Me hacia la paja en cualquier lugar.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Sebas..
Escribo de otras veces que me hice la paja frente a mi mama y como de caliente empecé dejándome ver de otras personas.

Es la continuación del relato— Tenía ganas de dejar que me vieran haciéndome la paja—que subí hace algún tiempo, si lo gustan leer esta en—- http://www.
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Después que me decidí dejar que mi mama viera como me jalaba la pija y echaba ya fuera leche, como me dijo que cuando tuviera ganas lo hiciera dentro de la casa para que no me vieran cuando lo hacía en el patio, no deje pasar mucho tiempo, a los quince días espere el sábado, al pararme me puse una trusa bikini negra de tela delgada por lo que la pija la levantaba notándose más, así baje a desayunar y hacer la limpieza de mi cuarto, cuando estaba con mi mama miraba como se marcaba la pija, al estar solo me sacaba la pija y me la jalaba rico, lo hice hasta sentir que me venía, ella estaba en su cuarto y fui jalándola rápido, antes de entrar metí la pija a la trusa notándose la puntita moviéndola al punzar, me pare frente a ella preguntándolo cualquier tontería, ella no quitaba la vista de ahí, no fue mucho punzo mas fuerte quedando quieta mientras sentía muy rico como corría por dentro la leche y salir, al ser tela delgada no tardo en pasar la leche notándose por lo negro, en un momento se cruzaron nuestras miradas y le sonreí
—–se me salió el seme—-

No contesto nada solo miraba, así que baje la trusa del frente con las dos manos, salto la pija apuntado el ombligo, la leche se notaba embarrada en la trusa, pija, bolas y pubis con mis pocos pelos, con dos dedos empecé a jalarla lentamente haciendo que el cuerito tapara y destapara la punta, disfrutando porque ella no dejaba de ver como lo hacía, con la otra mano me quite la trusa, sin parar y sonriendo
—–tengo ganas de sacarme otra vez el semen—
Salí de su cuarto y fui al mío acostándome en la cama con las piernas un poco abiertas, sin dejar de jalar la pija y con la otra mano me tocaba las bolas que las tenía muy pegadas al cuerpo, entro mi mama parándose a lado de la cama mirando cómo me hacia la jalaba, sintiendo cosas más ricas por lo que a veces la jalaba muy rápido, disfrute jalándola hasta que llego el orgasmo, solté la pija que punzado empezó a echar fuera la leche, cayendo en el abdomen, pecho y saliendo dos chorros tan fuerte que cayeron en el cuello, mientras me venía la mire sonriendo
—–me gusta mucho como se siente cuando sale el semen—

Solo sonrió sin contestar, cuando me recupere me pare mirando como escurría la leche por el cuerpo,
—–creo esta vez se me salió mucho mas semen que otras veces—-
Agarre la trusa limpiando la leche, la puse en la ropa sucia y me puse a terminar de limpiar mi cuarto desnudo, mi mama se fue también a hacer limpieza, al estar distraído limpiando y después de dos buenas venidas la pija se bajo colgado con las bolas que también ya me colgaban entre las piernas, mi mama regreso otras veces a ver si seguía de caliente jalándomela pero al verla colgada se iba.

Con mi mama mirándome hacer la paja descubrí que me ponía mucho más caliente, cuando me veía y al terminar me salía mas leche que si lo hacía a solas, así que aunque me daba miedo dejarme ver por otros decidí arriesgarme.

Una tarde al estar haciendo la tarea estaba de caliente tocándome la pija dura sobre el pantalón, al terminar fui con mi mama a pedir permiso se salir a jugar con los amigos, si me dejo pero me dijo que me quitara el uniforme del colegio, fui a mi cuarto a ponerme una playera y shorts, estando ahí no lo pese mucho me quite la trusa y me puse el shorts.

Salí a la calle y no estaba ni uno de los vecinos para jugar, me senté en la banquete a lado del árbol que estaba frente a mi casa, abrí las piernas y saque las bolas y pija por una de las piernas del shorts para jalármela rico, después de un rato salió Ricardo de diez años y lo vi cambiar hacia mí, por lo que solté la pija, baje la pierna del shorts y cerré un poco las piernas, se paro frente a mi ha platicar, estaba muy excitado y quería dejar que me viera pero me daba miedo que fuera a decirle a los demás amigos o a sus padres o los míos.

