MI PRIMERA EXPERIENCIA A LOS 13 AÑOS (II)

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Despues del placenetro rato que disfrutamos mi amigo y yo en el viaje de noche que hicimos en el autobus, rumbo al pueblito donde jugariamos beisbol por la mañana siguiente, todos lo integrantes del equipo descendimos, emprendiendo una caminata, casi de madrugada, por espacio de mas o menos una hora

Entre bromas, chistes y juegos, por fin llegamos a la casa donde ya nos estaban esperando.

Los dueños, papàs de alguno de los jugadores del equipo contrario al nuestro, amablemente nos recibieron con tazas de cafè, leche y pan a la vez que conversamos con ellos las peripecias de nuestro viaje (claro que tanto mi amigo como yo, guardamos por siempre y hasta la fecha, nuestra primera experiencia sexual).

Nos asignaron varios sitios donde dormir, todos nos acomodamos en la misma forma que como hicimos el viaje….Nos deseamos las buenas noches y nos dispusimos a dormir en el mas obsoluto silencio sobre el suelo.

Teniamos como cama un petate cubierto por una cobija que la hacia de colchon. Los tres que viajamos de compañeros, optamos por dormir en un extremo del cuartito junto a una pared.

Al acostarnos, la primera posicion la tomò nuestro compañero, enseguida yó y en el otro extremo junto a la pared, mi amigo.

Nos cambiamos de ropa, poniendonos nuestros uniformes de juego, ya que no queriamos perder tiempo en vestirnos por la mañana siguiente para ir a jugar y nos cubrimos con una manta,

Caimos rendidos, nuestro compañero fue el primero en dormirse !y lo hizo profundamente!…

Seria por nuestra curiosidad propia de la edad?, o porque habiamos despertado a la sexualidad!?, o por una atraccion mutua?, que mi amigo y yo voltemos nuestros rostros al mismo tiempo, y nos vimos que continuabamos despiertos.

Sin decir palabra, rosamos nuestras piernas entre sí y nos tocamos, el uno al otro, la verga…

Mi amigo se acomodó de lado y me insinuò que yo le diera la espalda, cosa que accedì.

Ambos quedamos de costado sobre nuestros brazos izquierdos, de repente sentì sobre mi pants de juego, entre mis nalgas, el bulto su verga que tambien estaba dentro de su ropa, a la vez que sobre de mi oido sentì su calido aliento que poco a poco fue haciendose mas agitado, provocando en mì algo nunca antes sentido que hizo que mi verga se pusiera muy dura.

Mientras que con su brazo izquierdo, pasado por debajo de mi costado del mismo lado, me arrejuntaba suavemente hacia su cuerpo, con su mano derecha sobaba mi endurecida verga, a la vez que yo acariciaba mis huevos y de vez en cuando le tocaba su verga. Todo lo hicimos en el mas obsoluto silencio y asi duramos mucho rato hasta que sentì que mi cuerpo se estremecìa y el liquido caliente de mis mecos inundò mis piernas, traspasando el calzoncillo hasta el pantalon de juego… Casi al mismo tiempo, tal vez porque al estar yo vaciendo mi leche, hice fuerza con mis nalgas y piernas sobre su verga, que sentì que mi amigo fuertemente me apretò con sus dos manos, dejando escapar sobre mi oido su caliente aliento acompañado de un largo y silencioso suspiro…

Casi enseguida ambos nos volteamos boca arriba, y nuevamente como en el autobus, sin mediar palabra, nos quedamos profundamente dormidos……

Al despertar y leventarnos fui al baño dàndome cuenta que mi pants tenìa una visible y dura mancha y no se diga mi calconcillo que fue el que recibio principalemente mi PRIMERA DESCARGA DE MECOS A MIS TRECE AÑOS.

Actualmente tengo 67 y hace algunos tres años, recordando anèctodas con mi amigo, tocamos el tema de nuestro pasatiempo favorito de la niñez: EL BEIS BOL, y entre otras cosas, platicamos de los dos juegos que celebramos en aquel pueblito. Mi sorpresa fue que mi amigo me dijo que ese viaje ha sido el mas recordado de su vida, que fue una muy bonita experiencia….., ""yo tambien asi lo recuerdo"", le dije… Pero ninguno de los dos hemos tenido la suficiente sinceridad para confesar, si sentimos algo mas que nuestra gran amistad, que por cierto continua perdurando hasta la fecha!