer las cosas de sexo que me gustaban y no dejaría de hacerlas hasta lograr que no me diera vergüenza que me vieran desnudó, hacerme la paja dejando que me vieran, hacer sexo con amigos.
Faltaban pocos días para las vacaciones de verano en el colegio y decidí que en eso días trataría de avanzar para lograr mis propósitos.

Como siempre los relatos se me van alargados al poner diferentes situaciones, en esta parte puse muchos de los temores que sienten los nenes al ir descubriendo su sexualidad, más cuando sienten atracción a los de su mismo sexo.
En el siguiente escribo las cosas que se atrevió hacer a David.

Sebas.