Me hice una paja en el cine.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Sebas..
No me gusta engañar a los lectores diciendo que es 100 % real, por lo que nada es verdad, nada es mentira, todo depende del cristal con que se mira, cada lector puede decidir cuáles son las partes ciertas y las de la imaginación, espero les guste.

Un sábado al bañarme me hice una rica paja, al salir fui a mi cuarto solo con la toalla a vestirme, aunque eche fuera la leche la pija seguía muy parada apuntando al ombligo, estaba tan excitado que decidí como otras veces no ponerme ropa interior, saque un pantalón de mezclilla que me quedaba algo pegado, me puse una playera que tapara el frente del pantalón para poder dejar de fuera las bolas y pija.

Ya otras veces así había salido a la calle, bajaba el zíper y desabrochaba el botón abriendo el frente del pantalón dejando ver la pija y bolas, la playera me cubría así que cuando quería dejar ver, solo subía la playera del frente.

Antes de bajar a comer me acomode el pantalón dejando fuera las bolas y pija, el temor de que mi mama o hermana viran que la traía de fuera hacia que me excitara, a esa edad uno es muy loco a veces, así que cuando me senté jale la playera dejando ver la pija y bolas, ya que mi mama y hermana estaban sentadas frente a mí, mientras comía movía los muslos un poco por lo que la pija punzaba de lo caliente que estaba, a veces discretamente metía la mano bajo la mesa para darle unos apretones a la cabecita, estaba ya tan ecxitado que no paso mucho en que sentí que estaba a punto de venirme, así que metí la mano bajo la mesa abrí un poco las piernas, agarre la pija bajándola apuntado al piso en el momento que empezó a salir los chorros de leche, mire a mi mama y hermana que continuaban comiendo, al terminar solté la pija que salto apuntado al ombligo con una gota de leche en la puntita, así termine de comer tranquilo.

Al terminar separe la silla de la mesa, en el piso se veía la leche así que con uno de los pies la pise y embarre para que no se viera, me baje la playera y me pare a ayudar a llevar las cosas a la cocina, a veces al andar así me ponía tras mi mama o hermana aunque solo tenía ocho años, con una mano subía la playera y con la otra me acariciaba las bolas y pija sin que me vieran, cuando giraban bajaba la playera.

Con mi hermana a veces me arriesgaba mas, esta vez ella traía un conjunto de playera y mini falda amarillas, mi mama se quedo en la cocina, cuando salíamos mi hermana caminaba frente a mí, al llegar a la sala de caliente no lo pensé mucho, subí la playera dejando fuera las bolas y pija muy parada, como otras veces me pegue tras de ella jalándola de la cintura y me senté en el sillón y ella sobre de mi, le empecé a hacer cosquillas en las axilas por lo que se movía sobre de mi
— te quiero mucho hermanita —

Ella reía y se movía diciendo que la soltara, por el movimiento su falsa se subió por lo que al moverse pegaba sus nalgas en la pija sobre la panty, eso me excito pegándola más a mí, pues al moverse y rozar la cabecita con la panty sentía rico, no la deje hasta que dijo
—- deja de molestarme sino le digo a mi mama —-
Cuando la solté me baje la playera tapando la pija que punzaba, ella camino a la cocina acomodando su falda, no sabía si ella sintió la pija dura en sus nalgas y le fuera a decir a mi mama, así que por si decía algo, metí las bolas y pija al pantalón subiendo el zíper.

Carmen al ser mi hermana nunca me había llamado la atención como para hacer sexo con ella, aunque de más chica la vi desnuda y a veces la veía en ropa interior caminando por la casa, además que me daba miedo que ella le contara a mi papa o mama si le hacía algo.

Me puso muy excitado el sentir las nalgas de mi hermana apretando la pija y bolas, por lo que decidí salir a la calle a dejarme que alguien me viera la pija dura y haciéndome la paja, así pedí permiso a mi mama.

En el patio de la casa antes de salí, baje el zíper abriendo la bragueta para sacar las bolas y pija, al ir caminando con una mano subía la playera y con la otra me tocaba las bolas y pija, llegue hasta una plaza comercial y decidí meterme a un cine a hacerme la paja.

Al entrar ya había empezado la película, así que me fui a sentar a la parte de arriba pues no había nadie, subí la playera abrí las piernas y empecé a jalarme rico la pija, me puse tan caliente que me quite el pantalón, sentado con las piernas abiertas las subí al respaldo de los asientos del frente, mientras me jalaba la pija despacio y rápido sintiendo más rico por el temor que alguien me viera.

Al sentir el orgasmo me pare jalándola muy rápido hasta que salió el primer chorro de leche, sin soltarla salió toda la leche cayendo en el asiento del frente, al terminar me senté para recuperarme, la pija punzaba aun de lo parada que estaba.

