Mi primera vez con mi perra Liz
Como mi perra Liz se convirtió en mi hembra total. .
Hola mi nombre es Kevin, tengo 28 años, mido 1.77 soy blanco, contextura normal ni flaco ni gordo. Soy de Colombia.
Decidí contar mi historia ya que veo en la página mucho del tema, cuando era adolescente allá por los años 2010 por allá me fui a vivir donde un tío, en una finca, una vez me levanté temprano y vi que mi primo se estaba cogiendo a la perra que tenían, me quedé sorprendido por la escena y eso me alborotó, mi primo tenía unos 19 años, me quedé viendo todo hasta que vi como mi primo llenaba a su hembra de su semen, el nunca supo que lo había visto, a pesar de que me excito mucho eso, me daba asco cogerme a una perra, pero me masturbaba pensando en eso. Los años pasaron empecé a tener novias a coger con ella y se me olvidando el tema, me comprometí con una chica, viví unos años con ella, las cosas no funcionaron, nos separamos y aquí es donde empieza mi historia de zoo.
Al separarme, y ser ella de otra ciudad dijo que se devolvía para donde su familia, que no la buscara más. Y bueno me quedé viviendo solo en mi apartamento, ya que lo había comprado con una herencia que me había dejado mi padre y ella no tenía derecho sobre el. Ya llevaba seis meses solo y bueno alguna que otra amiguita hacía el favor de deslecharme. Un día una de esas amiguitas, me dice que le salió un trabajo fuera del país y que se iba, pero que le preocupaba su perra Liz, ya que no tenía con quien dejarla y no la podía llevar, yo le dije si quieres me la das, y yo la cuido si un día regresas ahí estará para ti, me agradeció mucho y como a los dos días me llevó a Liz, me dijo sobre las vacunas, su alimentación y todo y me dijo que aún era cachorra y no había tenido su primer celo. Primero se sentía extraña, a los días me empezó a tomar confianza y luego ya me lamía cuando llegaba de trabajar, yo la atendía y todo, la mantenía muy aseada siempre olía a coco, me di cuenta que empezó a crecer y se volvió una perra grande. Un día cualquiera que llegue de trabajar, encontré en el piso manchas de sangre, me asusté pensé que le había pasado algo a Liz, ella salió como siempre a recibirme y vi que de su chochito salía la sangre la cual ella se limpiaba y volvía a salir y al vérselo lo tenía muy hinchado, consulté en internet y me di cuenta que estaba en celos, era su primera vez, empezaba a ver que ella se movía con desespero, y de repente me empezó a oler en mi verga, sentir ella ahí, y verle ese chochito hinchado me empezó a calentar mi verga se me empezó a poner dura y a lubricar, cosa que el olor de mi excitación a ella la encendía más, decidí ver hasta donde llegaba y abrí mi bragueta del pantalón sacando mi verga ya durísima, aún dentro de mi boxer el cual ya estaba húmedo de mi presemen, y ella al oler mi mojado se volvió más alborotada, y empezó a lamerme y yo me sentía en la gloria, decidí cerrarme el pantalón y me fui a mi habitación, cerré la puerta para que ella no entrara y mi corazón palpitaba igual que mi verga, no sabía qué hacer, en fin fue que mi calentura me gano y decidí quitarme toda la ropa ñ, para ver qué hacía ella, mi verga blanca de unos 16 cm muy dura, cabeza rosada, toda lubricada, salto de mi boxer cuando me lo bajé, decidí salir de mi habitación, caminando a cuatro patas, para que me viera más como un macho de su especie, ella estaba ahí afuera esperándome, cuando salí ella de una se acercó meneando su cola, y con ella alzada señal de que estaba recíproca, que quería aparearse con su macho, fue directo a mi verga y la empezó a lamer de una forma que nunca había sentido, yo me la cogia del tallo a la punta y salía más preseminal el cual ella lamía con unas ganas y se comía, su chochito cada vez más hinchado y húmedo me tenía loco, en unas acerque mi nariz y su olor era muy rico, no aguanté las ganas y como un perro macho empecé a lamer todo eso tan rico, ella me lamía mi verga y mis huevos y yo si chocho delicioso, era un sabor saladito delicioso, le empecé a hablar y decirle mi Liz, ya se quieres macho y por eso estás así, pues aquí tienes a tu macho a partir de ahora, el que todas tus calenturas te