Otra vez me gano lo caliente y decidí dejar que me viera, hablando abría y cerré las piernas unas veces, no tardo en darse cuenta que no traía trusa y se me veían las bolas y pija parada, así que me quede con las piernas abiertas, él se movía acomodándose para ver mejor mientras hablábamos, me di cuenta que de morboso miraba y me arriesgue a mas, me puse de pie pero al hacerlo jale la tela de pierna del shorts para que se enganchara en la pija que apuntaba al ombligo, dejando ver la pija y bolas, al estar ya parado frente a él sonrió diciendo
—– se te salió el palo—-

Sonreí y con dos dedos empecé a jalarlo lentamente
—–si, es que la tengo bien dura, quiero echar fuera la leche, a tú no te sale todavía—
El sonrió sin dejar de ver cómo me pajeaba,
—-si me hago la paja pero no me sale nada—-
Continúe despacio dejando que mirara
—quieres ver como se me sale la leche—
Contesto que si, por lo que empecé a jalarlo con toda la mano y más rápido, de ver se calentó por lo que desabrocho el pantalón bajándolo un poco con todo y trusa, se empezó a hacer la paja, como ya tenía rato de estar de caliente tocándome y jalado, no paso mucho en sentir que me venía, jale rápido la pija, al sentir el orgasmo deje de jalarla sin soltarla apuntado al frente para no ensuciar mi ropa,
—-ya me sale la leche—-

El paro de pajearse, mirando como terminaba, primero salió un chorro escurriendo al piso, después salieron disparados cinco buenos chorros, al final dos mas solo escurriendo al piso haciendo hebra
—-se siente muy rico cuando sale—
El había soltado su pija que le apuntaba al ombligo punzado de lo caliente que se puse al verme, con dos dedos empecé a jalarla otra vez
—-Ricardo, no le digas a nadie que me hice la paja y me salió leche, me daría vergüenza—
El se toco la pija dura
—–como crees, no se lo digo a nadie, también a veces me hago la paja—

Vimos que se acercaban otros vecinos así que nos acomodamos la ropa
—si quieres otro día me pajeo para que veas como sale leche—
Me miro sonriendo y movió la cabeza afirmando, nos fuimos con los otros a jugar un poco de fútbol.

Me di cuenta que a Ricardo le gustaba la paja, así que otras veces nos íbamos a solas a jalárnoslas a escondidas.

Llegaron las vacaciones de verano, con más tiempo libre al terminar de ayudarle a mi mama pedía permiso de salir con los amigos, pero antes de salir me iba al cuarto a quitarme la trusa y solo me ponía el shorts para ir de caliente a ver si alguien me miraba haciéndome la paja.

Mientras iba caminando para alejarme de la casa, subía la tela de la pierna del short sacando las bolas y pija para irla jalando, al estar ya retirado buscaba si podía dejarme ver por alguna nena, nene no muy grandes para que no me fueran a decir algo, pero solo miraban de pasada y no se quedaban a ver, por lo que la mayoría de las veces terminaba echando la leche solo.

Cada vez me ponía más caliente por lo que a veces me arriesgaba de mas, un domingo mi papa nos llevo a comer a la casa de campo de un compañero de trabajo, me había puesto una trusa bikini anaranjada y un pantalón de mezclilla algo pegado, al ir ya en la carretera no tarde en tener la pija muy parada por el movimiento del auto, iba sentado atrás de mi papa y mi mama dormitaba, de caliente desabroche el pantalón y baje el zíper, jale la trusa hacia abajo atorándola con las bolas para que no se subiera, agarre la puntita con dos dedos apretándola pues no me la podía jalar para no llamar la atención de mi papa, me puse muy excitado hacer eso sin que se diera cuenta mi papa, subí la cadera, baje el pantalón y trusa hasta los tobillos para poder abrir más las piernas y tocarme las bolas, al estar así, si terminaba la leche mojaría la ropa y se darían cuenta, así que con los pies me bote los tenis, moví despacio las piernas sacándome el pantalón y trusa, con mucho cuidado sin moverme rápido subí la ropa al asiento y continúe apretándome la punta y tocado las bolas y entre pierna sintiendo muy rico por el miedo de que se dieran cuenta que estaba desnudo de la cintura para abajo, ya no tarde mucho en sentí que me venía, me senté mas pegado a la orilla del asiento, sentí correr la leche por la pija y salió un poco escurriendo al piso, después salieron cinco buenos chorros que fueron a caer al respaldo del asiento de mi papa escurriendo, fue muy rico terminar.

Cuando me recupere, agarre la trusa y limpie la leche del respaldo y piso para que no la vieran, como quedo muy mojada la metí bajo el asiento de mi papa, muy despacio me puse el pantalón, la pija seguía muy parada por lo que se notaba por lo que tendría que cuidarme al bajar de que no lo viera mi mama o papa, al llegar a la casa del amigo al bajarme metí la mano debajo del pantalón acomodado la pija hacia el ombligo así se notaria.

En la casa la mayoría era gente mayor, solo había unas nenas menores de diez años jugando y ni un solo hombre para hablar o jugar, anduve caminado viendo algunos animales de graja que tenía el señor, como estaba aburrió fui con mi papa a decirle si podía ir a caminar por el bosque, estaba el dueño de la casa y dijo que no había ni un peligro que solo no me saliera de la vereda para que no me perdiera y me dijo que regresara en tres horas para comer.