No pasó mucho en que agarre la pija y empecé a jalarla otra vez, la adrenalina me traía muy caliente, agarre el pantalón y camine así bajando unas filas sentándome solo a dos de donde ya había gente, subí las piernas abiertas al respaldo de las bancas del frente y disfrutaba de la paja que me hacía, hasta que escuche que alguien me decía al oído
—— nene cochino, deja de jalarte tu palo, ponte el pantalón y vete sino le hablo a la policía —-
Gire la cabeza mirando a una mujer de unos veintinueve años con el uniforme de las que atienden en la dulcería, rápido me senté bien y me puse el pantalón, mire a atrás y ya no vi a la mujer, camine a la salida y han la puerta de la sala de proyección estaba la señora que dijo
—— vete a masturbar donde no te vea nadie, no seas cochino —-
Salí rápido del cine y de la plaza comercial fijándome que no me seguía la mujer, aun con el susto la pija seguía muy dura punzando, en el estacionamiento me metí entre dos autos desabroche el pantalón y me jale la pija rápido hasta que esche fuera la leche.

Al terminar la pija se fue bajando poco a poco, me acomode el pantalón y regrese a casa.

Pasaron unos días y olvide lo de la señora del cine, pero un día al salir del colegio al ir con mi mama y hermana caminando al auto, mi mama se paró a hablar con una señora que era la madre de una compañera de mi hermana, de inmediato al escuchar el tono de su vos supe que era la señora que me vio haciéndome la paja en el cine, ella al estar hablado me miraba a veces, seguro también me reconoció, me dio miedo que le contara a mi mama lo que hacía en el cine, la señora mirándome le dijo a mi mama
— ya esta grande tu hijo, es guapo seguro no tarda en tener novia, el otro día lo encontré muy entretenido en el cine —
Ella me miraba sonriendo, creí iba a decir a mi mama pero cambio de tema, terminaron de hablar y nos fuimos a casa.

Unos días después cuando esperábamos mi hermana y yo a que mi mama pasara por nosotros, se acerco la amiga de mi hermana dándome un sobre
—- te manda esto mi mama —-
Le señora estaba parada adelante y me miro sonriendo, su hija se fue corriendo con ella y guarde el sobre, paso mi mama por nosotros y al legar a casa subí a cambiarme el uniforme y leer la carta que me mando la señora que decía —- Hola nene, háblame por teléfono para que me digas si sigues de caliente jugando con tu cosita en los cines, espero tu llamada–
Al final traía su número de cel, escondí la carta entre las hojas de un libro, aunque me puso nervioso lo que decía la carta, la pija se me puso muy dura, mientras comía y hacia tarea pensaba lo que me escribió la señora, pero estaba indeciso si hablarle o no ya que no sabía que quería.

En la noche después de mucho pensarlo decidí hablarle para que ella no fuera a decirle a mi mama lo del cine, marque algo nervioso, espere a que contestara escuchando decir que quien hablaba, temeroso le conteste
—- soy yo, me dijo que la llamara —-

Escuche que reía
—- a eres el nene caliente del cine —–
Se escuchaban gentes porque estaba trabajando en la dulcería, le conteste que si y agrego
— de seguro tienes tu cosita parada o estás jugando con ella —-
Si tenía la pija dura aun con el temor que sentía, me quede cayado pues no sabía que contestar, así que ella hablo otra vez
—– me gustaría mucho verte otra vez jalando tú pija y ver salir tus jugos ricos —–
No sabía que decirle así que siguió hablado ella
—- seguro de caliente ya te estás sobando el palito y te vas a sacar la leche —-
Me hizo reír, así que le dije
—— paraqué quería que le hablara —

Escuche su risa
—- ya te lo dije nene caliente, quiero verte jugar con tu palito, te espero el sábado en la mañana en mi casa para verte, me tengo que ir a atender la dulcería —–
Se cortó la comunicación, no podía creer lo que me dijo la señora, pero como me dijo, tenía la pija muy dura solo de imaginar que quería que me pajeara frente a ella.

El resto de la semana estuve indeciso si ir a casa de la señora o mejor hablarle y decirle que no podía y que no le contara a mi mama que me vio, pero el sábado desperté muy excitado y tenía la pija muy parada, metí la mano bajo la trusa dándole unas jaladas pero recordé a la señora, en ese momento decidí si ir a que me viera haciéndome la paja, así que saque la mano y deje de jalármela.

Me levante a desayunar y ayudar a mí mama en algo y le pedir permiso de salir con los amigos, así que al terminar me bañe, me puse una trusa bikini azul marino de tela delgada, una bermuda color café y playera anaranjada.