va a quitar, y yo seré el primero y uno macho que entrará en ti, ya no aguantábamos las ganas de estar pegados, ella se colocó con su chocho y su cola levantada hacia donde mi, veía como todo esa deliciosa cueva virgen me la ponía a mi disposición, mi verga es de las que me quedan duras casi pegadas a mi abdomen, me coloque en provisión de un perro macho encima de ella y empecé a simular ser uno, que mi hembra sintiera que estaba con su macho, empecé a moverme como hacen ellos hasta que sentí que la punta de mi verga, se pegó a su chochito, húmedo y caliente una sensación me recorrió el cuerpo, empecé hacer como a meterla, pero ella estaba muy estrecha, sus jugos con mi lubricación, tenían nuestros sexos todos resbaladizos entre ellos, ella se movía hacia atrás, como diciendo méteme la no aguanto más, yo le decía tranquila hembra mía que hoy quedas montadita, hoy nos apareamos, empecé a abrirla con mi dedo, metí uno primero se sentía muy apretada, luego metí otro y ella se retorcía, cuando pude meter el tercero, sentí que su agujero se había ampliado un poco, pero a pesar de que le metía los dedos, ella mientras lamía mi verga, quizás por instinto o no se, ella sabía que lo que tenía adentro no era lo que quería. Le saqué mis dedos y me volví a colocar en posición para penetrarla, mi punta de mi verga volvió a sentir ese calor tan rico, entendí porque ella aunque tuviera mis dedos adentro buscaba mi verga, era diferente lo que sentíamos, igual yo cuando mi verga era la que llegaba, sentía un calor y una humedad distinta a con mis dedos.
Empecé a moverme nuevamente a hacer por meterla, hasta que sentí como mi cabeza abrió paso entre su chochito rico, ella lanzó un pequeño aullido como de felicidad, yo igual me sentía súper rico mi cabeza se sentía apretadita, algo indescriptible, seguí haciendo por entrar más hasta que mi verga entró un cuarto más o menos de su tamaño, seguí y al sentir que ya había entrado la mitad de mi verga, había algo que me impedía seguir, mi cabeza golpeaba ahí y ella se movía con más ganas como para que entrara más en ella, de un momento entre tanto movernos y sentir esas ganas de ambos de estar bien pegados, sentí como eso le dio paso a mi verga y se deslizó dentro de mi hembra, quedando prácticamente toda adentro, el calor que ella emanaba era demasiado, yo veía como todo esa baba de nuestros sexos salía y corría por mis huevos y caía al piso, los cuales ella lamía, enrojece a montarla como todo un perro, como su macho, de repente sentí como unas contracciones dentro de su chocho me estimulaban mi verga uff me Yese quieto y sentía como me la agarraban, como pidiendo que no la sacara, en un momento las contracciones se quedaron quietas y yo volví a montarla, y a darle como su macho, ya mis huevos me dolían de la carga de leche que tenía para expulsar, le empecé a decir eres lo mejor que me ha pasado Liz, ya tengo mis huevos hembra para mi solito, y aunque seamos de distinta especie, somos macho y hembra que se necesitan aparear, el uno necesita lo del otro, tú mi verga y yo tu chocho, le decía te voy a preñar, que tengamos hijitos de los dos porque eso es lo que tú quieres, empecé a moverme más rápido, las contracciones de su interior empezaron nuevamente, cuando ya sentía que me quería llegar, yo intenté sacarle mi verga, pues en momento pensé en no hacerlo dentro de ella, pero sus contracciones me lo impedían, ella necesitaba que le depositara mi semen adentro, después de unos 20 minutos de estar montándola, apareándonos, no aguanté más mis huevos empezaron hacer esas contracciones para expulsar toda mi carga de macho, sus contracciones y las mías se aceleraron y sentí como mi leche empezó a ser disparada con una fuerza descomunal en el interior de mi hembra, conté más de siete chorros de semen que la inundaron, yo estaba aún en otro mundo, así dure un rato relajándome, aún teniéndola penetrada, el apartamento olía a sexo, pero un olor distinto, se la saque y callo un poco de mi leche y sus fluidos, pero la mayoría quedó adentro, ella empezó a limpiar mi verga, mis huevos y lo que había caído al piso con su lengua. Ahí en el mismo piso en la anteada de