Fui a la parte de atrás y salí internándome en el bosque, caminando por la vereda desabroche el pantalón, baje el zíper y saque la pija y bolas, seguí caminando jalándome la pija, al estar ya mas retirado de caliente me arriesgue otra vez, pare me quite la playera y pantalón haciéndome la paja en el bosque, me puse los tenis y camine así dejando la ropa, camine subiendo la vereda hasta llegar a la parte de arriba de una loma, de ahí la vereda bajaba hasta un camino de terracería, me quede ahí mirando el paisaje jalando rico la pija, estaba muy excitado al estar desnudo, regreso donde estaba la ropa la agarre y la lleve la loma, ahí la escondí tras unos matorrales y baje jalándome la pija hasta la el camino de terracería, estado ahí decidí seguir caminado por la camino hasta una curva para ver que había, cuando casi llegaba se escucho el motor de un carro, así que me escondí entre los árboles, vi pasar una camioneta pick up , cuando se alejo salí y continúe hasta la curva, ahí la terracería bajaba muy empinada y vi que venían subiendo dos nenes y una nena, así que decidí dejar que me vieran, regrese a donde me escondí cuando paso la camioneta para que no vieran que había llegado por la vereda que da a esa casa.

Me queda parado a lado del camino jalando la pija hasta que los vi salir de la curva, de inmediato me vieron pero continuaron caminado, la nena tenía como ocho años y los nenes diez y doce, me jale más rápido la pija pues ya estaba a punto, ellos se miraban entre si y sonreían, cuando estaban a unos cinco metros me llego el orgasmo, solté la pija y punzando echo fuera la leche, los mire sonriendo, ellos se pararon viendo salir la leche, estaba tan excitado que apenas escurrió el ultimo chorro de la pija, la agarre con toda la mano y empecé a jalarla otra vez muy rápido, no se movieron seguían mirando y yo haciéndome la paja sin hablar nada, me la jalaba tan rápido que en cinco minutos sentí que terminaba otra vez, le di los ultimas jaladas y solté la pija, estaba tan caliente que la pija salto pegándose a mi ombligo y empezó a echar la leche, escurriendo por el cuerpo y la pija hacia las bolas, sentí muy rico como nunca pues me salió mucha más leche que la primera vez que me vieron, cuando me recupere del orgasmo camine hacia la curva ellos me miraron y caminaron para el otro lado.

Al llegar a la curva di la vuelta y regrese escondido en la maleza, ellos seguían caminado alejándose, cuando pasaron la vereda por donde baje, espere que se retiraran mas salí corriendo y me subí hasta donde deje la ropa, aunque me saque dos veces la leche la pija seguía estando muy parada así que me la fui jalado hasta que llegue a la casa la metí al pantalón.

Apenas llegue me sentaron a comer en una mesa donde estaban las nenas y una señorita y dos jóvenes, la pija me punzaba atrapada en el pantalón, a mi lado estaban sentadas dos nenas y la señorita y jóvenes hasta el otro extremo de la mesa, empecé a sentir que me iba a venir y mojaría de leche el pantalón, así que metí mas la silla debajo de la mesa para que el mantel tapara, con una mano desabroche el pantalón baje el zipper, saque la pija sin soltarla apuntando al centro de la mesa, apenas fue a tiempo sentí correr la leche por la pija y escurrir, después salieron unos chorros y escurrió otra vez, al terminas con la otra mano agarre una servilleta desechable y limpie la puntita antes de guardar la pija y cerrar el pantalón, al terminar mire debajo de la mesa y se veía la leche en el piso.

El resto de la tarde se me bajo lo caliente por lo que la pija estaba colgando, pero apenas nos subimos al auto y estuvo en movimiento se me paro, como ya era de noche me quite otra vez el pantalón con cuidado para apretarme la puntita y acariciar las bolas y entre pierna, cuando sentí que me venía saque la trusa de debajo del asiento, todavía estaba algo húmeda pero ahí eche la leche, me seguí tocando hasta llegar a casa para ponerme el pantalón, al llegar a la esquina me lo iba a poner pero mi papa me dijo
—-tengo muchas ganas de ir al baño, cierras el portón eléctrico—-
Metió el auto lo apago y bajo rápido, mi mama también bajo diciendo que ya no se aguantaba, al entras los dos a la casa me baje desnudo punzado la pija, cerré el portón agarre la trusa majada de leche y el pantalón, entre desnudo a la casa jalado la pija y fui a mi cuarto a ponerme un short.

Al acostarme a dormir me jale rico la pija recordando cómo me vieron los nenes y nenas, me saque la leche la unte en el cuerpo y me quede dormido desnudo después de sacarme leche seis veces en un solo día.

Al otro día al despertar tenia la pija parada, antes de pararme me saque la leche.

Por las vacaciones tenía mucho tiempo libre, de caliente andaba de morboso pensando como bajarme lo excitado, por lo que decidí ver cuántas veces me podía sacar leche en un día, también decidí que mi mama nos viera a Ricardo y a mi haciéndonos la paja, en otro relato se los escribo.

Sebas.