Al ir caminando a casa de la señora sentía algo de temor, pero la pija la traía muy parada por lo que iba a nacer, no viva muy lejos por lo que no tarde en llegar, toque el timbre, salió la señora abrió la puerta para que entrara y la salude, al entrar me dijo
—– buenos días nene, sabía que si ibas a venir, eres un caliente te gusta el sexo—-

Sus hijas estaban en camisón mirando televisión en la sala, Lorena de diez años como mi hermana y Ana de seis, me llevo la señora al el comedor sentándose en una silla, puso una mano sobre la bermuda tocándome la pija
—– traes tu palo bien parado, déjamelo ver —-
Desabrocho el botón de la bermuda bajando el zíper dejándola caer hasta los tobillos, la pija levantaba la trusa por lo parada que estaba, agarro el resorte de la trusa bajándola un poco dejando fuera las bolas colgando y la pija salto apuntado al ombligo, mire a la sala nervioso pues estaban sus hijas, con una de sus manos me agarro las bolas y sonriendo dijo
—– no te preocupes no te ven mis nenas, mira que bolas grandes tienes, seguro guardan mucha leche por eso te la sacar —
Bajo la trusa hasta los tobillos y me la quito con la bermuda, agarro la pija apretándola un poco
—– nene, jala tu palito para que se te salga la leche —-
Soltó la pija y me quito la playera dejándome desnudo, me agarre la pija y empecé a jalarla despacio, aun con la vergüenza y miedo sentía muy rico disfrutado mucho, mientras o hacia ella miraba sonriendo y a veces me decía
—– que rico juegas con tu palo, lo haces muy bien seguro juegas mucho con él —
Como en la mañana no me la jale y estaba muy excitado no tarde en sentir que me venía, empecé a jalar la pija tan rápido que mi mano hacia ruido al pegar en mi cuerpo, diciendole
— ya se me va salir la leche —-

Por el ruido que hacia mi mano al pegar en el cuerpo se levanto del sillón Ana, al sentir el orgasmo solté la pija saliendo disparados tres chorros de leche, después escurrió otros pocos cayendo a mis pies, Ana miraba como la pija punzaba, la señora puso una mano en las bolas que las tenía muy pagadas al cuerpo depuse de terminar, miro a su hija diciéndole
—- es que el nene se lastimo su cosita, por eso la tiene así —-
Me agarro la pija jalándola despacio
—- le voy a sobar su cosita —
Me miro diciéndome
—- vamos nene caliente, te voy a ayudar a que eches mas leche —-
Sentí muy rico como me hacia la paja, Ana de curiosa se quedo mirando,
—seguro ya quieres meter tu palito en una mujer —
La jalo un poco más, soltó la pija mirado a su hija
— sóbale un poco la cosita al nene —
Ana me agarro la pija manoseándola y moviendo un poco, mientras la señora sonreía
— a mi nena le gusto tu palito, seguro tú de caliente has de manosear y jugar cosas calientes con tu hermana—-

Sonreí diciéndole
—- no como cree es mi hermana, no hago cosas de sexo con ella —
La señora me agarro la pija jalándola mas rápido
—– no te creo que nuca le has arrimado el palo a tu hermana con lo caliente que eres—
Sentí que terminaba otra vez y le dije
—- ya se va a salir la leche —
Me la jalo solo con dos dedos hasta que salieron unos choros de leche y escurrió otros mas, Ana dijo riendo
— El nene ya se hizo de, la pipi otra vez—
Lorena la escucho y no tardo en estar parada a su lado mirando como la pija punzaba y escurría un poco de leche, así que le dijo riendo
—— el nene tiene su cosita dura porque quiere ver nenas desnudas—
Las dos nenas rieron sin dejar de ver la pija, la señora le empezó a quitar la ropa a Lorena dejándola desnuda, diciéndome
—– apoco nunca le has visto a tu hermanita la concha y nalgas —-

Sonreí morbosamente
—— cuando éramos más chicos si la vi algunas veces desnuda —-
Puso un dedo en la rayita de la concha y me dijo sonriendo al oído
—- a poco nuca le has puesto el palito por acá —-
Moví la cabeza negándolo, ella le acaricio la concha y nalgas a Lorena para después desnudar a Ana y tocarla también y decirles
—- vayan a bañarse que porque vamos a ir a casa de su abuela—
Al quedar solos me agarro la pija jalándola rico otra vez
—– seguro te dieron ganas de meterle el palito a mis hijas, y llenarlas con tu leche —-
Continúo jalado despacio y rápido la pija no se cuanto tiempo, diciéndome cosas sobre de sus hijas hasta que termine por echar fuera otra vez leche,
—– el nene caliente ya término de nuevo echando su lechita rica —

Al terminar me llevo al baño para que viera a las nenas desnudas, pero después de venirme tres veces la pija se bajo quedando colgada a lado de las bolas, cuando las nenas se empezaron a vestir la señora me llevo al comedor agarro mi trusa y me la puso, diciendo
—– nene, ya sabes cuando estés muy caliente, puedes venir y te ayudo a sacarte la leche o a que hagas cosas ricas con mis hijas —–
Mientras yo me terminaba de vestir agrego
—– nada más no le cuentes a nadie las cosas ricas que hicimos —-
Cuando ya estaba en la puerta para salir, me toco otra vez la pija sobre la ropa diciendo
—— tu hermanita también es muy caliente, seguro haría cosas calientes con tu palito —–
Al ir de regreso a casa no podía creer lo que paso, tampoco entendí porque me dijo eso de mi hermana.

Desde luego que de caliente regrese a la casa de la señora a hacer cosas ricas de sexo que me enseño y me dejaba hacer con sus hijas, pero eso sería otro relato.

Sebas.