mi habitación, donde habíamos estado pegados, como el macho y la hembra que somos, me quedé dormido, sucio de sus fluidos y los míos, ella también se hecho a mi lado y se durmió después de esa faena, serían las 8 de la noche cuando lo hicimos y recordé a eso de las doce, y ella me estaba lamiendo mi verga, la cual ya estaba dura nuevamente, su chocho comenzaba a sangrar nuevamente y le dije así que sigues caliente mi reina, y ya con más destreza me volví a poner detrás de ella, de una alzó su cola para que todo su sexo quedará a mi disposición y empecé nuevamente mis movimientos de macho, mi punta volvió a tocar esa entrada rica y volví a meter nuevamente, al llegar a esa zona otra vez esperé un rato hasta que me permitió entrar y volví a empezar a coger a mi hembra, le decía hoy quedas preñada mi Liz, y le seguía dando, por otra media hora estuvimos pegados y volvimos a llenar su chocho de leche de macho. Cuando nos despegamos nuevamente limpio mi verga y huevos, limpie todo donde habíamos estado apareándonos y me fui a bañar, cerré la puerta para evitar más ganas, me tiré en mi cama y me dormí profundo con esas dos deslechadas que me había dado mi hembra, sonó mi alarma a las 5:30 y me levanté, y me puse a consultar qué riesgo había de un humano coger con una perra y pues deci que alguna enfermedad si la perra habi sido montada, pero si era nueva no. Otra que me preocupaba en mi ignorancia era si la podía preñar, a lo cual salía que no, que era incompatible la carga genética de una especie con otra, eso me motivó a seguir cogiendo a mi hembra, al salir ahí estaba ella en la puerta esperando a su macho, le dije ven mi bb, vamos a cogerte antes de irme al trabajo, manda a tu macho sin leche en los huevos y la volví a montar, penetrándola y dándole de mi verga , esta vez decidí quedarme quieto y sentí como sus contracciones hacían el trabajo, solo sus movimientos estaban a punto de sacarme la leche, no aguanté más y me vine otra cantidad dentro de ella, y uff estaba descargado y encantado, ya era la tercera vez que nos apareábamos, me fui a bañar y cuando ya estaba para irme, la vi con su mirada viéndome, y queriendo más, así que decidí reportarme enfermo, ese día nos la pasamos pegados como macho y hembra la monté muchas veces, ya de mis huevos no salía leche. Al día siguiente me fui a trabajar, al volver la monté dos veces, con toda la carga de leche que le había dado, donde pudiera ya estuviera preñada, a los días su calentura se le fue, ya ya no quiso que la penetrara más. Bueno sabía que debía esperar a que estuviera en celos nuevamente, en cuestión de unos meses, y solo pajeadome para aguantar, llegué de trabajar y mi hembra estaba caliente otra vez, entre emocionado a mi habitación y me quité todo salí desnudo y de una ella empezó a lamer mi verga y huevos, yo empecé a lamer su chocho y nuevamente este macho y su hembra estaban pegados apareándose por varios días.
Y así ella se convirtió en mi hembra total me castigaba por unos meses, pero después venía mi recompensa, ya cuando está en celos éramos dos animales que solo quieren aparearse y pegarse, lo hacíamos donde fuera pero siempre en el piso, nunca me gustó nada de eso de cama ni nada, porque quería que fuera natural como su especie y siempre yo como su perro macho detrás y arriba de ella. Nos pegábamos en el piso de mi habitación, en la otra habitación, en la cocina, en la sala. Una vez quedó en celos un fin de semana que yo no trabajo, y pues yo me la pasé desnudo todo esos días ella llegaba me lamía la verga y no importa lo que yo estuviera haciendo, lo dejaba y atendía a mi hembra clavándola de una y apareándonos bien rico
Parcero soy colombiano telegran @putill29
Me la puso durisima, que rico que tienes una hembra así, yo cdmx
Uff muy COOL tu relato yo también soy de colombia mi telegram es @jjra20 me gustaría hablar contigo saber q raza es tu perra quiero conseguir una pero no se que raza o si es criolla qué tan grande
Que rico relato bro yo asi tuve sexo con varias perras a varias desvirgé pero quedaban receptivas a la verga aún sin celo. De lo más riico sigue con tus relatos bro alguna complicidad con un amigo zoo??